Parte 13
	Los Ejércitos Secretos de La OTAN
	La Guerra Secreta en Dinamarca
	
	por Daniele Ganser
	
	15 Agosto 2013
	
	del Sitio Web
	
	VoltaireNet
	
	 
	
	 
	
	 
	
		
			| 
			 
			Este artículo es el capítulo 13 
			del libro  
			
			Les Armées secrètes de l’OTAN 
			Publicado en francés por Editions Demi-lune (2007).  | 
		
	
	
		
			
				
					
						
						
						
						Ya se había publicado 
						el libro de Daniele Ganser sobre los ejércitos secretos 
						de la OTAN cuando el gobierno de Dinamarca reconoció 
						finalmente la existencia del Gladio en ese país. 
						
						 
						
						Pero lo hizo para minimizar 
						la importancia del hecho y presentarlo como uno de los 
						tantos incidentes que caracterizaron la guerra fría.
						
						 
						
						Si no existe hoy en día 
						prueba alguna de la continuación de aquel sistema, lo 
						cierto es que tampoco ha podido comprobarse su 
						disolución definitiva.
 
					
				
			
		
	
	
	 
	
	 
	
	
	
	Arne Sejr (1922-2008)
	
	Ex miembro de la resistencia 
	contra el nazismo, 
	
	dirigió La Firma, una sección 
	danesa del Gladio.
 
	
	 
	
	El nombre codificado del ejército stay-behind en 
	Dinamarca era "Absalón". 
	
	 
	
	Como dice el proverbio latino, Nomen est 
	nomen ("El nombre es un presagio"). Ese nombre reflejaba la misión 
	anticomunista confiada a la red clandestina: 
	
	Absalón fue un obispo danés de la Edad Media que 
	venció a los rusos espada en mano.
	 
	
	La imponente estatua ecuestre de bronce que 
	representa a Absalón revistiendo una armadura, monumento que aún puede verse 
	en Copenhague, suscitó renovado interés en noviembre de 1990, cuando la 
	prensa danesa reveló que,
	
		
		"El grupo 'Absalón', conformado por la CIA y 
		respaldado por la OTAN, se preparaba para la toma del poder por los 
		comunistas en Dinamarca".[1]
	
	
	Quedan muchas zonas oscuras en la historia de 
	Absalón ya que, al enterarse de la existencia de la red, el Parlamento danés 
	decidió discutir el asunto a puertas cerradas y sin publicar ningún tipo de 
	informe oficial. 
	
	 
	
	Según un ex miembro anónimo de la organización, 
	el ejército secreto fue creado como consecuencia del trauma que había dejado 
	la ocupación alemana durante la Segunda Guerra Mundial y su núcleo no contó 
	más 360 hombres. 
	
	 
	
	Al igual que en todas y cada una de los 
	operaciones de la gran operación stay-behind, [en Dinamarca] la red debía 
	extenderse en caso de ocupación. 
	
		
		"La organización fue naturalmente concebida 
		según el modelo de los movimientos de resistencia. Se componía de 12 
		distritos estructurados en células aunque no tan estrictamente 
		coordinadas como durante la guerra", reveló a la prensa danesa el ex 
		guerrero danés de la sombra. 
		 
		
		"Cada distrito contaba hasta una treintena 
		de miembros en su primer círculo." [2]
	
	
	Según varias fuentes anónimas, la red stay-behind 
	danesa estuvo durante muchos años bajo la dirección de un tal E.E. Harder. 
	
	 
	
	Harder tenía como sobrenombre "Bispen", palabra 
	que significa "obispo" en danés, lo cual era una referencia a Absalón, según 
	el testimonio de un ex agente. [3] 
	
	 
	
	Además de dirigir el ejército secreto danés, 
	Harder se mantenía en estrecho contacto con la OTAN. Trabajó en el cuartel 
	general de la alianza atlántica desde 1966 hasta 1970, año en que la OTAN 
	tuvo que instalarse en Bélgica, luego de ser expulsada de Francia por el 
	general de Gaulle. 
	
	 
	
	En Valenciennes [la sede de la OTAN en Francia], 
	y posteriormente en el nuevo cuartel general de la OTAN en Bruselas, el 
	director Harder era mantenido constantemente informado sobre los detalles de 
	la operación stay-behind de la alianza atlántica.
	
	Harder era un hombre conocido por sus opiniones políticas, muy a la derecha, 
	y con quien muchos pensaban que era mejor no relacionarse.
	
	 
	
	En 1990, al responder a las preguntas de la 
	prensa, Erik Ninn Hansen, miembro del Partido Conservador y ex ministro de 
	Defensa de Dinamarca entre 1968 y 1971, trató de marcar la distancia con el 
	comandante stay-behind. 
	
		
		"Varios grupos fueron creados al término de 
		la Segunda Guerra Mundial. Es posible que Absalón haya estado vinculado 
		al movimiento de resistencia", respondió prudentemente a los 
		periodistas. 
		 
		
		"También recuerdo muy bien numerosas 
		conferencias de prensa que dio Harder. Pero no crean que yo sentía la 
		menor simpatía por sus ideas, eso es totalmente falso. Él era demasiado 
		nacionalista para mi gusto. Nunca me imaginé que Absalón fuese tan 
		influyente y jamás se me ocurrió que él pusiese colaborar con los 
		servicios secretos." 
	
	
	Harder, por su parte, rechazó todos los pedidos 
	de entrevista que le llegaron al descubrirse la existencia de los ejércitos 
	secretos, en 1990. [4]
	
	En 1978, o sea unos años después del escándalo del Watergate y de la 
	intervención de la CIA en Chile - intervención que provocó la muerte del 
	presidente socialista Salvador Allende y la llegada de Pinochet al poder - 
	el ex director de la CIA William Colby publicó un libro destinado a tratar 
	de mejorar la imagen de la CIA, el servicio de inteligencia estadounidense. 
	
	 
	
	En aquel libro, Colby confesaba que él mismo 
	había participado en su juventud en la creación de redes stay-behind en 
	Escandinavia, mientras estuvo destacado en la estación CIA de Estocolmo. 
	
		
		"La situación era diferente en cada país 
		escandinavo. Noruega y Dinamarca eran aliados de la OTAN, Suecia se 
		mantenía apegada a su neutralidad, que le había permitido atravesar dos 
		guerras mundiales, y Finlandia estaba obligada a observar cierta 
		deferencia hacia la Unión Soviética, su vecino inmediato", contaba Colby.
		
		 
		
		"Así que en algunos de esos países los 
		gobiernos formarían ellos mismos sus propias redes stay-behind para 
		activarlas desde el exilio con vistas a continuar la lucha", escribía el 
		ex director de la CIA refiriéndose así a Noruega y Dinamarca. 
		
		 
		
		"Había que coordinar la acción de esas redes 
		con los planes de la OTAN, dirigir sus antenas de radio hacia los 
		futuros destinos del exilio y ocultar el equipamiento proporcionado por 
		la CIA en escondites bajo la nieve, con vista a su futura utilización. 
		En cuanto a los otros países", o sea la Suecia neutral y Finlandia, "la 
		CIA tendría que arreglárselas sola o, en el mejor de los casos, contar 
		con la ayuda 'extraoficial' de agentes locales ya que los responsables 
		de los gobiernos de esos países prohibían toda colaboración con la OTAN 
		y la menor sospecha provocaría un escándalo entre la prensa comunista 
		local, los diplomáticos soviéticos y los lealistas escandinavos que 
		esperaban que una política de neutralidad o de no alineamiento les 
		permitiese no tener problemas ante una Tercera Guerra Mundial". 
		[5]
		
		"El Berlingske Tidende puede hoy revelar que Absalón es la rama 
		danesa de la red internacional Gladio. La confirmación viene de un 
		miembro de Absalón que ha preferido conservar el anonimato", anuncio un 
		diario danés en 1990. [6] 
		 
		
		La fuente, que el diario designaba como Q, 
		confirmaba las revelaciones que Colby había hecho en su libro. "La 
		versión de Colby es rigurosamente exacta. Absalón fue creada a 
		principios de los años 1950", declaraba el testigo Q. También según Q, 
		la red se componía únicamente de hombres con ideas muy conservadoras y 
		cuyo anticomunismo estaba por lo tanto fuera de toda duda. 
		 
		
		"Colby era miembro laico de la organización 
		católica mundial Opus Dei. El Opus Dei desempeñó un papel crucial en la 
		creación de la red Gladio en toda Europa y sobre todo en Dinamarca", 
		afirmaba Q.
		
		"El jefe del Gladio era Harder, quien no era precisamente católico. Pero 
		no abundan los católicos en Dinamarca y el núcleo duro del Gladio danés 
		se componía sobre todo de ex miembros de la resistencia [de la Segunda 
		Guerra Mundial], de ex prisioneros de los campos de Tysk Vestre Faengsel, 
		de Froslevlejren, de Neuengamme y de la Brigada danesa." [7]
	
	
	Los periodistas daneses se pusieron nuevamente 
	en contacto con Colby, a fines de 1990, y descubrieron que los secretos del 
	Gladio seguían bajo la más estricta custodia. 
	
	 
	
	Ya con 70 años de edad, el ex director de la 
	CIA, residente en Washington, se puso a la defensiva: 
	
		
		"No sé absolutamente nada de la organización 
		danesa. Nunca estuve en contacto con ellos. No me parece. En todo caso, 
		no me acuerdo". [8] 
	
	
	Los periodistas insistieron:
	
		
		"¡Pero usted escribe en su libro que usted 
		construyó organizaciones por cuenta de la CIA en 4 países!" 
	
	
	A lo que Colby contestó: 
	
		
		"Ya no me acuerdo si hablé de 4 o de 3 
		países o de otra cantidad. Todo lo que supe en aquel entonces 
		seguramente lo supe a través de fuentes secundarias. Pero el libro es 
		fiel, fiel a lo que yo sabía en aquella época." 
	
	
	Al periodista danés que insistía y que parecía 
	evidentemente poco dispuesto a creer en la amnesia de Colby, el ex director 
	de la CIA acabó contestándole: 
	
		
		"La gente le está dando demasiada 
		importancia a esa historia. El peligro de invasión soviética era real 
		para mucha gente en aquella época y la cooperación con los movimientos 
		de resistencia en Noruega o en Francia eran el modo más natural de 
		organizar la defensa del país." 
	
	
	Colby se negó, sin embargo, a comentar las 
	sospechas de posible implicación de la red en operaciones terroristas y de 
	acondicionamiento del clima político. [9] 
	
	 
	
	Cuando un segundo grupo de periodistas insistió 
	en querer obtener al menos el nombre de un contacto de la CIA en Dinamarca, 
	Colby reveló que "su contacto en Dinamarca" para la Operación Gladio era 
	Ebbe Munck, figura central de los servicios secretos daneses y veterano 
	de la resistencia que había emprendido después una carrera como diplomático 
	y se había convertido en uno de los consejeros de la reina Margarita de 
	Dinamarca. [10]
	
	Como en todos los países vinculados a la Operación Gladio, el ejército 
	secreto de Dinamarca estaba integrado a los servicios secretos militares FE 
	(Forsvarets Efterretningstjeneste). 
	
	 
	
	Según una fuente anónima, los cuadros de mando 
	del ejército clandestino eran oficiales militares:
	
		
		"el 95% eran militares. También había 
		numerosos miembros de las Unidades Territoriales. Por otro lado, la 
		Federación de Oficiales de la Reserva también representaba una cantera 
		muy útil en caso de necesidad".
	
	
	Parece que algunos responsables políticos 
	cuidadosamente seleccionados habían sido informados de la existencia del 
	ejército secreto ya que, como subrayaba Q,
	
		
		"existían contactos muy estrechos con el 
		Partido Popular. El basamento ideológico era fuertemente anticomunista. 
		Éramos daneses dotados de un fuerte sentimiento nacional basado en la 
		ideología cristiana. Para nosotros era capital que pudiera organizarse 
		un movimiento de resistencia sin esperar uno o 2 años, como había 
		sucedido en 1940".
	
	
	El ejército secreto, como explicaba Q, tenía una 
	doble función: actuar en caso de invasión o de toma del poder por parte de 
	los comunistas daneses - aún sin intervención del Ejército Rojo - y recoger 
	información sobre las organizaciones de izquierda:
	
		
		"Estábamos en plena guerra fría y una 
		invasión rusa o un golpe de Estado de los comunistas daneses eran para 
		nosotros amenazas reales e inminentes". [11]
	
	
	A pesar de su orientación conservadora, Absalón 
	no reclutaba a cualquier militante de extrema derecha, según un ex agente:
	
		
		"No todo el mundo podía ser miembro. 
		Tuvimos, por ejemplo, el caso del activista de extrema derecha Hans 
		Hetler que quería ser miembro. Pero nosotros no lo queríamos. Era un ex 
		colaborador [de la ocupación alemana] y creíamos que no reunía las 
		cualidades requeridas." [12]
	
	
	El ex director de la CIA William Colby 
	tenía razón en indicar que, como todos los ejércitos secretos, el stay-behind 
	danés Absalón tenía también sus propias reservas. 
	
		
		"Cierto número de escondites de armas fueron 
		diseminados a través de Dinamarca. No daré la cantidad exacta pero puedo 
		decir que había menos de una decena", declaró el ex miembro del Gladio 
		identificado como Q. 
		 
		
		"Había dos en grandes bosques, en Bribskov y 
		en Dronninglund Storskov. No diré cómo fueron escondidas ni si están 
		allí todavía". [13] 
	
	
	Al contrario de lo que se vio en Italia, 
	aquellas armas nunca fueron utilizadas en la realización de operaciones de 
	terrorismo en territorio danés. 
	
		
		"Eso nunca sucedió en Dinamarca. Nunca 
		utilizamos aquellas armas. En cambio, sí participamos en ejercicios 
		militares. Uno de ellos tuvo lugar en la frontera norte de la OTAN, en 
		Tromso [Noruega]", precisó Q. [14]
	
	
	Durante aquellas maniobras internacionales, los 
	oficiales de la red Absalón se entrenaban en la realización de misiones 
	clandestinas y de operaciones especiales con agentes de los demás stay-behind 
	europeos, de la OTAN, de la CIA y del MI6. 
	
	 
	
	Por otra parte, como descubrió con asombro la 
	prensa danesa, el ejército secreto Absalón participó también en operaciones 
	particularmente sensibles del otro lado de la cortina de hierro, en los 
	países comunistas de "Europa Oriental". [15] 
	
	 
	
	Así lo confirmó el agente Q:
	
		
		"Absalón tenía todo tipo de funciones. Ante 
		todo tenía que mantenerse listo en caso de una posible invasión rusa o 
		de que los comunistas tomaran el poder. Pero también tenía que recoger 
		información sobre las organizaciones de izquierda así como datos de 
		inteligencia en Europa Oriental".
		[16]
	
	
	Cuando se conformó el ejército secreto, después 
	de la Segunda Guerra Mundial, las unidades tuvieron fácilmente a su 
	disposición armas y explosivos. 
	
		
		"Aquella abundancia era resultado de una 
		distribución desigual de las armas después de la liberación de 
		Dinamarca. En aquella época, algunas unidades militares habían recibido 
		grandes cantidades de armamento proveniente de Suecia mientras que no se 
		había entregado nada a los comunistas", explicó Q, quien también dio a 
		entender que la CIA también hizo llegar posteriormente equipamiento 
		suplementario al stay-behind danés. 
		 
		
		"Yo no excluyo la posibilidad de que se haya 
		entregado después equipamiento suplementario. Se trataba probablemente 
		de material americano." [17]
	
	
	Esa alegación fue confirmada en 1991 por los 
	titulares de la prensa danesa, 
	
		
		"La CIA envió armas a Dinamarca", que se 
		basaban en un documento hallado en los archivos nacionales de Estados 
		Unidos. 
	
	
	Se trataba de una nota de puño y letra del 
	general G.C. Steward, quien había sido en los años 1950 responsable 
	de la ayuda militar estadounidense a Europa. 
	
	 
	
	El documento estaba fechado el 10 de febrero de 
	1953 y dirigido al jefe del Military Assistance Advisor Group (MAAG) 
	en Copenhague. En aquella época, el MAAG disponía de toda una flota de 
	barcos destinados al transporte de material de guerra. 
	
	 
	
	El memorándum de Steward se titulaba: 
	
		
		"Ayuda de la CIA por abastecimientos 
		especiales a Dinamarca a través del MAAG". 
	
	
	El documento no contenía precisiones sobre el 
	tipo de equipamiento que se enviaba a Dinamarca ni a qué grupo.
	
		
		"El gobierno danés ha desmentido hasta ahora 
		todas las alegaciones de que la CIA creó, a principio de los años 1950, 
		una red de escondites de armas y de hombres destinada a combatir una 
		invasión soviética en Dinamarca", resaltó la prensa danesa. 
	
	
	En febrero de 1991, el ministro de Defensa 
	Knud Enggaard volvió a emitir un desmentido bastante mal concebido: 
	
		
		"El gobierno no tiene conocimiento de la 
		existencia de ese tipo de organización en Dinamarca." [18]
	
	
	Como la mayoría de sus colegas europeos, los 
	miembros del ejército secreto danés viajaban secretamente a Estados Unidos 
	para seguir una formación especial, probablemente en los centros de 
	entrenamiento para las operaciones especiales de la CIA o en el cuartel 
	general de las fuerzas especiales, en Fort Bragg. 
	
		
		"Varios miembros del Gladio danés parecen 
		haber participado en programas de entrenamiento de la CIA para misiones 
		de inteligencia y sabotaje en Estados Unidos", reveló un diario danés 
		sin precisar el lugar exacto de aquellos ejercicios secretos. 
		[19]
	
	
	Además de con la CIA, Absalón mantenía también 
	un estrecho vínculo con la OTAN. 
	
	 
	
	Los servicios secretos daneses FE, además de 
	dirigir Absalón, garantizaban también la conexión entre la red stay-behind y 
	la OTAN, según el esquema ya observado en Italia, Bélgica y Francia, donde 
	los servicios de inteligencia del ejército coordinaban la cooperación entre 
	el ejército secreto y mando de las fuerzas especiales de la alianza 
	atlántica. 
	
	 
	
	Parece que Eric Fournais, director del FE 
	de 1963 a 1973, desempeñó un papel preponderante en Absalón. Cuando dejó la 
	dirección de ese servicio, en 1973, fue nombrado coordinador de los 
	servicios de inteligencia de la OTAN en Bruselas, función que ocupó hasta 
	1977. 
	
	 
	
	Un ex miembro de Absalón precisó: 
	
		
		"Fournais estaba también muy presente en el 
		seno de Absalón". 
	
	
	El comandante del Gladio Harder, quien había 
	trabajado en el cuartel general de la OTAN de 1966 a 1970 y había 
	garantizado entonces personalmente el contacto entre la OTAN y Absalón, fue 
	por lo tanto muy probablemente reemplazado por Fournais a comienzos de los 
	años 1970. 
	
		
		"Cuando Fournais alcanzó las altas esferas 
		sustituyó a Harder como agente de enlace entre Absalón y la OTAN", 
		confirmó Q.
	
	
	En 1990, cuando la prensa lo interrogó sobre las 
	declaraciones de Q, Fournais desmintió nerviosamente haber tenido ningún 
	tipo de contacto con el ejército de extrema derecha afirmando a la vez que 
	la OTAN no tenía nada que ver con operaciones stay-behind:
	
		
		"Los servicios secretos militares y yo nos 
		manteníamos a distancia de Absalón. Absalón no tenía ningún contacto con 
		la OTAN ni con los servicios secretos militares daneses. 
		 
		
		Si oí hablar de Absalón fue porque los 
		responsables políticos insistieron para que nosotros [los servicios 
		secretos daneses] mantuviésemos un ojo en los grupúsculos de extrema 
		derecha. Pero nunca vigilamos a Absalón ni investigamos sobre ese 
		organismo. Hubiese sido ridículo." [20]
	
	
	En efecto, habría resultado bastante extraño ver 
	a Fournais, el jefe de los servicios secretos militares, investigando a 
	Fournais, el miembro de Absalón, para señalar sus actividades ilegales.
	
	Dentro del FE, el ejército stay-behind se hallaba bajo la tutela del 
	Departamento de Operaciones Especiales (SO), dirigido por Gustav Thomsen. 
	
		
		"El FE tenía un servicio de operaciones 
		especiales cuyas tareas eran desconocidas incluso para los otros 
		miembros del personal", declaró un ex guerrero danés de las sombras.
		
		 
		
		"Si había que poner micrófonos en algún 
		lugar, el SO ponía el material. El jefe del SO era Gustav Thomsen". 
		[21] 
	
	
	También el agente Q confirmó que el stay-behind 
	danés se relacionaba con los servicios secretos militares a través del SO: 
	
		
		"No tengo intenciones de citar nombres. Pero 
		así es. Era allí [en el SO] donde nos poníamos en contacto". 
		[22] 
	
	
	El ex comandante del SO Gustav Thomsen fue más 
	reacio a hablar de los secretos de Estado. En 1990, declaró:
	
		
		"Me retiré en 1975. Ha pasado mucho tiempo 
		desde entonces. Ya no recuerdo nada." [23]
	
	
	Como el parlamento danés no creyó necesario 
	abrir una investigación sobre el tema, los detalles sobre el entrenamiento y 
	las operaciones que realizaron el SO y Absalón durante la guerra fría siguen 
	siendo esencialmente desconocidos. 
	
	 
	
	Pero algunos afirman que sus operaciones 
	secretas incluyeron vigilar a los comunistas daneses y a otras 
	organizaciones de izquierda así como la elaboración de expedientes 
	personales. 
	
	 
	
	En virtud de lo declarado por fuentes anónimas, 
	la prensa local escribió que,
	
		
		"Absalón tenía esencialmente como misión 
		reunir información sobre las organizaciones de izquierda". [24]
	
	
	Hacia finales de los años 1950, el agente del FE
	Arne Sejr fue centro de un verdadero escándalo de envergadura 
	nacional cuando se descubrió que escuchaba y espiaba a Alfred Jensens, 
	uno de los principales líderes comunistas de Dinamarca. [25] 
	
	 
	
	Esa operación, al igual que otras más realizadas 
	en suelo nacional parece haberse realizado con el apoyo del SO y de Absalón, 
	aunque ya en aquella época el ejército secreto,
	
		
		"hacía todo lo posible para escapar a la 
		atención de los medios". [26] 
	
	
	Después de una fase de inactividad a principios 
	de los años 1950, todo parece indicar que las operaciones internas se 
	intensificaron a lo largo de la siguiente década. 
	
	 
	
	Parece que Harder, el comandante de la red, tuvo 
	algunas dificultades,
	
		
		"en hacer funcionar correctamente Absalón 
		durante los años 1950. No fue hasta 1960 y 1961 que la máquina se puso 
		en marcha", declaró Q.
		
		"Eso sucedió después de que 18 miembros del Gladio danés fueron a una 
		reunión en el cuartel general de la OTAN, que estaba entonces en 
		Valenciennes." [27]
	
	
	Como el ejército secreto actuaba en la más 
	completa clandestinidad, se borraba toda huella de su paso. 
	
	 
	
	Sólo una vez oyó hablar la población de las 
	operaciones internas de Absalón: en 1974. Aquel año, Absalón trató 
	inútilmente de impedir que un grupo de universitarios liberales integrara el 
	consejo de administración de la universidad de Odense, que ya le parecía 
	demasiado inclinado a la izquierda. Cuando se supo la verdad sobre las 
	intrigas de Absalón, la prensa se desencadenó contra aquella "organización 
	mística subterránea". 
	
	 
	
	Nadie logró, en aquella época, sacar a la luz 
	los vínculos existentes entre la OTAN, la CIA y la red internacional. 
	[28] 
	
	 
	
	Parece que, como resultado del escándalo de la 
	universidad de Odense, Absalón renunció a las operaciones secretas y comenzó 
	a crear organizaciones que le servirían de fachada para promover su propia 
	ideología. 
	
		
		"Aquello [la operación de Odense] llevó a 
		Absalón a renunciar a interferir en la sociedad. En vez de ello, se creó 
		un nuevo organismo llamado Pindsvinet [erizo] para difundir legalmente 
		las ideas de Absalón en el debate público", contó el agente Q, 
		precisando que se había recurrido al erizo como símbolo para ilustrar 
		los lazos ideológicos que la organización mantenía con la OTAN:
		
		"Pindsvinet es el nombre de una operación concebida por el general 
		Eisenhower pero es también el emblema de la alianza atlántica. A partir 
		de 1981, la Defensa Nacional de Dinamarca también adoptó el erizo como 
		emblema." [29]
	
	
	Cuatro años más tarde se produjo otro escándalo 
	en el que estuvo implicado el ejército secreto danés. 
	
	 
	
	En 1978, al descubrirse en Noruega un inmenso 
	escondite de armas, el ministro de Defensa Rolf Hansen no tuvo más 
	remedio que confirmar ante el Parlamento que se había conformado en el país 
	un ejército secreto bajo la égida de la OTAN. 
	
	 
	
	En la vecina Dinamarca, la red stay-behind 
	Absalón se vio entonces en una posición incómoda ya que las revelaciones que 
	tenían lugar en Noruega amenazaban también su propia cobertura.
	
	Según el agente Q, los efectivos del ejército secreto danés se redujeron 
	considerablemente durante los años 1978 y 1979. 
	
	 
	
	El jefe del Gladio danés, Harder, y su asistente 
	Fleming Norgaard se refugiaron entonces en España. 
	
		
		"Ya estábamos todos un poco viejos", comenta 
		el agente Q. [30] 
	
	
	Según ese testigo, Absalón fue reemplazado, en 
	1978, por una nueva organización conformada con nuevos agentes. 
	
	 
	
	Para Nils Gleditzch, del Instituto de 
	Investigación para la Paz - organismo internacional con sede en Oslo,
	
		
		"resulta algo sorprendente que ningún 
		ciudadano de ningún Estado miembro de la OTAN haya aprovechado aquella 
		oportunidad para interrogarse sobre la situación en su propio país". 
		[31]
	
	
	Como subraya el agente Q, Flemming Norgaard, 
	el brazo derecho de Harder, desempeñaba un papel clave dentro de la red 
	Absalón, sobre todo por "sus importantes actividades de recogida de fondos".
	
	 
	
	En 1990, varios periodistas daneses que lograron 
	encontrarlo en Francia quisieron conocer su reacción ante las declaraciones 
	del agente Q. 
	 
	
	Norgaard reconoció que había sido miembro de 
	Absalón y que disponía de una excelente red de contactos internacionales y 
	de respaldo en el seno del partido conservador danés. 
	
		
		"Svenne era la eminencia gris. Viajaba 
		constantemente", declaró el agente Q.
		
		"Nadie sabía con exactitud lo que él hacía. Pero las personas más 
		expuestas son raramente las más influyentes." [32]
	
	
	En 1990, cuando salió a la luz la existencia del 
	Gladio italiano, la red clandestina danesa seguía activa. 
	 
	
	El ministro de Defensa Knud Enggaard no 
	tuvo por lo tanto más remedio que presentarse ante un Folketing (el 
	Parlamento danés) tan atónito como curioso. El 21 de noviembre, el ministro 
	afirmó en su primera alocución pública sobre el ejército secreto danés que 
	ninguna organización "de ningún tipo" había sido creada nunca por la CIA en 
	el país con el respaldo de la OTAN. 
	 
	
	Y después, para gran confusión de los 
	parlamentarios, dijo:
	
		
		"Toda otra información relativa a una 
		operación de los servicios secretos concebida bajo la hipótesis de una 
		ocupación enemiga está clasificada como confidencial, e incluso 
		altamente confidencial, y me es por lo tanto imposible decir más sobre 
		ello al Parlamento danés."
	
	
	El diputado Pelle Voigt, quien fue el 
	primero en mencionar el asunto, juzgó la respuesta del ministro de Defensa,
	
		
		"contradictoria y una confirmación indirecta 
		de que Dinamarca también tenía su propia red secreta". [33]
	
	
	Al interrogar a varios ex ministros, los 
	periodistas descubrieron que estos no tenían muchas ganas de hablar del 
	delicado asunto. 
	 
	
	Erling Brondum, quien había sido ministro 
	de Defensa de 1973 a 1975, declaró en 1990: 
	
		
		"Ha pasado tanto tiempo. El nombre de 
		Absalón no me recuerda absolutamente nada". [34]
		
	
	
	Ni corta ni perezosa, la prensa recordó de 
	inmediato que en 1974 el propio Brondum había mencionado ante el parlamento 
	el nombre de "Absalón", el mismo que ahora decía no recordar mientras negaba 
	los presuntos vínculos entre el stay-behind danés y el ministerio de 
	Defensa. 
	 
	
	El socialdemócrata Poul Sogaard, ministro 
	de Defensa de 1978 a 1982, parecía tener mejor memoria y declaró claramente:
	
		
		"Yo me acuerdo muy bien de Absalón. Era un 
		círculo de oficiales militares. (…) Si al ejército le hacía falta tal o 
		más cuál equipamiento, Absalón ponía los fondos para comprarlo. Eso fue 
		lo que me explicó el general Andersen."
	
	
	Sin embargo, el general Andersen, quien según 
	Sogaard estaba implicado en la conspiración, desmintió aquella afirmación y 
	declaró a la prensa:
	
		
		"A Poul Sogaard debe estar fallándole la 
		memoria. El nombre de Absalón no me recuerda absolutamente nada." 
		[35]
	
	
	El ministro de Defensa Enggaard logró que el 
	tema de la red stay-behind se debatiera sólo de forma interna por parte de 
	la Comisión parlamentaria encargada de supervisar el trabajo de los 
	servicios secretos, Comisión cuyos archivos se clasifican por lo tanto como 
	altamente secretos y son inaccesibles para el público. 
	 
	
	Así que sólo algunos diputados recibieron 
	información sobre el asunto mientras que la población era mantenida en la 
	ignorancia.
	
		
		"Todos los ministros tenían conocimiento de 
		las actividades de Absalón. Eso es seguro en un 200%. Nosotros teníamos 
		un hombre en la cúpula del ministerio que estaba él mismo en contacto 
		con el primer ministro", subrayó el ex agente Q. 
		 
		
		"Teníamos razón en hacer lo que hacíamos. 
		Pero, después de tantos años, es tiempo ya de revelar ciertos detalles 
		en nombre de la Historia." [36]
	
	
	
	
 
	
	Actualización
	
	En 2002, el ex ministro de Defensa Hans Haekkerup reconoció en sus 
	Memorias la participación de su ministerio en la creación del Gladio en 
	Dinamarca.
	
	En 1999, a pedido del parlamento, el ministerio de Defensa de Dinamarca creó 
	una comisión de control sobre los servicios secretos (Politiets 
	Efterretningstjeneste). Después de la publicación del libro de Daniele 
	Ganser, la Comisión entregó su quinto informe, dedicado a las actividades 
	del Gladio en Dinamarca, de 1945 a 1989.
	
	Según ese informe, las actividades de espionaje de los anglosajones en suelo 
	danés se iniciaron inmediatamente después del fin de la Segunda Guerra 
	Mundial. También inmediatamente tuvieron lugar a una serie de negociaciones 
	ante la situación de pánico que siguió a la toma del poder por parte de los 
	comunistas en Checoslovaquia. Aquellas negociaciones no prosperaron hasta 
	1951, en un contexto de rivalidad entre el Reino Unido y Estados Unidos.
	
	 
	
	A la cabeza del Gladio danés se hallaban Arne 
	Sejr y Erik Husfeldt.
	
	La complicación que marcó aquellos inicios explica la existencia de varias 
	redes, entre las que figuraba Firmaet (la Firma), junto a Absalón. La 
	Comisión logró comprobar que fue el Gladio quien instaló dispositivos de 
	escucha en el apartamento del líder comunista Alfred Jensen, como revelara 
	el ex primer ministro Jens Otto Krag.
	
	En 2005, Peer Henrik Hansen publicó Firmaets største bedrift - Den 
	hemmelige krig mod de danske kommunister (Ediciones Høst & Søn). 
	
	 
	
	Al año siguiente, el mismo autor se basó en ese 
	trabajo para hacer un artículo para el International Journal of 
	Intelligence and CounterIntelligence, "Upstairs and Downstairs - The 
	Forgotten CIA Operations in Copenhagen".
	
	
	Red Voltaire
	
	
	
	
	Referencias
	
		
		[1] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig 
		haer efter anden verdenskrig", publicado el diario danés Berlingske 
		Tidende, el 25 de noviembre de 1990. El artículo del periodista Iver Hoj 
		sigue siendo hoy en día la descripción más completa del ejército stay-behind 
		en Dinamarca.
		
		[2] Ibid.
		
		[3] Ibid.
		
		[4] Ibid.
		
		[5] William Colby, Honorable Men: My life in the CIA (Simon & Schuster, 
		New York, 1978), p.82 and 83.
		
		[6] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[7] Ibid.
		
		[8] Ibid.
		
		[9] Ibid.
		
		[10] Fragmento de Jacob Andersen, "Mere mystik om dansk Gladio" en el 
		diario danés Information, edición del 26 de noviembre de 1990.
		
		[11] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[12] Jacob Andersen, "Mere mystik om dansk Gladio", Op. cit.
		
		[13] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[14] Ibid.
		
		[15] Jacob Andersen, "Mere mystik om dansk Gladio", Op. cit.
		
		[16] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[17] Ibid.
		
		[18] Henrik Thomsen, "CIA sendte vaben til Danmark" en el diario danés 
		Jyllands Posten del 22 de abril de 1991.
		
		[19] Diario danés Extra Bladet, retomado en Jacob Andersen, "Mere mystik 
		om dansk Gladio", Op. cit.
		
		[20] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[21] Ibid.
		
		[22] Ibid.
		
		[23] Ibid.
		
		[24] Jacob Andersen, "Mere mystik om dansk Gladio", Op. cit.
		
		[25] Henrik Thomsen, "CIA sendte vaben til Danmark", Op. cit.
		
		[26] Jacob Andersen, "Mere mystik om dansk Gladio", Op. cit.
		
		[27] Ibid.
		
		[28] Ibid.
		
		[29] Ibid.
		
		[30] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[31] Agencia internacional de prensa Associated Press, 14 de noviembre 
		de 1990.
		
		[32] Iver Hoj, "Ogsa Danmark havde hemmelig haer efter anden verdenskrig", 
		Op. cit.
		
		[33] Ibid.
		
		[34] Ibid.
		
		[35] Ibid.
		
		[36] Ibid.
	
	
	
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