Estas energías no solo portan un elemento vital para la vida, también portan todo tipo de datos esenciales para la comunicación entre seres vivos.
Nosotros participamos
retroalimentando este flujo, recibimos y a la vez emitimos, por lo
que a menor escala participamos igual que cualquier orbe del cosmos,
es en este "fluir" donde encontramos sentido a la popular cita
"somos parte de un todo".
Esto siempre se entendió
de forma vertical, en una pirámide, creando una jerarquía mental,
con una fuente primaria y suprema, pero en realidad es
multidireccional y no jerarquizada en absoluto.
En este sistema existen
una gran cantidad de, se podría decir, "células" que atacan a sus
iguales, como en una especie de Lupus global.
es aprovechada por los parásitos
Este sistema planetario
impuesto, creó esta propaganda que finalmente fue creída y aceptada
durante demasiado tiempo, lo que nos obliga a todos los Seres a
trabajar duramente para derrocarlo y restaurar el orden natural
basado en el bien común.
Esto lo da la experiencia, profundizando en el trato cordial, sabiendo escuchar y aprendiendo a leer tus propias reacciones cuando tratas con otros, se va aprendiendo, distinguiendo y finalmente a identificarlos.
Nuestra mejor herramienta
es
nuestra empatía, ya que los
parásitos no son generadores energéticos, nos puede ayudar al no
percibir de ellos ninguna emoción.
Esto es una constante, recibimos y emitimos; otro ser que interactúe con nosotros emitirá y recibirá, pero al recibir, le llegará lo que emitimos nosotros y así el otro receptor sabrá como estamos sin siquiera emitir un sonido.
Al contrario que con la
telepatía que es un puente mente a mente, con la
comunicación energética, recibimos las emociones de todos los
que nos rodean, y estos su vez la nuestra.
Esto no es nada fantástico, ni difícil de lograr, solo requiere empezar a leer nuestras emociones e identificar las que nos llegan de otros.
No solo es útil para
identificar un parásito. Su verdadera función es la de entender al
otro, la de comprender su situación antes siquiera de que haya una
comunicación oral; de este modo no prejuzgamos y no nos creemos
superiores a nadie, entendemos el tránsito y la situación de quien
nos rodea, y estos a su vez la nuestra.
Los parásitos (PO) están conviviendo con los Seres
Esto es importante
tenerlo integrado, para tener claro que beneficia al sistema y que
ayuda a restablecer el orden natural basado en el bien común.
Esta última quizá menos
conocida, es sencilla de identificar.
Para hacernos una idea
rápida, estas energías se podría decir que son defecadas por el
parásito, y al devolvérnoslas, su pretensión es que las purifiquemos
y las devolvamos al parásito.
Lidiar con esto nos puede
llevar dos o tres días (en una persona sana), tras los cuales
devolvemos esa energía 'desdensificada', más liviana y lista
para el consumo.
Si esa persona mejora, y
esa mejoría es palpable, ya tendremos una prueba lo suficientemente
convincente para empezar no solo a identificar a otros parásitos,
sino para encontrar la forma de liberarnos del parásito o ayudar a
liberarse a otros de sus parásitos.
No es cuestión de crearnos una psicosis, pero si tenerlo en cuenta para operar en consecuencia, y protegernos de posibles robos energéticos.
La única meta que persigue esto es estar sano, fuerte y mentalmente estable.
El parásito acaba por
controlar nuestra mente y anular nuestra voluntad, para asegurarse
su propia supervivencia. Inundará de falsedades el pensamiento del
huésped, para que solo vea la realidad tal y como al parásito le
interesa que la vea.
Esto si se practica en pareja, el avance es mucho más rápido, y la relación entre ambos se enriquece enormemente, dándole un cariz a la relación que seguro antes no habíais experimentado.
Es importante despejar la
mente de problemas cotidianos y estar tranquilos para leer
correctamente al otro, lo único que os lo impide es vuestra propia
elección.
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