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Mayo 23, 2013
del Sitio Web
ElLibroDeThot
Ya conocen las reglas del juego: ha de leerse todo y entenderse el conjunto. No vale sacar mis afirmaciones de contexto.
Muere Chávez, y resulta que comienza a rumorearse que tal como se venía sabiendo por lo filtrado por los propios lobbies occidentales, dado que el opositor Enrique Capriles es el candidato conveniente para los intereses de éstos, y dado también que las operaciones comerciales convenientes para los mismos dependen del cambio de régimen en Venezuela en favor del paradigma occidental (con Capriles o por cualquier otro medio), así como por el hecho de que se viene deduciendo desde hace tiempo por los investigadores críticos el vínculo del ejército venezolano con los intereses de USA por la capacidad de influencia de éstos, en torno a la sospecha de que los americanos pudieran comprar al ejército de ese país para instituir a Capriles en el poder.
El CFR, el comité fundado y dirigido por la familia Rockefeller, elaboró un artículo antes de las últimas elecciones, diciendo que Capriles (conveniente para los intereses de los lobbies americanos), no ganaría las elecciones, y que deberían esperar hasta "un empeoramiento de Chávez", o sea, que éste muriese.
Lo inquietante es que supieron calcular con sorprendente precisión la época en la que habrían de elaborar sus operaciones político-comerciales cuando muriese Chávez, de alguna manera, ¡prácticamente sabían cuándo moriría éste!
También andaban, desde hace tanto tiempo, tomando la muerte de Chávez como la piedra angular de sus futuros planes, ya andaban tramando desde hace tanto lo que debían hacer para instaurar su propio régimen en Venezuela a la muerte de Chávez.
Y ya sabían lo que seguramente pasaría después. ¡Lo tenían todo calculado!
En contra de lo que digan los desinformadores medios divulgativos occidentales, esto claramente incrimina de manera circunstancial al aparato de la administración americana, que como se sabe, está al servicio de estos lobbies.
Opciones de mitigación
En el caso de que el gobierno orqueste o se aproveche de una violenta reacción popular a la derrota de Chávez, su muerte o su incapacitación, para suspender las libertades civiles y gobernar bajo un estado renovable de excepción, los Estados Unidos podrían tomar o promover varias medidas con el fin de acelerar el retorno a la democracia.
La probabilidad de éxito de los esfuerzos unilaterales de Estados Unidos es baja, las actividades multilaterales que incluyen otros actores regionales importantes tienen muchas más probabilidades de influir en el comportamiento de Venezuela.
Opciones diplomáticas
Junto con naciones afines a sus ideales, Estados Unidos podría exigir a la OEA que declare a Venezuela en incumplimiento de sus obligaciones como signatario de la Carta Democrática Interamericana y fomentar una misión del secretario general dirigida a Caracas.
(Nota: Sería difícil generar el consenso para una condena de Venezuela en la OEA, pero el secretario general puede llevar a cabo tal misión por su propia autoridad, y aún así una misión liderada por el secretario general requeriría la aquiescencia de Venezuela para entrar en el país)
Venezuela podría entender que si las organizaciones regionales y subregionales determinan que el país ya no es una democracia que funciona, el gobierno deba ser suspendido como ha ocurrido recientemente con Honduras y Paraguay.
Estados Unidos podría llevar el tema de la democracia en Venezuela ante las Naciones Unidas y desde el Consejo de Seguridad instan a la ONU a aprobar una misión de determinación de hechos, o que apoyen explícitamente los esfuerzos regionales para restaurar la democracia. Junto con otros socios internacionales, incluida la Unión Europea, Estados Unidos podría apoyar las ofertas de mediación.
Si resulta difícil conseguir que la OEA o la ONU se involucren en los esfuerzos de mitigación, los Estados Unidos podrían proponer una delegación de ministros de Relaciones Exteriores para viajar a Caracas con el fin de actuar sobre las autoridades venezolanas.
Los Estados Unidos podrían suspender los visados para todos los individuos (funcionarios y no oficiales, el gobierno y la oposición) que sean tomados por partícipes en el desencadenamiento de la violencia o el menoscabo de la democracia, o suspender los servicios normales de adjudicación de visas en la embajada de EE.UU. en espera de una resolución de la crisis.
Opciones de Economía y Finanzas
En el caso de violencia o interrupción de la democracia, los Estados Unidos podrían congelar las cuentas bancarias individuales de las figuras clave involucradas o responsables y embargar bienes en los Estados Unidos.
También podría disponer del producto de propiedad del gobierno venezolano entidades corporativas como CITGO, que se celebrará en las cuentas de depósito en garantía hasta que se restaure la democracia y alentar a otros socios comerciales importantes (por ejemplo, Canadá, España, Francia, Brasil) para hacer lo mismo.
Si otras formas de presión no pueden tener un efecto, los Estados Unidos podrían bloquear el acceso a las instalaciones de refinamiento de CITGO en Estados Unidos y considerar prohibir la venta de petróleo de PDVSA a Estados Unidos, mientras que el estado del gobierno es incierto.
Opciones militares
Los Estados Unidos podrían alentar a otros militares latinoamericanos, así como tal vez los españoles, a comunicar al ejército venezolano la importancia de cumplir con los mandatos constitucionales, respetando los derechos humanos y la preservación de la democracia.
Mientras que los partidarios de Chávez dominan el alto mando de Venezuela, no está claro hasta qué punto controlan los mandos medios. Tampoco está claro en qué medida la lealtad de los militares al movimiento bolivariano de Chávez triunfaría sobre otras consideraciones.
En el fallido golpe militar de 2002, Chávez se retiró temporalmente, pero también le fue devuelto el poder.
La participación militar directa parece inapropiada. Los Estados Unidos nunca han intervenido unilateralmente en un conflicto interno de América del Sur a través del ejército (a pesar de las críticas al Plan Colombia), y de hacerlo ahora posiblemente la mayor parte de Sudamérica se pondría de parte de Chávez y /o su sucesor.
Muchos países latinoamericanos son profundamente reacios a intervenir o incluso comentar los asuntos internos de sus vecinos hemisféricos. A pesar de la intervención militar multilateral incluso en las peores circunstancias (Haití) es casi impensable.
Por todo esto, el posible colapso de la situación venezolana que fácilmente se puede deducir de las consecuencias de que Chávez muriese, tal como es visible, beneficia los intereses de los poderes fácticos que buscan aumentar su influencia y poder económicos empleando como instrumento el aparato del estado americano que se encuentra bajo su control, dado que el conflicto y el ascenso de su candidato (Capriles), tanto como la otra opción, el sembrado del caos, supondrían la implantación de su paradigma en Venezuela, bien por vías "legítimas", bien por la justificación de una invasión producida por un oportuno caos y estado de emergencia, o incluso también por una conspiración a través de la infiltración en el propio interior de la estructura, a través del propio ejército venezolano (como ya se contempló antes).
De este modo, ha de tenerse de nuevo en cuenta las afirmaciones del CFR, que disparan la sospecha sobre la verdadera autoría de todos estos hechos, con la emisión del informe donde estudia previamente todas las herramientas americanas disponibles para tomar el control de Venezuela en caso de que se vulnerase la dudosa democracia venezolana a partir de la muerte del Jefe del Estado, tal como antes se ha expuesto, puesto que es así como parece inevitable que surja de estos hechos la subliminal sensación de que todo esto beneficia sospechosamente los intereses de dichos poderes, y de que éstos se frotan las manos de manera similar al culpable.
Igualmente, ante la posibilidad de la muerte de Chávez, cabe añadir, que a finales del pasado año Sean Burges, un asociado veterano en el Centro Nacional Australiano de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional de Australia, se refirió a un artículo de la Constitución venezolana que explica lo que debe suceder cuando un Presidente muere.
Según Burges el artículo 232 de la Constitución venezolana se dirige a dos escenarios directamente relacionadas con la enfermedad de Chávez.
Mientras Chávez estaba al parecer muy enfermo para rendir su juramento, la cúpula de Venezuela dictaminó que podía sobrevivir, descartando las elecciones a principios de este año.
Sin embargo, si Chávez muriese pronto (decía Burges antes de la efectiva muerte de éste), el artículo 323 dice que las elecciones deben realizarse dentro de los 30 días consiguientes.
Eso significa que el heredero ungido de Chávez, Maduro, sería el presidente durante menos de un mes antes de las elecciones.
Si Maduro decidiese competir por la elección, parece probable que se enfrentaría al líder opositor Enrique Capriles, un político joven y carismático que recibió el 46 por ciento de los votos cuando compitió contra Chávez en octubre, que como ya se sabe, es el famoso testaferro de los poderes fácticos americanos.
De hecho él comparte la doctrina matriz de éstos, la que los identifica: el sionismo.
Muchos sospechan, sin embargo, que Diosdado Cabello, ponente en el Congreso de Venezuela y un aliado de la línea dura de Chávez, pueda iniciar una pugna por la presidencia, lo que forzaría a un conflicto interno (y posible desintegración) al Partido Socialista Unido de Chávez en Venezuela. La preocupación era que sin el culto a la personalidad de Chávez, la política venezolana podría caer en el caos.
En un país con una corrupción generalizada, un ejército con demasiado poder, y vinculado con el tráfico de drogas, esto es especialmente aterrador.
Incluso antes de las elecciones de octubre, se postulaba la posibilidad de un conflicto armado generalizado si Chávez no fuera elegido, algo a lo que ha de añadirse el crecimiento de producción monetaria del país y el déficit que cualquier nuevo líder puede encontrar imposible de manejar.
¡Tienen planeado usurpar el país de un modo u otro!
Esta conspiración golpista occidental vino a ser precisamente avalada cuando la televisión estatal venezolana realizó lo que se consideró como una actualización sobre la salud del presidente Hugo Chávez hace poco, en cuyo discurso, el vicepresidente, Nicolás Maduro, aseguró al país que Chávez todavía estaba vivo, pero se enfrentaba a serias complicaciones en su batalla contra el cáncer.
Sin embargo, gran parte de la declaración se centró en su alegación de una hipotética conspiración encabezada por Estados Unidos contra el país.
Maduro dijo que el gobierno había descubierto que un funcionario de la Embajada de los EE.UU. estaba actuando en perjuicio de las Fuerzas Armadas de Venezuela, para así ponerse en contacto con los oficiales y proponer un plan para desestabilizar el país.
Este hombre del que se trataba en el comunicado, era un afiliado a las Fuerzas Aéreas llamado "David del Mónaco", y se le ha dado 24 horas para salir del país.
Maduro dice que se tomarán "medidas especiales" para evitar conspiraciones de la derecha. Vale la pena señalar que el gobierno venezolano acusó a los EE.UU. de un complot similar en 2008, y expulsó al entonces embajador Patrick Duddy. El vicepresidente también dijo previamente a la prensa que él mismo ha sido objeto de un complot de asesinato.
Sin embargo, a muchos les "sonará extraño" lo que hasta este momento se ha venido tratando de una manera tangencial, que es la posibilidad de que la muerte de Hugo Chávez hubiera sido producto de un plan premeditado: ¿cómo se puede provocar una muerte tan aparentemente natural como la de un cáncer?
De entrada, sí que existen pruebas circunstanciales, de que un esfuerzo por atentar contra su vida ha habido desde luego, a pesar de que éste pueda por el momento ser considerado "a posteriori" de la aparición de la propia enfermedad en sí misma.
El primer detalle inquietante y sugerente es que a Chávez le conectaron a respiración asistida mecánicamente en su última etapa de vida, lo cual indica que uno ya está estancado en la inutilidad, que es irrecuperable; bien, pues fue entonces cuando comenzaron a aplicarle un tratamiento tan sumamente agresivo como la quimioterapia, que te lleva al borde de la muerte, ¿para qué llevarle al umbral de la vida cuando además ya se sabe que no podría, en cualquier caso, recuperarse al paciente?
Parece que alguien intentaba acelerar el proceso de su muerte "ad hoc".
Pero esto no es todo, porque en la famosa comparecencia de la "actualización sobre la salud", Maduro también aprovechó para decir que los enemigos de Chávez le habían perjudicado con intrigas, comparándola con la muerte de Yasser Arafat, el líder palestino de quien se afirma que fue envenenado.
Según CNN, el ministro de Información Ernesto Villegas anunció que Chávez se hallaba luchando contra una nueva infección del lunes:
Si bien, Maduro va aún más lejos de la teoría de la "aceleración del proceso natural de muerte", y dice que una "comisión científica" hallará a la larga pruebas de que la propia enfermedad de Chávez fue causada por una especie de "contaminación" (¿en qué sentido?).
Curiosamente, poco después se ha declarado el Estado de Emergencia en Venezuela, y el ejército se ha hecho con el control, tal como la teoría de la conspiración aseguraba que podría suceder, tal como previeron los del CFR, y finalmente, tal como les conviene a los lobbies occidentales para justificar el cambio de régimen beneficiador para su poder agazapado y usurpador del sistema, de régimen encubierto y de falsificación de la mal llamada "democracia" de occidente.
Ningún lugarteniente de Chávez goza del suficiente apoyo público, y el movimiento Chavista está empezando a desvertebrarse, tal como ellos quieren.
El célebre documentalista crítico con el sistema, Aaron Russo, predijo todo esto en un documental. También predijo el 11-S.
Este plan se lo confesó su amigo, el mismísimo Nick Rockefeller, de la familia bancaria perteneciente a la élite mundial, ¡los mismos fundadores del CFR, autor del sospechoso informe!
Poco después de ese documental, Aaron Russo murió también misteriosamente en menos de una semana de un cáncer repentino.
A parte de esto, existe también un artículo por parte de un tal Francis Quartararo, de la prensa de investigación independiente, que acredita la "atmósfera circunstancial" mencionada por Maduro efectivamente tuvo lugar, y que, haya o no de facto un complot para haber acabado con la vida de Chávez, desde luego el ambiente de infiltración de la inteligencia americana en Venezuela lo favorecía idóneamente, y además, según documentan los archivos clasificados filtrados por Wikileaks, la línea de la actuación americana apuntaba en esa dirección:
Wikileaks apunta hacia la tesis del homicidio de Chávez
Aprovechando los documentos de Wikileaks, somos capaces de reconstruir los movimientos de inteligencia ocurridos en Venezuela antes del empeoramiento de la salud de Chávez.
En este caso, hay dos aspectos que se destacan.
[Esto significa que el sistema político americano está en realidad fuertemente coartado ambientalmente por la presión de los lobbies, y necesitan la colaboración de instituciones privadas precisamente amigas de sus verdaderos jefes, para que estos poderosos ocultos puedan sacar doble provecho - manipular al estado para que les haga el trabajo sucio y que encima contraten a sus propios amigos, para que así la administración americana no pierda el sustento de todos sus facilitadores.
O sea: las élites logran que el estado haga por ellos lo que les beneficia económicamente, y encima ellos mismos cobran igualmente por ello de parte del estado ¡jugada redonda!]:
Aún así, a pesar de todo, muchos seguirán cuestionándose la verosimilitud de las acusaciones de que USA le haya de hecho provocado un cáncer a Hugo Chávez, bien, pues aquí es cuando llegamos al clímax de la redacción, donde aportamos las fuentes que garantizan la existencia de este tipo de ciencia y este tipo de tecnología.
Desde los medios oficiales manipulados por los prejuicios del sistema oculta e irreconocidamente para la gran mayoría controlado por las élites, se nos intenta imponer de manera Orwelliana el falso concepto de que sugerir que un cáncer pueda ser inducido tecnológicamente es un disparate sin sentido: eso es en realidad, tal como voy a demostrar, pura defensa sesgada del paradigma materialista y sobre todo de los intereses del Poder (sospechoso).
Resulta que no sólo es posible, sino que es una realidad constatada y reiterada hasta la saciedad, pero omitida en los medios manipulados.
Realmente, se puede, y se consigue, producir cánceres en personas de manera inducida a distancia.
Eva Golinger recordó también que el propio vicepresidente venezolano, Nicolás Maduro, indicó que ya tienen pistas sobre esa posibilidad.
De hecho, dijo que no hay duda de que se ha producido un ataque contra el mandatario bolivariano, hay mucha evidencia circunstancial que indica que eso puede ser una posibilidad muy plausible.
Según Golinger,
En cuanto a lo de los archivos desclasificados, no se trata de un bulo ni de una fantasía.
Durante los años 60 la embajada americana en Moscú fue testigo de un evento inusual. Muchos de sus miembros comenzaron a padecer náuseas, escalofríos, falta de concentración, ofuscación mental, e interferencias en sus pensamientos.
Tres de ellos llegaron a padecer Cáncer, siendo esto algo que se salía por completo de la estadística, por lo cual cabía argüir que realmente algún efecto causal había inferido de manera artificial ese cáncer.
Pueden comprobar las referencias en el trabajo de Sheila Ostrander, el cual, a pesar de haber sido muy prejuiciosamente vilipendiado desinformativamente (sacando citas de contexto, con falacias consensualistas y de muñeco de paja, con negacionismo pretencioso y pobre contraste hemerográfico doliente de una carencia de lectura integral - probablemente por motivos de sesgo cognitivo), ha sido en realidad un trabajo sobradamente respaldado por los propios archivos desclasificados de la DIA del Mayor LaMothe y el Capitán LaMaire, pues su trabajo era tan riguroso que incluso hubo, como se puede comprobar en estas referencias, un ejercicio de censura de parte de la información por el gobierno americano debido a la relevancia de algunos apartados corroborándose así el grado de rigor de los contenidos.
Sin embargo, volviendo a la embajada americana en los 60 y los anómalos cánceres y perturbaciones mentales, resulta que a pesar de todo, lo que no se nos dijo entonces ha acabado corroborándose definitivamente por la aparición muy posterior de un archivo desclasificado por el Acta de Libertad de Información, donde se habla de una tal "Operación Pandora".
Al parecer, tras los eventos de Moscú la CIA comenzó a realizar investigaciones al respecto y descubrió para su sorpresa que realmente había una señal de frecuencias electromagnéticas extremadamente bajas siendo dirigidas desde un edificio situado justo en la calle de enfrente, delante de la embajada, y bajo cuyo radio de influencia se apreciaba un cambio en la salud de los afectados, sobre todo psíquica, pues al parecer esta frecuencia afectaba principalmente a las frecuencias holonómicas, pero también al cuerpo histológico, siendo obviamente ésta la causa de aquellos cánceres.
Todo un hallazgo:
Las autoridades del gobierno llegaron a llamar a esta misteriosa emisión "la Señal de Moscú".
Los americanos descubrieron que era el gobierno soviético el que había logrado desarrollar en secreto nada menos que, por muy extraordinario que suene, un arma de control mental, y también capaz de provocar cánceres.
A partir de entonces, el gobierno de USA comenzó a hacer lo posible para desarrollar tecnología semejante con la ayuda del Departamento de Defensa en los proyectos Pandora y Bizarre.
La investigación retratada en ese archivo concluyó con resultados insuficientes, pero el informante final del archivo reconoce que la información fue traspasada a otras autoridades y que aún quedaba material por desclasificar, así como la realización de nuevas investigaciones paralelas en otros centros a los que el material había sido traspasado para continuar mucho más tiempo con mayor tecnología con toda la potestad pasando a otros mandos y otros departamentos, nuevos encargados, y un mayor nivel de secretismo.
Evidentemente esa tecnología hubo de ser desarrollada mucho más allá posteriormente, puesto que lo que sí estaba confirmado tal como se puede ver en determinadas correspondencias de estos archivos, es que la Señal de Moscú existió y que por lo tanto, de hecho sí existe la capacidad tecnológica de inducir tumores a distancia y de afectar a la salud en general, lo cual descalifica a los descalificadores.
Esto es la enésima prueba de que si hay una prensa especialmente manipulada y tergiversada por el poder de manera dictatorial, ésa es la de occidente (lo cual no quiere decir, repito, que yo esté a favor de otros regímenes donde esto también sucede).
Recomiendo para este tema de las denominadas "armas psicotrónicas" leer el trabajo del Coronel John B. Alexander (quien fuera Director del Departamento de Armas Avanzadas de la NSA y experto en guerra psíquica), pues da muchas referencias posteriores al respecto.
Su trabajo está disponible en Biblioteca Pléyades (busque "John B. Alexander ").
APÉNDICE
Nótese como tras el fracaso electoral de Capriles, el testaferro sionista en Venezuela, éste ha hecho algo que diversas fuentes de la CIA ya han identificado como una forma de golpismo encubierto conspirativo americano:
Así es como América, tal como sabemos por material desclasificado y numerosas filtraciones, ha manipulado Georgia, Pakistán, Irán, Egipto, Armenia, Afganistán, etc., en el pasado.
Parece increíble que después de tanta información que ha visto la luz sigamos creyendo estas "estupideces".
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