22 Enero 2022
del Sitio Web
RT
CNSA / Xinhua / Legion-Media
Las
imágenes tomadas por el róver
muestran que
gran parte de
la fina malla
metálica de sus ruedas
está cubierta de
suciedad...
Un equipo de
investigadores chinos publicó recientemente en la revista Science
Robotics un estudio (A
2-year locomotive exploration and scientific investigation of the
lunar farside by the Yutu-2 rover) en el que afirman que
el suelo de la cara oculta de la Luna, además de estar repleto de
pequeños cráteres y carecer de los suaves océanos de lava
solidificada que salpican la otra cara, es "pegajoso".
Los investigadores obtuvieron estos datos gracias al róver Yutu-2,
parte de la misión china Chang'e 4 que en 2019 se convirtió en la
primera misión en aterrizar en la cara oculta de la Luna.
Las imágenes tomadas por el róver muestran que gran parte de la fina
malla metálica de sus ruedas está cubierta de suciedad que ha
recogido mientras rodaba por la superficie lunar.
Eso detalle contrasta fuertemente con la experiencia del predecesor
de Yutu-2,
Yutu, que aterrizó en el lado cercano
en 2013.
Aunque ambos róvers
tienen diseños casi idénticos, el Yutu original nunca acumuló
grandes montones de suciedad en sus ruedas durante más de dos años
de exploración, solo un poco de polvo fino.
Según los expertos, esto probablemente se deba a que la actividad
volcánica en el lado oculto cesó antes que en el lado cercano, por
lo que su suelo es más antiguo y ha estado expuesto a las duras
condiciones del espacio durante más tiempo.
El proceso como tal se conoce como 'meteorización
espacial', y consiste en la absorción de los impactos
repetidos de los micrometeoritos, los cuales pulverizan la suciedad
en partículas más finas, la derriten y la fusionan en gotas vítreas
más grandes de forma irregular, llamadas aglutinados.
Estas formas irregulares pueden entrelazarse entre sí más
fácilmente, formando grandes terrones.
Debido a que la
superficie de la cara oculta es más antigua y está más
desgastada, tiene sentido que posea un mayor número de
aglutinados, que son más pegajosos y se adhieren a las ruedas
más fácilmente.
Por otro lado, Yutu-2 también encontró muchos cráteres pequeños.
De los 88 cráteres que el
equipo documentó en el estudio, 57 tenían menos de 10 metros de
ancho, y solo 2 tenían más de 60 metros de ancho.
Los nuevos datos aportados por el róver podrán ayudar a los
investigadores a comprender mejor la historia y las características
del misterioso lado oculto de la Luna...
|