por Mirja Holtrop 
27 Julio 2018 
del 
Sitio Web DrRath
 

traducción de Adela Kaufmann
Versión original en ingles

 

 

 

 

 

 


Los trastornos de inmunodeficiencia son un grupo de afecciones en las que el sistema inmunitario del cuerpo está muy debilitado o no funciona en absoluto.

 

En algunos casos, los pacientes nacen con trastornos de inmunodeficiencia. En otros, sin embargo, como en el SIDA o ciertos cánceres, el trastorno es adquirido más adelante en la vida.

 

Los trastornos de inmunodeficiencia adquirida son el tipo más común.

 

 

 

 

¿Qué es el sistema inmune? 

El sistema inmune es la defensa del cuerpo contra organismos infecciosos y otras influencias dañinas del medio ambiente.

 

Se compone principalmente de,

  • amígdalas

  • ganglios linfáticos

  • timo

  • bazo

  • médula ósea

Las principales tareas del sistema inmune son reconocer invasores como virus, bacterias, hongos o parásitos; neutralizarlos; y eliminarlos del cuerpo.

 

El sistema inmunitario también debe reconocer y neutralizar las sustancias dañinas del medio ambiente y luchar contra las propias células del cuerpo cuando presentan una amenaza para él, como el cáncer.

 

 

 

 

Síntomas de los trastornos de inmunodeficiencia

Los síntomas de los trastornos de inmunodeficiencia incluyen los siguientes:

  • La aparición repetida de neumonía, bronquitis, infecciones sinusales, infecciones de oído, meningitis u otras infecciones

     

  • Inflamación e infección de órganos internos

     

  • Trastornos de la sangre, como bajos recuentos de plaquetas o anemia

     

  • Trastornos autoinmunes, como el lupus o la artritis reumatoide

 

 

 

Diagnóstico de los trastornos de inmunodeficiencia

Si su médico sospecha que tiene un trastorno de inmunodeficiencia, él o ella realizará una variedad de diversas pruebas de laboratorio.

 

Estos pueden incluir revisión de,

  • su conteo de glóbulos blancos

  • su conteo de células T

  • sus niveles de inmunoglobulina

 

 

 

Tratamiento convencional de los trastornos de inmunodeficiencia

El tratamiento convencional para los trastornos de inmunodeficiencia depende de los síntomas específicos.

 

Los médicos generalmente recetan,

  • medicamentos como antibióticos y terapias de inmunoglobulinas

     

  • antivirales como amantadina o aciclovir

     

  • un medicamento proteínico llamado interferón

Al igual que con todos los enfoques farmacéuticos, sin embargo, tales tratamientos inevitablemente causan efectos secundarios...

 

En el peor de los casos, si su médula ósea no produce suficientes glóbulos blancos, su médico incluso podría sugerirle un trasplante de médula ósea ... 
 

En última instancia, sin embargo, para corregir adecuadamente los trastornos de inmunodeficiencia, ninguno de estos enfoques proporciona la respuesta.

 

Para tratar el problema con éxito, simplemente abordar los síntomas no es suficiente.

 

 

 

 

El enfoque de la Medicina Celular para mejorar el sistema inmune: la defensa natural de su cuerpo

El enfoque de la 
Medicina Celular para los trastornos de inmunodeficiencia se centra en fortalecer el sistema inmune a través de un suministro óptimo de micronutrientes específicos.

 

Además de seguir las Recomendaciones Básicas de Salud Celular del Dr. Rath, como tomar dosis más altas de los siguientes micronutrientes, es particularmente beneficioso:

 

 

VITAMINA C - La vitamina C ha demostrado tener efectos beneficiosos sobre la función inmune.

VITAMINA A - los estudios demuestran que tener una cantidad suficiente de vitamina A es esencial para la inmunidad.

VITAMINA E - la vitamina E es un micronutriente importante para mantener el sistema inmunitario.

VITAMINA B6 - La vitamina B6 ha demostrado aumentar la respuesta inmune, incluso en pacientes críticamente enfermos.

VITAMINA B12 - La vitamina B12 juega un papel clave en la inmunidad celular.

ÁCIDO FÓLICO - se ha comprobado que el ácido fólico ayuda al funcionamiento normal de las células inmunitarias.

HIERRO - La falta de hierro afecta negativamente la respuesta inmune.

CALCIO - Una ingesta equilibrada de calcio es crucial para un buen funcionamiento del sistema inmune.

MAGNESIO - Las investigaciones muestran que el magnesio participa en las respuestas inmunitarias de numerosas maneras.

 

 

 

 

Consejos generales para mejorar la inmunidad

Coma una dieta balanceada de alimentos integrales con muchas verduras de hojas verdes, frutas, nueces, semillas y granos, y asegúrese de hacer ejercicio regularmente.

 

Comer una dieta rica en vitaminas y mantenerse activo ha demostrado beneficios para el sistema inmune del cuerpo. 

Y no te olvides de dormir lo suficiente. Un patrón de sueño saludable es esencial para un sistema inmune fuerte. 
Trate de evitar el sobreesfuerzo también.

 

Durante períodos de estrés, el cuerpo libera,

  • cortisol

  • adrenalina

  • otras hormonas

Si estás crónicamente estresado, una alta producción de estas dañinas sustancias puede ser perjudicial para el sistema inmune.