del Sitio Web Laneros

 

 


Esta campaña va dedicada a Aaron Russo, autor del video “Freedom to Fascism” (“De la Libertad al Fascismo”) y a todos los “9/11 Truthers” en general.
 

 

 

 

Freedom to Fascism

Autor: Aaron Russo
 

Hola a todos,

Es crucial difundir al máximo el tema del 11-S para intentar alcanzar la masa crítica de gente despierta que incline la balanza para el lado opuesto al actual. Pero dada la intensa censura que sufre este tema en los grandes medios de desinformación oficiales, los cuales están controlados por la misma élite corrupta que es la presunta responsable del 11-S (y de innumerables crímenes más), para conseguir una difusión efectiva y amplia del 11-S se requeriría desarrollar una campaña masiva de GUERRILLA MARKETING en medios alternativos (Internet y otros).

Veamos en qué consiste esta idea:

La élite censura las verdades incómodas del 11-S (explosiones, metal fundido, WTC7, etc.) porque sabe que si el grueso de la sociedad llegase a enterarse de que realmente fue un auto-atentado, “habría una revolución antes de mañana por la mañana”, como decía Henry Ford.

Aparte de su gravedad, lo que hace al 11-S “especial” en comparación con otros crímenes de la élite ¡es que es tan obvio que fue un auto-atentado! (siempre y cuando uno no se fíe ciegamente de lo que dice la televisión sino que haga un mínimo esfuerzo por investigarlo por su cuenta en Internet, libros, etc.). Eso implica que, paradójicamente, el 11-S también supone una oportunidad de oro para terminar con esta locura.

 

El 11-S es el Talón de Aquiles de la élite, es el punto más débil por el que rasgar su disfraz de oveja y dejar al descubierto su verdadero rostro de lobo.

Por todo ello, no deberíamos dejar escapar una oportunidad así, tanto por nuestro propio bien como por el de las generaciones futuras (hijos, sobrinos, nietos, etc.).

 

Si ahora nos cruzamos de brazos, la situación podría empeorar, y mucho, porque:

“Todo lo que se necesita para el triunfo del mal es que los hombres de bien no hagan nada”
--- Edmun Burke.

Entonces, si tuvieras una oportunidad para ayudar a cambiar el rumbo de la historia, ¿lo harías?

Si tu respuesta es sí, hay buenas noticias, porque ya hay miles/millones de personas de bien que se han despertado del engaño y están trabajando en equipo para contrarrestar la censura y las mentiras oficiales. Si lo estimas conveniente, únete a ellas, ponte del lado correcto de la historia, aporta tu pequeño granito de arena para contribuir a despertar a la masa crítica de la sociedad, pues muchos granitos juntos forman una gran montaña.

 

Y recuerda:

“Cualquier cosa que hagas es insignificante, pero es muy importante que la hagas”
--- Mahatma Gandhi.

Si has investigado por tu cuenta el 11-S y has llegado a la conclusión de que fue un auto-atentado, eso significa que ya te has despertado del engaño (has elegido tomarte la PASTILLA ROJA, como en la película Matrix, sólo que esta vez es real y no ficción), y quizás te estés preguntando:

¿Cómo puedo yo ayudar?

Mediante la difusión del 11-S en medios alternativos de Internet de máxima audiencia y que permitan dejar comentarios libremente (foros, blogs, periódicos oficiales online, etc.). O también mediante la difusión persona a persona (familiares, amigos, conocidos).

 

Se trata de realizar una campaña masiva de “Guerrilla Marketing”:

Es una forma no convencional de realizar actividades promocionales con un presupuesto muy bajo. Más que combatir en grandes batallas, las guerrillas se dividen en pequeños grupos que atacan de forma selectiva el objetivo en sus puntos más débiles (...) mediante una secuencia repetida de ataques, retiradas y ocultaciones practicadas en series.

Se dice que las "fuerzas de guerrilla nunca ganan las guerras, pero que sus adversarios generalmente las pierden".

Mediante esta estrategia, el efecto del boca a boca de miles/millones de personas multiplicará el poder de difusión de la información. Mientras más gente participe, antes se alcanzará la masa crítica de gente despierta y antes empezará a cambiar la situación actual.

  • La información es poder. Quien controla la información, controla la sociedad.

Muchos se preguntarán:

¿Cómo es posible que hayan podido ocultar un auto-atentado del calibre del 11-S?

La respuesta a esa pregunta se basa en el control implacable que ejerce la élite sobre los grandes medios de desinformación masiva (TV, prensa, radio, etc.).

Parece ser que la élite controla alrededor del 96% de los grandes medios de desinformación oficiales a nivel mundial, y utiliza la censura y la propaganda para engañar descaradamente a la sociedad. En esos medios hay auténticos profesionales de la mentira, y también hay trabajadores normales (algunos son padres de familia, etc.) que, o consienten las manipulaciones, o los despiden (en Internet hay muchos ejemplos de ello).

Si miráis el EGM (Estudio General de Medios) veréis que la gran mayoría de la población se informa de lo que sucede en el mundo a través de esos medios oficiales.

 

Veamos a modo de ejemplo el caso de España, aunque en otros países sucede algo similar:

Datos del EGM, año 2007:

Población de España: 37.9 Millones.

  • Gente que ve televisión: 33.6 Millones (88.8 %)

  • Gente que oye radio: 20.9 Millones (55.2 %)

  • Gente que lee revistas: 18.3 Millones (48.2 %)

  • Gente que lee periódicos: 15.7 Millones (41.3 %)

  • Gente que usa Internet: 9.5 Millones (25.0 %)

Además, de la gente que usa Internet (9.5 M) sólo un porcentaje menor habrá investigado por su cuenta el 11-S, porque es más cómodo que te lo “muestre” la tele a que tengas que “buscarlo” en Internet. Pero como el % de gente que usa Internet va en aumento, eso le está empezando a molestar a la élite, la cual está pensando la manera de controlar y censurar también Internet.

 

Este es un ejemplo de ello:

Polémica Ley en Italia para intentar controlar Internet
Los blogs tendrían que registrarse como empresas editoriales, pagar impuestos y ser supervisados por un periodista “profesional.” DAVID CORRAL - Madrid - 26/10/2007

 

Conclusión

La élite aún controla las mentes de una gran mayoría de la población mediante el control de los grandes medios oficiales (TV, prensa, radio).

 

El objetivo de esta campaña es intentar inclinar la balanza para el lado opuesto al actual antes de que sea demasiado tarde e Internet también sea víctima de la censura “oficial.”

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