por Gareth J. Medway
Septiembre 1996
del
Sitio Web
MagoniaMagazine
traducción de Alonso
González de Nájera
03
Noviembre 2020
del
Sitio Web
Editorial-Streicher
Versión original en ingles
El siguiente artículo de 1996 que explora algunos
antecedentes del mito contemporáneo de los Antiguos
Astronautas, señalando influencias que no van más
atrás que fines del siglo XIX y especialmente
posteriores a la Segunda Guerra Mundial, fue
publicado originalmente en la revista ovnilógica
Magonia Nº 57, y lo hemos traducido desde su Sitio
Web que lo reprodujo a fines de 2013.
Trata en general de un cierto debate que se ha dado
entre religión y ciencia, que es el contexto del
moderno mito aludido.
¿Quién Enseñó a Dios a Conducir?
Los Orígenes del Mito de los Antiguos Astronautas
El libro "God Drives a Flying Saucer" (Dios Conduce un Platillo
Volador, 1969) de Robert L. Dione se mofa de la metafísica
tradicional:
"...ningún sistema de
lógica aún ideado puede resolver las inconsistencias y paradojas
inherentes en la creencia de que el hombre es habitado por un
algo místico, sobrenatural e inmortal llamado un alma".
Si miramos la Biblia,
¿qué debe ser hecho
con los milagros registrados allí?
Dione no puede encontrar
ninguna razón para dudar de la exactitud de la Biblia:
"...si no fuera por
las referencias a milagros, la Biblia permanecería
incuestionable como un logro monumental en el reportaje
histórico".
La posibilidad de poderes
sobrenaturales él la encuentra absurda, y por lo tanto la única
explicación consiste en que estuvo actuando una tecnología de
platillos voladores.
Después de eso, todo se
hace simple:
-
Adán y Eva fueron
creados por ingenieros genéticos que trabajaban bajo la
dirección
de Yahvé, quien es el "líder de los tecnólogos
maestros"
-
los ángeles eran
cosmonautas
-
la
visión de
Ezequiel fue de platillos voladores
-
en cuanto a la
Inmaculada Concepción, es "razonablemente seguro" que
Gabriel era un "especialista biológico" que artificialmente
inseminó a María con una aguja hipodérmica
-
"bien puede ser
que el esperma usado fuera el de Dios, haciendo de Jesús el
Hijo de Dios tal como la Biblia enseña".
Sin embargo, al final el
Dios súper-tecnológico de Dione es apenas diferente del
sobrenatural de los católicos.
No tenemos almas, pero la tecnología
puede hacer inmortales nuestras mentes, que son electromagnéticas en
su naturaleza:
"Dios elegirá cuáles de nosotros sobrevivirán como
ángeles en el cielo... analizando las referencias de nuestros
ángeles de la guarda y estudiando las cintas de escucha que están en
este momento registrando nuestras vidas".
El antecedente original de Dione estuvo claramente en
la Iglesia
romana, ya que él dedicó un capítulo entero a Fátima, y citó la
Biblia en una versión revisada de la traducción Douay [del AT,
1609].
David F. McConnell, en su libro "Flying Saucers of the Lord"
(1969), usó la traducción del rey James de 1611 (y por lo tanto
fue probablemente criado como un Protestante), pero sus
interpretaciones eran muy similares a las de Dione:
"Éxodo 13:21: Y Yahvé iba delante de ellos durante el día como un
pilar de nube, para guiarlos por el camino, y de noche como un pilar
de fuego, para darles luz, para que anduvieran día y noche.
Ése fue
un caso de un platillo volador o platillos de Yahvé conduciendo a
los hijos de Israel a través del desierto del Mar Rojo... Salmo
97:3: Un fuego va ante él, y quema a sus enemigos en todas
direcciones.
Los platillos voladores de Yahvé con los ángeles van
antes de Yahvé y queman a sus enemigos".
Una Cuestión de
'Fe'
Hasta aproximadamente 1950 la religión parecía estar en decadencia
en todas partes, mientras la ciencia y el materialismo aumentaban,
aparentemente en dirección del ateísmo universal.
Una de las
objeciones estándares a la religión era que la Biblia está llena de
milagros, los cuales el progreso de la ciencia había indicado que
eran imposibles.
El Libro de Josué registra que
Yahvé, a petición de
Josué, detuvo al Sol en su movimiento durante un día entero...
En la
Antigüedad eso no parecía raro; después de Newton, era difícil de
creer.
1950 vio la publicación del libro "Mundos en Colisión -
Worlds in Collision" de
Immanuel Velikovsky. Aunque su autor pueda no haberlo comprendido
conscientemente, la intención de ese libro parece haber sido una
reconciliación de ciencia y religión.
Siendo judío Velikovsky, para él religión significaba el Antiguo
Testamento.
Él sugirió que muchas de las maravillas bíblicas podrían
ser explicadas en términos totalmente científicos como catástrofes
causadas por los desplazamientos de los planetas Venus y Marte.
Él
consideraba que Venus nació sólo hace unos pocos miles de años,
cuando salió desde Júpiter.
Aproximadamente en 1500 a.C. pasó cerca
de la Tierra, provocando varios efectos gravitacionales dramáticos,
como la separación del Mar Rojo, y la detención del movimiento del
Sol ya mencionada.
Finalmente alcanzó su órbita actual, que estaba
ocupada entonces por Marte.
Venus se instaló en la órbita de Marte,
y Marte se vio forzado a alejarse del Sol, pasando junto a la Tierra
durante el pleno período registrado por el bíblico Libro de Reyes,
causando diversos aparentes milagros adicionales.
El doctor Velikovsky fue amigo tanto de
Sigmund Freud como de Albert
Einstein, y evidentemente esperaba que su nombre estuviera un día
junto al de aquéllos.
Pero él fue decepcionado:
aunque "Mundos en
Colisión" fuera primero publicado por los respetados editores
académicos Macmillan de Nueva York, no sólo los escritores
científicos denunciaron a dicho libro, sino que las universidades
amenazaron con boicotear la lista entera de libros de Macmillan
mientras la obra de Velikovsky permaneciera en ella.
Entonces ellos
transfirieron los derechos a Doubleday, que no tenía un negocio de
libros de texto, y a pesar de toda la crítica el libro se vendió
bien durante décadas.
Aunque hubo objeciones absolutamente legítimas
a las teorías de Velikovsky por razones astronómicas, esa reacción
excesiva lleva a sospechar que sus oponentes estaban
inconscientemente conscientes de la oculta agenda religiosa del
libro, y era a eso a lo que se oponían.
En cierto modo, Velikovsky estaba firmemente dentro de la tradición
rabínica, que es que cualquier cosa y todo puede ser encontrado en
la Torá (Ley de Yahvé).
En el siglo XII, cuando la filosofía
aristotélica se hizo popular entre los judíos, los rabinos afirmaron
encontrarla toda ella en los escritos de ellos.
Aristóteles enseñó
que hay tres partes en el alma:
el alma animal, el alma racional, y
el alma divina...
Ahora bien, la palabra hebrea bíblica para "alma" es
nephesh, pero una o dos veces aparece ruach y neshamah, las cuales
palabras significan "viento" o "aliento" y son usadas en el sentido
de aliento de la vida.
(Génesis 2:7: "Y Yahvé formó a Adán del polvo
de la tierra, e insufló en sus fosas nasales el neshamah de la vida;
y Adán se hizo un nephesh viviente").
Entonces fue explicado que
nephesh era el alma animal, ruach el alma racional, y
neshamah el
alma divina.
Habiendo por tales medios descubierto todo el sistema
de Aristóteles dentro de sus libros sagrados, ellos declararon que
Aristóteles debió haber viajado a Jerusalén y haber aprendido de los
judíos.
La idea de
los Antiguos Astronautas fue considerada ya en 1919 por
Charles Fort en "El Libro de los Condenados".
También se convirtió
en un tema regular en la ciencia-ficción.
Especialmente, en
Noviembre de 1947 la serie Fantastic Stories publicó una historia
breve, "El Hijo del Sol" (Son of the Sun), en la forma de un mensaje
de un extraterrestre, que le dice a la raza humana que las naves
ahora vistas en los cielos (eso fue unos pocos meses después del
comienzo de la primera oleada de platillos voladores) han visitado
la Tierra hace mucho:
sus tripulantes fueron antiguamente
confundidos con dioses.
Ellos dejaron "ciertas señales" en Egipto y
en otras partes.
El autor de esa historia, que firmó como "Alexander
Blade", era nada menos que Brinsley Le Poer Trench, posterior autor
de una serie de libros sobre el tema, desde "The Sky People" (1960)
en adelante.
El primer tratamiento sustancial fue hecho por Desmond Leslie y
George Adamski en "Los Platillos Voladores Han Aterrizado" (Flying
Saucers Have Landed), que apareció tres años después de "Mundos en
Colisión".
Después de alguna descripción de OVNIs modernos, Leslie
repentinamente salta a miles de años atrás a la Atlántida.
En aquel
tiempo la gente volaba en máquinas llamadas
Vimanas, de las cuales
fue escrito:
"...su superficie exterior era aparentemente continua y
absolutamente lisa, y brillaban en la oscuridad como si estuvieran
cubiertas de pintura luminosa".
(Leslie, p. 81, citando a W. Scott
Elliott, The Story of Atlantis)
Ésos no fueron los platillos voladores más tempranos.
De hecho, la
vida humana fue primero traída a la Tierra desde Venus por los
Señores de la Llama, acerca de los cuales Leslie citó de las "Stanzas
de Dzyan":
"Los Señores de la Llama se levantaron y se prepararon (...) el
Gran Señor de la Cuarta Esfera (la Tierra) esperó su acercamiento.
La inferior (Tierra) estaba preparada. La superior (Venus) fue
descartada...".
Su llegada fue descrita así:
"Entonces con el
poderoso y fuerte rugido del rápido descenso desde alturas
incalculables, rodeada de masas ardientes de fuego que llenaban el
cielo con punzantes lenguas de llama, la nave de los Señores de la
Llama apareció a través de los espacios aéreos.
Ella se detuvo sobre
la Isla Blanca que está en el Mar de Gobi. Verde era, y radiante con
los primeros florecimientos, cuando la Tierra ofreció su más bella y
mejor bienvenida a su Rey".
(Leslie, p. 166, citando a Besant y
Leadbeater, Man: How, Whence and Whither)
Leslie comentó:
"En este fragmento tenemos la primera descripción
del aterrizaje de una
gran nave espacial o platillo volador (...)
Increíble como parece, no puede haber ningún otro significado en
este pasaje".
Él dató ese aterrizaje como del año 18.617.841 a.C.
En vista de las sensacionales conclusiones, uno podría preguntar
cuán confiables son las fuentes. Esa pregunta no pareció ocurrírsele
a Leslie.
Sus autoridades principales son dichas Stanzas de Dzyan,
junto con los escritos de,
-
Annie Besant
-
Charles Leadbeater
-
W. Scott
Elliott
-
Alice Bailey
Las Stanzas de Dzyan fueron primero
publicadas en "La Doctrina Secreta" de Helena P. Blavatsky,
introducidas con la descripción:
"Un manuscrito arcaico
- una
colección de hojas de palma hechas impermeables al agua, el fuego y
el aire, mediante algún proceso específico y desconocido - está ante
el ojo de la escritora".
Lamentablemente, ese libro no parece haber sido visto por el ojo de
nadie más, y la propia Helena Blavatsky probablemente sólo lo vio
con la visión clarividente.
Se puede objetar por lo tanto
razonablemente que es una materia de fe, más bien que de registro
histórico, aceptar su relato de los Señores de la Llama.
Además, la
información dada por Besant, Leadbeater, Scott Elliott y Bailey fue
también obtenida por la investigación psíquica. (La fecha 18.617.841
estaba "de acuerdo con las Tablas Brahmánicas").
"Tan pronto como abandonamos nuestra propia razón, y estamos
contentos con confiar en una autoridad, no hay ningún final a
nuestros problemas.
La autoridad de quién:
¿del Antiguo Testamento,
del Nuevo Testamento, del Corán?
En la práctica, las personas eligen
el libro considerado sagrado por la comunidad en la cual ellas
nacen, y de aquel libro ellas eligen las partes que les gustan,
ignorando las demás...
Ningún católico, por ejemplo, toma en serio
el texto que dice que un obispo debería ser marido de una sola
esposa".
Bertrand Russell, Unpopular Essays, 1950, p. 108
Ahora bien, las autoridades principales de Leslie eran escritores
teosóficos, y aunque la Sociedad Teosófica pudiera negarlo, la
Teosofía es en efecto una religión, con los escritos de Blavatsky,
Besant y Cía. como sus escrituras.
Desmond Leslie era evidentemente
un teósofo, y él estaba simplemente actualizando su religión
victoriana para que abarcara el nuevo fenómeno de los platillos
voladores.
Para ser justos, él fue capaz también de citar algunos libros
incuestionablemente antiguos, principalmente el
Mahabharata, que
menciona naves voladoras y armamentos letales como el "Arma de
Brahma" descrita en términos comparables a
una bomba atómica.
Sin
embargo, el Mahabharata es un libro sagrado para los hindúes.
Hace
algunos años encontré a un gurú indio que iba camino a California.
Él dijo que su casa original era una cueva en el Himalaya, que
estaba equipada con su propio televisor.
Él explicó que ellos tenían
que conseguir uno a fin de ver la dramatización del Mahabharata, ya
que era un deber religioso mirarla.
Para la mayoría de los occidentales, por supuesto,
religión
significa el cristianismo, y escritura, la Biblia...
La aparición en
1956 de "UFO and the Bible" de
Morris K. Jessup era esperada desde
hace tiempo.
Él comenzó diciendo:
"Escasamente transcurre una semana
sin que algún lector despierto me envíe sugerencias de que yo
debiera dar más detalles acerca de las referencias bíblicas a OVNIs
y fenómenos relacionados de un supuesto tipo milagroso".
Jessup comenzó desde la siguiente posición:
"Creo que es tiempo de
que la Iglesia y la Ciencia entierren sus respectivos tomahawks
[hachas de guerra] y que se encienda la pipa de la paz intelectual,
y que ambos partidos se relajen alrededor de la fogata de la
investigación tolerante y objetiva".
Como un ejemplo de la
reconciliación de estos dos lados, considere 2 Reyes 2:11:
"Y
sucedió que cuando ellos todavía iban caminando y hablando, apareció
un carro de fuego, con caballos de fuego, que los separó a uno del
otro, y Elías ascendió por un torbellino hacia el cielo".
Jessup
citó a un "experto y profundo estudioso de la Biblia", un tal
H.
Lawrence Crowell, como diciendo que,
"las palabras arameas
ruach
cearah deberían ser traducidas como "estallido de energía" en vez de
"torbellino".
Él pudo de esa manera ofrecer una nueva versión:
Mientras ellos caminaban y hablaban, de repente apareció un
brillante OVNI, emitiendo chispas y estallidos eléctricos, y los
separó:
"Elías fue arrebatado hacia el cielo con una descarga de
energía".
Habiendo dado una vez
con este principio de interpretación, otros milagros son
fácilmente explicados. Considerando pasajes tales como:
"Y he aquí que la
montaña estaba llena de caballos y carros de fuego cerca de
Eliseo" (2 Reyes 6:17), y "montó sobre un querubín, y voló:
sí, él voló sobre las alas del viento".
(Salmo 18:10)
Jessup comentó: .
"Ya no podemos permitirnos
reírnos de estas referencias como simplemente pintorescas y
alegóricas, ya que ellas comienzan cada vez más a sonar como
descripciones exactas de OVNIs".
El punto de partida de "El Misterio de Sirio" (The Sirius Mystery,
1976) de Robert Temple fueron
los Dogones, una tribu sudanesa que
los antropólogos franceses descubrieron que tenían tradiciones
acerca de haber sido visitados por seres de Sirio, y de una criatura
anfibia que, según Temple, dio información a los Dogones acerca del
Sistema Solar.
Temple reprodujo sus conclusiones, y luego trató de demostrar que la
misma información era conocida por los sacerdotes egipcios antiguos
como una tradición secreta, y más tarde por varios filósofos griegos
que eran iniciados en sus misterios.
Por supuesto esas tradiciones
nunca fueron escritas, y Temple tuvo que conjeturarlas a partir de
pistas dispersas.
Sus principales autoridades eran,
-
"Los Dioses de
los Egipcios" de Wallis Budge
-
las epopeyas mesopotámicas
-
los
libros Herméticos
-
"Los Mitos Griegos" de Robert Graves
-
"Acerca de
Isis y Osiris" de Plutarco
-
los neo-platónicos...
Todos éstos son
escritos sagrados de los Paganos, o resúmenes modernos de tales.
En
una conjetura, uno consideraría al propio Robert Temple como un
pagano, en particular ya que él ignora totalmente la Biblia, y su
única referencia al cristianismo es ésta:
Las perversiones del
cristianismo siempre me ha parecido que incorporan una perversión de
la noción de "pecado" y de los medios por los cuales el "pecado"
puede ser explotado como un medio de chantaje temporal sobre otros
seres humanos.
Más Allá de la Creencia
Pertinente aquí es el furor creado por "Honest to God" (1963),
escrito por el obispo de Woolwich, John A. T. Robinson, que propuso
una moderada revolución en teología.
Él comenzó preguntando si tenía
sentido hablar de un Dios "allá arriba" en un universo copernicano.
Aunque su argumento no fue presentado claramente, él llegó a
proponer desplazar el "supra-naturalismo" con la religión
"naturalista".
Eso significaba deshacerse de milagros y similares,
que en la época científica habían llegado a ser considerados como un
impedimento para la fe, aunque él no estaba seguro de con qué
deberían ser reemplazados ellos.
La primera impresión original de "Honest to God" fue de 6.000
copias, pero antes del final del año más de 350.000 habían sido
vendidas, mostrando que las cuestiones que planteaba ya habían
inquietado a muchas personas.
Inevitablemente hubo controversia y
llamados a la dimisión del obispo, pero es significativo que los
críticos no estuvieron de acuerdo entre sí.
Un hombre le escribió:
Tengo, y muchos miles tienen, una imagen de
Dios en el cielo. Los clérigos siempre han hablado de Dios como
estando allá arriba, pero ahora están contradiciendo todo lo que
ellos han dicho. (...)
Estas nuevas creencias dañarán a los
cristianos en creer que hay un Dios, y podría ser que la Iglesia en
general se acabe.
Las palabras del Credo no significarán nada. De
repente es como decirle a un joven que cree incondicionalmente en
Santa Claus: "No hay ningún Santa Claus, es tu papá".
El mundo
entero colapsaría bajo esas nuevas creencias.
(Esta cita y otros
comentarios son del The Honest to God Debate, 1963).
Clive S. Lewis,
por contraste, pensó que el obispo estaba haciendo ruido sobre nada:
"Hemos abandonado hace mucho tiempo la creencia en un
Dios que se
sienta en un trono en un cielo localizado".
Las voces de alabanza fueron mucho más comunes:
la esposa de un
vicario dijo al obispo que él había,
"hecho a la Iglesia parecer viva
otra vez, cuando durante años ha parecido tan insoportablemente
muerta".
Cartas expresando acuerdo llegaron de sacerdotes, teólogos,
médicos, directores de colegios y hombres de negocios.
"Un político
famoso" escribió:
"Leyéndolo, y oyéndolo hablar de ello, ha hecho
más para hacer que la validez básica del mensaje cristiano me
parezca relevante que todos los sermones y servicios que yo haya
oído alguna vez o a los que he asistido".
Hasta el debate acerca de la ordenación de mujeres, este asunto fue
la controversia religiosa más grande que la Iglesia de Inglaterra
había visto este siglo.
Esto sugiere que, hablando en general, los
británicos se sentían incapaces de creer en un consolador Dios
Padre
"allá arriba", tal como ellos no podían creer en Papá Noel.
Sin
embargo, ellos no se volvieron simplemente al ateísmo (como la
mayoría de los materialistas esperaban que ellos hicieran) sino que
sintieron la necesidad de alguna nueva clase de religión o creencia,
algo con lo cual sustituir al viejo Dios sobrenatural...
El obispo Robinson comentó que él nunca había experimentado "nacer
otra vez" (Honest to God, p. 27). Desde entonces, el desarrollo más
notable dentro de la Iglesia ha sido la aparición del Cristianismo
"Renacido".
Un ex "renacido" me dice que es absolutamente justo
decir que a los cristianos "nacidos de nuevo" se les enseña a
no
pensar, y deben confiar, en cambio, en la autoridad de la Biblia y
en la inspiración del Espíritu Santo.
Para esa creciente sección de
la Iglesia no puede haber ningún conflicto entre ciencia y religión,
ya que ellos no piensan en tal cuestión.
Pero para el resto del "Cuerpo de Cristo" el problema ha
permanecido, y las iglesias convencionales, no nacidas-de-nuevo, han
seguido disminuyendo.
Y de esa manera, los Dioses del Espacio han
sido capaces de manifestarse para ayudar a llenar el vacío dejado
por la salida de Dios el Padre de su trono en el cielo.
El Retorno de los Dioses
Unos años más tarde, en 1968, apareció el más exitoso de los libros
acerca de los Antiguos Astronautas, "Recuerdos del Futuro" (Erinnerungen
an die Zukunft) de Erich von Däniken.
La primera cosa con la que se
encontraría cualquiera que esté familiarizado con tal literatura es
con la carencia de originalidad de ese libro.
A pesar de las
continuas referencias del autor a sus supuestas teorías propias,
casi todo en su libro había sido comentado ya por,
-
Desmond Leslie
-
Robert Charroux
-
Pauwels y Bergier
-
W. Raymond Drake,
...y otros.
En
efecto, las citas de Von Däniken del Ramayana y del Mahabharata
simplemente están tomadas de "Flying Saucers Have Landed" (él
tradujo las interpretaciones del inglés del siglo XIX al alemán, de
donde Michael Heron - traductor del libro al inglés - volvió a
traducirlas al inglés, de modo que las versiones en "Recuerdos del
Futuro" han sido traducidas tres veces).
Del mismo modo, cuando Von Däniken escribió:
"Vista desde el aire,
la impresión neta que la llanura de 60 kilómetros de largo de Nazca
hizo en mí, fue la de un campo de aviación" (p. 32),
...en él influyó
muy probablemente "El Retorno de los Brujos" (Le Matin des Magiciens)
de Louis Pauwels y Jacques Bergier (1960):
"Las fotografías tomadas
de la llanura de Nazca le recuerdan a uno irresistiblemente la
iluminación de tierra de un campo de aviación".
Sería tedioso
analizar el libro entero de esta manera, pero casi todo había sido
dicho antes.
Entonces,
¿por qué ese libro vendió enormemente más que sus predesores?
Parte de la razón es sin duda que,
Von Däniken escribió
en un estilo fluido y popular (más de lo que uno puede decir del
autor promedio de libros de OVNIs), él parecía ser científico
(aunque sólo superficialmente), y él realmente se había molestado en
visitar muchos de los sitios acerca de los cuales escribió...
A diferencia de Desmond Leslie y muchos de los demás, su tratamiento
era simple y no místico.
Los lectores de "The Sky People" de
Brinsley Le Poer Trench, por ejemplo, podrían haber sido capaces de
entender,
-
el Jardín de Edén (un experimento galáctico de hibridación
realizado en Marte)
-
la Atlántida
-
Osiris e Isis
-
Abraham
-
el
folklore de los Pieles Rojas
-
Sodoma (destruida por armas
nucleares)
-
las tectitas
-
Jericó
-
la explosión siberiana de 1908
-
la estrella de Belén,
...pero tal vez se hizo demasiado confuso cuando,
él añadió a Helena Blavatsky, kundalini, gnosticismo, naturaleza
etérica, médiums, el significado de la cruz, poderes telepáticos, y
el "viaje de vuelta a la divinidad"...
Quizá la causa principal era simplemente que Von Däniken publicó en
el momento y lugar apropiados para influir en aquellos que, como los
lectores desafectos de "Honest to God", querían un Dios
no-sobrenatural "allá arriba".
Por ejemplo, Darwin había dejado
incómodos a los cristianos con respecto al Génesis, y el obispo
Robinson apenas se molestó en defenderlo:
"Hace cien años la Iglesia fue obligada a clarificar si aceptaba la
historia de Adán como historia o como mito.
Hasta entonces había
habido muchos teólogos (Pablo probablemente entre ellos) que, de ser
presionados, no habrían pensado que la verdad de la historia
dependía de que Adán fuera un individuo histórico real.
Pero el caso
es que ellos no fueron presionados. No había ninguna necesidad
apremiante de distinguir entre las categorías de historia y mito.
Pero con la controversia darwiniana sobre la evolución aquello se
hizo una necesidad vital.
Era imperativo para la apologética
cristiana dejar claro que el Génesis no era un relato rival de la
antropología primitiva.
Si no hubiera sido hecha la distinción,
habría sido prácticamente imposible seguir recomendando la fe
bíblica al hombre científico moderno".
El propio obispo se decidió por el mito en cuanto a
Adán y Eva como
metáforas para el hombre y la mujer corrientes, quienes están
siempre sujetos a la tentación (la Serpiente).
"Remóntese tan lejos
como usted desee, la naturaleza humana siempre ha sido como eso. Por
eso en el mito ellos son puestos al principio".
(John A. T. Robinson, But That I Can't Believe!, 1967)
¡Cuánto más felices son aquellos que pueden tomar un mito como la
verdad absoluta!
Los nacidos-de-nuevo, como siempre, se adhieren a
la Biblia en esta cuestión. Muchos de ellos suponen que el mundo fue
creado en 4.000 a.C., y de ahí que el determinar fechas de acuerdo
al método radiactivo esté totalmente equivocado, que los dinosaurios
y el hombre de Neanderthal nunca existieron, y que Darwin esté
condenado al infierno.
Algunos incluso sugieren que Dios creó
fósiles, cuando fueron encontrados, con la intención de engañar ("A
causa de esto, Dios les enviará una operación de engaño para que
crean en la falsedad", 2 Tes. 2:11) a fin de probar la fe de los
cristianos en las escrituras.
"Return to the Stars" (1968) de Von Däniken ofreció, nuevamente, una
reconciliación entre escritura y ciencia:
consideró el Jardín de
Edén como un registro exacto, no de los hechos de un Señor Dios
sobrenatural sino de la manipulación genética por medio de la cual
cosmonautas desconocidos crearon al homo sapiens a partir de
hombres-mono.
Incluso a versículos extravagantes se les podría dar
credibilidad:
"Hizo, pues,
Yahvé Elohim caer sobre Adán un
profundo
sopor, y, dormido, tomó una de sus costillas, cerrando en su lugar
la carne, y de la costilla que de Adán tomara, formó Yahvé Dios a la
mujer, y se la presentó a Adán".
(Gén. 2:21-22)
Von Däniken:
"Eva
debe haber sido producida en un matraz.
Ahora bien, varios dibujos
rupestres que muestran objetos como matraces en los alrededores del
hombre primitivo han sido conservados.
¿Pudieron las inteligencias
alienígenas, con una ciencia muy desarrollada y sabiendo acerca de
las reacciones biológicas inmunes de los huesos, haber usado la
médula de Adán como un cultivo celular y llevado el esperma al
desarrollo allí?".
Así Dice en la Biblia
Milagros aparte, la exactitud de
la Biblia ha sido una materia de
disputa desde el siglo XVIII; hasta entonces, aparentemente nunca se
le había ocurrido a nadie dudar de ella.
Thomas Paine, el
autor de "La Edad de la Razón" (The Age of Reason, publicado en tres partes
entre 1794 y 1807), se opuso a la Biblia a causa de que ella a
menudo representa a Dios como un tirano enloquecido.
Él respaldó eso
con argumentos críticos contra la supuesta perfección textual de la
Biblia:
el Libro de Reyes ("poco más que una historia de asesinatos,
traición, y guerras") realmente se contradice a sí mismo: en cuanto
a los reyes de Judá e Israel, que fueron ambos llamados Joram,
"un
capítulo (2 Reyes 1:8) dice que Joram de Judá comenzó a reinar en el
segundo año de Joram de Israel; y el otro capítulo (8:16) dice que
Joram de Israel comenzó a reinar en el quinto año de Joram de Judá".
Tales errores son suficientes para refutar la vieja opinión de que
todo ello es la palabra de Dios, dictada por el Espíritu Santo a
escribas incapaces siquiera del error clerical corriente.
La
respuesta de los cristianos renacidos es que no es posible entender
la Biblia correctamente a menos que usted nazca de nuevo en Jesús:
cualquiera que pone objeciones como las referidas, dicen ellos, está
todavía bajo la influencia de Satán...
Los escritores de OVNIs están divididos en la cuestión.
Unos, como
Dione, la consideran como totalmente exacta, y simplemente tiene
necesidad de una interpretación científica.
Por contraste, el libro
"Gods and Spacemen in the Ancient East" (1968) de W. Raymond Drake,
aunque feliz con "La Doctrina Secreta", los romances sánscritos,
-
"Oahspe"
(libro producido en 1882 mediante mecanografía automática por el
dentista John Newbrough de Nueva York)
-
los Libros de los Muertos
egipcio y tibetano
-
las revelaciones de
Aetherius por medio del
doctor
George King,
...tenía dudas sobre el valor histórico de la
Biblia:
"Los egiptólogos, los asiriólogos, los arqueólogos de renombre, los
hombres de ciencia, que deberían conocer los hechos, no encuentran
en absoluto ninguna evidencia del Éxodo (...) ningún texto egipcio
se refiere a la milagrosa liberación mencionada en la Biblia (...)
el Libro del Éxodo no es un registro crítico de hechos y
acontecimientos, de Historia como la escribimos hoy (...) con todo
el debido respeto al sabio Moisés, esa mezcolanza de narrativa
religiosa en tal estilo hinchado no le hace justicia a su gran
mente; es dudoso si su mérito literario atraería a algún editor hoy".
(pp. 157-158)
Esa actitud es comprensible:
cualquiera que intenta una revolución
en el pensamiento tenderá a desafiar los estándares aceptados con
los que fue criado, y si ellos incluyen que la Biblia es verdadera,
el pensador independiente crece para cuestionar aquello.
Si la
literatura oriental antigua y las modernas obras inspirativas no
fueron mencionadas en la infancia, entonces no existe el mismo
motivo para dudar de ellas.
Como fuere, los textos en los que él se basó eran obras en su mayor
parte religiosas de una clase u otra. Lo mismo es verdadero de
Robert Charroux.
La tapa de la edición francesa original de su texto
"Le Livre des Secrets Trahis" (1965) asegura que se basa en
"documentos más viejos que la Biblia".
El
Libro de Enoc trata de los
"ángeles caídos", que descendieron a la Tierra, se casaron con
mujeres humanas, y enseñaron diversas artes y ciencias:
-
eso indica
"una colonización de nuestro mundo por cosmonautas" (p. 127)
-
la
erudición convencional, sin embargo, atribuye la fecha de
composición de ese libro al período inter-testamentario
El Inca
Garcilaso de la Vega relata que una mujer llamada Orejona bajó a la
tierra desde Venus, y dio a luz a una raza humana apareándose con un
tapir.
Charroux aparentemente aceptó eso porque estaba en un libro
que él supuso "más antiguo que la Biblia".
Verdad del Evangelio
Sobre el asunto del Nacimiento Virginal, el obispo Robinson resumió
la posición de los escépticos modernos así:
"Pero usted realmente no
puede creer aquella parte, ¿verdad?
¿Estrellas que se mueven sobre
pesebres, coros angelicales que iluminan los cielos, Dios que viene
a la Tierra como un hombre, como un visitante del espacio exterior?
Usted realmente no podría creerlo hoy".
(But That I Can't Believe! p.
27)
La respuesta del obispo fue vaga, sugiriendo que la estrella y los
ángeles y la madre Virgen eran "poesía", un modo de decir que "Dios
está en todo eso".
Sin embargo, él sin querer sugirió la nueva
solución de "un visitante del espacio exterior", que sería tan
entusiastamente adoptada por algunos.
"El único objeto celeste que aparece de repente bastante cercano a
la Tierra para ser visible sólo dentro de un pequeño radio, que se
mueve guiando a seguidores, y que luego se está quieto, es una nave
espacial controlada de manera inteligente".
(W. Raymond Drake, Gods
and Spacemen throughout History, 1977, p. 184)
"La llegada del
niño Cristo a la Tierra desde una nave espacial es
menos fantástica, más creíble, lógica y aceptable, que el dogma
etéreo enseñado por la Iglesia cristiana".
(Robin Collyns, Did
Spacemen Colonise the Earth?, 1975, p, 163)
Hacia 1976 W. Raymond Drake pudo declarar:
"Hoy las únicas personas
preparadas para aceptar aquellas maravillas del Nuevo Testamento
como literalmente verdaderas parecen ser nuestros creyentes en los
Platillos Voladores".
(Gods and Spacemen in Ancient Israel, p. 11)
La cuestión de la resurrección es complicada incluso para los
escritores del tema OVNI, pero eso no desalentó a Paul Thomas (Flying
Saucers Through the Ages, 1965; edición francesa, 1962).
Thomas era
realmente Paul Misraki, un conocido músico popular francés, que era
un católico, y al igual que Dione, dedicó un capítulo a Fátima.
Sin
embargo, su interpretación del regreso de Jesús desde los muertos no
habría sido recomendada a la Congregación para la Doctrina de la Fe.
Él sugirió que Jesucristo era una "mutación biológica" producida por
la experimentación genética alienígena...
De hecho, el interés de los
Ángeles Astronautas por los Hijos de Israel, desde el tiempo de
Abraham, era en tanto constituía un fondo de genes para criar el
primer espécimen de la siguiente fase de la evolución:
humanos que
podían morir y luego naturalmente volver a la vida, como fue
demostrado después de la crucifixión.
Si eso fuese verdadero, uno esperaría que Jesús hubiera sido animado
a tener tantos descendientes como le fuera posible:
pero, como
Thomas/Misraki admite, él dejó el mundo sin haber tenido hijos.
Entonces parece que por alguna razón
los alienígenas decidieron
esperar antes de hacer generalmente disponibles los beneficios de la
inmortalidad...
La Vida por Venir
El otro rasgo clave de una religión es su enseñanza acerca del
futuro, en el cual, casi siempre,
los males presentes deben ser
corregidos de algún modo.
O hay una vida después de la muerte en la
cual se darán recompensas y castigos, o habrán futuras vidas
asignadas sobre la base del comportamiento pasado, o si no, debe
haber una Segunda Venida, en la cual el Reino Divino será traído a
la Tierra, y (después de que los malos hayan sido lanzados en el
foso llameante que arde para siempre) la paz universal y la
felicidad reinarán por la eternidad.
Una de las profecías más
conocidas a este efecto es la de Marcos 13:26-27:
"Y entonces ellos
verán al Hijo del Hombre viniendo entre nubes con gran potencia y
gloria.
Y luego él enviará a sus ángeles, y reunirá a sus elegidos
desde los cuatro vientos, desde el extremo de la tierra al extremo
del cielo".
Morris K. Jessup produjo su propia versión:
"¿Lo parafrasearemos un poco?
La gran brillante y poderosa nave
madre aparecerá entre las nubes, y el Maestro enviará a sus
ayudantes en naves más pequeñas, y juntará de todas las partes de la
Tierra a aquellos que hayan sobrevivido a lo peor del cataclismo y
hayan alcanzado sitios temporales de seguridad, y en particular a
aquellos que la Raza Pastora considere convenientes para la
propagación y resurgimiento de la Humanidad en una nueva generación
racial, y ésos serán tomados para vivir un rato en las regiones
celestiales donde están los hogares de los OVNIs en el espacio.
No
hay mucho más para decir, ¿o lo hay?".
Algunas personas concluirían de todo esto que no hay ninguna razón
para creer en Dioses o Astronautas...
Realmente todo lo que demuestra
es que la gente tiene una necesidad muy fuerte de
alguna especie de
religión, y si una les es arrebatada ellos se apresurarán para
localizar otra.
Incluso los laicistas más severos admitirían que el
credo de los Dioses Astronautas es inocuo, según van las religiones:
no se espera que los creyentes obedezcan cada orden de un clero, o
que quemen a herejes en la hoguera.
La ciencia podría ser
capaz un día de proporcionar una explicación verificable del impulso
religioso.
Hasta entonces, la
frontera entre ciencia y religión debe permanecer como un territorio
incierto y disputado...
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