15 Febrero 2022

del Sitio Web EcoInventos



 

 

 

 


La desalinización se está estudiando como una forma de resolver la escasez de agua potable que afecta a gran parte del mundo, pero tiene algunos problemas que resolver.

Un nuevo diseño de dispositivo de desalinización alimentado por energía solar evita la acumulación de sal, lo que hace que el sistema sea eficiente y asequible.

Con tan sólo 4 dólares en materiales se puede conseguir un dispositivo que proporcione el agua potable diaria a una familia.

La suciedad es uno de los principales problemas de los sistemas de desalinización.

 

A medida que se filtra la sal y otras impurezas del agua, ese material tiende a acumularse en las membranas u otras superficies del dispositivo, lo que obliga a limpiar las piezas con regularidad o, peor aún, a sustituirlas.

 

Los materiales de absorción se encuentran entre las piezas que más se ensucian, por lo que para el nuevo proyecto, científicos del MIT y de la Universidad Jiao Tong de Shangai se propusieron diseñar un dispositivo de desalinización solar sin mallas.
 

 

 


Destinado a flotar en la superficie de una masa de agua salada, el sistema se compone de varias capas.

Un material con perforaciones de 2,5 mm extrae el agua del depósito inferior, formando una fina capa de agua en la parte superior.

 

Con la ayuda de un material oscuro que absorbe el calor de la luz solar, esta fina capa de agua se calienta hasta que se evapora, de modo que puede condensarse en una superficie inclinada para ser recogida como agua pura.

La sal se queda en el agua restante, pero aquí es donde entra en juego la nueva idea del equipo. Los agujeros del material perforado tienen el tamaño justo para permitir que se produzca una circulación convectiva natural.

 

El agua más caliente por encima del material - que ahora es mucho más densa en sal - se devuelve a la masa de agua más fría que hay debajo. Una nueva capa de agua es arrastrada hasta la parte superior del material y el ciclo comienza de nuevo.

En los dispositivos de prueba, el equipo afirma que esta técnica puede lograr una eficacia superior al 80% en la conversión de energía solar en vapor de agua, incluso cuando el agua de partida tenía concentraciones de sal de hasta el 20% en peso.

 

No se detectaron cristales de sal en el dispositivo tras una semana de funcionamiento.

Y lo que es más importante, el sistema está fabricado con materiales cotidianos, por lo que debería ser escalable y barato.

 

El equipo calcula que un sistema con una superficie de recogida de sólo 1 m2 podría proporcionar suficiente agua potable para las necesidades diarias de una familia, y los materiales para construirlo sólo costarían unos 4 dólares.

Si se perfecciona, el equipo afirma que este diseño de desalinización podría ayudar a llevar agua potable a zonas remotas o en vías de desarrollo, y utilizarse como instalaciones temporales para proporcionar ayuda en caso de catástrofe tras la interrupción del suministro habitual.

 

 

 

Referencias