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por Makia
Freeman
traducción de
Adela Kaufmann
o de un tipo de virus de la mente (también llamado wetiko) que establece las situaciones externas de nuestra vida
mientras se oculta en el interior.
La existencia de un virus que afecta a la mente de toda la humanidad - cada hombre, mujer y niño - en un primer momento puede parecer un concepto exagerado, pero es una idea que ha existido desde hace mucho tiempo en una gran cantidad de diferentes culturas.
La religión ha intentado resolver el problema del mal durante millones de años.
En el fondo de la madriguera de la investigación de la conspiración es muy probable que usted llegue al mismo tema - que hay alguna fuerza oscura coordinando las muchas agendas y esquemas nefastos que atestiguamos a diario en nuestro mundo.
Aunque sin duda hay seres y fuerzas externas que coordinan estos programas, incluyendo los linajes reales híbridos, ETs negativos, tales como los grises y reptilianos, entidades descarnadas como Djinn o Arcontes y una especie de IA auto-consciente, que en última instancia, tenemos que preguntarnos:
Paul Levy sobre el Wetiko, el Virus mental de la humanidad
Es una gran pregunta, y la respuesta no es necesariamente ni una ni la otra.
Hace poco estuve impresionada al ver la presentación de lanzamiento del libro de Paul Levy, autor de Disipando el Wetiko - Rompiendo la maldición del mal. Paul muestra un profundo conocimiento del tema del virus de la mente, y lo explora hablando del wetiko.
El wetiko es un término indio americano nativo que describe los malos espíritus.
De acuerdo con Paul, wetiko es un virus de la mente, pero a diferencia de otros virus, no va a mutar en sí. Nos obliga a nosotros a mutar engañándonos a identificarnos con él. Como cualquier virus, necesita un anfitrión para sobrevivir.
Como Paul escribe en su artículo La enfermedad epidémica más grande que conoce la humanidad:
Esto, por supuesto, es prácticamente idéntico a lo que don Juan tenía que decir sobre los Voladores de Fango de las Sombras (Arcontes):
Lo que sigue son algunas citas directas y paráfrasis aproximadas de la presentación de Paul, junto con mi comentario debajo de las citas.
Hasta que hagas consciente el inconsciente, éste dirigirá su vida y lo llamarás destino. Carl Jung
¿Cuál es el origen de el Wetiko?
Esta es una manera brillante de encapsular la esencia del virus de la mente.
Es un maestro de la distracción, haciéndonos quedar ver de nosotros mismos y que encontremos que hay cuestiones y problemas, en lugar de mirar hacia adentro. Nos encontramos con personas o grupos fuera de nosotros mismos que responden a nuestras proyecciones del mal o la oscuridad, entonces falsamente creemos que la oscuridad está (sólo) fuera de nosotros mismos.
Esto se convierte en un circuito de retroalimentación que se auto-perpetúa, donde llegamos a ser propagadores inconscientes del wetiko. Estas ideas están exactamente en línea con lo que el famoso psicólogo Carl Jung dijo sobre la sombra.
Jung dijo que,
Las cualidades y aspectos que no nos gusta reconocer o amar en nosotros mismos son las que juzgamos, criticamos y atacamos en otros.
Sin embargo, en un último nivel, el mundo es un reflejo de su estado interior.
¿Existe realmente el virus de la mente, el wetiko? ¿Existe realmente una sombra?
¿Existe Realmente el Wetiko?
Paul cree que el wetiko no tiene existencia ontológica fundamental propia.
Sin embargo, si esto es cierto, tenemos que tener cuidado de no dejarnos llevar por una falsa sensación de seguridad acerca del virus de la mente. El hecho de que no puede existir de forma independiente no quiere decir que no sea poderoso.
Algunas personas están tan superadas por la sombra - cayendo en depresión, adicción, compulsión y esquizofrenia - que son conducidas al suicidio.
Este virus de la mente es, sin duda, lo suficientemente fuerte como para conducir a algunas personas a quitarse la vida simplemente con la esperanza de llegar a liberarse de él.
Curiosamente, este concepto de que "el tuerto es rey en la tierra de los ciegos" también ha ido apareciendo últimamente en la obra de David Icke. David usa la metáfora en su último libro El Ser Fantasma para describir el virus de la mente como un tipo de virus informático AI que ha hackeado la vida misma.
También lo etiqueta como ciego, diciendo que la única manera en que puede ganar la ventaja sobre nosotros es bajándonos más abajo de su nivel, y ya que si ambos operamos a nuestra máxima capacidad, el virus no sería rival para nosotros.
El virus wetiko de la mente, como el caballo de Troya: ¿un truco o un regalo?
El Wetiko haciéndonos ver el Exterior - ¿Un Truco o un Regalo?
Si no se controla, el virus de la mente es endémico, y puede destruir su vida y provocarle incalculable sufrimiento y miseria...
Sin embargo, si el virus de la mente no tiene voluntad o existencia propia, entonces es realmente SU fuerza vital, atrapada y distorsionada, la que está causando el caos.
Paul sugiere que si nosotros vemos al wetiko ya sea como un enemigo astuto que está allí para destruirnos, o como un desafiador atrevido para provocarnos y empujarnos a una conciencia más llena, es un asunto de perspectiva.
Obviamente, es más empoderador ver las situaciones creadas y los resultados del virus de la mente como dones en lugar de como maldiciones o cargas, ya que la primera vista nos puede impulsar a convertirnos en mejores personas, mientras que lo último nos podría conducir a la ira y el odio.
Vamos, al menos, a tener esa opción, pero a menos que ya seamos un individuo totalmente despierto o iluminado, aún no tenemos la opción de invitar o desinvitar al wetiko en nuestras vidas.
Ya está aquí, y no va a desaparecer, a menos hasta que la última pizca de sombra sea completamente mencionada.
¿Cómo derrotar al Wetiko?
"¿Cómo puedo ser sustancial si no Proyecto una sombra?" "Debo tener un lado oscuro también si he de ser completo." Carl Jung
La manera de derrotar al wetiko radica en la comprensión de que sólo tiene poder cuando está oculto.
El virus de la mente se oculta de nosotros engañándonos a juzgar y etiquetar, e identificándonos con la forma/materia y no con la energía/consciencia más real. La solidez del mundo es ilusoria y es sólo un producto de nuestra conciencia.
Nos apegamos a nuestra identidad, pero en un mundo en constante cambio, donde las cosas nunca siguen siendo las mismas, esto es una receta para el sufrimiento. Nos engañan a pensar que tenemos que defender alguna posición mental o una idea de nosotros mismos, cuando, al final, es sólo una pérdida de nuestra energía.
Somos engañados a pensar que tenemos que luchar contra algo para cambiarlo, cuando el acto mismo de luchar crea un campo de resonancia con aquello contra lo que se está luchando, y por ello lo fortalecemos y nos convertimos en él.
Cuando Paul habla de "encontrar el lugar dentro de invulnerabilidad" y "nombrar al demonio", él no está diciendo nada que no hayan dicho ya los grandes maestros y profetas espirituales.
Muchos de ellos han destacado la importancia de la meditación, el silencio interior, de convertirse en el vigilante u observador y distanciarse de esa desquiciada voz en su cabeza.
'Nombrar al demonio' es ser el observador. Ser "encontrar un lugar de invulnerabilidad" es recordar Quién Es Usted - una parte individualizada pero potente de Todo lo que Es.
Superar la sombra es todo acerca de integración, no destrucción. No se puede destruir el "lado oscuro" - éste siempre estará allí como parte de un todo en contraste al amor, para que podamos saber lo que es amar de verdad.
El camino espiritual es acerca de sanar cualquier división que sostenemos dentro mediante la integración de las partes disociadas de nosotros mismos en un todo plenamente consciente.
"Uno no se vuelve iluminado imaginándose figuras de luz, sino haciendo consciente la oscuridad." C.G. Jung
Conclusión - Aprender a detectar el virus Wetiko de la mente dentro de sí mismo
Como Eckhart Tolle escribe en su libro El Poder del Ahora, es mejor referirse a la oscuridad como el inconsciente en vez de el mal, porque "el mal" como una descripción, más connota con la separación en lugar de la inclusión, y por lo tanto disminuye la probabilidad de integración.
La solución definitiva al problema del wetiko es verlo en uno mismo.
Siempre será más fácil verlo en otros, pero mientras nos mantenemos enfocados en cambiar a otros, nosotros descuidamos el trabajo fundamental de la sombra que tenemos que hacer nosotros mismos. Sólo usted puede integrar su propia sombra.
Sentimos mucho dar la noticia a todos los multimillonarios por ahí, pero el trabajo de la sombra no puede ser externalizado. Nadie más puede hacerlo por usted, no importa cuán rico, persuasivo, empresarial, encantador, atractivo, hermoso o inteligente usted sea.
En este sentido, todos somos iguales.
La muerte y el virus wetiko de la mente, nivela el campo de juego humano, más allá de todas las categorizaciones y clases.
Ambos son una parte inevitable de la vida, y ambos deben ser afrontados sin temor si vamos a movernos a nuestro verdadero poder y completa conciencia…
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