P. Antes de iniciar el debate de los Últimos Días, nos gustaría
saber más sobre las predicciones de
Nostradamus. Yo nunca he
creído que es posible predecir el futuro muy exactamente, sin
embargo sus poemas proféticos siempre me han impresionado mucho.
R. Las predicciones de Nostradamus son muy engañosas. Las
personas que piensan que fue capaz de predecir acontecimientos
como la Revolución francesa y la Segunda Guerra Mundial están
equivocadas. La mayoría de cuartillas que parecen haberse
cumplido contienen detalles específicos que coinciden con
acontecimientos históricos por pura casualidad. Por ejemplo, una
de las últimas “que se volvieron realidad” involucra una
cuartilla que cuenta cómo “uno de Francia” derrocaría o
depondría al Shah de Irán.
Puesto que el líder de la reciente Revolución iraní, de hecho,
salió de su exilio en Francia para deponer al Shah, la
predicción se hizo realidad en cierto sentido. Pero nosotros le
aseguramos que esto fue pura coincidencia.
P. Siempre he sentido de la misma manera sobre las predicciones
de acontecimientos históricos entre el tiempo de Nostradamus y
el presente. Lo que me ha impresionado a mi son sus imágenes
visuales de la tecnología moderna. Algunos de sus versos
contienen lo que parecieran ser descripciones exactas de
aviones, submarinos, torpedos y misiles guiados, bombardeo
convencional y nuclear, guerras químicas y biológicas, etc.
R. Nostradamus tuvo visiones de todas estas cosas que fueron
bastante exactas, pero esto no tuvo nada que ver con profecía.
La tecnología física se desarrolla a lo largo de líneas
similares en varios diversos mundos, y las imágenes que el
describió fueron tomadas de los registros históricos de alguna
civilización avanzada.
P. En otras palabras, el tuvo memorias de vidas pasadas que
incluyeron el equivalente de un metraje de película sobre el
desarrollo de la tecnología.
R. Sí, y el también recibió algunas de las imágenes de espíritus
extraterrestres enviados aquí especialmente para hacer ese
trabajo en particular.
P. Sin embargo, ahora se ve como si sus predicciones de que los
Últimos Días en la Tierra ocurrirán hacia el final del siglo
veinte bien pudieran convertirse en realidad. ¿Cómo explican
ustedes esto?
R. Esto no tiene nada que ver con sus visiones acerca del
desarrollo de tecnología. La información le fue proporcionada
por el Colegio Invisible, y fue simplemente una adivinación
educada, basada en nuestro conocimiento del desarrollo de otras
civilizaciones. Sin embargo, es importante darse cuenta que lo
que predijeron no fueron los Últimos Días en sí, sino que solo
el potencial de entrar en ellos.
La Tierra está obviamente en ese punto ahora, pero todavía no
podemos predecir exactamente lo que sucederá después o cuando.
La situación es muy compleja, tanto estratégica como éticamente,
y hasta cierta medida estamos obligados a esperar a que los
acontecimientos determinen su propio curso.
P. A mí me parece que si las civilizaciones extraterrestres
avanzadas que están manipulando la evolución de la sociedad
terrestre están divididos en dos facciones con objetivos que
están en conflicto. Los Elohim están aquí para ayudar en el
nacimiento de nuevos dioses, y la gente del espacio está aquí
para crear una nueva civilización, similar a la suya propia.
R.
Esto es completamente correcto, y es una difícil situación
política. Los Elohim tienen una fuerte demanda, porque la
mitología astral de que sus ancestros dejaron en esta planeta
hace mucho tiempo, pero también querían mantener una buena
relación con nosotros, por lo que nos permitirían fundar una
civilización avanzada de individuos humanos en la Tierra, de ser
posible. No hay ninguna animosidad emocional entre las dos
facciones, y un complejo conjunto de reglas determinan cómo será
manejada la situación.
Y en un sentido, la misma gente de la Tierra determinará el
destino de su propio mundo.
P. ¿Qué quieres decir exactamente?
R. Si ocurre una gran guerra nuclear antes de que la Tierra haya
establecido colonias espaciales viables, ninguna civilización
avanzada individual se desarrollará aquí. E incluso si se
establecieran tales colonias, el destino de cientos de millones
de almas individuales depende del curso de la historia, a partir
de este momento hasta los Últimos Días. Si la Tierra es todavía
capaz de sostener la vida humana después de los Últimos Días,
mucha más gente puede ser salvada, entonces, si la nueva
civilización es forzada a vivir en el espacio.
P. Esto me trae a un tema que realmente no deseo hablar, pero es
tan obvio, de todo lo que ustedes han dicho hasta la vez, que
debo preguntarlo. La población de la Tierra es ahora sobre cinco
billones. ¿Cuántos de ellos tienen una oportunidad razonable de
sobrevivir como individuos? Ya se que la mayoría serán
asimilados en los nuevos Dioses al irse desarrollando, y
encontró este concepto absolutamente aterrador. ¿Existe
realmente alguna diferencia entre tal destino y simplemente ser
devorado por espíritus teocráticos?
R. Los Elohim dicen que hay una diferencia. Las personas en una
etapa inferior de desarrollo espiritual que se vuelven parte de
un Dios no mueren, sino que retienen el potencial para encarnar
en algún otro mundo en el futuro, y continuar su evolución.
P. Esto significa que están admitiendo que la mayoría de las
personas que están vivas ahora en la Tierra no tienen el
potencial de volverse igual que ustedes, sino que deberán echar
su suerte con los Elohim y los Dioses, o de otra manera serán
devorados por Teócratas y sus Elementales animalísticos.
R. Sí.
P. ¿Las personas que no han evolucionado espiritualmente en el
curso de muchas vidas terrenales, tienen alguna oportunidad de
determinar cual destino les aguarda durante los Últimos Días?
R. Sí. La mayoría de gente que muere mientras los nuevos Dioses
se están formando sobrevivirán. Los más avanzados sobrevivirán
como individuos, y el resto será asimilado en los Dioses. Sin
embargo, aquellos que ya están en bandas teocráticas o los
Elementales animalísticos no sobrevivirán.
Esta es la razón por
la cual nosotros originalmente te pedimos que simplemente les
advirtieras a los lectores acerca de la Teocracia y te
detuvieras allí. Esto por sí solo sería suficiente para salvar a
la mayoría de gente terrestre que estén un una etapa inferior de
desarrollo espiritual.
Mientras tales personas evitan la esclavitud teocrática después
de la muerte, se encuentran en una excelente oportunidad de
sobrevivir.
P. ¿Porqué está usted complicando la cuestión, haciendo que el
resto de la información en este libro, pública?
R. La principal razón es que los Teócratas ya han comunicado
mucho de esto a gente viva, pero en una forma que sirve a sus
intereses, y no a los intereses de los Elohim y la gente del
espacio. Ya no es posible para nosotros decir que los Dioses no
existen y que la gente debería tratar de sobrevivir como
individuos y reencarnar.
P. Por favor aclare esto mejor.
R. Durante los últimos veinte años, los Teócratas de la quinta
etapa han manipulado a millones de personas de la Tierra a creer
en una cosmología basada mucho más cercanamente a la verdad que
las mitologías religiosas. En lugar de afirmar que la gente
tiene que someterse a la voluntad de una deidad omnipotente,
para sobrevivir a la muerte, ahora están diciendo que los
individuos pueden fusionarse con la divinidad en una base de
mayor igualdad.
Este es uno de los principios básicos de la mitología de la
Nueva Era, y está lo suficientemente cerca de la verdad como
para ser demasiado peligroso.
P. Entiendo lo que quiere decir, pero, ¿podría ayudarme a poner
eso en palabras, más claramente?
R. El concepto de que una persona terrestre puede fusionarse en
uno de los jóvenes Dioses que se formarán durante los Últimos
Días, y aún así sobrevivir como individuo es verdad. Sin
embargo, cualquier persona común que trate de hacer esto en
estos momentos terminará en una banda teocrática.
Es verdad
que los espíritus de las razas Elohim y otras almas en una
etapa superior de desarrollo están ahora preparando a ciertos
Elementales embriónicos a convertirse en dioses, pero ellos no
reclutan a la gente común de la Tierra para ayudarlos.
Es un
trabajo para especialistas, y tales personas saben quienes son
desde su nacimiento.
No necesitan ser reclutados, ni necesitan que les digan
telepáticamente quien y que son. Cualquier persona a quien se le
dice algo diferente, está siendo engañada.
P. En otras palabras los Dioses sí existen. No, digo, van a
existir, pero la gente de la Tierra debería fingir que no, y
deberían hacer un esfuerzo para reencarnar después de la muerte
física.
R. Estamos haciendo todo lo mejor posible. ¿Ve ahora porqué le
estamos diciendo todo esto?
P. ¿No habrá una mejor manera de comunicar la información que
poniéndola en un libro como este?
R. Por supuesto, pero es un buen primer paso. Teniendo la
información en forma verbal coherente, en un lenguaje terrenal
hace más fácil comunicarlo telepáticamente a grandes números de
personas. Y mientras más gente lea el libro y escriba o hable
acerca de las ideas en el, mucho mejor. La Guerra en el Cielo es
solo una pequeña parte de nuestros esfuerzos para difundir esta
información.
P. Todavía no creo que más que una pequeña fracción de la
población total de la Tierra será expuesta a esta información
antes de que lleguen los Últimos Días, en caso de sucedan en las
próximas décadas.
R. Lo que usted está pensando es que la mayoría de la gente de
la Tierra vive en países del Tercer-Mundo, y por ello no se le
dará la oportunidad de decidir su destino durante los Últimos
Días. Este es un temor razonable, y señala uno de nuestros
mayores problemas: el tiempo.
P. Entiendo. Si los Últimos Días vienen muy pronto, grandes
números de personas no tendrán oportunidad de decidir su propia
fe. Pero mientras más tiempo se mantenga la población de la
Tierra, más daño se le hará a la biosfera.
R. Usted ha indicado muy bien el problema. La mayoría de los
pasos que estamos tomando para solucionarlo implican directas
batallas psíquicas con los Teócratas y los Elementales, los
cuales no describiremos por razones de seguridad. Todo lo que
usted y nuestros otros agentes conscientes en la Tierra pueden
hacer es tratar de extender la información verbal que le estamos
dando, y esperemos lo mejor.
P. ¿Está usted dispuesto a hablar sobre cuándo ocurrirán los
Últimos Días?
R. No. Estos podrían suceder mañana o en doscientos años. Es
mejor para usted no especular acerca del tiempo en impreso
(palabra impresa aquí N. del T.).
P. Por favor resuma lo que me quiere decir, para decirle a la
gente que aumentará sus posibilidades de supervivencia.
R. Todo el que entiende y acepta la información básica en este
libro debería hacer un esfuerzo consciente de desarrollar sus
poderes psíquicos durante la vida. Es una habilidad básica para
la supervivencia que cada ser humano necesita saber, y los
rudimentos de ello no son tan difíciles de aprender.
La mayoría
de grupos ocultistas y de la Nueva Era son capaces de enseñarle
a una persona las suficientes capacidades psíquicas para atraer
la atención de espíritus amistosos en el plano astral después de
la muerte. Si tal grupo no está disponible, las personas pueden
aprender tales habilidades trabajando con casi cualquier persona
que ya las posee, usando solamente prueba y error. Sin embargo,
nosotros queremos dejar claro que el proceso requiere un
esfuerzo real aplicado regularmente durante varios años.
También tenemos otra palabra de precaución para las personas que
han aceptado la información en Guerra en el Cielo como
verdadera, pero no son ocultistas serios con poderes psíquicos
altamente desarrollados. Ellos deberían leer informaciones de
experiencias en el punto de muerte y aprender a reconocer los
trucos comunes que utilizan los Teócratas para esclavizar a los
incautos después de la muerte.
P. Sí. He leído todas esas historias sobre la persona moribunda
encontrándose allí con espíritus que afirman ser parientes o
amigos fallecidos, o deidades, o mensajeros de deidades que le
dan la bienvenida en el más allá. Sospecho que muchas personas
que creen en la información del avance mientras vivan pudieran
repentinamente olvidarse de esto al ser confrontados, después de
la muerte, con la “sombra de su amada madre, que ha llegado a
darle la bienvenida al cielo”.
En otras palabras, “Ver es
creer”. Una confrontación emocional directa de este tipo pudiera
tener más peso que cualquier conocimiento racional o intelectual
recibido durante la vida, especialmente a un alma que acaba de
someterse al trauma de morir.
R. Esa es una descripción exacta y vívida. Todavía perdemos
personas de esa manera cada día, a pesar de nuestros mejores
esfuerzos.
P. ¿Qué se puede hacer para evitar ese tipo de engaños?
R. La única defensa segura es lograr cierto grado de desarrollo
psíquico. Los Teócratas son capaces de practicar tales trucos
solamente si los sentidos psíquicos de la persona difunta están
siendo activados desde el exterior por las transmisiones
telepáticas por parte de los Teócratas.
Si el alma de la persona
está percibiendo activamente el entorno astral con sus propios
poderes telepáticos y clarividentes, usualmente puede percibir
la verdadera naturaleza de los espíritus conformando la “fiesta
de bienvenida”. Esto es difícil de ponerlo en un idioma
terrestre, así es que digamos solamente que ellos se “ven
falsos” o “tienen malas vibras”.
Lo más cercano que podemos llegar en una descripción real, es
que algunos de los mecanismos de control psíquicos que usan los
Teócratas para esclavizar a otros espíritus en el plano astral,
se vuelve perceptible a cualquiera que físicamente los pueda
“leer” activamente, en vez de ser comunicado, mientras permanece
pasivo.
P. Este es uno de los elementos de la información del avance que
asustará a algunos lectores, especialmente cuando se dan cuenta
que muchos de sus parientes y amigos difuntos pudieran ser
esclavos en bandas teocráticas en estos momentos. ¿Supongamos
que tal persona sí, de verdad, se encuentra a su madre fallecida
o a algún otro ser querido en el plano astral?
R. La regla importante es: MANTENGA SU DISTANCIA. NO LE PERMITA
A NINGÚN OTRO ESPÍRITU QUE LO “TOQUE” MIENTRAS PERMANEZCA EN EL
PLANO ASTRAL.
Los Espíritus Libres simplemente se comunican
telepáticamente. No abordan de cerca de otros espíritus, aun
cuando les ayudan a reencarnar, sino que en vez de eso “hable a
través” del proceso.
Recuerde: “HABLE PERO NO TOQUE”.
P. Nunca he visto esto por escrito antes, pero se vuelve muy
obvio cuando se señala. Usted explicó anteriormente que los
Teócratas esclavizan almas más débiles, literalmente
uniéndoseles, permitiendo que las energías fluyan directamente
como lo hacen con el tejido nervioso del humano; pero no me di
cuenta del completo significado de esto hasta ahora.
R. Sí, es información que puede literalmente “salvar su alma”.
Desafortunadamente es tan difícil comunicar advertencias como
esta a las personas de la Tierra, así como es de difícil para
los padres advertirles a sus hijos acerca de abusadores de
niños. No es difícil decirles, “No te vayas en autos con
extraños, ni aceptes regales de nadie que no conozcan”, pero es
mucho más difícil tratar con el hecho de que un gran número de
casos de abuso de niños implica a amigos cercanos o miembros de
la misma familia.
Todo lo que podemos hacer es repetir que es
una costumbre universal entre espíritus no-teocráticos de
mantener siempre su distancia el uno del otro. Es triste que
tengamos que hacerlo, pero los Teócratas no nos dejan opción.
Lo más importante acerca de esto es que se requiere habilidad
psíquica, no solo conocimiento intelectual. Mientras más control
consciente desarrollen las personas sobres sus sentidos
psíquicos y poderes durante su vida, mejor oportunidad tendrán
de sobrevivir en el plano astral después de la muerte, lo
suficiente para reencarnar.
Los espíritus desencarnados ven por
clarividencia, se comunican por telepatía y se mueven por
telekinesia.
Si usted no tiene un control consciente sobre éstos
poderes psíquicos, usted pudiera encontrarse ciego, tonto y
paralizado después de la muerte. Si tiene suerte, descubrirá
después de alcanzar el plano astral, que su alma contiene
memorias residuales de una vida previa que le dan acceso a estos
poderes, pero es mejor no apostar la vida de su alma mortal en
ella.
Aprender habilidades psíquicas es mucho trabajo, pero lo
recomendamos fuertemente a todos los que hacen el avance.
Poseyendo conocimiento intelectual sobre la naturaleza de la
realidad espiritual no es tan esencial para la supervivencia
después de la muerte como teniendo las habilidades psíquicas
básicas. Mientras más, usted, estudie los hechos sobre la
Teocracia, la Guerra Invisible y la cosmología espiritual, hay
mayores probabilidades que usted recordará algo de esta
información cuando más la necesite.
El momento de mayor peligro en el plano astral es inmediatamente
después de la muerte, cuando el alma astral está todavía
traumatizada por el choque de la separación del alma somática.
La propaganda teocrática ha creado el mito de que algunas
muertes son “fáciles” y “naturales”, y que solo las muertes
repentinas o violentas son traumáticas.
En realidad, la ruptura
del cordón de plata es un shock tan grande para el alma astral
como la pérdida de una pierna es para el cuerpo. Es verdad que
algunas muertes son más traumáticas que otras, pero ninguna es
“fácil”.
Por otra parte, lo peor que pueden hacer las personas cuando
fallecen es negarse a admitir que están muertos. Hay un mito
universal de que la gente puede prevenir la muerte si su
voluntad es lo suficiente mente fuerte para vivir, por lo que
luchan contra el proceso con toda su fuerza y coraje. Nuestro
consejo para las personas que sienten que podrían estar muriendo
es permanecer lo más calmado y tranquilo que se pueda,
concentrando toda su atención en permanecer consciente y alerta,
no luchando por permanecer vivo.
No perderá nada haciendo esto, porque en la mayoría de los casos
no hay absolutamente nada que usted pueda hacer por un acto de
voluntad consciente para detener el proceso físico de la muerte
si está, de hecho, muriendo.
Sin embargo, vigorosamente luchando
contra el proceso de la muerte incremente significativamente el
traumatismo después de la muerte para el alma, haciéndola más
vulnerable durante las primeras horas cruciales en al plano
astral.
P. En un número de cuentas de experiencias de punto-de-muerte,
la persona muriendo se rehusó a tocar o abrazar a los espíritus
que se encontró, usualmente por alguna vaga sensación de que “no
estaba bien” hacerlo. Sin embargo, en otras cuentas, hay un
cercano contacto, pero tiene un efecto negativo: ocurre un
doloroso intercambio de energía, a menudo comparable a un shock
eléctrico, y la persona en el punto de muerte tiene la sensación
de “regresar al cuerpo”.
En aún otros casos, los mismos
espíritus que salen a recibir rechazan el contacto cercano, y
dicen, “Regresa, tu tiempo todavía no ha llegado”. ¿Cómo
explican ustedes todo esto para hacerlo evidencia para apoyar
los conceptos que está describiendo?
R. Lo importante de recordar cuando se lee una cuenta de una
experiencia de punto-de-muerte es que la personas relatándola
nunca estuvo realmente muerto, en primer lugar. Las definiciones
de muerte física son imprecisas, pero no así la definición de la
muerte como es percibida por los espíritus: la separación del
cordón de plata del alma somática. Una vez esto sucede, la
muerte es irreversible y el alma astral no se puede volver a
unir.
Las personas que han tenido experiencias del punto-de-muerte
simplemente han estado cerca del punto en el cual el alma astral
se separa del alma somática, lo suficientemente cercano como
para atraer la atención de otros espíritus, quienes se preparan
para recibirlos en el plano astral.
El mismo trauma físico que
lleva a la persona cerca de la muerte también produce un estado
de conciencia en el cual la mente física es muy pasiva y el alma
astral está despierta y activa, permitiendo la fácil
comunicación con los espíritus. Deberíamos señalar que solamente
las “almas viejas”, aquellas que están en un estado superior de
desarrollo espiritual tienen tales experiencias.
Esta es la razón por la cual la gente a veces retrocede del
contacto con los espíritus: su percepción psíquica es lo
suficientemente profunda como para detectar que algo anda mal.
Sin embargo, incluso si esto no sucede, el contacto cercano con
los otros espíritus todavía no puede dar lugar a la esclavitud
teocrática. El alma de la persona moribunda permanece unida al
cuerpo y continúa recibiendo energía de el a través del cordón
de plata.
Es esta energía la que produce el shock eléctrico si
ocurre el contacto. Por supuesto, la mayoría de Teócratas son lo
suficientemente conocedores como para rechazar ellos mismos tal
contacto, para evitar el shock o golpe. Sin embargo los
Teócratas varían en conocimiento, por lo cual ocurren ambos
tipos de experiencias del punto-de-muerte.
Esto finaliza nuestras transmisiones sobre la Guerra en el
Cielo.
Ahora es asunto suyo el completar el libro, hablando
sobre el concepto de la “Revolución Espiritual” y lo que
significa para el individuo.