Las Religiones Inconformistas (Maverik)
El movimiento Religioso INCONFORMISTA de India fue un importante
evento histórico. Atrajo a millones de adherentes y tenía un fuerte
efecto civilizador en Asia. El movimiento provocó la creación de los
llamados “Seis Sistemas de Salvación.” Éstos eran seis diferentes
métodos, desarrollados en tiempos diferentes, para lograr la
salvación espiritual.
Quizás el más significativo de los Seis Sistemas, debido a sus
similitudes con el Budismo, era el sistema conocido como ”Samkhya.”
La palabra “Samkhya” significa “razón.” El origen preciso de las
enseñanzas Samkhya es desconocido. Normalmente se le atribuyen a un
hombre conocido como Kapila. Quien era Kapila, de donde vino, y
exactamente cuando vivió es todavía un temas de especulación.
Algunas personas colocan a Kapila alrededor de 550 A.C., durante la
vida de Buda.
Otros creen que Kapila puede haber vivido antes. Algunas personas
alegan que no existió en absoluto, debido a la extraordinaria
mitología que se levantó alrededor de él. Quienquiera que haya sido
Kapila, o no haya sido, algunas de las enseñanzas atribuidas a él
pusieron el fundamento importante para las filosofías inconformistas
más tarde. Por ejemplo, el sistema Samkhya enseñó correctamente
que había dos entidades básicas contrastantes en el universo: el
alma (espíritu) y la materia.
Además enseñó: Las almas son infinitas en número y consisten de
inteligencia pura. Cada alma es independiente, indivisible [no puede
desmontarse], no condicionada, incapaz de cambio [alteración],
inmortal. Sin embargo parece estar ligada a la materia.
*
*
El sentido común nos dice que habría un
límite de cuántas almas existieron. “Infinito” puede significar un
número tan grande para ser incontable.
Samkhya enseña que cada persona es tal alma, y que cada alma ha
participado en la creación y/o perpetuación de los elementos
primarios que constituyen el universo material. Las almas crearon
los sentidos con los cuales se perciben esos elementos. Las
personas, por consiguiente, solo se tenían a sí mismas, no a un
“Dios” o Ser Supremo, para aplaudir (o culpar, dependiendo en la
perspectiva de uno) por la existencia de este universo y para todo
lo bueno y malo dentro de él. La liberación del alma de la
cautividad en la materia, según el Samkhya, ocurre a través del
conocimiento.
El escritor Sir Charles Eliot describe la creencia de Samkhya de
esta manera:
Sufrir es el resultado de almas que están en esclavitud de la
materia, pero esta esclavitud no afecta la naturaleza del alma y en
un sentido no es real, porque cuando las almas adquieren el
conocimiento discriminativo y ven que ellos no son materia, entonces
cesa la esclavitud y ellos logran la paz eterna. 2
Varias preguntas
surgen de estas enseñanzas de Samkhya. Primero, ¿cómo pudieron todos
los seres espirituales ayudar a crear el universo? Un atisbo a un
libro de físicas nos dice que el universo es un asunto enormemente
complejo. Ni siquiera el gran científico Albert Einstein tenía todo
deducido. ¿Cómo es posible, entonces, que todos nosotros “menos
mortales”, incluyendo los ebrios que duermen su resaca en las
callejas del centro de la ciudad, podrían tener alguna vez que ver
con la creación de este mundo? La respuesta puede estar en el hecho
de que la materia se construye con simple aritmética y es mucho
menos sólida de lo que parece.
El ladrillo básico de la materia física es el átomo. Un átomo está
compuesto tres componentes principales: “protones,” “neutrones,” y “electrones.”
Se unen los Protones y los neutrones para formar el núcleo (centro)
del átomo. Los electrones orbitan a tremendas velocidades alrededor
del núcleo, y por eso forman la “cáscara” del átomo. El arreglo
entero se sostiene unido por la fuerza electromagnética.
¿Qué hace un tipo de átomo diferente de otro? Nada más que el número
de electrones y protones. Por ejemplo, el hidrógeno tiene sólo un
electrón y un protón. Agregue un electrón y un protón más a un átomo
de hidrógeno y, vea!, ahora usted tiene helio. Agregue 77 electrones
y protones más, junto con una generosa ayuda de neutrones, y
repentinamente usted tiene oro. Quítele algunos para conseguir
cobalto y luego agregue un poco más para formar zinc. ¡Hay 105
elementos básicos, cada uno existiendo simplemente porque tienen un
diferente número de electrones y protones!
Como podemos ver, la materia física se construye sobre simple
aritmética que cualquiera puede hacer. La razón por la cual este
arreglo parece funcionar es que la suma y la sustracción de
electrones y protones causa un cambio en la energía creada por el
átomo. Puesto que la materia es solamente energía condensada, un
cambio en la energía de un átomo a través de esta simple aritmética
causa un cambio en la sustancia física que produce el átomo. El
universo sólo se vuelve complicado después de que las sustancias
empiezan a interactuar.
Otro punto es que la materia física es mucho menos sólida, y mucho
más efímera de lo que parece. Los átomos consisten casi
completamente en espacio vacío. Si el núcleo de un átomo de
hidrógeno fuera agrandado al tamaño de un mármol, su único electrón
estaría ¡a un cuarto de milla de distancia! El átomo más pesado con
más neutrones, protones y electrones es el uranio, con 92 electrones.
¡Si un átomo de uranio fuera agrandado a una media-milla en el
diámetro, el núcleo no sería más grande que un a pelota de béisbol!
Esto revela que los átomos están casi completamente compuestos de
espacio vacío y esa materia, incluso el granito más pesado, es, por
consiguiente, sorprendentemente efímero. Nuestras percepciones
físicas no detectan la naturaleza casi ilusoria de la materia,
porque los sentidos físicos están construidos para aceptar la
ilusión de solidez causada por el movimiento sumamente rápido de
partículas atómicas. (Mueva algo de un lado a otro, o déle vueltas y
vueltas, lo suficiente y parecerá sólido.) Si nosotros pudiéramos
ver la materia por lo que es de verdad, veríamos el objeto más
sólido como un pedazo de pelusa espigada.
Al pasar el tiempo, se agregaron muchos principios incorrectos a las
enseñanzas básicas de
Samkhya, causando eventualmente el decaimiento
del sistema Samkhya. Los otros sistemas inconformistas (Maverik)
sufrieron el mismo destino. En el sistema de “Yoga,” por ejemplo,
las personas regresaron a la idolatría de “Dios” como parte de su
camino a la libertad espiritual. En otro de los Seis Sistemas, “Mimamsa,”
fue hecho un esfuerzo por mantener los credos arios e incorporarlos
en los nuevos principios inconformistas (Maverick). Esto no funcionó
porque uno no puede mezclar doctrinas apuntadas a dar fuerza a la
rígida obediencia, con enseñanzas diseñadas para la libertad
espiritual y esperar lograr lo último. Para tener éxito, el
verdadero conocimiento espiritual parece requerir la misma precisión
exigida de cualquier otra ciencia. Diluir el conocimiento espiritual
exitoso con enseñanzas erróneas destruirá esa precisión.
El movimiento inconformista (Maverik) hindú eventualmente vino cada
vez más a una inevitable parada cuando cada vez más ideas arias que
se buscaba reemplazar se incorporaron de regreso al movimiento. Al
mismo tiempo, muchas enseñanzas inconformistas (Maverik) fueron
sacadas del contexto y absorbidas en la religión hindú. El resultado
ha sido desde entonces un desesperado revoltijo espiritual en la
India.
Antes de su último decaimiento, el movimiento inconformista (Maverik)
hindú provocó una de las más grandes y única religión, en su género,
en la historia: El Budismo. Fundado alrededor del año 525 A.C. por
un príncipe hindú llamado Gautama Siddharta (quien más tarde llegó a
ser conocido como el “Buda,” o “El Iluminado”). El Budismo se
extendió rápidamente a lo largo del lejano Oriente. Como el sistema
de Samkhya, el Budismo, en su forma original, no rindió culto a los
Dioses Védicos. Se opuso al sistema de castas y no apoyó las
doctrinas Brahmánicas (hindúes avanzadas).
Al contrario de muchos
budistas modernos, los tempranos budistas no le rindieron culto a
Buda como Dios; en cambio, ellos lo respetaron como un pensador que
había diseñado un método por el cual un individuo, a través de sus
propios esfuerzos, podría lograr la libertad espiritual por vía del
conocimiento y ejercicios espirituales. Es difícil determinar cómo
los tempranos budistas exitosos realmente estaban en cuanto a lograr
sus objetivos, aunque Siddharta exigió haber logrado personalmente
un estado de liberación espiritual.
El Budismo, como los otros sistemas inconformistas (Maverik), sufría
mucho cambio, división y deterioro en el transcurso de los siglos.
Esto causó la pérdida de la mayoría de las verdaderas enseñanzas de
Siddharta. Además, muchas enseñanzas y prácticas no creadas por Buda
fueron agregadas más tarde a su religión y etiquetadas “Budismo.” Un
buen ejemplo bueno de este decaimiento se encuentra en la definición
del “nirvana.”
La palabra “nirvana” originalmente se refería a ese estado de
existencia en que el espíritu ha logrado pleno conocimiento de sí
mismo como un ser espiritual y ya no experimenta sufrimiento debido
a una mala identificación con el universo material. “El nirvana” es
el estado que se esfuerza por alcanzar cada budista. “El nirvana”
también ha sido traducido como “Nada” o “Nulo”: conceptos que suenan
horrible, que han venido a implicar para muchas personas hoy que el
”nirvana” es un estado de no-existencia o que involucra una pérdida
de contacto con el universo físico. En verdad, la meta del
inconformista (Maverik) original era realmente lograr el estado
opuesto. El verdadero estado de “nirvana” de Buda incluía un sentido
más fuerte de existencia, auto-identidad aumentada, y una habilidad
para percibir el universo físico con más precisión.
Si comparamos la religión del inconformista (Maverik) con la
religión Custodial, descubrimos varias diferencias muy distintas por
las cuales una persona pueda distinguirlas. Un gráfico que compara
las filosofías claves por las cuales ellos difieren más fuertemente
podría verse así:
La Religión inconformista
(Maverik)
Se dice que es Fuente o
inspiración de enseñanzas identificables para un ser
humano. La creencia en un Ser Supremo es usualmente
tolerada, pero es una parte muy pequeña o inexistente de
la doctrina
Se pone el énfasis en el papel del ser espiritual
individual con relación al universo.
Se busca libertad espiritual e inmortalidad. Una
interminable existencia en el mismo cuerpo físico es
condenada como insignificante o indeseable.
Se sostiene que la observación y la razón son
fundaciones apropiadas para adherirse a una doctrina.
Los castigos físicos o coacción son bastante suaves o
inexistentes. El castigo más severo es usualmente la
exclusión formal de la organización religiosa de un
individuo.
Creencia que no hay ningún propósito espiritual oculto
en la existencia humana y que el proceso de la
muerte-amnesia-renacimiento causa decaimiento
espiritual.
La creencia que todas las personas son finalmente
responsables de haber creado sus propias condiciones en
la vida, buenas y malas, por acciones conocidas e
inacciones, y que todas las personas finalmente pueden
controlar sus propios destinos.
La creencia que todos tenemos algo que ver con la
creación y/o perpetuación del universo físico. El
sufrimiento humano, trabajo, y esclavitud son
enfermedades sociales que no tienen ningún propósito
constructivo y bloquean el camino de salvación
espiritual y libertad.
La recuperación espiritual y salvación dependen
completamente de que el individuo logre, a través de su
propio esfuerzo auto-motivado. |
La Religión custodial
Se dice que la fuente o
inspiración de enseñanzas es un Dios, ángel, o una
fuerza sobrenatural; no un ser humano.
La creencia en un solo Ser Supremo, o Dios, es una
piedra angular del principio de la fe. (En los tiempos
más tempranos, culto a muchos “Dioses" parecidos a
humanos).
La inmortalidad física es una meta importante o deseada
en muchas religiones Custodiales. Se enfatiza la
adhesión a la doctrina, basada en la fe o solo
obediencia.
Severos o fatales castigos físicos son, a veces
empleados o defendidos durante la historia de la
religión para tratar con no- creyentes o reincidentes.
La creencia que naciendo en un cuerpo humano, ya sea una
vez o muchas veces a través de la reencarnación, es
parte de un amplio plan espiritual que finalmente
beneficiará a cada ser humano.
Creencia que hay "fuerzas más altas," "Dioses” o
entidades sobrenaturales que controlan los destinos
colectivos o individuales de las personas. Los seres
humanos no tienen ningún control sobre esas fuerzas y
sólo pueden rendirse a ellos.
La creencia que un solo ser Supremo creó el universo
físico.
El sufrimiento humano, trabajo, y esclavitud son parte
de un plan espiritual más amplio que finalmente llevará
a la salvación y a la libertad a aquellos que
obedientemente lo soportan.
La recuperación espiritual y la salvación dependen
completamente de la gracia de "Dios" u otra entidad
sobrenatural.
|
Algunos lectores observarán que muchos elementos Custodiales e
inconformistas (Maverik) listados arriba están mezclados juntos en
algunas religiones. Un buen ejemplo de esto es el Hinduismo.
Normalmente se preparan tales mezclas cuando ideas inconformistas (Maverik)
son incorporadas a una religión Custodial, o cuando doctrinas
Custodiales son agregadas a enseñanzas inconformistas (Maverik).
Cuando sucede cualquiera de estos casos, los beneficios plenos de
las enseñanzas inconformistas están perdidos. Esto está
especialmente claro en el Budismo moderno, donde rituales, idolatría
y oraciones a Buda tienen casi completamente suplantado el sistema
práctico que Buda había intentado desarrollar.
Aunque el Budismo no libró a la raza humana, dejó la esperanza que
la libertad habría de llegar algún día. Según la leyenda budista,
Gautama sabía que no había logrado su meta de crear una religión que
provocaría la plena liberación espiritual para toda la humanidad. Él,
por consiguiente, prometió que un segundo “Buda,” o “Iluminado”
llegaría más tarde en la historia para completar la tarea. Esta
promesa constituye la famosa profecía “Mettaya” (“Amigo”) que se ha
vuelto un elemento muy importante de fe budista moderna. Porque el
Budismo no expresó originalmente la creencia en un Ser Supremo, la
leyenda de Mettaya no sugería que se pensara en un mensajero o un
maestro de “Dios.” Mettaya simplemente sería un individuo con el
conocimiento y habilidad de conseguir que se hiciera el trabajo.
Precisamente cuando en la historia “Mettaya” llegaría es
calurosamente debatido en algunos círculos. Muchas fuentes budistas
dicen que Mettaya vendrían cinco mil años después de la muerte de
Buda; otros han dicho que la mitad de eso. Muchos líderes budistas
han venido en la historia exigiendo ser Mettaya. Ninguno de ellos
tuvo éxito trayendo el mundo prometido por Buda, por lo que la
mayoría de los budistas todavía esperan.
Cuando pasó el tiempo, la profecía de Mettaya se deterioró con el
resto del Budismo. La leyenda fue lentamente absorbida a una
doctrina muy destructiva siendo extendida por fuentes de la
Hermandad en el Medio Oriente y en otras partes: la doctrina del
“Fin del Mundo,” también conocida por tales nombres dramáticos como
el “Día del Juicio,” “la Batalla Final,” “Armagedón,” y otros.
Las
enseñanzas del Fin del Mundo han tenido un efecto catastrófico en la
sociedad humana. Es, por consiguiente, de gran importancia entender
más sobre donde, y porqué empezaron esas enseñanzas.
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Los Profetas del Juicio Final
PREGUNTEN a CASI CUALQUIERA, “¿cree usted en un futuro Día del
Juicio de alguna clase?” Hay oportunidades que ella o él contestarán
“sí.” Además de una creencia en Dios, la creencia en un Día del
Juicio puede ser el concepto religioso más extendido en el mundo
moderno. Incluso muchas personas que son abiertamente ateístas a
menudo experimentan un sentimiento “innato” que alguna clase de gran
juicio o realineación está por delante.
La mayor parte de las enseñanzas del Día del Juicio se encuentran en
las escrituras de profetas religiosos que declaran haber recibido
revelaciones místicas de Dios concernientes al futuro del mundo.
Este tipo de escritura profética normalmente se llama “Apocalipsis.”
La palabra Apocalipsis viene de las palabras griegas “apo –“(fuera
de) y “kalyptein” (cubrir). Un Apocalipsis es, por consiguiente,
“quitar la cubierta,” es decir, una revelación.
La mayoría de los Apocalipsis siguen un modelo similar: La humanidad
sufrirá levantamiento durante un futuro cataclismo global. El
cataclismo será seguido por un Día del Juicio en el que Dios, o un
representante de Dios decidirá el destino de cada persona en la
Tierra. Sólo aquellas personas que son obedientes a la religión que
predica el Apocalipsis merecerán misericordia en el Día del Juicio.
Todos los demás serán condenados a muerte o a la eterna condenación
espiritual . El Día del Juicio será seguido por una Utopía en la
Tierra para sólo ser disfrutada por aquellos que creyeron y
obedecieron.
A pesar de las promesas de un Shangri-la universal, estas enseñanzas
a menudo aterraron a las personas, y todavía causan intranquilidad
hoy. Como discutiremos brevemente, los temerosos del Apocalipsis le
dan otra falsa distorsión a las verdades espirituales y, más
obviamente, dominan a las personas para obedecer a una religión
específica o líder. Las doctrinas del Fin del Mundo también hacen
que la gente tenga temor de explorar respecto a los sistemas
religiosos, como aquellos ofrecidos por los inconformistas
(mavericks) religiosos. Las enseñanzas del Día del Juicio finalmente
se suman a una extorsión: obedezca o muera. La pregunta es: ¿quien
implantó las creencias apocalípticas en la Tierra? Un Ser Supremo
usualmente es citado —pero ¿será realmente un Ser Supremo la fuente?
Una mirada cuidadosa a la historia revela que las enseñanzas
apocalípticas primero surgieron de la actividad Custodial y de las
fuentes dentro de la red de la Hermandad corrompida. Las doctrinas
del Fin del Mundo fueron diseminadas por misioneros y conquistadores
de la temprana Hermandad, mano a mano con el monoteísmo. Por
consiguiente no es sorprendente aprender que las doctrinas de la
Batalla Final de tienen algunas raíces en un famoso símbolo de la
Hermandad descubierto en las antiguas reliquias egipcias. Ese
símbolo era el mítico pájaro conocido como el fénix.
El fénix es un pájaro de ficción que se dice vive quinientos a
seiscientos años antes de quemarse hasta la muerte en un nido de
hierbas. Fuera de las cenizas emerge un pequeño gusano que crece
hasta convertirse de nuevo en el fénix. El fénix repite eternamente
este ciclo de vida-muerte-renacimiento, una y otra vez.
La leyenda del fénix es una alegoría (una historia con un
significado subyacente), o símbolo, diseñado para impartir una
verdad más profunda. Precisamente lo que es esa verdad se ha perdido,
por lo que nosotros encontramos a las personas interpretando la
leyenda del fénix en una variedad de maneras. Por ejemplo, muchas
personas ven el fénix como un símbolo de resurrección o
supervivencia espiritual después de la muerte: Un alma nace en un
cuerpo, el cuerpo florece, el cuerpo sufre los rigores ardientes de
la vida y la muerte, y el alma permanece intacta para surgir y
construir de nuevo. Otros ven el fénix como un símbolo del ciclo del
nacimiento-crecimiento-decaimiento, en el que los elementos físicos
del universo parecen operar, detrás de lo cual está una
indestructible realidad espiritual.
Lamentablemente, la leyenda del fénix, como tantas otras alegorías
místicas de la Hermandad egipcia, son importantes verdades
distorsionadas. La leyenda dio a entender una falsa idea falsa de
que allí existe alguna clase de “ley” o “plan” inalterable que manda
que la existencia espiritual debe consistir en un arduo proceso
como-el-fénix, de crecer, morir por el “fuego,” surgiendo de las
cenizas, y creciendo de nuevo, muriendo una vez más, y así
sucesivamente para siempre. Mientras este proceso parece regular la
vida en la Tierra, no es ni natural, ni inevitable ni saludable.
Muchas enseñanzas sobre el “Fin del Mundo” toman la filosofía
expresada en el mito del fénix y lo aplican a la raza humana entera.
Cuando ellos hacen esto, ellos a menudo expresan la noción que las
sociedades humanas deben continuamente soportar “pruebas por el
fuego” como parte del gran plan de Dios. La mayoría de los
Apocalipsis viran, entonces, de la alegoría estándar del fénix
proclamando que este proceso culminará en una gran “Batalla Final”
seguida por una Utopía. Estas creencias animan que las personas
toleren, e incluso den la bienvenida a un mundo de incesante
penalidad física, conflicto, y muerte: el tipo de mundo en el que
las antiguas escrituras dicen que desearon los Custodios que viviera
su raza de trabajadores. Las Profecías del Día del Juicio incluso
espuelan a algunas personas a trabajar para provocar una “batalla
final”, porque esos creyentes piensan que significará el amanecer de
una Utopía.
Las enseñanzas del “Fin del Mundo” fueron ampliamente diseminadas en
alguna parte en Persia entre 750 A.C. y 550 A.C. por un famoso
profeta Pérsico llamado Zoroastro. *
*
Zoroastro probablemente vivió más cerca de 550 A.C. que de 750 A.C.,
aunque hay debate en este asunto. Tradicionalmente, él ha sido
puesto 258 años “antes de Alejandro,” lo cual algunos estudiosos
interpretan como 258 años antes de que Alejandro el Grande
destruyera el primer Imperio Pérsico en 330 A.C.
Zoroastro también es conocido con el nombre de Zarathustra—un nombre
que dio inspiración para un famoso trabajo sinfónico, compuesto por
Richard Strauss, titulado Spake Zarathustra. La composición de
Strauss se volvió del tema de la película americana, 2001 - Una
Odisea Espacial.
Zoroastro es citado por historiadores como uno de los profetas más
tempranos en predicar el tipo de monoteísmo creado primero por Akhenaton. Zoroastro era un místico y sacerdote ario que también
enseñaba una forma de arianismo. Persia en ese momento era una
nación dominada por una casta sacerdotal aria. Algunas ramas de la
Hermandad hoy declaran que Zoroastro era emisario de la antigua
Hermandad.
La cosmología de Zoroastro (teoría del universo) estaba basada en el
concepto de un forcejeo entre el bien y el mal. Zoroastro dijo que
este forcejeo iba a tener lugar sobre un período de 12,000 años
divididos en cuatro fases.
-
La primera fase consistía solamente en existencia espiritual,
tiempo en que un Dios principal diseñó el universo físico.
-
Durante la segunda fase, el universo material fue creado, seguido
por la entrada del antagonista del Dios principal en el nuevo
universo, con el propósito de crear problemas.
-
La tercera fase consistía en una batalla entre el Dios principal y
sus rivales, sobre el destino de las muchas almas que vinieron a
ocupar el universo.
-
En la cuarta fase final, el Dios principal iba a enviar una
sucesión de salvadores que derrotarían finalmente al antagonista, y
traerían la salvación a todos los seres espirituales en el universo.
Según el modelo de Zoroastro, el mundo está en la cuarta fase.
Zoroastro parece haber sido un sincero y honesto reformista. Él
enseñó algunas buenas lecciones sobre la naturaleza de las éticas y
su importancia para la salvación espiritual. Él enfatizó que las
personas tienen el libre albedrío. En otras materias, sin embargo,
la religión de Zoroastro cayó muy corta de ideal. Para entender
porqué, sólo necesitamos ver al “Dios de Zoroastro."
El Dios de Zoroastro se llamaba Ahura Mazda que quiere decir “señor”
o “espíritu” (“aura”) del “conocimiento” o “sabiduría” (“mazda”).
Zoroastro declara que cuando él era un sacerdote de 30 años de edad,
Ahura Mazda apareció ante él diciendo que él, Ahura Mazda, fue era
el verdadero DiosÚnico. Ahura Mazda procedió a impartir a Zoroastro
muchas de las enseñanzas que constituyeron el Zoroastrismo
entonces.
Como miramos para ver que clase de criatura era
Ahura
Mazda, descubrimos buena evidencia de que él era otro Custodio
pretendiendo ser “Dios.” Ahura Mazda es retratado en algunos lugares
como una figura humana barbada que está de pie en un estilizado
objeto redondo. Del objeto redondo se destacan dos estilizadas alas,
para indicar que vuela. El objeto volante redondo tiene dos pavoneos
saliendo debajo que se asemejan a patas para aterrizaje.
En otras palabras, Ahura Mazda era un “Dios”
que parecía humano que
volaba en un objeto volante redondo con almohadillas para aterrizar:
Un Custodio. La implicación es que el monoteísmo de Zoroastro, con
su mensaje apocalíptico, fue esparcido en Persia con la ayuda Custodial, muy del mismo modo en que el Judaísmo se extendió bajo
Moisés.
Como se notó anteriormente, Zoroastro era un ario que vivía en una
región gobernada por otros arios. La dominación aria era tan fuerte
que el nombre de Persia fue eventualmente cambiado a “Irán,” qué es
un derivado de la palabra “ario.” Los trabajos de Zoroastro hablan
de un Dios luchando por las naciones arias y ayudándolos a provocar
buenas cosechas. A través de sus escrituras (principalmente el Zend
Avesta), y a través de sus enseñanzas místicas secretas, el Zoroastrianismo hizo mucho para extender las filosofías arias a
otras organizaciones dentro de la Red de la Hermandad. Nosotros
veremos más tarde algunos ejemplos.
Las doctrinas apocalípticas continuaron siendo extendidas después de
la muerte de Zoroastro, sobre todo por los profetas hebreos. Pueden
encontrarse las advertencias de esos profetas hebreos en los libros
más tardíos del Antiguo Testamento. Uno de esos profetas era Ezekiel
cuya descripción de raros objetos voladores que vimos en el Capítulo
7. Según la narrativa de Ezekiel, él fue tomado a bordo de
una
extraña nave para el único propósito de darle un mensaje
apocalíptico para diseminar, indicando de nuevo que los Custodios
eran los últimos creadores de las enseñanzas del Día del Juicio.
Al aproximarse el año 1 D.C., la religión hebrea se había
establecido bien en el Medio Oriente. Sin embargo, estaba sufriendo
muchos cambios, algunos de los cuales fueron causados por la
extensión del imperio romano hasta Palestina. Los romanos que habían
sido manejados a la conquista por extrañas religiones místicas con
tonos definitivamente de la Hermandad, a menudo hicieron la vida
difícil a los judíos. En este entorno, varias sectas judías se
levantaron, que estaban a menudo con desigualdades entre si, excepto
respecto a un asunto: los romanos no eran bienvenidos en Palestina.
Algunas sectas hebreas, como los Saduceos, proclamaron la venida de
un Mesías de “Dios”— un Mesías que prevalecería en el eterno
forcejeo del bien contra el mal y traería libertad a los judíos
oprimidos. Esta idea se volvió bastante popular entre los hebreos de
Palestina, aunque su fuerte inclinación política lo hizo peligroso.
Las profecías mesiánicas del Antiguo Testamento empezaron ya en 750
A.C. con el profeta Isaías. Los judíos Apocalipticos aparecieron
esporádicamente después de eso, lo bastante a menudo como para
mantener vivo el miedo de un cataclismo mundial.
Los ejemplos incluyen al profeta Joel, hacia el 400 A.C. y Daniel
hacia 165 A.C. Irónicamente, las profecías eran bastante horribles y
expresaban tremenda hostilidad contra las mismas personas judías,
aunque se pensaba finalmente beneficiar a los mismos hebreos con las
profecías. Los videntes del Antiguo Testamentos describieron a las
personas de Israel como malas y pecadoras. Ellos citaron a “Jehovah”
amenazando con toda clase de calamidades contra las personas de
Israel, y contra los opresores de Israel. Nadie sería ahorrado.
Para
darle sabor de estas predicciones, aquí está una cita del último
libro del Antiguo Testamento, escrito poco antes 445 A.C.:
Porque he aquí, viene el día ardiente como un horno, y todos los
soberbios y todos los que hacen maldad serán estopa; aquel día que
vendrá los abrasará, ha dicho Jehová de los ejércitos, y no les
dejará ni raíz ni rama.
Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia,
y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como
becerros de la manada.
Y hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de
vuestros pies, en el día en que yo actúe, ha dicho Jehová de los
ejércitos.
Acordaos de la ley de Moisés, mi siervo, a quien encargué en Horeb
ordenanzas y leyes para todo Israel. He aquí, yo os envío el profeta
Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y terrible. El hará
volver el corazón de los padres hacia los hijos, y el corazón de los
hijos hacia los padres, no sea que yo venga y hiera la tierra con
maldición. MALAQUÍAS 4:1-6
El pasaje anterior predica la venida de un mensajero especial de
Dios llamado Elías que era la competencia hebrea contra Mettaya de
la religión budista. Los budistas, dándose cuenta de que quizás el
único “dios” o la presa caída a la influencia de la Hermandad
corrompida, reformaron la leyenda de Mettaya para que se pareciera a
los Apocalipsis monoteístas. Esto creó la ilusión que los hebreos y
budistas estaban esperando por la misma persona, cuando, de hecho,
no era así. Los monoteístas de la hermandad estaban (y todavía están)
esperando un mensajero de Dios acoplado con un Día del Juicio.
Los
budistas estaban simplemente esperando a un amigo que es listo y lo
suficientemente involucrado para terminar el trabajo de Buda sin
necesidad de que finalizara el mundo entero. Los Hebreos modernos
todavía están esperando que aparezca Elías, mientras los cristianos
creen que Elías era Juan el Bautista, el hombre que bautizó a Jesús
Cristo.
Los profetas del Antiguo Testamentos expresaron otra importante
idea. “Jehovah” continuaría manipulando a las personas a la guerra:
Porque yo (Dios) reuniré a todas las naciones para combatir contra
Jerusalén… Después saldrá el Señor y peleará con aquellas naciones
como peleó en el día de la batalla….
ZACARÍAS 14:2-3 (escrito. 520
A.C.)
Ésta es una cita sorprendente porque “Dios” declara la intención de
llevar a muchas naciones a un conflicto apoyando primero un lado y
respaldando al otro. Tales acciones son del libro de texto de
Machiavelli. La intención de “Dios” para hacer al hermano luchar
contra el hermano fue expresada en el mismo año por el profeta Haggai:
Y yo derrocaré el trono de los reinos, y destruiré la fuerza del
pagano; y yo derrocaré las carrozas, y aquellos que pasean en ellas;
y los caballos y sus jinetes serán bajados, todos por la espada de
su hermano.
HAGGAI 2:22
Los creyentes de la Biblia todavía piensan que un
Ser Supremo está
detrás de las viciosas intenciones Maquiavélicas descritas en la
Biblia. La teoría de los “antiguos astronautas” parece proporcionar
un verdadero descubrimiento apuntando a una brutal sociedad
tecnológica, no a un Ser Supremo, como la fuente más probable de
tales maquinaciones.
Cuando las personas se adhieren a las profecías apocalípticas, ellos
normalmente lo hacen porque creen en lo predestinado. La Predestinación es la idea que el futuro ya está creado inalterable,
y que algunas personas tienen una habilidad especial de ver ese
futuro. ¿Realmente existe la predestinación?
Por causa de la discusión, permitámonos asumir que lo hace: en
cualquier momento dado en el presente, hay ya un futuro creado que
es tan sólido y tan real como cualquier momento en el pasado o
presente. Quizás el tiempo no es tan lineal como lo hemos creído.
Si tal futuro ya existe, ¿significa esto que es inevitable y debe
ocurrir? No. Aquí están unos simples ejercicios en dos-partes para
ilustrar esto:
Parte 1:
Encuentre un momento y note el tiempo. Calcule que
hora será en exactamente 30 segundos. Ahora decida exactamente
donde usted estará cuando llegue ese momento de 30-segundos.
Mire el reloj y esté seguro que usted estará de pie en el
preciso lugar que usted escogió. Usted simplemente acaba de
crear una profecía y la ha cumplido.
Parte 2:
Mire el reloj de nuevo y decida sobre una nueva ubicación.
Diez segundos antes de que llegue el momento de los 30-segundos,
vuelva a pensar si usted quiere cumplir la profecía. Si usted lo
hace, esté en el lugar que eligió; si no lo hace, escoja una
nueva ubicación al azar y esté allí cuando llegue el momento de
los 30-segundos.
Repita el ejercicio anterior varias veces.
¿Cual de las dos partes anteriores creó
el futuro más fuerte y más sólido? La respuesta, es, por supuesto,
la Parte 1 ¿Cuál de los dos futuros sería para un profeta más
probable de prever? La respuesta es, de nuevo la Parte 1. El punto
que se está haciendo es que el futuro esté grandemente formado por
una intención respaldada por la acción: mientras más fuerte sea la
intención y mejor respaldo tenga por la acción, más sólido tenderá a
ser el futuro.
Por consiguiente, el futuro es maleable. Una futura realidad, no
importa cuan sólida sea o cuántos profetas hayan aceptado su
existencia, puede ser cambiada. Sólo será irreversible si las
personas continúan realizando, o fallando en realizar aquellas
acciones que causarán que ocurra ese futuro, y que nadie haga algo
lo suficientemente efectivo para contrarrestar esas acciones o
inacciones.
Algunas personas argumentarían que el verdadero vidente prevería el
cambio de mente en la parte 2 del ejercicio anterior. Si esto es
verdad, entonces, eventualmente, el profeta habría ganado una
extraordinaria habilidad de influir, porque él o ella pueden ahora
contactar el asunto de su visión y persuadir a esa persona a cambiar
su mente, o el vidente puede tomar acciones para asegurar o prevenir
las consecuencias de la decisión.
La profecía realmente tiene sólo un valor: como una herramienta, ya
sea para cambiar o asegurar el futuro. El problema con un vidente
que prevé un evento trágico que después se hace realidad es que él o
ella adivinan insuficiente información para hacer algo sobre eso.
Por ejemplo, el famoso profeta americano,
Edgar Cayce, predijo un
holocausto mundial en los 1990. Debido a la habilidad reputada del
Sr. Cayce de percibir las tales cosas, muchas personas están
convencidas que tal evento eventualmente pudiera suceder, y quizás
lo haga. Lamentablemente, el Sr. Cayce no pudo extenderse lo
suficiente en su predicción, como para ofrecer información detallada
que podría ser usada para alterar los eventos que él predijo.
Tristemente, su profecía es, por consiguiente, incompleta.
Como lo veremos en este libro, ha habido muchos episodios del ”Fin
del Mundo” en la historia mundial. Todos ellos han cumplido
profecías religiosas, excepto en un punto muy crucial: ninguno de
ellos trajo con ellos una nueva era de paz y salvación, como la
prometida. A pesar de ese triste registro, muchas personas hoy están
predicando que todavía viene otro ”Fin del Mundo” o “Batalla Final”
que está a punto de hacer mejor la vida.
Poco antes el año 1 D.C., nació un polémico líder religioso, quien
intentó prevenirse de ser declarado un Mesías apocalíptico. Él no
tuvo éxito, y fue clavado a una cruz de madera, como resultado.
Nosotros lo conocemos hoy como Jesús Cristo, y su historia es muy
importante.
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El Ministerio de Jesús
La historia que conocen la mayoría de
las personas de Jesús es contada en el Nuevo Testamento. Tanto el
Nuevo Testamento, como el Antiguo Testamento, son, a menudo, una
versión grandemente alterada de las cuentas originales en las que
está basada. Además, probablemente menos del 5% de todas las
enseñanzas de Jesús y sus seguidores originales se encuentra
en la Biblia.
Muchos de los cambios y tachaduras al Nuevo Testamento fueron hechos
por concilios especiales de la Iglesia. El proceso de la edición
empezó ya en 325 D.C. durante el Primer Concilio de Nicea, y
continuó bastante en el siglo 12. Por ejemplo, el Segundo Sínodo
[concilio de la iglesia] de Constantinopla en 553 D.C. suprimió de
la Biblia las referencias de Jesús a la “reencarnación”—un concepto
importante a Jesús y sus seguidores tempranos. Después, los
Concilios de Luteranos del 12 siglo agregaron un principio a la
Biblia que nunca fue enseñado por Jesús: el concepto de la “Santa
Trinidad.”
La iglesia cristiana no se limitó a cambiar unas pocas ideas,
también rechazó libros enteros. La iglesia destruyó muchos
documentos y archivos que contradijeron los cambios radicales que
fueron hechos a la doctrina cristiana por estos concilios.
Afortunadamente, las escrituras originales que todavía sobrevivieron
el proceso de edición ofrecen valiosas pistas y visiones en la vida
de Jesús.
Muchas escrituras rechazadas por los concilios de la Iglesia
encontraron su camino en un libro conocido como el “Apócrifo”
(“escrituras ocultas”). * El
Apócrifo consiste en escrituras que fueron adjudicadas ser de
calidad u origen dudoso por la iglesia.
*
Para no ser confundido con “el
Apocalipsis,” que es una “revelación.”
Algo del material fue legítimamente rechazado. Sin embargo, se
omitieron otros trabajos Apócrifos, simplemente porque contradijeron
la versión oficial de la iglesia de la vida de Jesús en varios
detalles cruciales. Éstos son detalles que, si son cuidadosamente
investigados, ofrecerían una perspectiva algo diferente sobre la
vida de Jesús de lo presentado en la Biblia autorizada.
Según los Apócrifos, la historia de Jesús empieza con sus abuelos
maternos, Joaquín y Ana. Se decía que Joaquín era sacerdote en un
templo hebreo. Joaquín y Ana estaban felizmente casados, salvo un
problema: ellos no habían podido tener hijos. Ésta era una fuente de
considerable vergüenza para ellos. Tener hijos, especialmente
varones, era muy importante en esa era.
Un día Joaquín estaba de pie, solo, en los campos, cuando apareció
un ángel. El ángel fue descrito como que emitía una tremenda
cantidad de luz y provocó miedo en Joaquín, por su apariencia. El
ángel encaró a Joaquín y le dijo que ya no estuviera avergonzado,
porque un ángel causaría que Ana se embarazara. La única
estipulación para este honor era que Joaquín y su esposa debían
rendir a su vástago para que fuese criado por los sacerdotes y
ángeles en un templo en Jerusalén.
Todo fue según el plan. A la edad de tres, Joaquín y la pequeña niña
de Ana, María, fue llevada al templo y dejada allí. María era una
niña bella, que permanecería consagrada a los sacerdotes y ángeles
por aproximadamente los próximos once años. Cuando María cumplió 12
o 14 años en el templo (dos diferentes fuentes dan dos edades
diferentes), era tiempo para ellos regresar al mundo y casarse.
Sin embargo María no era libre escoger a su propio esposo. Sus
mentores escogieron uno para ella. El compañero escogido para María
era un hombre muy viejo llamado José. José, al principio no aceptaba
el matrimonio, porque era bastante viejo y ya había tenido hijos
propios. Después de que se hicieron esfuerzos para que cambiara su
modo de pensar, José consintió al matrimonio y fue a su casa en
Belén, a preparar su casa para su nueva esposa. María fue a la casa
de sus padres, Joaquín y Ana, en Galilea, para prepararse.
Mientras María estaba en Galilea, un ángel llamado Gabriel apareció
ante ella, anunciando que ella daría luz al nuevo Mesías. María
estaba desconcertada: Ella dijo, ¿Cómo puede ser? ¿Según mi voto [de
castidad], yo nunca he tenido contacto sexual con ningún hombre,
cómo puedo haber concebido un hijo sin la semilla de un hombre? A
esto, el ángel le contestó y dijo:
No pienses, María, que concebirás
de la manera ordinaria.
Pues, sin dormir con un hombre, siendo una Virgen, concebirás y
siendo una Virgen darás leche de tu pecho.
El Espíritu Santo vendrá a ti, y el poder de la voluntad más alta te
sombreará, sin ningún calor de la lujuria.
Por lo que aquello a lo que darás nacimiento será sólo santo, porque
sólo es concebido sin pecado, y naciendo, se llamará el Hijo de
Dios.
¡Entonces María, estirando sus manos hacia adelante, y alzando sus
ojos al cielo, dijo, Tome aviso de la sierva del Señor! Permite que
me sea hecho lo que has dicho.
MARÍA VII: 16-21
Varios investigadores creen que las historias de “los nacimientos de
vírgenes” pudieran estar basadas en casos de inseminación
artificial. El nacimiento de la virgen sólo significa que la mujer
no fue inseminada por un hombre, sino, en cambio, que el embarazo
fue causado de otra manera para concebir y llevar a un niño a través
de la acción de un “ángel.” Si consideramos que muchos “ángeles” del
Nuevo Testamento son Custodios, la inseminación artificial se vuelve
una posibilidad diferente.
La conversación anterior entre María y su “ángel” expresa una fuerte
creencia moral y espiritual conectada con acto de concepción. La
fecundación por un “ángel” se juzgó santa y deseable, pero la
concepción por los medios humanos fue considerada, a menudo, pecado.
Para que alguien se comprometiera con inseminación artificial,
habría una razón práctica para crear tal distinción. La inseminación
artificial ayuda a garantizar el control sobre las características
físicas de un futuro bebé, algo que no puede ser asegurado con el
azar de la unión humana. Inseminando artificialmente dos o más
generaciones seguidas se aumenta grandemente la pureza del producto
final.
Esto es practicado hoy en día por criadores de animales, que
controlan estrechamente la inseminación, engendrado del ganado de
generación en generación para producir animales mejores, más grandes
y más puros. A este respecto, es significante que la descendencia
humana de supuestos nacimientos de una virgen, a menudo son
descritos como físicamente sin desperfectos y extraordinariamente
bellos en apariencia.
Mientras alguna de estas lisonjas era, sin
duda alguna debido a la tendencia de los seguidores de ver a sus
líderes religiosos bajo la mejor luz posible, las historias de
embarazos inducidos-por-ángeles sobre consecutivas generaciones,
como el cuento alrededor de Jesús, sugeriría fuertemente un esfuerzo
de inseminación para cría. Esta discusión no significa lanzar falta
de respeto en la personalidad de Jesús, sugiriendo que su cuerpo fue
engendrado como el de una vaca, pero ése es el cuadro que surge.
El desdén expresado a los sacerdotes por los “ángeles” Bíblicos
sobre el método humano de la concepción aparentemente estaba basado
en preocupaciones exclusivamente prácticas para asegurar una buena
cría, pero, no obstante, fue tomado muy en serio por los tempranos
sacerdotes y se convirtió en un importante elemento de muchas
religiones monoteístas. En los días bíblicos, los seres humanos
también estaban tan pesadamente publicitados como muy pecadores para
poder justificar los bárbaros tratamientos sufridos en las manos de
su “Dios” y “ángeles” Custodiales.
Extendiendo este concepto de pecado al método humano de procreación,
cada persona concebida a través de la comunicación sexual humana
sería considerada como nacida en pecado, y por consiguiente, sería
condenada espiritualmente. ¡Que dilema tan espantoso creó esto! Cada
vez que un hombre y una mujer concebían y daban nacimiento a un
niño, habrían condenado a un ser espiritual; sin embargo, los
caminos humanos que producen niños son fuertes. Las enseñanzas
religiosas de condenación espiritual automática debido a la
procreación humana generaron un poderoso conflicto entre el camino
para la libertad espiritual y el camino físico para reproducirse.
El resultado fue una intensa ansiedad en el tema del sexo y un
incremento en la actividad sexual no-procreadora, tal como la
homosexualidad, el autoerotismo, formas no procreadoras de
relaciones sexuales, pornografía, vouyerismo y aborto. La ironía en
esto está clara. Esas religiones que más fuertemente han condenado
el “pecado inherente” en todos los seres humanos, también han sido
aquellas que más vocalmente se han opuesto al sexo no procreativo.
Estas enseñanzas tenían otro efecto importante. Ellas ayudaron a
reducir la resistencia humana a comprometerse en la guerra. Es más
fácil para una persona religiosa matar a alguien, si cree que la
víctima es inherentemente pecadora.
Afortunadamente, la mayoría de las personas hoy ya no cree que la
concepción humana sea naturalmente pecadora, incluyendo a la mayoría
del clero. Si acaso, el dar nacimiento a niños es visto como un
evento feliz, y así es como debe ser. A pesar de esto, todavía
encontramos remanentes de algunas de las viejas ideas. Un pequeño
número de filósofos, psiquiatras, líderes religiosos y sociólogos
continúan proclamando que los seres humanos somos inherentemente
“malos” o “malvados,” sea en terrenos religiosos o “científicos”.
Esto contribuye poco a nuestra cultura, excepto para mantener vivas
la ansiedad sexual y las guerras.
Después de que la experiencia de María con el ángel, José viajó de
su casa en Belén para recoger a María en Galilea. Para su
mortificación, José descubrió que su joven novia ya tenía varios
meses embarazada. Pensando que María se había hecho una prostituta,
José hizo los preparativos para abandonarla. Un ángel intervino y
convenció a José que María todavía era una virgen. José se quedó con
María en Galilea hasta su noveno mes de embarazo. En el noveno mes,
José y María salieron para la casa de José en Belén para tener el
niño allí. Según los Apócrifos, la pareja no llegó a tiempo a la
casa de José. María entró en labor de parto cerca de las afueras de
Belén e inmediatamente tuvo que localizarse un resguardo para ella.
5
Lo que encontraron fue una cueva. En esa cueva nació el joven Jesús:
Y cuando ellos llegaron a la cueva, María confesó a José que su
tiempo de dar nacimiento había llegado, y ella no podría seguir a la
ciudad, y dijo, "Entremos en esta cueva". En ese momento el sol estaba
casi abajo.
Pero José se marchó rápidamente para poder conseguirle una partera;
y cuando él vio a una vieja mujer hebrea que era de Jerusalén, le
dijo, “Por favor ven conmigo, buena mujer, y entra en esa cueva, y
verás a una mujer justo a punto de dar nacimiento”.
Era después del ocaso, cuando la vieja mujer y José llegaron a la
cueva, y los dos entraron en ella.
Y miren, todo estaba lleno de luz, más clara que la luz de lámparas
y velas, y más intensa que la luz misma del sol. El infante estaba
envuelto en pañales y mantillas, y chupando del pecho de su madre,
santa María.
INFANCIA 1:6-11
Las inusuales luces en la cueva indican a algunas personas la
existencia de alguna clase de iluminación de alta tecnología. Esto
puede no ser sorprendente cuando descubrimos que otros claros
fenómenos de alta tecnología rodearon el nacimiento de Jesús, como
la llamada “Estrella de Belén.”
Casi todos en el mundo cristiano sabemos el cuento de los tres
hombres sabios que siguieron una estrella luminosa hasta llegar done
el bebé Jesús en Belén. La mayoría de los Cristianos cree que esta
rara estrella, conocida como el “la Estrella de Belén,” era de
origen sobrenatural—una creación de Dios. Algunos científicos, si no
han descartado la historia como mito religioso, creen que la
Estrella puede haber sido el cometa Halley haciendo un pase bajo
sobre la Tierra, o una rara alineación de Venus y una estrella
luminosa.
Varios escritores de OVNI, por otra parte, afirman que la Estrella
de Belén era un vehículo aéreo que guió a los tres hombres sabios de
sus casas en Persia hasta Belén, del mismo modo que Moisés y las
tribus hebreas fueron guiados por un “Jehovah” aerotransportado, en
la temprana historia.
Si es verdad que Jesús nació en una cueva, ¿porque el escritor de
Lucas y otros tempranos líderes de la iglesia dirían que la primera
cama de Jesús era un pesebre?
Era la intención de aquellos que respaldaron a Jesús de proclamarlo
el Mesías hebreo. Para que fuera verdad esta aseveración,
necesitaban demostrar que Jesús era un descendiente directo de Rey
David hebreo. Tal linaje era requerido por las profecías hebreas.
Sin embargo, varios historiadores religiosos han concluido que Jesús
pertenecía a una secta religiosa hebrea, conocida como los
“Esenios.” Joaquín, Ana, y María pueden todos haber sido miembros de
templos Esenios. El nacimiento en la cueva tendería a reforzar esa
conclusión porque los Esenios eran bien conocidos por usar cuevas
como resguardos y hospicios.
Si Jesús hubiera sido un Esenio, no
podría haber sido descendiente del Rey David, por lo siguiente:
Los Esenios eran exteriormente judíos, pero ellos también estudiaron
el Zend Avesta de la religión de Zoroastro, y según los registros,
ellos practicaban el arianismo. Esto explicaría la visita de los
tres hombres sabios de Persia al niño Jesús en Belén. También parece
que ser ario era un requisito para ser Esenio. El propio Jesús tenía
piel clara y cabello castaño rojizo. Debido al previo requisito
racial para ser Esenio, ningún verdadero Esenio podría ser
descendiente directo del Rey David, porque las tribus hebreas tenían
un linaje diferente.
Mucho de lo que nosotros sabemos hoy de los Esenios viene de un
famoso descubrimiento arqueológico de mediados del siglo 20:
Los
Pergaminos del Mar Muerto. Los Pergaminos son una biblioteca de
documentos muy antiguos que fechan del primer siglo D.C. Fueron
escritos por miembros de una comunidad Esenia y escondidos por ellos
en cuevas cerca del Mar Muerto. Los Pergaminos fueron descubiertos
en 1947 (o posiblemente 1945) por un joven miembro de una tribu
beduina.
Según el historiador Juan Allegro que analiza los Pergaminos en su
libro Las Personas de los Pergaminos del Mar Muerto, los Esenios
tenían muchas características de una sociedad secreta. Por ejemplo,
la admisión de una persona en la Orden Esenia sólo era lograda
después de varios años de prueba. Los Esenios practicaron rituales
de iniciación en que juraban nunca divulgar sus enseñanzas secretas.
Ellos también mantuvieron secretos los nombres de los “ángeles” que
se decía que estaban viviendo entre los Esenios, en sus comunidades
cerradas. Los Sacerdotes Esenios a menudo fueron llamados “Los Hijos
de Zadok” en honor al alto sacerdote Zadok que había servido en el
templo de Salomón.
A la luz de estos descubrimientos, no es sorprendente que varias
ramas de la Hermandad habían exigido mucho tiempo antes del
descubrimiento de los Pergaminos del Mar Muerto, que la organización
Esenia era una rama de la Hermandad en Palestina, quizás el vástago
más importante de la Hermandad en esa región. La Historia de la
Francmasonería, de Alberto MacKey publicada en 1898, confirma
esto, informando que los Esenios tenían un sistema de grados y
usaban un simbólico delantal.
Hay mucha evidencia que Jesús siguió siendo esenio a lo largo de su
vida adulta. El historiador Will Durant, escribiendo en su trabajo,
César y Cristo (La Historia de la Civilización, Parte III), señala
que la secta esenia era la única secta con una tradición judía que
no se opuso a los tempranos esfuerzos de Jesús en cuanto a la
innovación religiosa. De las tres principales sectas Hebreas
existentes en Palestina en ese momento, Jesús condenó sólo a los
Fariseos y a los Saduceos, por sus vicios e hipocresía, no a los
esenios. Los esenios y los cristianos compartieron muchos rasgos en
común: ellos sostuvieron creencias similares sobre vivir en ”Los
Últimos Días,” compartían comidas en común, la propiedad era poseída
comunalmente, tomaban parte en baños rituales y bautismos, y tenían
algunos puntos organizacionales en común.
Las notables similitudes entre varias doctrinas de los Pergaminos
del Mar Muerto y las escrituras del Nuevo Testamento también han
sido nombradas. Los historiadores apuntan a la cercana amistad
personal de Jesús con Juan el Bautista. Muchas prácticas bautismales
y ascéticas (abnegación) de los esenios eran compartidas por Juan.
Mientras Juan difirió en otros respetos, de lo que sabemos hoy,
sobre las prácticas esenias normales, las similitudes son lo
suficientemente fuertes como para sugerir que Juan era un esenio.
Finalmente tenemos la presencia activa de los “ángeles” guiando a
ambos, a los esenios y al ministerio de Jesús según, según los
registros.
A pesar de la fuerte evidencia, algunos teólogos todavía disputan
que Jesús era esenio. Sus objeciones están basadas principalmente en
el hecho de que muchas de las enseñanzas de Jesús contradecían las
costumbres y modos esenios. Había una buena razón para esa
contradicción. Jesús, aunque era un esenio, había entrado en
contacto con el movimiento inconformista hindú (Maverik) y, como
resultado, se había vuelto un rebelde inconformista (Maverik). Él
intentó fraguar adelante con una filosofía religiosa que estaba a
menudo en contra de sus patrocinadores esenios, y él sufriría por
ello.
La mayor parte de la información del Nuevo Testamento sobre la vida
de Jesús cubre sólo los tres años inmediatos a su crucifixión. Ésos
fueron los años del ministerio público de Jesús. Durante ese tiempo,
Jesús no vivió dentro de las comunidades esenias, por la simple
razón que él estaba comprometido en un ministerio de predicar por
los caminos, que lo mantendría ocupado hasta su crucifixión. A cada
esenio le fue dado, o creado para él, un “llamado” o una meta de
vida a seguir. Jesús siguió la suya como maestro predicador en los
caminos.
Tanto en el Nuevo Testamento, como en los Apócrifos, la vida de
Jesús parece estar bastante bien cubierta hasta más o menos la edad
de 5 o 6 años. Entonces, abruptamente hay una total falta de
información acerca de donde fue Jesús, o lo que hizo. Encontramos en
el Nuevo Testamento unos episodios en los que Jesús aparece ante los
eruditos hebreos a la edad de 12 años, seguido por un silencio de
dieciocho-años, en los cuales las actividades de Jesús se quedan sin
contar.
De repente, aproximadamente a la edad de 30 años, Jesús re-surgió y
lanzó su corta y tumultuosa carrera religiosa. ¿Donde fue Jesús, el
que había hecho durante los años desconocidos? La mayoría de los
cristianos cree que el Jesús pasó su adolescencia y su temprana
adultez trabajando para su padre, como carpintero. Sin ninguna duda,
Jesús ocasionalmente visitó a su padre y aprendió el oficio de la
carpintería en esas visitas. Sin embargo, muchos historiadores
sienten que había mucho más aconteciendo en la vida de Jesús, y han
tratado de descubrir que más podría haber estado haciendo Jesús
durante esos años críticos, cuando sus pensamientos, su
personalidad, y sus motivos se estaban desarrollando. Como resulta,
Jesús estaba siendo intensivamente entrenado para su futuro papel
religioso.
El era común para los muchachos esenios entrar en un monasterio
esenio como a la edad de cinco años, para comenzar su educación.
Esto podría responder el enigma de la súbita desaparición de Jesús
en la historia a esa edad. Algunos investigadores creen que Jesús
fue criado y educado en la comunidad esenia arriba de Haifa, por el
Mar Mediterráneo. Al parecer permaneció allí hasta su adolescencia.
A la edad de doce años hizo un viaje a Jerusalén en preparación para
su bar mitzvah el siguiente año. Fue durante ese viaje que Jesús
tuvo el debate con los eruditos hebreos. Jesús, entonces,
desapareció de nuevo de la historia. ¿Ahora donde es que fue?
Hace varios años, sucedió que vi un intrigante film documental por
Richard Bock titulado Los Años Perdidos. Esta película se presenta
regularmente en las estaciones de televisión americanas alrededor de
las épocas de la Pascua y la Navidad. Bien vale la pena verla. La
película sugiere que Jesús viajó a Asia donde pasó su adolescencia
estudiando las religiones practicadas allí. Una fuente de donde el
director de la película sacó esta notable conclusión fue de la
“Leyenda de Issa”, un documento budista antiquísimo, supuestamente
descubierto en el Monasterio de IIMI, en la Inda, por el viajero
ruso Nicolás Notovitchin en 1887. Notovitch publicó su traducción de
la leyenda budista en 1890, en su libro, La Vida Desconocida de Jesús.
El Según la leyenda budista descubierta por Notovitch, un notable
hombre joven “Issa” partió hacia Asia a la edad de trece años. Issa
estudió bajo varios maestros religiosos del Oriente, predicó un poco
por su parte y regresó a Palestina dieciséis años más tarde, a la
edad de 29 años. Los significativos paralelos entre las vidas de
“Issa” y de Jesús han llevado a la conclusión de que Issa, de hecho,
era Jesús. Si esto fuese verdad, tal viaje ciertamente sería omitido
de la Biblia, porque contradice la idea que Jesús había alcanzado la
iluminación espiritual solamente por inspiración divina.
Si Jesús hubiera sido un esenio y hubiera viajado a Asia bajo un
patrocinio esenio, y si el esenios, de hecho, hubieran seguido una
tradición aria sería de esperarse que Jesús hubiera sido enviado a
estudiar bajo los brahmanes arios del subcontinente de la India.
Según la Leyenda de Issa, esto es precisamente lo que pasó:
En su decimocuarto año, el joven de Issa, el Bendecido,
llegó de
este lado del Sindh [una provincia al este de Pakistán]
y se
estableció entre los arios...
A la llegada de Jesús, “los sacerdotes blancos de Brahma le dieron
la bienvenida con alegría” 2 y le enseñaron, entre otras cosas, a
leer y comprender los Vedas, y a enseñar y exponer las sagradas
escrituras hindúes. Esta jubilosa recepción rápidamente se agrió,
sin embargo, porque Jesús insistió en asociarse con las castas más
bajas. El llevó a fricciones entre el joven cabezudo Jesús y sus
anfitriones brahmanes.
Según la leyenda:
Pero los brahmanes y los kshatriyas [miembros de la casta militar]
le dijeron que les estaba prohibido, por en gran Para-Brahma [Dios
hindú] acercarse a aquellos que fueron creados de su barriga y sus
pies [el origen mítico de las castas más bajas];
Que los Vaisyas [miembros de la casta mercantil y agrícola] podrían
escuchar sólo la recitación de los Vedas, y esto sólo en los días
festivos, y que a los Sudras [una de las castas más bajas] no sólo
les era prohibido asistir a las lecturas de los Vedas, sino que
incluso verlos; ya que ellos estaban condenados a perpetua
servidumbre, como esclavos de los brahmanes, los kshatriyas e
incluso los Vaisyas.
Pero Issa, desatendiendo sus palabras, permaneció con los Sudras,
predicando contra los brahmanes y los kshatriyas.
Él declamó fuertemente en contra de que el hombre se atribuyera la
autoridad de privar a sus compañeros-seres de sus derechos humanos y
espirituales. “Mismamente,” dijo, “Dios no ha hecho diferencias
entre sus hijos, quienes son todos igualmente amados por El”. Issa
negó la inspiración divina de los Vedas y los Puranas [una clase de
sagradas escrituras].
Los sacerdotes blancos y guerreros estaban tan enfurecidos que
enviaron a sirvientes a que asesinaran a Jesús. Advertido del
peligro, Jesús huyó de la ciudad santa de Djagguernat por la noche y
escapó al país budista. Allí él aprendió el idioma de Pali y estudió
las sagradas escrituras (“Sutras”). Después de seis años, Jesús
“podía exponer perfectamente los sagrados pergaminos [budistas].”
La leyenda de Issa tiene algunas notables implicaciones. Retrata a
Jesús como un sincero reformador religioso que se encontró
volviéndose contra las tradiciones Custodiales/Aria en las que él
había sido criado. Sus simpatías fueron, en cambio, para las
budistas maverick inconformistas. La influencia budista en las
enseñanzas de Jesús es evidente en la Biblia, como en “el Sermón en
la Montaña”, de Jesús, que contiene un poco de filosofía
notablemente similar a la budista de sus días.
Después de quince años aproximadamente en Asia, Jesús viajó de
regreso a Palestina vía Persia, Grecia, y Egipto. Según una
tradición, Jesús fue iniciado en los rangos más altos de la
Hermandad en la ciudad egipcia de Heliopolis. Después de completar
esa iniciación, Jesús regresó a Palestina, ahora convertido un
hombre de 29 o 30 años. Inmediatamente después de su retorno, Jesús
se embarcó en su ministerio público.
La división entre Jesús y sus anfitriones arios en India, al
principio, pareció no afectar adversamente la relación de Jesús a la
Orden Esenia. Sin embargo, no tomó mucho tiempo, para que surgieran
problemas. Jesús no compartía el ascetismo de sus hermanos esenios y
minimizaba la importancia de ritualismo por lograr la salvación
espiritual. Jesús se rodeó de patrocinadores esenios que creían
fuertemente en la venida de un Mesías y estaban determinados a tener
su inversión, Jesús, proclamaron a este nuevo Mesías. Jesús les
prohibió hacer esto.
Según el historiador Will Durant, Jesús,
“repudió toda la demanda
acerca de su descendencia” de David durante mucho tiempo, y “les
prohibió a los discípulos que lo llamaran el Mesías.. ... ”6
La
mayoría de los historiadores atribuye esas acciones al clima
político del tiempo. Palestina estaba bajo ocupación romana y los
romanos tomaron una visión oscura de las profecías hebreas, debido a
su política subida de tono. Jesús no deseaba enredarse con los
romanos, o eso se piensa.
Hay, sin embargo, una razón mucho mejor del porqué Jesús no quiso
ser proclamado el Mesías hebreo. Él sabía que la proclamación era
falsa y él estaba siendo honesto sobre esto. Jesús quiso traer a
Palestina una genuina ciencia espiritual del tipo que los
inconformistas (maverik) todavía estaban intentando en India. Por
consiguiente, Jesús se volvió un rebelde dentro de la misma
organización de la Hermandad que lo respaldaba.
El error más grande de Jesús era creer que podía usar los canales de
la corrompida red de la Hermandad para extender una religión
inconformista (Maverik), aun cuando él tenía muchos amigos cercanos
y queridos en la Orden Esenia. Jesús nunca tenía tiempo para
establecer su sistema religioso inconformista (Maverik), porque
algunos de los Esenios que lo respaldaban y, según la Biblia,
incluso algunos “ángeles” Custodiales rápidamente lo metieron en
problemas proclamándolo el Mesías. No le tomó mucho tiempo a los
romanos y a algunos líderes hebreos el arrestar a Jesús y llevarlo a
juicio.
Los hebreos objetaron sus poco ortodoxas ideas religiosas y los
romanos sus supuestas pretensiones políticas. Apenas tres años
después de haber empezado su ministerio, Jesús fue clavado a una
cruz. Aunque hay evidencia que Jesús no murió en la cruz sino que
sobrevivió para vivir el resto de su vida en el aislamiento, la
crucifixión acabó su ministerio público y pavimentó el camino para
que su nombre fuera usado para implantar las filosofías del Día del
Juicio a las que el se había opuesto. *
* Un juego de documentos fechados alrededor de 400 D.C., los
rollos
de Nag Hammadi fueron descubiertos en Egipto en 1945. Los pergaminos
son copias manuscritas de manuscritos originales más tempranos.
Muchos o todos estos originales fueron escritos no más tarde que 150
D.C., es decir, antes de los evangelios estándar del Nuevo
Testamento. Algunos estudiosos creen que muchos de los Pergaminos
Nag Hammadi son auténticos, y menos alterados, que los Evangelios
aceptados del Nuevo Testamento. Según el Nag Hammadi, Jesús no fue
clavado a una cruz, sino otro hombre, Simón, había sido diestramente
sustituido para sufrir el destino de Jesús. Cualquiera que fuera la
verdad de esto, lo que es importante para nosotros es simplemente
que la crucifixión señalaba el fin del ministerio público de Jesús.
Sin embargo, los problemas de Jesús no pueden atribuirse solamente a
quienes lo respaldaban. Ciertamente los propios errores de Jesús
contribuyeron a su caída. A pesar de sus inclinaciones
inconformistas (maverik), Jesús no fue capaz de deshacer
completamente dentro de él toda una vida de adoctrinamiento como
Esenio. Hay buena evidencia Bíblica y Apócrifa de que Jesús intentó
mezclar el dogma Custodial con los principios inconformistas (maverik).
Esto causará que falle cualquier esfuerzo honesto de una reforma
espiritual. La Biblia también indica que Jesús enseñó algunas de sus
lecciones a través de un sistema de misterios. La única esperanza de
Jesús habría sido romper completamente con la Orden Esenia y sus
métodos, pero es fácil entender porque lo no hizo. Su vida, familia,
y amigos eran demasiado una parte de esa organización.
Aunque Jesús tuvo un seguimiento lo suficientemente grande como para
llamar la atención, él no predicó el suficiente tiempo como para
entrar en los libros de historia de su propio tiempo. Su fama creció
después de la crucifixión, cuando sus discípulos viajaron lejos y
extensamente para establecer su nueva secta apocalíptica. Con la
ayuda continuada de sus “ángeles” Custodiales, los misioneros
cristianos hicieron de Jesús un nombre de marca, y crearon una nueva
poderosa facción que dividiría a los seres humanos más allá en
grupos de batalla.
El exitoso esfuerzo para hacer de Jesús un testaferro de una nueva
religión del Día del Juicio provocó la escritura apocalíptica más
famosa en el mundo occidental: el Libro de Revelaciones de San
Juan. Este trabajo que también es conocido como el Libro de
Revelaciones o Apocalipsis, es el último libro del Nuevo Testamento.
Deja a los cristianos con el mismo tipo de profecía horrible que con
la que dejaron a los hebreos al final del Antiguo Testamento:
La venida de una gran catástrofe global seguida por un Día del
Juicio.
El Libro de Revelaciones merece bien darle una mirada más
cercana.
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