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traducción de Editorial-Streicher
27 Mayo 2012
La discusión sobre este registro del tiempo ha estado intensificándose rápidamente por varios años hasta ahora, y no sólo en círculos New Age. Muchísimos sitios y foros en Internet están dedicados a ello. Es el asunto principal del libro de Daniel Pinchbeck, 2012 El Retorno de Quetzalcoatl, y una docena de otros libros especulativos.
Actualmente, John Major Jenkins y Carl Johan Calleman están
aporreando el tema para ver quién será el visionario vencedor en la
cuenta regresiva de 2012.
Aquellos que conocen algo de mi trabajo en filogenética astral (Quest for the Zodiac), mitología estelar, las Eras del mundo, y el cálculo precesional (Dendera Decoded), esperan con curiosidad mis opiniones.
Habiendo pasado bastante años
en la práctica de la observación del cielo y la investigación en el
margen de tiempo del Zodíaco y varias esquematizaciones de
cronologías a largo plazo - hindú, egipcia, tibetana, maya, azteca,
persa, mitraica, Gurdjieffiana, teosófica, antroposófica, y otras
que no recuerdo - me siento obligado a comentar sobre este tema de
moda.
Computar los ciclos a largo plazo del orden cósmico era una preocupación en todas las culturas antiguas, desde China a Perú. La introducción de calendarios para regular la vida cívica y la planificación agrícola fue un proceso largo y complejo. En la ideación de estos sistemas, los confeccionadores del calendario no se limitaron al tiempo en la escala humana sino que ampliaron sus cálculos a innumerables miles de años.
Haciendo eso,
ellos aparecieron a veces con cifras asombrosas.
4.320 es el número base que genera los
cuatro yugas [edades] de la cosmología hindú. También aparece en la
cronología de los reyes antediluvianos compilada por el sacerdote
babilonio Beroso, y en otras partes. Es una norma artificial (una
unidad canónica sagrada, si usted prefiere) que también es un factor
en varios ciclos de tiempo geológicos, siderales, solares, lunares y
planetarios.
La precisión de sus tablas planetarias, solares y lunares es impresionante.
Ellos calcularon los ciclos de Venus y la Tierra tan exactamente como lo hacemos hoy, hasta con cuatro decimales.
Este dominio de ciclos del tiempo verificables exige respeto, y nos obliga a mirar muy de cerca sus extrapolaciones a largo plazo. Para los mayas y todos los otros pueblos antiguos, los cálculos verificables y no-verificables eran parte integral de un sistema singular de calendarios sagrados.
No veo nada
desconcertante en conceder un poco de respeto a su marco de tiempo a
largo plazo, sobre todo si algo se puede aprender haciendo aquello.
La última fecha registrada fue Enero
de 909 d.C.. El calendario usa un grupo de cinco unidades-conceptos
calculados sobre una base de 20: k'ín (1 día), huinal (20 días), tun
(360 días de 18 huinales), katun (7200 días o 20 tunes) y baktun
(144.000 días o 20 katunes).
El 21 de Diciembre de 2012 está
escrito como 13.0.0.0.0. Hay tres pautas de correlación y, usted
apueste, muchas sutilezas y sintonía fina en la cronología maya.
Esto hace un total de 5.126 años ó
1.867.145 días. Este lapso abarca casi 13 baktunes de 144.000 días
cada uno, de modo que la Cuenta Larga maya es llamada rutinariamente
"trece baktunes". No es un período enormemente largo de tiempo de
acuerdo a otros cálculos sagrados, pero es un tiempo suficiente para
enmarcar una vasta perspectiva histórica.
El actual debate se
centra en lo que va a suceder cuando la Cuenta expire en Diciembre
de 2012.
Hasta ahora, ésta ha
recibido bastante menos atención que la fecha final. Pero yo
argumentaría que el resultado final de la Cuenta será un reflejo, en
alguna manera y en alguna medida, de las condiciones iniciales. Si
esperamos que algo termine en 2012 d.C., podría ser provechoso
conocer lo que comenzó, qué condiciones prevalecieron, en la fecha
inicial de 3114 a.C..
La leyenda hindú declara que el Kali-yuga, la Era de oscuridad o decadencia en la cual ahora vivimos, comenzó con la muerte de Krishna el 16 de Febrero de 3102 a.C.. Ésta es quizá la fecha más famosa en los calendarios sagrados.
Los cálculos
hindúes hacen de la duración del Kali-yuga enormemente más larga que
la Cuenta Larga maya, pero la coincidencia de las fechas iniciales
es asombrosa. Ésta es la correlación Hindú-Maya.
En el mito egipcio, la fecha 3102 a.C. señala el asesinato de
Osiris, paralelo a la muerte de Krishna. Esto da la correlación
Hindú-Maya-Egipcia.
Muchas de las cosas
que él describe son ahora triviales en nuestro mundo. Las profecías
de Padma Sambhava de la tradición tibetana también presentan
predicciones similares, abarcando desde las costumbres sociales
comunes (la gente comerá de pie, e incluso corriendo), invenciones
tecnológicas (aves metálicas cruzarán los cielos), a la decadencia
espiritual (las guías para la iluminación serán vendidas en las
esquinas de las calles).
Sin pruebas de lo que los confeccionadores del calendario creían, estamos obligados a configurar nuestras propias mentes sobre los aspectos sociales, espirituales y psicológicos del "tiempo final". Puedo diferenciarme de otros académicos al admitir abiertamente que estoy inventando lo que digo sobre los signos y perspectivas del "tiempo del fin".
Otros
más calificados que yo tienden a afirmar que ellos sacan sus
interpretaciones de la evidencia antigua, o que siguen lo que los
antiguos creían, aunque no haya ningún relato escrito para decirnos
lo que los mayas creían.
Bien. Prefiero avisarle a usted cómo funciono, manteniendo sin rodeos mis métodos y pretensiones a cielo descubierto.
Tome lo que
le guste y deje el resto.
La
muerte de Krishna y el asesinato de Osiris representan momentos mitogenéticos (término de Campbell), cuando el acceso intrínseco de
nuestra especie a lo Sagrado fue roto. Por consiguiente, las
reflexiones culturales y las expresiones creativas de aquel acceso
comenzaron a decaer dramáticamente.
En esta perspectiva, Krishna no es un capacitado patriarca,
sino más bien una versión asiática de Eros, o un Dionisos hindú.
Esta visión es consecuente con la preponderancia de la
escuela Vaishnava. (Vea la excelente antología El Consorte Divino. Vaishnava
es el nombre para los cultos dedicados a la adoración de Krishna).
Igualmente, en la cultura pre-dinástica del Sur de Egipto Osiris era el consorte de Isis, que había nacido en Dendera.
La diosa madre suprema del Egipto pre-dinástico era Hathor, a quien el templo de Dendera estaba dedicado. Hathor era una divinidad femenina sin un consorte masculino, excepto por su propio descendiente, Horus, que no tenía padre.
El animal totémico de Hathor era el buitre, que se
decía que era fecundado por el viento. El mito de Hathor-Horus
señala al tiempo cuando los varones no gobernaban la sociedad y la
paternidad no era el factor determinante en el status o la
organización social. Es decir, a tiempos pre-Osirianos.
En otras palabras, hay un Osiris pre-teocrático en la cultura orientada hacia la diosa que nos dejó el templo de Dendera, una construcción Ptolomeica que incorpora algunos temas extremadamente antiguos. En el contexto de Dendera, Osiris era una manifestación de los poderes regeneradores de la Naturaleza, específicamente del código filogenético.
Osiris representa el lenguaje "engranado" o las instrucciones operacionales de la Naturaleza, el linga sharira ("vaina larga") en términos tántricos, y Hathor era la antigua guardiana matriarcal de los Misterios de aquél. En tiempos dinásticos, el clero que dirigió la teocracia egipcia elevó a Osiris al status de un avatar divino, e hizo de él el modelo deífico del gobernante teocrático, el faraón.
Tal es la exageración típica del libreto
teocrático en todo el mundo.
En este marco, propongo que
el tiempo de inicio de la Cuenta Larga maya representa una ruptura
de la sabiduría de la Naturaleza orientada hacia la diosa, el
secuestro (co-optation) de la biología sagrada por una agenda
teocrática, y una consiguiente pérdida de contacto con lo inmanente
Sagrado en el mundo natural, conduciendo a la especie humana a una
edad oscura en que el contacto con lo Sagrado es intermediado por
creencias dictadas por hombres que afirman hablar de parte de Dios.
Con esta decadencia, la especie
humana perdió su equilibrio de género, su disposición moral natural
a la bondad y la cooperación, y cayó bajo el hechizo de narrativas
patriarcales y teocráticas como las fábulas egipcias y babilónicas
de la monarquía divina y, por supuesto, el cuento del Antiguo
Testamento del Pueblo Elegido.
Bien, aquí hay un pequeño truco que a veces uso para rastrear patrones históricos de largo plazo: Vayamos al punto medio de la Cuenta restando la mitad de los 5.126 años desde 3114 a.C.. Esta fecha es 551 a.C.
El siglo VI a.C. fue el momento en que la narrativa yahvista del Génesis entró en una formulación rígida conforme a las reformas de Rey Josías (gobernó entre 640 y 609), alabado como el gobernante ideal en aquel manifiesto brutal de la teocracia, el Deuteronomio. Entre 587 y 537 a.C. una gran parte de la nación judía fue desterrada a la ciudad de Babilonia.
Cuando ellos volvieron a Canaán, los escribas yahvistas
que estaban escribiendo el programa del dios-padre combinaron su
mito racial con el dualismo persa de la fuente dividida, una
cosmovisión que atribuye el bien y el mal a la misma entidad
sobrehumana.
Esto es así de simple, y es asombroso el tipo de información que este instrumento puede generar, una vez que usted tiene un concepto-marco o frase heurística (orientadora) que le diga a usted qué buscar. En este caso, el instrumento heurístico es el concepto "sociedades basadas en la diosa, derrocadas por la agenda teocrática" o "sabiduría de la Naturaleza versus religión revelada".
Los momentos-nudo
revelan acontecimientos históricos fundamentales que tienen sentido
dentro del marco heurísticamente pre-definido.
La transición hacia el patriarcado alcanzó un gran
impulso durante el período cuando el punto vernal cambió del Toro al
Carnero, de Tauro a Aries, alrededor de 1850 a.C. No hay ninguna
causalidad implicada aquí, amigos: ¡es simplemente un asunto de
dinámica sincrónica!. Parece que los momentos en el tiempo histórico
tienen un fractal o estructura auto-similar, que se auto-repite.
En el tiempo de Alejandro el Grande, dos siglos más tarde, todavía estaba en esa región, y esto había sido comentado por los estudiosos del cielo durante algún tiempo. Los egipcios llamaban a la constelación del Carnero como Amón, y Alejandro se identificó con Amón, es decir, él se deificó a sí mismo.
Los sacerdotes en Siwa, que lo declararon "Hijo de Amon"
para apaciguar la obsesión narcisista del muchacho solitario,
insinceramente le aconsejaron que se hiciera retratar con los
cuernos del carnero en las monedas. Estos sacerdotes habrían sido
veteranos observadores del cielo que sabían que el motivo del cuerno
concordaba con el cuadro zodiacal del momento.
Justo en este momento histórico los moros se involucraron en masivas olas de invasión contra Europa y se extendieron por las estepas rusas. El siglo VIII vio tanto la extensión como el fracaso de la agresión islámica en varios frentes. Muy a menudo, las fechas-nudo son extraordinariamente precisas. Note que los estudiosos designan 731 d.C. como el año exacto en que la civilización Clásica maya alcanzó su punto máximo, y comenzó a declinar rápidamente.
Éste es un
ejemplo de cómo un simple instrumento de factorización del tiempo
sin conexión con el calendario maya, y muy distante de los complejos
cálculos usualmente aplicados a ello, puede generar distintos puntos
de datos coherentes con el perfil histórico de la Cuenta Larga.
El año 741 vio la muerte del Emperador bizantino León II que había repelido con éxito la invasión árabe, así como la de Carlos Martel, la figura clave en la resistencia al avance moro en Francia (Galia). Con el cambio de importantes jugadores del poder, Europa se hizo más vulnerable al Islam, la forma más virulenta del fascismo teocrático sobre la Tierra.
El ascenso del Islam implicó el genocidio en gran escala, a menudo cometido por árabes contra otros árabes, como se ve hoy en Iraq. En 750, Abu-Abbas Al-Safah, un descendiente del tío de Mahoma, fundó la dinastía Abasí que establecería un Imperio islámico que duraría 350 años.
Haciendo aquello, él masacró a los Omeyas, los competidores
sobrevivientes de la dinastía precedente.
Según
la teoría Eurabia de Bat Ye'or, un historiador británico nacido en
Egipto especializado en la experiencia de no-musulmanes en países
musulmanes, éste es exactamente el caso. En
While Europe
Slept (2006), el escritor estadounidense
Bruce Bawer pinta un atemorizante
y fuertemente documentado cuadro de la subversión islámica de la
democracia en Europa, sobre todo en Escandinavia.
El Islam presenta la fórmula de la fase final del patriarcado y de la religión del dominador, la etapa donde vence o se destruye a sí misma en el intento: el parásito destruye a su anfitrión.
Las condiciones iniciales de la
Cuenta Larga culminan en el fascismo teocrático del Islam con su
programa para el rígido control social, la sumisión ciega a la
autoridad revelada, la amenazante intolerancia y la segregación
sexual, todo fundado en un libro atribuido al dios creador.
Ésta no es - por favor note esto - la manera en que los
diagnósticos sobre 2012 son usualmente conducidos.
(He repetido este punto numerosas veces en este sitio, y no me gusta repetirme, pero insisto en que ésta es una apreciación histórica clave que no podemos permitirnos ignorar. Lea a Merlin Stone, When God Was A Woman).
La supresión de la sociedad orientada
hacia la diosa condujo al éxito del patriarcado, la dominación de la
Naturaleza y la segregación sexual, un patrón que puede ser
rastreado en el cercano detalle histórico, si uno quisiera. Todo
esto fue llevado a cabo mediante fuerza e intimidación, por
supuesto, y funcionando "por medio del Libro".
En el siglo VIII el Islam se estaba esparciendo globalmente y los árabes combatieron contra la dinastía Tang por el control de Asia Central. Los musulmanes permanecieron como la fuerza dominante en Transoxiana durante 150 años.
Una consecuencia de la confrontación árabe-china fue el establecimiento de la primera fábrica de papel en el mundo musulmán. Esto sucedió en 751 d.C. (20 años después de la fecha-nudo) en Samarcanda, después de que dos prisioneros de guerra chinos revelaron la técnica de la fabricación de papel a sus captores.
Inmediatamente, los musulmanes
letrados comenzaron a usar la nueva tecnología para hacer
traducciones de antiguas escrituras griegas y romanas, pero también
para producir copias de su escritura revelada: el Corán, por
supuesto.
Entonces, alrededor del "avanzado" momento-nudo de 731 d.C., los escribas musulmanes adquirieron la tecnología basada en el papel para extender su versión de la Historia, inscrita en el Corán.
El patrón
es claro: narrativa doctrinal y trabajo de imprenta juntos para la
imposición de la dominación patriarcal y la Mentira Paterna. El
truco del cálculo de los puntos-nudo revela el patrón.
El hecho de que las mujeres musulmanas abracen y adoren el Corán no es ninguna medida de su conformidad sino una indicación de que ellas saben que sus vidas están en peligro si actúan de otra manera.
Si usted es un musulmán, la pena
por disentir o renunciar a la Fe es, según el Corán, la muerte. Para
las mujeres en las sociedades islámicas, hay penas peores que la
muerte.
Muy claramente, la religión Abrahámica es incompatible con
una sociedad civil y democrática que permita la libertad de
expresión. Hoy, los musulmanes en Europa usan la libertad de
expresión concedida a ellos por las democracias en las cuales ellos
viven para pedir la anulación de aquella libertad, y casi nadie se
atreve a decirles que esta táctica es inaceptable. Imagínelo.
Es el arma de producción masiva para la destrucción masiva por
excelencia.
Durante los últimos 5.000 años, la especie humana entera ha caído bajo la esclavitud del Libro.
En
Not in His Image
propongo el término "hechizo
de la narrativa" para el insólito poder del libreto salvacionista
que codifica las creencias de las tres religiones Abrahámicas.
Aquellos que
son obligados a creer en la historia de la religión revelada, la
representan insensatamente y sin reflexión crítica o restricción. Lo
que ellos han recibido irreflexivamente, sin su consentimiento, lo
actúan sin discernimiento, desatendiendo la libre opción de otros.
Ellos se comportan como ellos creen. Lo que se les dice que deben
creer está codificado en el Libro (Torá, Biblia, Corán).
Consideremos algunas
soluciones y estrategias inspiradoras.
En el debate de aquel entonces, José Argüelles [1939-2011] desempeñó un papel central con su declaración de que el final de la Cuenta Larga indicaba un momento cuando una radiación desde el centro de nuestra galaxia barrería la Tierra y produciría efectos mágicos.
Si recuerdo correctamente, el período de aquella radiación coincidía con el ciclo precesional de 25.920 años. En virtud de esto, Argüelles simplemente atribuyó una fantástica interpretación al conocido fenómeno del ritmo astronómico.
En The
Mayan Factor él afirmó que la civilización maya desapareció (momento-nudo:
731 d.C.) por des-materialización cuando una parte de la población
fue teletransportada hacia fuera de la Tierra por aquella misteriosa
radiación cósmica, y predijo que lo mismo ocurriría con muchas
personas en 2012. Sus teorías le hicieron ganar dos minutos de fama
en la CNN.
Puede haber una repetición de la noción de Argüelles sobre la des-materialización en algunos círculos, pero yo más bien esperaría que no. Los llamamientos a escapar del planeta no serán tolerados en este sitio.
No estoy probablemente al corriente de los pálpitos del nuevo grupo
de gente que está construyendo la expectativa de 2012, pero me
parece que las mejores opciones para el "tiempo del fin" maya están
irrumpiendo desde la imaginación orgiástica de la gente más joven en
la contracultura, gente que está encendida con todo género de
inspiraciones eróticas, cósmicas, artísticas, mánticas, mitopoyéticas y esotéricas.
Una oleada multi-frecuencial de confianza mística se
está esparciendo por algunas áreas de la cultura juvenil.
Este tipo de especulaciones podría estar completamente fuera de foco si no ofrece un mensaje de cambio que expresamente se dirija a las condiciones sociales y materiales terminales del Kali-yuga.
Una cosa es afirmar
un salto cuántico en la conciencia cósmica, y apoyarlo con cálculos
abstrusos que retroceden 16.000 millones de años (Calleman), y otra,
digamos, congregarse contra la amenaza social de la religión
revelada. La primera es una mera hipótesis, brillante o no, y la
segunda es una postura revolucionaria, que implica una llamada a la
acción y a la transformación.
Si
Sophia confía de algún modo en la Humanidad para conseguir su
corrección, como los gnósticos enseñaban, la condición humana
contribuirá a aquella magnífica posibilidad, una corrección del
curso planetario, o la impedirá. Cualquier progreso en torno a 2012
depende de cómo veamos la condición humana, considerando tanto la
resistencia a entrar en la corrección, como la habilidad e
inspiración requerida para entrar en ella.
Hasta ahora, no estoy convencido de que las nociones que circulan sobre el "fin de los tiempos" maya ofrezcan una visión anticipada confiable de lo que pueda pasar, o la escala en que pueda ocurrir.
Mi crítica principal de la especulación
es que, aunque pueda usar referencias históricas, como se ha visto
en la correlación cercana de los "trece infiernos" y los "nueve
cielos" con acontecimientos conocidos, etc., en el esquema de Calleman, este acercamiento no identifica el patológico tema
predominante del Kali-yuga: el hechizo de la narrativa de la
religión revelada, venerada en la autoridad del Libro.
Maquinación Mental
Como si millones de personas en todo el mundo despertaran un día y vieran la vida de un modo totalmente diferente que el del día anterior. Tales predicciones de cuantía no son provechosas, creo. Ellas establecen falsas expectativas. Tal cambio a escala masiva podría ocurrir si fuera a ser provocado por un acontecimiento externo, como el derretimiento de la capa de hielo de Groenlandia.
Si ocurriese una explosión
nuclear, un ataque terrorista biológico, o una convulsión geológica
que devastara un área urbana principal, la atención del mundo entero
sería afectada, y la gente tendría que ajustar colectiva y
simultáneamente su estilo de vida a la nueva situación. Careciendo
de tales acontecimientos, es difícil creer que las masas de personas
cambiarán de improviso sus mentes con respecto a cómo vivimos en
este planeta.
Este acontecimiento podría intensificarse hasta una guerra nuclear en el Oriente Medio, la Tercera Guerra Mundial, algo que podría estar determinado que ocurriera si la actual concatenación de acontecimientos históricos no es conjurada. A su debido tiempo, probablemente habrá otro acontecimiento terrorista en EE.UU., quizá un ataque biológico contra un importante centro urbano.
Todos los expertos dicen que esto no es una cuestión de si ocurrirá
o no, sino de cuándo, y un gran segmento del público está aprensivo,
tensionado por lo que ha de venir. Puede esperarse que tal tensión
alcance alturas insoportables en el próximo tiempo.
Estos terribles acontecimientos ocurrirían si la Cuenta
estuviera llegando a sus años finales o no. Ellos no son el
resultado de un determinismo calendárico sino de la locura acumulada
de la Historia. Ellos provienen de condiciones iniciales que se
remontan aproximadamente a unos 5.000 años. Los elaborados informes
de la Cuenta - los períodos de los nueve cielos y los trece infiernos,
por ejemplo - son ejercicios de maquinaciones mentales, modos de
imponer un cómodo sentido del orden en los acontecimientos; pero
tales ejercicios no demuestran, a mi parecer, el poder predictivo de
la Cuenta.
La pregunta,
La Cuenta puede ser un instrumento heurístico
que nos permite enmarcar acontecimientos y aprender algo sobre las
pautas compulsivas de la Historia, como lo he demostrado arriba.
Como tal, no tiene que ser tomado como un oráculo misterioso que
tiene el poder de provocar lo que pronostica.
Puede que no todo finalice abruptamente en Diciembre de 2012. Lo más probable es que no morirá con tan elegante brevedad.
Pero en la forma en que nos
acercamos al momento designado, conscientes de la trayectoria
histórica que nos lleva a él, algo crucial al final del hechizo
letal del patriarcado podría ser conseguido.
Éstos son hechos obvios de la vida moderna, pero la fuerza peculiar del argumento de Harris a través de todo su libro consiste en su declaración de lo obvio de tal modo que parece a la vez nuevo y alarmante.
Una vez que es dicho, con tantas palabras, que la mayoría
de la gente cree que Dios ha escrito un libro, la creencia parece
evidentemente absurda. Pero sabemos que esta creencia es universal,
profundamente asentada, y existente desde hace mucho tiempo.
Determina el modo en que muchas personas en este planeta se
comportan.
Recuerde que identificamos dos fechas-nudo, 551 a.C. y 731 d.C., cuando la composición de la agenda patriarcal fue puesta de relieve.
Éstas fueron fechas claves en el establecimiento de la dominación por medio del Libro: la Biblia en 551 a.C. y el Corán en 731 d.C.
El Final de la Fe puede indicar lo que realmente puede pasar en el
"fin de los tiempos" mejor que cualquier número de tomos proféticos
que pretenden describir lo que sucederá, o lo que se espera que pase,
como las especulaciones de Jenkins en sus libros sobre alineamiento
galáctico.
Considere la certeza de acontecimientos que destruyen el mundo, como ataques biológicos terroristas y catástrofes geofísicas, ¿y qué concluye usted?
Yo supondría que cuando tales acontecimientos ocurren, la mayoría de las personas buscará rápidamente el Libro, más bien que arrojarlo lejos. La certeza de acontecimientos atemorizantes que interrumpirán o incluso destruirán la seguridad social y personal, impide casi totalmente la posibilidad de que las masas opten por librarse del hechizo de la narrativa.
Al contrario, ellas están dispuestas a hundirse en él aún
más profundamente. Ellas descenderán hacia su fe cuando el sistema
falle. Ellas morirán con sus corazones apretados, creyendo, antes
que habiéndose liberado de la creencia.
¿Es ésta una visión elitista de
la oportunidad que presenta el "fin de los tiempos"?. No, pero puede
ser una genuina visión de supervivencia.
Si el debate anti-religioso señalado por The End of Faith debiera intensificarse hacia una controversia pública abierta, nos encontraríamos viviendo un acontecimiento que verdaderamente refleja el cambio óptimo para la Humanidad.
Cuestionar abiertamente, en público debate, el segregacionismo sexual del Islam, por ejemplo, sería un acontecimiento trascendental y una ganancia enorme para el cambio positivo y la sanación social.
El problema hoy es no sólo que
el segregacionismo sexual exista - más descaradamente en el Islam,
pero también en las otras dos religiones Abrahámicas, además de en
la religión india y china - sino que no puede ser puesto en duda,
debido a una supuesta incorrección política y al miedo de ofender a
los musulmanes.
Suponga
que las mesas están patas arriba, y es la parte ofendida, no la
parte ofensora, la que debe defenderse en el debate sobre creencias
religiosas y principios basados en la fe. Sería un cambio en la
realidad social y en su sintaxis, consecuente con una ruptura del
hechizo de la narrativa del patriarcado que ha dominado el
Kali Yuga.
Este fallo introduce lo que podría ser un cambio radical en las reglas del discurso en cuestiones de fe. Esto cambia la sintaxis del debate sobre asuntos de fe. El caso tuvo que ver con el líder del Partido Nacional británico, Nick Griffin, que describió al Islam como una religión "perversa".
Sin tener en cuenta la fuente del comentario, es verdadero que la ofensa no constituye incitación. Griffin no dijo que el Islam es una religión cruel y que los musulmanes deberían ser ahorcados.
Esta última frase sí que es una certísima incitación. Con el
privilegio de la libre expresión viene la responsabilidad de usar el
lenguaje de un modo sobrio, racional y mesurado: sea cuidadoso con
lo que usted dice, pero nunca tan cauteloso como para que usted
nunca desafíe ni ofenda. Cualquier persona sana de buena conciencia
sabe lo que es una incitación y lo que no lo es.
Lo mismo ocurre con el argumento de que la conversación ofensiva indispone a la gente ofendida para el diálogo positivo que podría conducir a la reconciliación social y a una mejor integración: tomar el hecho de ser ofendido como una excusa para retirarse del discurso social abierto es sólo otra manera de extorsionar para lograr una exención especial.
La respuesta ante la ofensa no es
sincera y rechaza el disenso creativo que hace posible a la sociedad
democrática.
El riesgo de ser ofendido es una consecuencia de la libre expresión ofrecida en una sociedad abierta. Actualmente es tabú ofender a judíos, cristianos o musulmanes diciendo algo crítico o despectivo sobre su fe, sus creencias y sus costumbres, incluyendo cómo se visten, cómo tratan a sus hijos y cómo matan a los animales.
El temor a ofender no es una medida de compasión o consideración, aunque se disfrace como tal.
Es una concesión a la demanda de una
exención especial ejercida por miembros de estas religiones, que
buscan la ventaja de implementar su agenda trabajando con valores y
creencias que no pueden - ellos insisten - ser cuestionados,
criticados o ridiculizados. Pero demandar una exención especial en
cualquier asunto que fuere es inconsecuente con los principios de
una sociedad abierta (o sociedad cívica, como Harris la llama).
No puede haber ninguna exención especial de la crítica social abierta en ningún asunto en una sociedad libre, mucho menos de las creencias religiosas que dirigen el comportamiento social y de las prácticas religiosas que definen la identidad social. La sociedad que sucumbe a esta demanda comete suicidio moral (que es exactamente lo que está ocurriendo en Europa, argumenta Bruce Bawer en su inquietante estudio While Europe Slept).
Pero el Occidente, y especialmente la
sociedad europea, ha llegado a ser cada vez más complaciente con
esta demanda durante las pasadas décadas.
El desafío del tabú contra la ofensa religiosa sería un verdadero cambio de paradigma con repercusiones mundiales para el bien. Ésta es la clase de cambio conductual de masas a buscar en la vida social a medida que se acerca el "fin de los tiempos" maya.
Esto es algo
digno de discusión, no como una mera expectativa sino como un
desafío para el momento 2012.
Algunos ensayos en este sitio ejemplifican
expectativas realistas que podríamos albergar para un positivo gran
final de la Cuenta Larga: por ejemplo,
The Promise
of a Lonely Planet.
En efecto, es un signo de una sociedad sana que esto pueda ser hecho sin temor a la represalia.
Pero si una sociedad en general accede a
la demanda de una exención especial, el programa de la dominación
patriarcal, basado en la fe, que consiguió ponerse en movimiento a
gran velocidad al principio del Kali-yuga, prevalecerá, hasta la
vigencia del último varón.
Es bastante malo que los
musulmanes sientan de esta manera, pero peor es que los infieles en
el "Occidente democrático" quieran apaciguar los sentimientos de los
primeros. Liberado de las amenazas expresadas rutinariamente por
musulmanes indignados, el debate anti-religioso crecería hasta
proporciones considerables, o al menos tendría una posibilidad para
crecer.
(Comenzamos a hacer esto en este sitio ya en 2002, con una escasa ventaja de diez años sobre el "fin de los tiempos").
Muchas personas podrían involucrarse entonces en el debate, y quién sabe cuántos podrían experimentar un cambio radical de opinión en cuanto a Dios, la salvación y la supervivencia.
Ver algo como esto sucediendo en los
próximos años sería uno de los mejores resultados de la Cuenta Larga.
Hay también otro camino principal hacia el cambio radical en una futura arca para el debate y la diferencia...
Presentaré mis ideas sobre este asunto en el siguiente artículo:
The
Discovery of the Next World.
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