por Marcin Rotkiewicz

en colaboración con Henryk Suchar y Ryszard Kaminski
27 de Abril de 2010
Publicado en la revista Polaca WPROST, No 2
(Enero 14 , 2001)

del Sitio Web MitosYFraudes

 

 


La explosión en el reactor nuclear de Chernobyl no pertenece al grupo de las peores tragedias del Siglo 20. La explosión no mató a miles de personas, ni tampoco contaminó a enormes áreas durante cientos de años.

Veintitrés minutos después de la una de la mañana del 26 de abril de 1986, una violenta explosión ocurrió en la unidad No. 4 de la planta nuclear de Chernobyl, en Ucrania.

 

Grandes cantidades de material radioactivo fueron lanzados a la atmósfera. El mundo entró en pánico - empeorado por la falta de información confiable bloqueada por la censura del gobierno de la Unión Soviética.

 

Los titulares de prensa en occidente gritaban:

“Hecatombe en Chernobyl”

“Hiroshima, Nagasaki, Chernobyl”

“Muerte desde Chernobyl”

Respetable diarios y revistas anunciaban:

“Miles de cuerpos están siendo sepultados en Chernobyl.”

La atmósfera de miedo que comenzó a desarrollarse paraliza a la opinión pública todavía en nuestros días.

Cuando en realidad, el accidente de Chernobyl no representa una de las tragedias más grandes del Siglo 20, la explosión no mató a miles de personas, ni tampoco contaminó enormes áreas durante cientos de años. Más aún, las dosis de radiación a las que fueron expuestas las poblaciones de Rusia, Ucrania y Bielorusia, casi no han tenido impacto sobre su salud - esta gente no sufre de leucemia con mayor frecuencia, ni dan a luz más niños con defectos congénitos.

 

Esas son las conclusiones del reciente informe del UNSCEAR (United Nations Scientific Committee on the Effects of Atomic Radiation, o Comisión Científica de las Naciones Unidas sobre Efectos de las Radiaciones Atómicas), que fue preparado por los 142 más prominentes expertos de 21 países. Pero después de 15 años desde el accidente, está claro que este evento fue bien usado por las organizaciones ecologistas y antinucleares.

 

“Gracias” al “desastre de Chernobyl” el desarrollo del programa de energía nuclear ha sido demorado por varias décadas.

 

 

La planta nuclear de Chernobyl

está rodeada por una zona cerrada de 30 kilómetros

 

 

 

Muerte por miedo

...o cómo mucha gente fue realmente herida por la explosión de Chernobyl

De acuerdo con los autores del informe del UNSCEAR, sólo 134 miembros del personal de la planta y de los equipos de emergencia fueron expuestos a muy elevadas dosis de radiación ionizante, y subsecuentemente sufrieron de la “enfermedad aguda de radiación“.

 

Veintiocho de ellos murieron a causa de la radiación y dos a causa de quemaduras generales. Esas fueron las únicas muertes registradas.

Cerca de unas 381.000 personas que estuvieron encargadas de la eliminación de las consecuencia del accidente resultaron expuestas a dosis de radiación ligeramente superior a los 100 mSv (miliSievert). Se cree que una sola dosis de 2.000 mSv impone un riesgo de muerte.

 

Del examen de esa gente ocupada en los trabajos posteriores al accidente se obtuvo la conclusión de que son actualmente más saludables que el común de la gente no expuesta a la radiación - según dice el profesor Zbigniew Jaworowski, del Laboratorio Central de Protección Radiológica y uno de los coautores del informe, que desde 1973 representa a Polonia en el UNSCEAR.

Como se declara en el informe del UNSCEAR:

“Catorce años después de del accidente de Chernobyl no existe ninguna evidencia científica de una aumento de la incidencia de cáncer, aumento de la mortalidad, o la ocurrencia de otras enfermedades atribuibles a la radioactividad.”

Por otro lado, se ha observado un significativo aumento de la incidencia de desórdenes psicosomáticos relativos a los sitemas respiratorio, digestivo y nervioso. Pero estos desórdenes no han sido causados por la radiación sino por el miedo.

 

La gente tiene miedo de haber sido expuesta a radiación, o que viven en territorio contaminado y ue algún día desarrollarán cáncer.

“Los científicos jamás han publicado ese tipo de basura, como la servida por los medios sobre las consecuencias del accidente de Chernobyl” - dice el Profesor Leonid Andreyevich Ilyin, del Instituto de Biofísica del Ministerio de Salud de Rusia, quien participó en el programa de la eliminación de las consecuencias del desastre, y representa a Rusia en el UNSCEAR.

Según el Profesor Ilyin:

“Los medios de prensa exageraron esta tragedia, una y otra vez al prestar oídos a varios 'expertos'”.

Por ejemplo, muy recientemente una publicación quincenal de Rusia “El Eco del Planeta” afirmó que Chernobyl había sido el peor desastre de la segunda pare del Siglo 20.

 

En el artículo publicado allí se descubren estimaciones totalmente inventadas sobre las consecuencias de este accidente, porque ¿cómo tendríamos que juzgar a la información de que 300.000 personas resultaron muertas?

 

De hecho, las consecuencias más peligrosas son las de índole psicológica, que han sido causadas por el miedo y la reubicación de las poblaciones de áreas que fueron consideradas (muy apresuradamente) como riesgosas.

 

 

Casi 400.000 personas

participaron en la eliminación de las consecuencias del accidente
 

 

 


Chernobyl, o una Paranoia Galopante

Con anterioridad se había arribado a conclusiones similares.

 

En marzo 1996 la revista semanal The Economist había publicado un artículo bajo el significativo título “Chernobyl, cáncer y paranoia galopante”, indicando que el impacto de la radiación sobre la salud fue bien pequeño. Mucho peor son las consecuencias del miedo y la ignorancia - la gente no supo, y aún no lo sabe, cuál era el peligro real.

 

Y este es el más grande de los problemas relacionados con la salud causado por el desastre de Chenobyl - escribe The Economist.

Inmediatamente después del desastre, miles de mujeres embarazadas de Ucrania y Bielorusia decidieron, o fueron persuadidas por los médicos, de realizarse un aborto. La cantidad de abortos en esas dos naciones Soviéticas durante 198697 fue igual a la tercera parte del total de niños nacidos en la Europa Oriental. En algunas regiones la cantidad de pérdidas naturales del embarazo dio un salto hasta el 25%.

 

¿Por qué? Las mujeres tenían miedo de dar a luz a mutantes.

 

Mientras tanto, después del desastre, el número de niños nacidos con serios defectos en Ucrania no ha aumentado - asegura el Dr. Herwig Paretzke, del Instituto de Protección Radiológica en Munich.

 

 

 

El SIGLO 20, UNA CENTURIA DE DESASTRES

 

AÑO

Tipo de desastre

Ubicación

Muertos

1921

Explosión en planta química

Oppau (Alemania)

561

1942

Explosión de polvo de carbón

Mina Honkeiko (China)

1572

1947

Explosión de Fertilizante

Texas City (USA)

562

1956

Explosión de Dinamita

Cali (Colombia)

1100

1957

Incendio de Reactor

Windscale (Gran Bretaña)

0

1959

Fallo en Dique Fluvial

Frejus (Francia)

421

1963

Derrame de Dique (108 m3)

Vaiont (Italia)

2600

1975

Explosión en una mina

Chasnala (India)

431

1976

Derrame químico

Seveso (Italia)

0

1979

Accidente en planta de armas bio-químicas

Novosibirsk (Rusia)

300

1979

Derretido Núcleo de Reactor

Three Mile Island (USA)

0

1984

Explosión de gas natural

Ciudad de México (México)

452

1984

Fuga de gas tóxico

Bhopal (India)

aprox. 15.000

1986

Derretido Núcleo de Reactor

Chernobyl (Ucrania)

30


 

Por otro lado, el aumento en la cantidad de niños nacidos con defectos genéticos ha sido simplemente imposible - afirman los expertos del UNSCEAR.

 

Aún después de las más altas dosis de radiación incurridas por gente a causa de las explosiones atómicas de Hiroshima y Nagasaki (cientos de veces más altas que las dosis de Chernobyl y absorbidas en una fracción de segundo), no se han observado desórdenes genéticos de ninguna clase en los descendientes de los sobrevivientes de los ataques nucleares en Japón.

El único impacto sobre la salud, de la liberación de material radioactivo a la atmósfera, pueden ser los 1800 casos de casos de cáncer de tiroides en niños, registrados en Ucrania, Bielorusia y Rusia. Esta evidencia, sin embargo, es algo dudosa. El cáncer de tiroides inducido por radiación se desarrolla sin ser notado durante 6 a 9 años.

 

Mientras tanto, el aumento de los casos se había notado ya después de sólo un año desde el accidente. No se ha encontrado ninguna correlación entre la exposición de niños a diversas dosis de radiación y la incidencia de cánceres de tiroides.

 

Los expertos del UNSCEAR piensan que este aumento en la incidencia del cáncer puede haber sido causada por otra cosa y no la radiación - por ejemplo, por los llamados “cánceres mudos”.

 

Tales cánceres no presentan síntomas clínicos a lo largo de la vida del paciente. Hasta la explosión de Chernobyl no se habían realizado exámenes de este tipo en Ucrania, Bielorusia y Rusia, de tal modo los equipos médicos de todas partes del mundo descubrieron sólo algo que existía de manera independiente al desastre.

Tampoco se halló entre los habitantes Polacos de la región oriental del país ningún aumento en el cáncer de tiroides inducida por la radiación.

“Durante la noche del 28 al 29 de abril de 1986 fui llamado al comité Central del partido Obrero Polaco, como experto en asuntos de contaminación radiológica,” recuerda el Professor Zbigniew Jaworowski.

 

“Hicimos consultas secretas, pero aún los notables del Partido no sabían qué estaba ocurriendo en Chernobyl. La Unión Soviética impuso un bloqueo total a la información. Entonces, basándome en el conocimiento de nuestras propias mediciones, presenté algunos escenarios posibles.

 

También propuse que se debía administrar a los niños Lugol líquido (una solución de compuestos estables de iodo, logísticamente más adecuado que las grageas de ioduro de potasio) para proteger a la glándula tiroides contra la absorción del iodo radioactivo.

Los Americanos nos felicitaron por la ejecución efectiva de esta acción, pero hoy estoy convencido de que esta acción fue innecesaria. Pero entonces, en 1986, era la decisión correcta a la luz de la información que teníamos, y por el aumento del aire contaminado que ingresaba a Polonia.

 

Pero el conocimiento actual de la contaminación de la población de Polonia indica que el riesgo era mucho menor de lo que creíamos entonces.”

En 11 días se reubicaron 116.000 habitantes de la vecindad de la planta nuclear.

 


 


Zona Libre de Contaminación

o cuánta tierra había sido realmente degradada por la explosión de Chernobyl

El área altamente contaminada en la vecindad de la central nuclear de Chernobyl mide apenas medio kilómetro cuadrado!

 

Tal es la conclusión de los mapas incluidos en el informe del UNSCEAR. Por otro lado, la mayor parte del territorio que rodea a la planta no impone ningún riesgo para la salud humana.

  • ¿Por qué existe entonces un área despoblada de 30 Km. alrededor de la central?

  • ¿Por qué se han reubicado a los habitantes de la ciudad de Prypiat?

  • ¿Por qué esta ciudad permanece clausurada hasta el día de hoy?

El reasentamiento fue implementado velozmente y a una gran escala.

 

En los primeros 11 días (desde el 27 de abril hasta el 7 de mayo de 1986) 116.000 personas fueron obligadas a cambiar su lugar de residencia.

"La decisión de la reubicación fue tomada sin atender la opinión de los científicos Rusos, que sugerían que a la mayoría de las personas que vivían en las cercanías de la central nuclear debían ser dejadas en su lugar," dice Michael Waligórski, el jefe del Departamento de Física de la Salud en el Centro de Oncología en Cracovia, Polonia.

 

"La gente reubicada no murió de dosis letales de radiación, sino a causa de altos niveles de estrés. Nosotros observamos reacciones al estrés similares en Polonia, durante la inundación de 1997. Mucha gente murió, no ahogadas, sino a causa de ataques del corazón," agrega Waligórski.

La ciudad de Prypiat y una gran parte de la zona cerrada de 30 Km. alrededor de la central son de hecho habitables! Las mediciones radiológicas llevadas a cabo por equipos internacionales muestran claramente que el nivel de radiación en esta región no es dañina para los humanos.

 

La dosis promedio para las áreas contaminadas es de sólo 8 mSv por año, y en las partes más contaminadas con material radioactivo - de 30 a 80 mSv. Cuarenta por ciento de esta dosis proviene del radón, un gas noble liberado por el radio contenido en la corteza terrestre y en los materiales de construcción.

 

Todos los isótopos radioactivos artificiales producidos por los ensayos de las armas nucleares, por la energía nuclear, y por el accidente de Chernobyl, etc., contribuyen a la exposición de los habitantes de Polonia en 0,036 mSv anuales.
 

 

 


Cómo Chernobyl llegó a ser una mentira

Mientas las autoridades Ucranianas estaba clausurando con solemnidad los últimos reactores nucleares de Chernobyl en el 2000, la prensa, radio, y las cadenas de televisión de todo el mundo estaban aún desparramando las visiones Apocalípticas del desastre.

 

En despachos de agencias noticiosas de Polonia, uno podía leer lo siguiente:

"La cantidad de víctimas en Ucrania de la explosión nuclear excedieron las 4.000, y 3,5 millones de personas sufren en diversos grados la contaminación radioactiva. (...) Hasta el día de hoy no hay información sobre el número de vidas tomadas por el desastre, que varias fuentes estiman entre 15 y 30 mil."

Los informes de la TV mostraron otra vez la desierta ciudad de Prypiat, ubicada a una docena de kilómetros de la central nuclear, y a los niños que habían sido horriblemente deformados

 

Recontando las trágicas historias de los que fueron reubicados de la "zona de muerte de 30 Km.", citaron a aquellos que se hallaron a ellos mismos entre,

"los 3,5 millones de personas afligidas por las consecuencias del accidente" y: "¿Cuánto viviré, quizás en un año, o una semana el doctor me dirá que tengo leucemia?"

Desde un principio, los medios estaban promocionando una visión trágica y exagerada del desastre.

 

En mayo de 1986, la prensa de los EE.UU. informaba que la explosión del reactor había matado a 80 personas de inmediato, que otros 2000 más habían muerto camino de los hospitales, y que sus cuerpos no eran enterrados en los cementerios sino en un lugar llamado Pirogovo, donde existe un repositorio de residuos nucleares.

 

El gigantesco titular del New York Post anunciaba:

"Tumba masiva - en Kiev 15.000 cuerpos humanos son empujados por topadoras a los pozos de basura", mientras que el National Enquirer describía a una gallina mutante de 2 metros de altura, capturada por cazadores en los bosques cercanos a Cherobyl.

Lo interesante del asunto es que historias igualmente absurdas aparecieron en la prensa no sólo en tiempos en que las autoridades soviéticas impedían la obtención de información confiable sobre el accidente, sino también muchos años después.

 

En 1990, el principal diario de Noruega, Aftenposten publicó un largo artículo titulado "Chernobyl - Una Pesadilla Constante."

 

Este artículo fue ilustrado son las fotos tomadas por un fotógrafo Polaco llamado Wojciech Laski, mostrando a dos niños con serios defectos congénitos (uno de ellos, con un solo brazo), supuestamente causado por la radiación.

 

Cinco años después, el 13 de octubre de 1995, Reuters informó que 800 mil niños habían sido afectados por las consecuencias del accidente de Chernobyl, que era "tan terrible como un ataque nuclear".

 

 

Dosis Promedio de Radiación Ionizante

mSv/a

Causadas por el Accidente de Chernobyl

 

Chernobyl (1992)

Prypiat (1992)

4.9

25

De fuentes naturales (suelo, rocas)

 

Promedio en Polonia

2.4

Estación Grand Central Station en New York City

5.4

Kerala (India)

9

Una región en Noruega

10

Una región en Suecia

35

Guarapari (Brazil)

37

Tamil Nadu (India)

53

Una casa en Ramsar (Irán) construida hace 100 años

89-132

Fuente: UNSCEAR, Jovanovich, Sohrabi - Datos de 1993.

 

 

1) Prypiat - una ciudad abandonada

2) Maria Pietrovna Shovkuta regresó a Opatycha, 15 kilómetros de Chernobyl, un año después del accidente. Ella no se queja de su salud, y come los alimentos que cultiva en su tierra.

 


En octubre de 200, la televisión Francesa mostró una película sobre el desastre titulada "Chernobyl, una autopsia de la nube".

 

Los científicos Franceses protestaron contra este programa - las cartas al presidente de la red de TV Francesa habían sido firmadas por los presidentes de las sociedades científicas más prestigiosas en biofísica, medicina nuclear y física nuclear. Dos años antes, científicos Polacos enviaron cartas similares de protesta al Consejo Nacional de Radio y Televisión.

 

Esto fue motivado por la emisión de la documental Inglesa "Igor - un niño de Chernobyl". Los científicos polacos declararon:

"Esta película describe el caso de un niño con defectos en las extremidades, que nació en las vecindades de Minsk, en Bielorusia, dos años después del accidente de Chernobyl. En esta documental se afirma repetidamente que las deformidades del niño fueron causadas por la irradiación de polvo radioactivo.

 

Los autores del film declaran que anormalidades similares en el desarrollo ocurrieron en un millón de niños en los territorios contaminados. Toda esta información es simplemente una mentira."

Los miedos a las consecuencias del accidente cayeron en terreno receptivo - hasta se puede decir que las malas noticias eran esperadas.

"Principalmente, era el resultado del miedo a la bomba atómica," explica el Profesor Kazimierz Obuchowski, del Instituto de Psicología de la Academía de Bydgoszcz.

 

"El desastre ocurrió en tiempos cuando el conflicto entre las superpotencias nucleares todavía existía, y varias organizaciones expusieron a viva voz sobre las consecuencias de una guerra atómica. La gente buscó la información que podría respaldar sus temores - y sólo esa información fue considerada creíble," considera el profesor Obuchowski.



Chernobyl, un Mito Lucrativo

¿Por qué se explota tan laboriosamente al mito de Chernobyl?

 

La respuesta es.

Número Uno - el dinero, número dos - el dinero y, número tres - el dinero.

Ucrania y Bielorusia heredaron una pesada carga de la Unión Soviética.

 

Las autoridades Soviéticas concedieron pensiones y privilegios sociales (equivalente más o menos a una docena de dólares americanos) a unas 600.000 personas (consideradas como víctimas de la explosión). Se estima que al día de hoy unas 3 millones de personas califican para recibir algún tipo de privilegio a cuenta de “un permanente detrimento de la salud causado por la radiación de Chernobyl.”

 

Ningún político se atrevería a retirar esos subsidios y privilegios.

 

Hasta el año 2015, en una empobrecida Bielorusia, sólo los “pagos de alivio de Chernobyl” suman $86.000 millones de dólares. A esto se deben agregar los costos de los arreglos de seguridad para el reactor arruinado.

La construcción del super-sarcófago (el actual de concreto está en mal estado) costará $300 millones. Hasta la fecha, los Estados Unidos y la Europa Occidental han transferido $800 millones para la eliminación de las consecuencias del accidente; el Banco de Desarrollo y Reconstrucción (EBDR) planea contribuir con 2.3 mil millones de euros.

 

Kiev reclama que, durante los próximos 20 años, afrontar los gastos de las consecuencias del accidente le costará $5 mil millones!

 

En Ucrania se escucha a menudo que el vehemente reclamo de los políticos para mayor apoyo financiero “para liquidación de las consecuencias del desastre de Chernobyl”, tienen sus raíces en el hecho de que alguna parte de este dinero irá para parchar los agujeros del presupuesto del Estado y otro poco - quizás - a los bolsillos de los burócratas.

 

 

El museo en Kiev corrobora el Mito del accidente en Chernobyl.
Las fotos muestran a las víctimas del desastre.

 

 

Así Chernobyl todavía es presentado en los colores más oscuros posible.

 

En 1996, durante la sesión de la Agencia Internacional de Energía Atómica, en Viena, el representante del Ministerio de Salud de Ucrania declaró que hasta es día 2500 personas y habían muerto por enfermedades causadas por la explosión de Chernobyl.

 

De acuerdo a esta información, las fatalidades fueron causadas por cánceres, enfermedades del sistema cardíaco y circulatorio, y desórdenes del sistema nervioso. En 1995, este mismo ministerio informó en sus partes de prensa que el accidente de Chernobyl había causado 125.000 muertes. Los expertos de la OMS (Organización Mundial de la Salud) protestaron enérgicamente contra esta declaración.

Valeri Pistchikov, quien monitorea en Ucrania las consecuencias del accidente de Chernobyl, declaró recientemente en público que,

“los desórdenes más frecuentes sufridos por la población de Ucrania como resultado de la explosión de la planta atómica, incluyen cáncer y varias formas de enfermedades que involucran a los sistemas nervioso, digestivo, sanguíneo y respiratorio.”

Por otra parte, Vladislav Ostapienko, cabeza del Instituto para la medicina de Radiación de Bielorusia, le dijo a Reuters que a causa de la explosión de Chernobyl su país enfrenta una catástrofe demográfica: desde hace algunos años se registran más muertes que nacimientos, y además cada años nacen 2500 niños con defectos genéticos.

 

Sin embargo, Ostapienko no mencionó el hecho que un bajo demográfico se nota en casi todo el territorio de la ex-Unión Soviética, incluyendo su parte Asiática. Además, tomando en cuenta la población en Bielorusia, la cantidad de desórdenes genéticos serios entre los recién nacidos debería ser cinco veces más elevada.

 

Pero eso nada tiene que ver con la radiación y en particular con Chernobyl: en todas las poblaciones esos defectos de nacimiento se muestran en el 6% de la población.
 

 

 


Chernobyl, o la mistificación más grande del ecologismo internacional

Desde el mismo principio, el desastre de Chernobyl se convirtió en la principal arma usada por las organizaciones ecologistas en su guerra contra la energía nuclear.

 

El accidente y sus supuestas horribles consecuencias tendrían que ser una advertencia para todos aquellos que planean la construcción de centrales nucleares.

 

Esta campaña ha sido exitosa - y mucho!

 

En Alemania, el parlamento dominado por los Social Demócratas y miembros del Partido Verde decidieron desmantelar todas las estaciones nucleares de generación eléctrica. En Francia, previamente libre de la fobia antinuclear, los ecologistas presentaron una demanda similar.

 

Mientras tanto, los ecologistas que llevan adelante tal feroz batalla contra las usinas nucleares son acusados por el lobby nuclear de estar pagados por la industria del gas y del petróleo, interesadas en cerrar las actuales centrales nucleares y demorar la construcción de futuras plantas.

“La organización ecologista Greenpeace dispone de más dinero que el presupuesto de algunas naciones Africanas. ¿De dónde proviene este dinero?”, pregunta el Profesor Lukasz Turski, del Centro de Física Teórica y Colegio para Ciencias de la Academia Nacional de Ciencias en Varsovia.

 

“Greenpeace es una de las organizaciones más fuertes que luchan contra la energía nuclear,” reconoce el Profesor Ziemowid Sujkowski, director del Instituto para Problemas Nucleares en Varsovia.

 

“Esta organización es bien conocida por sus muchas acciones positivas en defensa del ambiente, pero está profundamente equivocada en el caso de las plantas nucleares de generación de electricidad. Quizás esa gente está siendo manipulada… Gente que se auto-titulan “ecologistas” no pueden ser sordos a todos los argumentos racionales. La energía nuclear ejerce el menor de los impactos sobre el ambiente, en contraste con las plantas que queman carbón. El miedo a la radiación se enraíza principalmente en la ignorancia. La radioactividad es asociada con algo misterioso y extremadamente peligroso,” enfatiza el Profesor Sujkowski.

Las organizaciones ecologistas, mientras que son muy ruidosas para hacer públicos desastres en Ucrania, son reticentes para mencionar un accidente similar que tuvo lugar en marzo de 1979 en Three Mile Island, Pennsylvania, USA, y donde - como en Chernobyl - el núcleo del reactor se derritió.

 

Pero gracias a condiciones adecuadas de seguridad, no se liberó a la atmósfera ninguna radioactividad peligrosa, nadie en las proximidades sufrió consecuencias, y las dosis de radiación obtenidas por una docena de operarios de la planta no fueron perjudiciales para su salud.

 

Así parece que el problema no está en el combustible nuclear, sino en los sistemas de seguridad apropiados.

“Aún cuando la explosión hubiese causado la muerte de varios miles de personas, este no sería por cierto el peor desastre de la segunda parte del Siglo 20,” considera el Profesor Turski.

 

“¿Quién habló con fuerza sobre las consecuencias del accidente ocurrido en 1984 en la planta de pesticidas en Bhopal, India? En este evento se liberaron al aire grandes cantidades de materiales fatalmente tóxicos, matando a más de 15.000 personas,” enfatiza el Profesor Turski.

 

“¿Cuántos miles de personas mueren anualmente a causa de los contaminantes emitidos por las usinas que queman carbón?”

Entonces, ¿imponen las centrales nucleares una amenaza real y mortal para el ambiente y los seres humanos?

 

Tales recelos y dudas no son apoyadas por la información citada por los científicos. Quemar un millón de toneladas de carbón (sin dispositivos de filtrado) libera al atmósfera 20 toneladas de polvo, 25 toneladas de dióxido de azufre, 6 toneladas de óxidos de nitrógeno, y 20 mil toneladas de dióxido de carbono. El efecto perjudicial de esas sustancias para la salud humana es fácil de imaginar.

 

En Polonia se queman anualmente 30 millones de toneladas de carbón en las estufas y cocinas hogareñas, donde no existen filtros.

 

En comparación, una planta nuclear de 1000 MW (todas las plantas convencionales de generación eléctrica en Polonia suman 30.000 MW) genera solamente 30 toneladas anuales de residuos nucleares radioactivos.

“Si toda la energía eléctrica y de calor de la Gran Bretaña fuese producida por centrales nucleares, todos los residuos radioactivos generados por esas plantas podrían almacenarse en un área igual a un campo de fútbol,” dice el profesor Turski.

En su opinión, el problema de los residuos radioactivos no es más que otro mito, que es impulsado para convencer a la gente de que las centrales nucleares son perjudiciales.

 

Tales residuos pueden ser perfectamente manejados de la manera adecuada.

“Si nos decidiésemos a obtener energía sólo de fuentes convencionales, estas fuentes se agotarían rápidamente,” sostiene el Profesor Sujkowski.

 

“Sería tremendamente irresponsable. El agotamiento de los recursos del petróleo no sólo significa la falta de combustible para los hornos o los autos. ¿A partir de qué produciremos plásticos y algunos textiles?” advierte el Profesor Sujkowski.

 

“Si la atmósfera que rodea a lo programas de generación eléctrica nuclear, formadas por el tratamiento mitológico del accidente de Chernobyl, no cambian rápidamente, entonces en unas pocas décadas una congelada humanidad comenzará frenéticamente a construir centrales nucleares,” afirma el Profesor Turski.

 

“Y entonces tendremos una real causa para temer, porque esas plantas serán construidas a las apuradas y chapuceramente.”


 







Chernobyl

The Biggest Bluff of The 20th Century
by Marcin Rotkiewicz

in collaboration with Henryk Suchar and Ryszard Kamiñski
Polish weekly WPROST, no 2 (14 January) 2001

from WONUC Website
 

 

The explosion in nuclear reactor in Chernobyl does not belong to the worst tragedies of 20th century. The explosion did not kill thousands of people, nor did it heavily contaminate for hundreds of years enormous areas of land.

Twenty three minutes after 1 A.M. on 26 April 1986 a violent explosion has occurred in the fourth unit of the Chernobyl nuclear power plant. Large quantities of radioactive material have been ejected into the atmosphere. The world panicked  the more so because of the lack of reliable information blocked by the Soviet Union censorship.

 

The headlines in the Western press shouted:

"Chernobyl hecatomb" "Hiroshima, Nagasaki, Chernobyl" "Death from Chernobyl."

Respectable newspapers and weeklies announced:

"Thousands of bodies are being buried in Chernobyl."

The atmosphere of fear, which then started to develop, paralyses the public opinion to this very day.

Whereas, in fact, the accident in Chernobyl nuclear reactor does not represent one of the largest 20th century tragedies, the explosion did not kill thousands of people, nor did it heavily contaminate for hundreds of years enormous areas of land. Moreover, radiation doses to which the populations in Russia, Ukraine and Belarus have been exposed, had nearly no impact on their health  these people do not suffer more frequently from leukemia, nor do they give birth to more children with genetic defects.

 

Those are the conclusions from the recent UNSCEAR (United Nations Scientific Committee on the Effects of Atomic Radiation) report, which has been prepared by 142 most prominent experts from 21 countries. But after 15 years since the accident, it is clear that this event has been put to a very good use  mainly by environmental and antinuclear organizations.

 

"Thanks to" the "Chernobyl disaster" the nuclear power program development has been delayed by several decades.

Chernobyl nuclear power plant is surrounded by a 30km closed zone
 

 

 

 

Death from fear

or how many people really were injured by the Chernobyl explosion

According to the UNSCEAR report authors, only 134 people from nuclear power plant staff and emergency teams members have been exposed to very high ionizing radiation doses and subsequently suffered from acute radiation sickness. Twenty eight of them died from irradiation and two from scalding. Those were the only fatalities.

About 381 000 people, who have been engaged in the elimination of accident consequences, have been exposed to radiation doses slightly above 100 mSv (milliSievert). It is presumed that a single dose of 2 000 mSv poses a risk to life. 

 

The examinations of people engaged in elimination of accident consequences indicate that those people are even healthier than the non-exposed individuals  says Professor Zbigniew Jaworowski from Central Laboratory for Radiological Protection, one of the report coauthors, who since 1973 is representing Poland in UNSCEAR.

As stated in UNSCEAR report:

"Fourteen years after the Chernobyl accident there is no scientific evidence of increased cancer incidence, increased mortality or the occurrence of other diseases attributable to radiation."

On the other hand, a significant increase in the incidence of psychosomatic disorders  concerning the respiratory, digestive and nervous systems  has been observed.

 

But these disorders are caused not by radiation but by fear. People are afraid that they have been exposed to radiation or that they live on contaminated land and that any day they will develop cancer.

The scientists have never published such rubbish as the trash served by media on the consequences of Chernobyl accident  says Professor Leonid Andreyevich Ilyin from the Biophysics Institute of the Russia’s Ministry of Health, who participated in the program of elimination of the disaster’s consequences and represents Russia in UNSCEAR.

 

According to Professor Ilyin: 

The media exaggerated this tragedy, now and again giving ear to various "experts." For example, quite recently a Russian biweekly "Planet’s Echo" claimed that the Chernobyl has been the worst disaster of the second half of 20th century.

 

In the article published there one finds some entirely fabricated estimates of the consequences of this accident, because how are we to rate the information that 300 000 people were killed? In fact, the most dangerous consequences are those of psychological kind, which have been caused by fear and relocation from the areas deemed (often rashly) at risk.

 


Almost 400 000 people participated in the elimination of accident consequences


 

 


Chernobyl, or a creeping paranoia

Similar conclusions have been formulated earlier.

 

In March 1996 weekly magazine The Economist has published an article under a meaningful title "Chernobyl, cancer and creeping paranoia" indicating that the direct health impact of the radiation was quite small.

"Much worse are the consequences of fear and ignorance  people did not know, and still do not know, what was the real danger  and this is the largest health related problem caused by the Chernobyl disaster"  writes The Economist.

Immediately after the disaster, thousands of Ukrainian and Belarusian pregnant women decided, or were persuaded by the physicians, to undergo abortion.

 

The number of abortions in those two Soviet republics during 19861987 was equal to one third of the number of children born in Eastern Europe as a whole. In some regions the number of natural miscarriages jumped up by 25%.

 

Why? Women were afraid that they will give birth to mutants.

 

Meanwhile, after the disaster, the number of children born with serious defects in Ukraine has not risen  maintains Dr. Herwig Paretzke from the Institute of Radiation Protection in Munich.

 

 

20th CENTURY, A CENTURY OF DISASTERS

 

Year

Type of disaster

Location

Number of fatalities

1921

Explosion in chemical plant

Oppau (Germany)

561

1942

Coal dust explosion

Honkeiko mine (China)

1572

1947

Fertilizer explosion

Texas City (USA)

562

1956

Dynamite explosion

Cali (Columbia)

1100

1957

Reactor fire

Windscale (United Kingdom)

0

1959

River dam failure

Frejus (France)

421

1963

Water dam overflow (108 m3)

Vaiont (Italy)

2600

1975

Explosion in a mine

Chasnala (India)

431

1976

Chemical leakage

Seveso (Italy)

0

1979

Accident in biological-chemical weapons plant

Novosibirsk (Russia)

300

1979

Nuclear reactor meltdown

Three Mile Island (USA)

0

1984

Natural gas explosion

Mexico City (Mexico)

452

1984

Toxic gas leakage

Bhopal (India)

app. 15 000

1986

Nuclear reactor meltdown

Chernobyl (Ukraine)

30

 


Besides, the growth in the number of children born with genetic defects has been simply impossible  assert UNSCEAR experts.

 

Even after the highest radiation doses incurred by people because of the atomic bomb explosions in Hiroshima and Nagasaki (hundreds of times higher than the Chernobyl doses and absorbed within a fraction of a second), no genetic disorders have been observed in the offspring of the Japanese nuclear attacks survivors.

The sole health impact of the atmospheric radioactive material release may be the 1800 cases of thyroid cancer in children, registered in Ukraine, Belarus and Russia. This evidence, however, is somewhat doubtful. Radiation induced thyroid cancer develops unrevealed for 69 years.

 

Meanwhile the increased number of cases has been noted already after a year from the accident. No correlation was found between the children’s exposure to various radiation doses and the thyroid cancer incidence. UNSCEAR experts think that this increase in cancer incidence may be caused by something else than radiation  e.g. by so called mute cancers. Such cancers give no clinical symptoms through the patient’s lifetime.

 

Until the explosion in Chernobyl no examinations of this type were performed in Ukraine, Belarus and Russia, thus medical teams from all over the world discovered only something that existed independently of the disaster.

Also among Poles inhabiting the country’s eastern region, no increase in the thyroid cancer incidence was observed which could be induced by radiation. 

"During the night 28/29 April 1986 I was summoned to the Central Committee of the Polish Worker’s Party, as an expert on radiological contamination issues"  recalls Professor Zbigniew Jaworowski. 

 

"Secret consultations were carried on, but even party notables did not know what was happening in Chernobyl. Soviet Union imposed total information blockade. Thus, basing on the knowledge gained from our measurements, I presented some possible scenarios. I also proposed that Lugol liquid (a solution of stable iodine compounds, logistically more handy than potassium iodide tablets) should be administered to children, to protect the thyroid gland against radioactive iodine absorption.

 

The Americans praise us for the effective execution of this action, but today I am convinced that this action was unnecessary. But then, in 1986, it was a right decision, in the light of the data being in our possession and because of increasing waves of contaminated air flowing over Poland.

 

But our current knowledge of the contamination of Polish population indicates that the risk was much smaller than we thought."


In 11 days 116 000 people have been resettled from immediate NPP vicinity
 

 

Safe contaminated zone, or how much land really has been degraded after Chernobyl explosion

Highly contaminated area in the NPP vicinity measures only a half of a square kilometer! Such is the conclusion from the maps included in UNSCEAR report.

 

On the other hand, most of the territory surrounding the plant poses no risk to human health.

  • Why then is there a 30km uninhabited safety zone?

  • Why the inhabitants of the town Prypiat have been resettled?

  • Why does this town stay closed until this very day?

The resettlement has been implemented swiftly and on a large scale.

 

Within 11 days (from 27 April until 7 May 1986) 116 000 people were forced to change their place of residence. 

"The decision on resettlement has been taken with no notice of the opinion of Russian scientists, who suggested that the majority of people living in the NPP neighborhood should be left alone"  says Michael Waligórski, the head of the Health Physics Department in Oncology Center in Cracow. 

 

"Resettled people did not die from lethal radiation doses, but from high stress. We observed similar reactions to stress also in Poland, during the flood of 1997. Many people died then not from drowning but e.g. from heart attack" adds Waligórski.

The town Prypiat and a large part of the closed 30km zone are in fact habitable!

 

Radiological measurements conducted by international teams clearly show that the radiation level in this area is not harmful for humans. The average dose for the contaminated area is only 8 mSv per year, and in locations most contaminated with radioactive material  from 30 to 80 mSv. During 1999 each Pole absorbed a mean radiation dose of 3.3 mSv.

 

Forty percent of this dose comes from radon, a noble gas released from radium contained in earth crust and in construction materials.

 

All artificial radioactive isotopes produced in nuclear weapons tests, from nuclear power and from Chernobyl accident etc., account for the radiation exposure of Poles equal to 0.036 mSv annually.

 



How the Chernobyl lie came into being

While Ukrainian authorities were solemnly shutting off the last reactors of Chernobyl nuclear power plant in late 2000, the press, radio and TV networks worldwide were still spreading the apocalyptic visions of the disaster.

 

In Polish Press Agency dispatches one could read the following:

"In Ukraine the number of nuclear explosion victims exceeded 4 thousand and 3.5 million people suffer in various degree from radioactive contamination. (...) To this day there is no data on the number of lives taken by the disaster, which by various sources is estimated to be 1530 thousand. (...)"

TV reports again showed the deserted town of Prypiat located a dozen kilometers from the power plant and the children who have been born hideously deformed, recounted the stories of the tragedy of those resettled from "the 30km death zone", quoted those, who found themselves among,

"3.5 million people afflicted by the accident consequences" and: "How long shall I live, perhaps in a year, or in a week I shall learn from the doctor that I got leukemia?"

From the very beginning the media were promoting a tragic and exaggerated picture of the disaster.

 

In May 1986 the American press reported that the reactor explosion killed 80 people immediately, that further 2 thousand died on the way to hospitals and their bodies are buried not on the cemeteries but in a place called Pirogovo, where a nuclear waste disposal site is located.

 

The enormous headline in New York Post threatened:

"Mass grave in Kiev 15 thousand human bodies pushed down by bulldozers into the waste pits", while National Enquirer described a mutant chicken 2 m high, caught by the hunters in the forests close to Chernobyl.

The interesting point is that equally absurd stories appeared in the press not only in the times when Soviet authorities prevented gathering of reliable information on the disaster, but also afterwards.

 

In 1990 the major Norwegian daily newspaper Aftenposten published a large article entitled "Chernobyl an everlasting nightmare."

 

This article has been illustrated with the pictures made by a Polish photographer Wojciech Laski, showing two children with serious congenital defects (one of them one-armed), supposedly caused by radiation.

 

Five years later, 13 October 1995, Reuters dispatch reported that 800 thousand children have been affected by the consequences of Chernobyl accident, which was "as terrible as a nuclear attack."


 

Average ionizing radiation doses

mSv/a

Caused by the Chernobyl disaster

 

Chernobyl (1992)

4.9

Prypiat(1992)

25

From natural sources (soil, rocks)

mSv/a

Average in Poland

2.4

Grand Central Railway Station in New York City

5.4

Kerala (India)

9

A region in Norway

10

A region in Sweden

35

Guarapari (Brazil)

37

Tamil Nadu (India)

53

A house in Ramsar (Iran) build over 100 years ago

89-132

Source: UNSCEAR, Jovanovich, Sohrabi.
Data from 1993

 


 

 

1) Prypiat  an abandoned town

2) Maria Pietrovna Shovkuta returned to Opatycha, 15 kilometers from Chernobyl, one year after the disaster. She does not complain of her health and eats her own produce.

 


In October 2000 French television has shown a movie on the disaster, entitled "Chernobyl, an autopsy of the cloud."

 

French scientists protested against this program  the letter to the French TV network chairman has been signed by the presidents of the most prestigious scientific societies for biophysics, nuclear medicine and nuclear physics. Two years earlier Polish scientists delivered a similar letter of protest to the National Radio and Television Council.

 

This action concerned the emission of a British documentary "Igor - A child of Chernobyl."

 

Polish scientists stated:

"This movie describes the case of a boy with defects of extremities, who has been born in the vicinity of Minsk in Belarus, two years after the Chernobyl accident. In this documentary it is repeatedly stated that the boy’s deformities has been caused by irradiation from radioactive dust. The movie’s authors claim that similar developmental anomalies occurred in a million children on contaminated territories. All this information is simply untrue."

The fear of accident consequences fell on a receptive ground  it may be said that bad news was even expected. 

"Mainly it was the result of the fear of atomic bomb" explains Professor Kazimierz Obuchowski from the Psychology Institute of Bydgoszcz Academy. 

 

"The disaster happened in the times when the conflict among nuclear superpowers still existed, and various organizations loudly expounded on horrible consequences of atomic warfare. People sought the information which could endorse their misgivings and fears  and only such information was deemed credible" considers Professor Obuchowski.

 



Chernobyl, or a profitable myth

Why the Chernobyl myth is so industriously supported? What it is all about?

 

The answer is:

number one  the money, number two  the money, and number three  the money.

Ukraine and Belarus inherited a heavy burden from the Soviet Union  Soviet authorities granted pensions and social privileges (worth, after conversion, a dozen or so US dollars) to 600 000 people (deemed to be victims of the explosion). It is estimated that at present over 3 million people are entitled to some privileges on the account of "permanent health detriment caused by Chernobyl radiation."

 

No politician will dare to take them away. Up to the year 2015, in impoverished Byelorussia, the "Chernobyl relief payments" alone will equal $86 billion. To this one should add the costs of safety arrangements for ruined reactor.

 

The super-sarcophagus construction (the present concrete one is in a bad shape) shall cost $300 million. Up to now the United States and Western Europe transferred $800 million for the elimination of accident consequences; EBDR (European Bank for Development and Reconstruction) plans to contribute further 2.3 billion euros. Kiev claims that, during the next 20 years, coping with the accident consequences will cost $5 billion!

 

In Ukraine it is often heard that the politicians’ eager appeals for financial support "for liquidation of the Chernobyl disaster consequences" have their roots in the fact, that some part of this money will go for patching up the holes in the state budget, and some  perhaps  will end in the pockets of bureaucrats.

 

 


The museum in Kiev corroborates the myth of the accident in Chernobyl.

The photographs show the victims of the disaster.
 

 

Thus Chernobyl still is presented in the very blackest colors.

 

In 1996, during the session of the International Atomic Energy Agency in Vienna, Ukrainian Ministry of Health representative stated that up to that day 2500 people died from illnesses caused by the Chernobyl explosion.

 

According to this information, the fatalities were caused by cancers, heart and circulatory system diseases and nervous system disorders.

 

In 1995 this same ministry in its press release informed that the Chernobyl accident in 9 years accounted for 125 000 fatalities. WHO experts strongly protested against this statement.

 

Valeri Pistchikov, who in Ukrainian Ministry of Health monitors the Chernobyl consequences, recently stated in public that,

"the most frequent disorders, suffered by the population of Ukraine in the result of the power plant explosion, include cancer and various forms of illnesses involving blood and respiratory, digestive and nervous systems."

On the other hand, Vladislav Ostapienko, the head of Belarusian Institute for Radiation Medicine, said for Reuters that because of Chernobyl explosion his country faces a demographic catastrophe: since some years there are more deaths than births, and moreover each year 2500 children are born with genetic defects.

 

However Ostapienko did not mention the fact, that a demographic low is noted on nearly whole former Soviet Union territory, including its Asiatic part. Moreover, taking into account the population of Belarus, the number of serious genetic disorders among the newborns should be five times higher.

 

But those have nothing to do with any radiation, and in particular that from Chernobyl: in every population such defects show up in about 6% births.
 

 

 


Chernobyl, or environmental international’s great mystification

From the very beginning, the disaster in Chernobyl became the main weapon used by the environmental organizations in their war against nuclear power.

 

The accident and its supposedly horrible consequences were to be a warning to all who plan nuclear power plants construction. This campaign has been successful  and very much so!

 

In Germany, the parliament dominated by Social Democrats and Green Party members decided to dismantle all nuclear power plants. In France, previously free of antinukes phobia, the ecologists push a similar demand.

 

Meanwhile, the environmentalists who wage such fierce battle against nuclear power plants, are accused by the nuclear lobby of getting funds from oil and gas industry, interested in closing the existing nuclear power plants and delaying the construction of the future ones.

"Ecological organization Greenpeace has in its disposition more money than the budgets of some African countries. From where this money comes?" asks Professor Lukasz Turski from the National Academy of Sciences Center for Theoretical Physics and College for Sciences in Warsaw. 

 

"Greenpeace is one of the most active organizations fighting against nuclear power" reckons Professor Ziemowid Sujkowski, director of the Institute for Nuclear Problems in Warsaw. 

 

"This organization is well known for its many positive actions for preserving the environment, but it is deeply wrong in the case of nuclear power plants. Perhaps those people are being manipulated... People calling themselves ecologists cannot be deaf to all rational arguments. Nuclear power exerts the least impact on the environment, in contrast to the coal fired power plants. The fear of radiation is rooted mostly in ignorance. Radioactivity is associated with something mysterious and extremely dangerous" emphasizes Professor Sujkowski.

Environmental organizations, while quite vocal in extolling dire disaster in Ukraine, are rather reluctant to mention a similar accident, which took place in March 1979 in Three Mile Island in Pennsylvania, USA, and where  as in Chernobyl  the reactor core has been melted.

 

But thanks to adequate safety arrangements, no dangerous radioactivity has been released into the atmosphere, nobody from the neighboring population suffered, and radiation doses obtained by a dozen or so plant’s personnel were not harmful for their life.

 

Thus it appears that the problem is not in the nuclear fuel, but in appropriate safety systems.

"Even if the explosion in Chernobyl would cause death of several thousand people, this nevertheless would not be the worst disaster of the second half of 20th century" considers Professor Turski. 

 

"Who loudly spoke of the consequences of the accident which occurred in 1984 in pesticide plant in Bhopal in India? In this event very large quantities of fatally toxic materials have been released into the air, killing over 15 000 people" emphasizes Professor Turski.

 

"How many thousand people die each year because of the pollutants emitted from coal fired power plants?"

Thus, do the nuclear power plants pose a real, mortal threat to the environment and humans?

 

Such misgivings are not supported by the data quoted by the scientists. Burning up one million tons of hard coal (with no filtering devices) releases into the atmosphere 20 thousand tons of dust, 25 thousand tons of sulfur dioxide, 6 thousand tons of nitrogen oxides, and 2 million tons of carbon dioxide. The detrimental effect of those substances for human health is easy to imagine.

 

In Poland each year 30 million tons of hard coal are burned in home stoves and local furnaces, where there are no filters.

 

For comparison, 1000 MW nuclear power plant (all conventional Polish power plants together account for 30 000 MW) generates only 30 tons of highly radioactive waste annually.

"If all electric and heat energy in the United Kingdom were produced in nuclear power plants, the radioactive waste generated in those plants could be accommodated within one football field."  says Professor Turski.

In his opinion, the problem of radioactive waste is nothing more than another myth, which is fostered to convince people that nuclear power plants are harmful.

 

Such waste can be managed in an appropriate way.

"If we shall decide to draw energy only from conventional sources, these sources will be quickly depleted" holds Professor Sujkowski. 

 

"It would be extremely irresponsible. The depletion of oil resources means not only the lack of fuel for furnaces or cars. From what shall we produce plastics and some textiles?" warns Professor Sujkowski. 

 

"If the atmosphere around nuclear power programs, shaped also by the mythological treatment of the Chernobyl accident, would not change rapidly, than in a few decades freezing humanity will frenetically start building nuclear power plants"  emphasizes Professor Turski. 

 

"And then we shall have real cause for fear, because those plants will be build hurriedly and shoddily."