por Rodrigo Bernardo Ortega
21 Noviembre 2024
del Sitio Web
TerceraInformacion
El 4 de septiembre de 2024 en una alocución presidencial y en medio
del paro camionero, el presidente de Colombia Gustavo Petro
sorprendió al país con una revelación que confirma la compra del
software
Pegasus en el gobierno anterior.
Ya en febrero de 2024 el
periodista de Haaretz, Gur Megiddo, hizo pública una investigación
de cómo en el gobierno de Iván Duque, en junio de 2021, habría
concretado la compra del software Pegasus en efectivo por 13
millones de dólares, los cuales habrían sido enviados en un jet
privado en dos pagos.
El diario israelí también informa que los
dineros de la transacción provendrían de incautaciones de efectivo
producto de operaciones militares contra el narcotráfico, haciéndolo
así en un esfuerzo por borrar toda traza de la ilegal operación de
compra.
A pesar de estas precauciones, durante la alocución, Petro hizo
público un documento de inteligencia clasificado hasta entonces
proveniente de la UIAF (Unidad de Inteligencia Financiera) la cual
confirmaba el hecho de manera incontrovertible (salvo que el monto
mencionado es de 11 millones de dólares en 2 pagos de 5.5 millones
cada uno), el dinero pagado en efectivo a
NSO Group (NSO significa
Niv, Shalev y Omri, los nombres de los fundadores de la compañía)
fue luego consignado a una cuenta bancaria en Israel.
En revelaciones más recientes se confirmó que los ocupantes de los
vuelos que vinieron a Colombia a recoger los dólares eran ciudadanos
israelíes, entre quienes estaba
Yehuda Lahav, gerente de negocios de
NSO Group.
El dinero nunca fue declarado en aduana, sobra decir que
este monto supera con creces los 10.000 dólares que se pueden llevar
consigo en viajes internacionales, por lo cual se configuraría el
delito de blanqueo de capitales.
A pesar de lo dificultoso que es avanzar la investigación por el
lado israelí en razón a la ruptura de relaciones con dicho país
(debido a las fuertes declaraciones de Petro ante, el ya más que
probable, genocidio gazatí), NSO Group asevera en una escueta
comunicación, que las transacciones,
"se realizaron de acuerdo con la
ley y con la autorización y documentación adecuada en ambos países",
por si quedaban dudas.
No está claro, por el contrario, qué destino tuvo el software espía
adquirido por la anterior administración del ex-presidente Duque.
Todos sus funcionarios aseguran no tener conocimiento de la
presencia de Pegasus en Colombia.
El mencionado reporte de
inteligencia parece dar pistas sobre su destinatario:
La DIPOL
(Dirección de Inteligencia Policial)...
La fecha de adquisición
tampoco parece aleatoria, para el 2021 en Colombia se estaba
desarrollando el Estallido Social, una serie de fuertes
movilizaciones - brutalmente reprimidas - de la sociedad civil ante
las políticas económicas y tributarias del gobierno, en las cuales
hubo violaciones a los derechos humanos por parte del aparato
policivo.
También,
por la época, estaban tomando vuelo las campañas
presidenciales que llevarían a la casa presidencial a Petro.
Cabe
recordar que la campaña de Petro estuvo marcada por filtraciones, en
el escándalo de los llamados Petrovideos.
NSO Group, propietaria de Pegasus, afirma que sólo autoriza el uso del software en la lucha
contra el crimen organizado y el terrorismo, sin embargo, si tenemos
en cuenta,
-
de una parte, la opacidad de la transacción
-
de otra
parte, la forma de actuar del gobierno colombiano de entonces
-
de
otra, la historia de interceptaciones ilegales del país (Chuzadas)
-
así como el escándalo del mal uso del software en otros países,
...nos
queda más que claro que el uso en Colombia de dicho software dista
mucho de ser lícito.
¿Pero qué hace tan poderoso a Pegasus con respecto a otros métodos
de espionaje?
Pegasus puede instalarse sin intervención del usuario,
incluso a través de mensajes de texto.
Una vez instalado, Pegasus
puede acceder a una amplia gama de datos en el dispositivo,
incluyendo,
-
fotos
-
videos
-
ubicación GPS
-
mensajes de chat (así sean
'encriptados' como Whatsapp, Signal o Telegram)
-
historial de
navegación
-
contactos de redes sociales
También puede activar la
cámara y el micrófono del dispositivo.
A esto, hemos de sumar, que
la detección de Pegasus es casi imposible.
Como se puede ver, un uso
ilegítimo de Pegasus confirmaría una violación a los derechos
fundamentales de privacidad de los ciudadanos.
Dichos usos ilegítimos han sido más que probados.
En el 2021, un equipo de 80 periodistas de 14 periódicos en todo el
mundo, analizaron una filtración que contenía más de 50.000 números
de teléfonos infectados.
De manera probada establecieron que
periodistas, políticos, activistas de al menos los siguientes
países:
México, Arabia Saudita, España, Reino Unido, Francia,
Hungría, Turquía, India, Azerbaiyán, Kazajstán, Egipto, Argelia,
Marruecos, Togo, Ruanda, RD Congo, Uganda, Qatar, Bahrein y Emiratos
Árabes Unidos,
...fueron el objetivo de este software espía.
Se confirmó
por ejemplo que personas cercanas al periodista Jamal Khasshoggi,
fueron infectadas por el malware antes que éste fuera asesinado y
descuartizado en un consulado saudí en Estambul.
En Latinoamérica, se siguen revelando casos de vigilancia ilegal en
la región con Pegasus.
En El Salvador, se ha conocido el caso de
infección a una magistrada de la Corte Suprema, así como al menos 35
periodistas de un diario opositor al presidente Bukele.
En México,
diferentes organizaciones estatales de manera independiente
adquirieron el software en el sexenio de Enrique Peña Nieto como
arma contra el narcotráfico.
Pero se reveló que políticos opositores
(entre ellos el hoy presidente AMLO), así como periodistas (entre
ellas la afamada Carmen Aristegui de CNN) fueron también objetivos
ilegítimos.
En República Dominicana, la periodista Nuria Piera fue
identificada como víctima de Pegasus, lo que llevó a la CIDH y a la
RELE a pedir una investigación al Estado.
Ahora hemos de adicionar a Colombia en esta triste lista...
De otra parte, la revelación de Petro también ha tenido graves
consecuencias para el Colombia, pues el país pertenece al grupo
EGMONT, una organización internacional que promueve la cooperación y
el intercambio de inteligencia entre 177 países para combatir el
lavado de activos y la financiación del terrorismo, pero después de
la filtración, decidió suspender el acceso de Colombia a su
plataforma de intercambio de información confidencial.
Según INFOBAE:
"El comunicado emitido por la organización destaca la
importancia de la 'cooperación internacional' en la lucha contra el
blanqueo de capitales y los delitos asociados.
En él se enfatiza que 'el compromiso del Grupo Egmont con la cooperación internacional es
fundamental' y que este se basa en,
'una sólida base de confianza
mutua que garantiza que las Unidades de Inteligencia Financiera (UIF)
miembros cumplan con altos estándares de responsabilidad en lo que
respecta a la protección y confidencialidad de la inteligencia
financiera que se intercambia'."
Lo anterior significa que Colombia pierde acceso a importante
información financiera sobre lavado de activos, por tanto, la lucha
contra el narcotráfico se verá seriamente comprometida.
Volviendo a Pegasus, están ampliamente documentados los excesos y
usos ilegales del software, sin embargo, NSO Group no revela la
lista de clientes ni las acciones que ha tomado para prevenir el
abuso de su producto.
Esta compañía, además, actúa sin escrutinio
parlamentario o judicial:
Israel apenas ha adelantado
investigaciones que desestima, y no ha tomado medidas contra la
compañía cuya residencia fiscal está en su territorio.
Después de
todo, NSO Group es una empresa privada, pero no puede vender su
tecnología sin la aprobación del Gobierno israelí.
Este gobierno
emite las licencias de mercado, necesarias antes de iniciar
negociaciones con un cliente, y las licencias de exportación, que
autorizan cada venta, regulando así la industria de defensa.
La alineación del Estado con la empresa NSO Group en estos procesos
ha sido total.
Lo cierto es que Pegasus se ha convertido en una herramienta clave
para la industria de ciberseguridad de Israel. El programa ha sido
utilizado por agencias de inteligencia como el Mossad y el
Shin Bet
para operaciones de espionaje sin dejar rastros.
Esta es sin más la
razón que Hezbollah, en el Líbano, dejara de utilizar celulares para
la comunicación entre sus miembros a favor de Beepers
(buscapersonas, localizadores), circunstancia que facilitó la
infiltración en la cadena de producción de los aparatos por parte de
Israel, y que resultó en la explosión de miles de estos aparatos en
septiembre del 2024.
Pero quizá el activo más importante para el gobierno hebreo que le
trae Pegasus es la diplomacia.
La exportación de programas como Pegasus fue una parte integral de la estrategia de los gobiernos del
primer ministro Benjamín Netanyahu entre 1999 y 2021 para mejorar la
imagen internacional de Israel, afectada por el conflicto palestino.
Al ofrecer estos programas de ciber-espionaje, Israel buscaba ganar
aliados en
Naciones Unidas, donde se cuestiona regularmente la
ocupación de Cisjordania y Jerusalén Este, así como el bloqueo de la
franja de Gaza.
Extrabajadores de NSO revelaron a Haaretz que
responsables del Mossad solían visitar la sede central de la empresa
en Herzliya, junto con delegaciones de países árabes y africanos
interesados en adquirir Pegasus.
Estos encuentros se dieron en el marco de los llamados
Acuerdos de
Abraham, dichos acuerdos, firmados en 2020, buscaban normalizar las
relaciones diplomáticas y comerciales entre Israel y cuatro países
árabes:
-
Emiratos Árabes Unidos
-
Bahrein
-
Sudán
-
Marruecos
Mediados
por Estados Unidos, estos acuerdos representaban un cambio
significativo en la política de la región, ya que excluían a
Palestina, lo que ha generado críticas al interior de los países
mencionados por lo que consideran un pacto "envenenado".
No es casualidad que los países árabes que firmaron los Acuerdos de
Abraham sean clientes de NSO, al igual que Arabia Saudí.
El
Ministerio de Defensa y el Mossad han incentivado a NSO y otras
empresas similares a vender sus tecnologías a estos países. Benjamín
Netanyahu, por ejemplo, ordenó reanudar la venta de Pegasus a Arabia
Saudí tras una solicitud de Mohamed Bin Salman (príncipe coronado
Saudí), a pesar del veto impuesto por el antes mencionado caso Khashoggi.
NSO tiene un comité ético que evalúa los contratos, pero este es
criticado por ser una fachada, ya que los contratos son considerados
secretos de Estado y pocas personas tienen acceso a la lista de
clientes.
Además, si la empresa descubre que su tecnología se está
utilizando para espiar a periodistas, no puede cancelar el contrato
sin causar una crisis diplomática.
La empresa, además, tiene órdenes
de no cuestionar a las organizaciones o personas que otros países
consideran terroristas o criminales.
Israel, ha liberado en el mundo un poderoso virus, y lo ha puesto en
las manos de gobiernos inescrupulosos adrede, para ganar influencia
y comprar aliados.
Latinoamérica, en medio de un proceso de cambios políticos que cada
vez más lo alejan del polo EE.UU., puede ser terreno fértil para
comprar conciencias con esta poderosa tecnología, y que ésta, sea
utilizada en contra de quienes se atrevan a ejercer una política no
alineada.
POST SCRIPTUM
Fuente
Para acabar de enredar este nudo de informaciones contradictorias,
dando un giro totalmente inesperado, a comienzos del mes de
noviembre 2024, el periódico
El Tiempo emite la siguiente
información:
"funcionarios americanos consultados aseguraron que
Estados Unidos no solo estuvo pendiente de la compra, sino que la
financió con recursos lícitos con el fin de perseguir a
narcotraficantes y también hizo control para que el software se
usara de manera legal.
Agregaron que el presidente Iván Duque no fue
informado porque se trataba de la cooperación rutinaria con la que
han trabajado ambos países durante décadas en contra de amenazas
comunes.
'Solo sabía un grupo pequeño de personas en los organismos
de seguridad del país', le dijeron al periódico en Bogotá."
Fuentes
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