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 del Sitio Web RedVoltaire 
 
 
	 
 
 Apenas terminada la Segunda Guerra Mundial en el teatro de operaciones, se inicia la rivalidad entre los Estados Unidos y la URSS. 
 
	La prioridad de 
	ambos pasa a ser el rápido saqueo del enemigo vencido: el Tercer Reich de 
	Adolf Hitler. Así, el conocimiento tecnológico desarrollado por los 
	científicos alemanes despierta la codicia aunque haya sido fruto de la 
	explotación de una mano de obra en cautiverio en los campos de concentración. 
 
	Por el contrario, otros oficiales del estado mayor consideran que estos 
	criminales son un personal insustituible que conviene poner al servicio del 
	poderío de los Estados Unidos, de modo que el Pentágono pone en marcha una 
	operación para recuperar a los científicos alemanes que hayan trabajado para 
	el Tercer Reich nazi de Adolf Hitler. 
 Como explicará más tarde su director, Bosquet Wev, 
 La operación se enfrenta a una gran resistencia proveniente al mismo tiempo de dirigentes políticos y en el estado mayor. 
 
	La posición del presidente 
	Franklin Delano Roosevelt es clara: rechaza el conceder privilegios a los 
	oficiales de las SS y a los miembros del ministerio alemán de Relaciones 
	Exteriores al ser interrogado sobre el asunto por William Donovan, jefe de 
	la OSS. 
 
	Pasando por encima de la orden presidencial, la JIOA toma la decisión de 
	falsificar expedientes militares de los científicos alemanes que se propone 
	sacar con destino hacia los Estados Unidos [3]. 
 
	Con sólo 32 años en 1945, se trata de uno de los más 
	brillantes ingenieros de la época. Desde la década de 1930 trabaja con 
	Hermann Oberth, padre del cohete alemán. 
 
	Durante la guerra trabaja en el centro de Peenemünde en el proyecto de los 
	cohetes V2, construidos en la fábrica Mittelwerk por personal procedente del 
	campo de concentración de Dora. 
	 Presentación a los dignatarios nazis del centro de investigación Peenemünde donde fue concebida la "guerra de las galaxias" y realizados los cohetes V2 nazis. 
	Von Braun se convirtió posteriormente en director de la NASA estadounidense. 
	 
 La tarea no es muy difícil: en su mayoría, los científicos corren el riesgo, si se quedan en Europa, de ser conducidos ante un tribunal por "complicidad en crímenes de guerra". 
 
	Paralelamente, uno de los directores de la JIOA, 
	E.W. Gruhn, se encarga de hacer una lista de científicos alemanes y 
	austriacos de los más calificados para que sean reclutados y trabajen para 
	el gobierno de los Estados Unidos. 
 Como lo señala Linda Hunt, este método, 
 El programa confiado a von Braun no obtiene inmediatamente los resultados esperados. 
 En junio de 1947 se efectúa el lanzamiento del primer V2 modificado desde la rampa de White Sands Proving Ground, en Nuevo México. 
 
	El 
	misil, ensamblado a partir de piezas alemanas recuperadas en Mittelwerk, se 
	aleja de su trayectoria inicial para ir a estrellarse del otro lado de la 
	frontera mexicana, a menos de cinco kilómetros de un barrio superpoblado de 
	Ciudad Juárez, lo que obliga a Washington a explicarles inmediatamente a los 
	mexicanos que bajo ningún concepto pretende lanzar un ataque coheteril 
	contra su país. 
 
	 del 2 de junio de 1953, en la que hace constar que 820 científicos nazis 
	han sido ya 
	reclutados en el marco del proyecto Paperclip. 
	 
 
	Muchos de ellos sólo aceptaron este "exilio" 
	bajo amenaza de persecución judicial en su país, lo que no es una prueba de 
	confiabilidad. En el mejor de los casos consideran colaborar con un aliado 
	objetivo en la lucha contra la URSS. 
 Walter Jessel, teniente del ejército norteamericano, fue encargado en 1945 de evaluar la lealtad de los científicos antes de que abandonaran Alemania. Su informe, basado en los interrogatorios, concluye que Von Braun y sus hombres tratan de ocultar sus informaciones a los oficiales norteamericanos. 
 
	Según el militar estadounidense, confiar en ellos sería 
	"absurdo". Después 
	de todo, los científicos alemanes estaban hasta hacía poco en el campo 
	enemigo. 
 
	Además, "las actividades de los 
	científicos en el exterior eran muy poco controladas", lo que da fe de una 
	ligereza increíble o de una confianza ciega que sólo puede explicarse como 
	simple ingenuidad. 
 
 
	 
 
	A finales de 1946 el departamento 
	de Guerra organiza incluso un día a puertas abiertas en Wright Field a fin 
	de presentarle a la prensa una delegación de "sabios alemanes". Los 
	artículos publicados tras esta iniciativa propagandística silencian los 
	antecedentes dudosos de estos brillantes ingenieros. 
 El subsecretario de Guerra Patterson declara, 
 
	En 
	realidad, existen importantes diferencias dentro de la propia base de Wright Field, donde varios militares norteamericanos se indignan por tener que 
	trabajar con "criminales de guerra nazis". 
 El experto en carburantes de reactores, Ernst Eckert, ve resurgir su pasado de antiguo miembro de las SA, luego del NSDAP a partir de 1938 y de las SS en 1939. 
 
	Pero la política del Pentágono es la de proteger al máximo a estos hombres 
	mientras sigan trabajando mientras se va trayendo a otros más. 
 Esta les propone trabajar para el ejército o para grandes empresas privadas, especialmente para, 
 Otto Ambros es de los que se benefician con el programa. 
 Director del I.G. Farben durante la guerra, participa en la decisión de utilizar el Zyklon B (producido por una filial del IG Farben) en las cámaras de gas y escoge el campo de exterminio de Auschwitz para instalar una fábrica. Esto le permite producir, con mano de obra en condiciones de esclavitud, gases asfixiantes que probaba allí mismo con prisioneros antes de extender su uso a los demás campos. 
 
	Declarado culpable en Nuremberg de esclavización y asesinatos en serie, es 
	beneficiario de la clemencia del tribunal y sólo es condenado a ocho años de 
	prisión. 
 Entonces es integrado como "consejero" a los efectivos de, 
 
 
 
	 
 El más emblemático es el de la conquista espacial en el que se destaca todo el antiguo equipo de los V2, que dirige prácticamente la totalidad de las investigaciones. 
	 
 
	Durante la guerra, como jefe 
	de producción en Mittelwerk, Rudolph estuvo especialmente encargado de 
	determinar el número de horas de trabajo que podían realizar los prisioneros 
	procedentes del campo de concentración de Dora. 
 
	La colaboración de los tres hombres permite a los 
	Estados Unidos realizar una de las hazañas más espectaculares de su historia 
	ya que, el 21 de julio de 1969, 
	
	Neil Armstrong pisa la Luna, una verdadera 
	coronación para la cooperación científica entre el partido nazi y el estado 
	mayor norteamericano. 
	 generalmente prisioneros de guerra, la resistencia al frío del cuerpo humano, este era el triste final para miles de deportados en el campo de concentración de Dachau. 
	Hubertus Strughold fue reclutado para el proyecto 
	Paperclip. 
	 
 
	A principios de la década de 1950 el ejército de los Estados 
	Unidos lanza un programa destinado a mejorar el conocimiento de la salud de 
	los pilotos y los cuidados a dispensarles en caso de accidente o 
	circunstancias extremas, como el lanzamiento en paracaídas a muy elevada 
	altura. Estas investigaciones son centralizadas en la Escuela de Medicina 
	Aérea de Randolph Field, en Texas, bajo la dirección del general Harry 
	Armstrong. 
 El más eminente de ellos es Hubertus Strughold, quien, tras haber vivido en los Estados Unidos en el período de entreguerras, se convierte en el responsable del Instituto de la Luftwaffe para la medicina aérea en Berlín. 
 Se trata de un centro siniestro donde científicos han realizado experimentos especialmente atroces con detenidos de los campos de concentración a fin de determinar la resistencia al hielo, a la absorción de agua salada y a la falta de oxígeno. 
 Oficialmente Strughold no habría tenido conocimiento de estos experimentos, sin embargo fueron realizados por sus más cercanos colaboradores: 
 Poco faltó para que Ruff también fuera contratado en el marco de Paperclip después de haber sido absuelto milagrosamente en Nuremberg. 
 
	Aún hoy, el edificio de la US Air 
	Force en San Antonio lleva el nombre de Hubertus Strughold. 
 
 
	 
 
	Muy por el contrario. 
 
	Primero para probar los gases creados por los 
	alemanes durante la guerra, y más tarde los métodos de manipulación 
	psicológica, muchos científicos de la operación Paperclip realizaron 
	experimentos en la misma entre 1947 y 1966, con frecuencia de manera 
	demasiado empírica y utilizando los conejillos de Indias que tenían a mano, 
	lo que no mejoró la imagen de Paperclip, incluso entre el personal 
	científico permanente de la base. 
 
	Ahora bien, en el campo de los gases de 
	combate, de los gases paralizantes y psicotrópicos, tales métodos tuvieron 
	consecuencias humanas terribles. 
 A pesar de un uniforme desfavorable que no lo consideraba digno de confianza y por lo tanto peligroso para la seguridad de los Estados Unidos, la JIOA envía a este especialista de la electrónica de alta frecuencia a Edgewood en septiembre de 1947, pero no le confían trabajos secretos y es demasiado moderado para el gusto de Hans Trurnit, otro reclutado, importado en 1947, de la élite científica nazi esta vez, que lo acusa de comunista y hace que sea expulsado a Alemania. 
 
	Profesor titular en 
	la universidad de Kieldu de 1934 a 1940, Trurnit fue adjunto del profesor 
	Holzlöhner, quien realizó experimentos con prisioneros de Dachau durante la 
	Segunda Guerra Mundial relacionados con el frío. 
 Este antiguo candidato rechazado por las SA sintetizaba durante la guerra los gases tóxicos y las toxinas para el laboratorio de química de guerra de la universidad de Würzburg y el Instituto de Investigaciones Técnicas de la Luftwaffe. 
 
	Una vez en los Estados Unidos, es encargado de crear nuevos 
	trajes de protección y antídotos contra los dos gases más mortales creados 
	por los nazis y que posee la US Army, el Tabun y el Sarín, llevados en 
	grandes cantidades desde Alemania a los arsenales norteamericanos. 
 El protocolo experimental es sumario: 
 El soldado Don Bowen, después de haber visto agonizar en medio de atroces sufrimientos a todos los animales de la pieza, cuenta: 
 
	Numerosos conejillos de Indias 
	fueron así hospitalizados luego de haber respirado pequeñas dosis de gas 
	mostaza o Tabun. 
 
 
	 
 Se trata del LSD, descubierto algunos años antes por otro Hoffmann, Albert esta vez, en los laboratorios Sandoz, de Basilea [5]. 
 
	Según su principal promotor, L. Wilson Greene, su 
	utilización debía hacer posible una guerra más humana. 
 
	Pero progresivamente, con 
	el aumento en potencia de la Guerra Fría y la multiplicación de las 
	operaciones de contrainsurgencia, la CIA acapara el proyecto para utilizarlo 
	en la conducción de los interrogatorios y como medio para quebrar la 
	resistencia psicológica del interrogado, provocar disociaciones psicológicas 
	y estados de amnesia [6]. 
 
	Friedrich Hoffmann inicia un amplio censo de las plantas 
	psicotrópicas para ultimar el "suero de la verdad". 
 
	Las 
	investigaciones sobre la amnesia condujeron a la utilización del Sernyl (SNA), 
	conocido igualmente como PCP o "polvo de ángel", administrado por vía oral o 
	por aerosol a soldados mientras caminaban sobre una estera rodante. 
 Entre los nazis más virulentos de Paperclip participantes en las investigaciones sobre guerra química y psicológica se encontraba igualmente el ex brigadier general Walter Schieber (empleado durante 10 años), quien había supervisado las fábricas de armamentos francesas durante la ocupación, las plantas alemanas que empleaban STO y el programa nazi de guerra química. 
 
	Encarcelado en 1945 bajo 
	sospecha de crímenes de guerra, salvó la vida redactando informes sobre la 
	guerra química para el US Army tras haberse presentado como testigo vedette 
	en Nuremberg. Fue integrado a Paperclip en 1947. 
 
 
	 
 A partir de inicios de los años 70 disminuye el financiamiento militar para los programas científicos de Paperclip. En 1971 las restricciones presupuestarias afectan duramente el programa espacial, especialmente a los ingenieros alemanes. 
 
	Arthur Rudolph 
	pasa a retiro con la más alta distinción de la NASA, la Distinguished 
	Service Medal. 
 
	Diez años más tarde, en 1984, cuando resurgen 
	las acusaciones de crímenes de guerra contra Arthur Rudolph, este último es 
	obligado a abandonar los Estados Unidos para trasladarse a Hamburgo. 
 Esta decisión fue validada posteriormente por el presidente Truman y elevada a nivel de política federal sistemática. 
 
	Bajo el control del Consejo de Seguridad 
	Nacional son realizadas operaciones paralelas en otros campos para recuperar 
	e integrar a los cuadros nazis, así como a los cuadros del sistema militar 
	japonés, al aparato de seguridad de los Estados Unidos o para emplearlos en 
	las operaciones secretas en el extranjero. 
 
	 Referencias 
 
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