por Ruben Torres
11 Marzo 2014

del Sitio Web LaCosechaDeAlmas







Vivimos en un entorno virtual, un planeta prisión en el que cumplir condena por los siglos de los siglos.

 

El cuerpo humano y el alma, que habita y vive preso en este planeta, tiene la particularidad y la capacidad de, desdoblarse conscientemente e inconscientemente.

 

El alma que habita en el contenedor humano, tiene la capacidad de abandonarlo de forma momentánea mientras este se recarga y se reordena a través del periodo de sueño.

 

Nuestra maquinaria física sufre un desgaste energético y precisa recargarse y reequilibrarse a diario para que funcione correctamente, pero el alma, la conciencia que habita ese contenedor, no precisa de ese descanso, así que durante el sueño abandona su vehiculo y continua su labor creativa.

 

Continúa trabajando por y para su propia experiencia, teje la realidad que próximamente formara parte de su realidad física, o simplemente da rienda suelta a su poder creador durante esas horas de sueño.

Como toda prisión, este planeta tiene un patio de recreo, donde esas almas que sufren condena, puedan realizar sus actividades bajo la atenta mirada de sus carceleros.

 

Un patio donde dar rienda suelta a su creatividad y tener entretenida a esas almas en un entorno seguro y perimetrado, ese patio es el Astral.

 

Podrás tener la capacidad de desdoblarte conscientemente o no, y simplemente tengas que dormirte para que tu conciencia salga al recreo y liberarse por unos instantes de la celda que es tu cuerpo para ella.

 

Los viajes astrales no son mas que la capacidad de estar consciente y salir al patio en ese astral y materializar allí, lo que el dueño, de esa conciencia dentro de su madurez emocional considere.

 

Por lo general, muchos de los viajeros del astral descargan allí sus frustraciones y reflejan en lo que crean, su amplio abanico de carencias, encarnando y creando todo aquello que en su modesta vida física no son o no logran ser.
 

 

 


El Astral no es mas que un holograma, diseñado y pensado para que el alma no pueda deambular libre.

 

El plano físico es demasiado irreal y el astral es un lugar donde el poder del alma fascina a aquellos mediocres que dedican su tiempo a jugar en esa holográfica piscina de bolas, una guardería del alma bien diseñada y construida con un propósito muy bien pensado.

 

La conciencia debe esta muy madura para identificar esto y evitar caer en esta trampa.

 

Salir del holograma no es sencillo, pero alguien experimentado lo podría lograr si su voluntad así lo quiere.

 

La mayoría de aquellos viajeros que dicen viajar por el espacio, visitar mundos o guerrear con entidades de todo tipo, no hacen más que jugar en ese entorno virtual, donde la conciencia es constantemente engañada.

 

Esto no quiere decir que no se pueda salir y contemplar el universo. La conciencia no tiene limites y puede viajar allí donde la voluntad desee, sin importar tiempo o espacio.

El holograma consta de varias capas con las que mantener atrapado al rebaño que vive preso en esta mega factoría 'almica' (del alma).

 

La capa física donde el alma encarnada vive y experimenta a través de esos vehículos físicos, gestiona los sentimientos y las emociones, lidia con situaciones en las que el sistema mantiene entretenido a ese Ser, conflictos, dramas y un sinfín de expresiones en un amplio catalogo de experiencias que disfrutar a un módico precio.

 

Una manera de vivir una vida, encerrada en una celda corporal, una especie de culebrón en primera persona, a través del mando de control humano.

 

La siguiente capa es la que se crea para entretener al alma cuando desencarna momentáneamente mientras se recarga el joystick corporal con el que interactúa, mientras, el holograma dispone de un espacio virtual a la medida de su potente capacidad creadora y creativa.

 

Por las noches miles de millones de conciencias salen de sus celdas, encadenadas a ese "cordón de plata" que le impide liberarse voluntariamente.

 

La Luna como vigilante y testigo de excepción, una pupila atenta en el oscuro y profundo espacio, cuidando que ninguna alma se descarríe y trate de fugarse de la prisión.

 

Esta capa es la que mas entretiene y mas análisis sesudos a dado pie, a los médicos del sueño, psicólogos y psiquiatras, una capa holográfica surrealista en el que el alma codifica de forma alegórica un mensaje, para su posterior interpretación consciente, pero que una vez enfundado en su traje humano es incapaz de decodificar.

 

Esta puede repetir ese mensaje en forma de sueño recurrente cuantas veces necesite, que el Ser consciente, una vez despierto, inicia su rutina y se transforma en un torpe ignorante y es poco probable que den con el enigma.

 

Damos poca importancia a los sueños, se nos ha enseñado que no son útiles o que son fantasías, recreaciones mentales sin importancia, hecho que es totalmente falso.

 

La tercera capa es la que mas desesperanza ofrece a priori, ya que se trata del mecanismo que se activa cuando se rompe la cadena que mantiene atada el alma, a su cuerpo, esto lo tocare mas adelante.

 

 

 


Los sueños no son mas que formas en la que tu conciencia, tu alma, crea una imagen y una situación alegórica, llena de símbolos, personas y lugares reconocibles para que interpretes y des con la clave de un mensaje que es esencial en tu desarrollo en el juego.

 

Despertamos y no damos importancia a eso surrealista y bizarro que soñamos anoche, una simbología incomprensible, una mezcla de personajes y de espacios, y una cosmología imposible de analizar debidamente.

 

Cuando la consciencia entra en acción, reclamando tu atención y dando prioridad máxima a esas cuestiones físicas y emocionales que irrumpen en los primeros instantes, antes de tocar el suelo con el pie, ya habrás olvidado horas de trabajo de tu conciencia tratando de hacerte entender la clase de ganado que eres y el lugar al que, cada día tras un largo periodo de trafico y estrés, vas a pastar.

Es hora de que entendamos que el astral no es un lugar especial donde ir de visita y saciar tu curiosidad.

 

Es el lugar al que vamos todos cuando soñamos. Lo que allí encuentras o bien son simulaciones o son creaciones mentales de nuestra conciencia tratando de formar situaciones que posteriormente recuerdes en tu estado consciente y asocies convenientemente.

 

El holograma astral es una capa mas de la cebolla que forma el holograma Tierra, y cada capa esta compuesta a su vez de una solapada concatenación de capas, un laberinto donde mantener presa tu conciencia y ser un recurso provechoso.