Versión en italiano con la alusión al festival Heb Sed
Museo Egipcio o los antiguos egipcios disponían de una tecnología superior a la que la historia les concede, o recibieron ayuda externa avanzada...
Sin embargo, el verdadero misterio y complejidad
también se encuentra en los pequeños objetos de uso cotidiano.
Este misterio es evidente en las numerosas vasijas con embocadura estrecha hechas de basalto, alabastro o diorita, la piedra más dura conocida en la Tierra.
La cuestión de cómo vaciaban el interior de esos
recipientes sigue sin respuesta, considerando que en el Imperio
Antiguo no disponían de tornos y los taladros eran de cobre.
Este jarrón, descubierto por Jean Philippe Lauer junto a otros 40.000 jarrones y vasijas de gran belleza, algunos anteriores al reinado de Zóser, presenta una simetría perfecta y una superficie pulida que parece imposible de lograr sin un torno.
Además, muchos de estos jarrones, incluido este,
tienen cuellos estrechos y alargados que impiden introducir la mano
para dar forma y pulir su interior.
Las representaciones y figurillas que muestran la
confección de artesanías similares incluyen herramientas conocidas
por los historiadores, pero no tornos, y los taladros de cobre
parecen insuficientes para modelar materiales tan duros.
Durante el reinado de Zóser se produjeron grandes
innovaciones tecnológicas en la arquitectura en piedra, pero aún
así, el método exacto de trabajo en piedra dura sigue siendo un
enigma.
Este bloque tiene una perforación realizada por un trépano tubular, un proceso difícil de explicar con las herramientas conocidas de la época. Las representaciones de taladros en la tumba TT100 de la Necrópolis de Tebas muestran taladros de cobre utilizados en la madera, pero no en piedra dura...
Las perforaciones en el granito presentan marcas
en espiral en la pared interior, que indican un avance rápido y
continuo que parece imposible con herramientas de cobre.
Este misterio lleva a dos conjeturas:
Más allá de la credibilidad que se le dé a una u otra teoría, lo que es incuestionable es que los enigmas no sólo están en las grandes construcciones como las pirámides, sino también en los pequeños utensilios que utilizaban a diario.
Estos artefactos demuestran que la sofisticación
y el conocimiento de los antiguos egipcios en el trabajo de la
piedra abarcan tanto lo monumental como lo cotidiano...
|