10 Septiembre 2010
del Sitio Web
PreventDisease

traducción de Adela Kaufmann
Versión original
 

 

 

Rudolf Steiner, el fundador de la agricultura biodinámica y filósofo austriaco dijo que toda la tendencia a la inoculación va en una dirección en donde por fin será encontrada una forma de vacunar los cuerpos para que estos organismos no permitan la inclinación hacia el desarrollo de ideas espirituales y que todas sus vidas la gente crea únicamente en el mundo físico que percibimos con los sentidos.


En una conferencia el 27 de octubre 1917 titulada La influencia de los Espíritus Caídos en el Mundo (The Fallen Spirits' Influence in the World), Steiner indicó,

"Hoy, los cuerpos son vacunados contra una y otra cosa, en el futuro, los niños serán vacunados con una sustancia que sin duda será posible producir, y esto les hará inmunes, a desarrollar tontas inclinaciones relacionadas con la vida espiritual - 'tontas' aquí, por supuesto, a los ojos de los materialistas ".

"La gente es ahora vacunada contra la consunción, y en la misma forma serán vacunados en contra de cualquier inclinación hacia la espiritualidad.

Esto es simplemente para darle un ejemplo especialmente notable de muchas cosas que vendrán en un próximo y más distante futuro en este ámbito - con el objetivo de traer confusión a los impulsos que quieren transmitirse a la tierra después de la victoria de los espíritus de la luz. "

En La Caída de los Espíritus de la Oscuridad (The Fall of the Spirits of Darkness), Steiner explica,

"Llegará el tiempo - y puede no estar muy lejos – en el que se plantearán tendencias muy diferentes en un congreso, como el que se celebró en 1912 y la gente dirá: Es patológico de las personas siquiera piensen en términos de espíritu y alma. La gente del ‘sonido’ hablará solamente del cuerpo. Será considerado una señal de enfermedad para que cualquiera pueda llegar a la idea de algo como un espíritu o un alma.

Las personas que piensan así, serán consideradas como que están enfermas y- usted puede estar seguro de ello – una medicina será encontrada para ello. En Constantinopla, el espíritu fue hecho inexistente. El alma se hará inexistente con la ayuda de un medicamento. Teniendo un ‘buen punto de vista’, la gente se inventará una vacuna para influir en el organismo tan pronto como sea posible, de preferencia al nacer, para que este cuerpo humano jamás tenga siquiera la idea de que hay un alma y un espíritu.

Las dos filosofías de vida estarán en completa oposición. Un movimiento deberá reflejar cómo los conceptos y las ideas se pueden desarrollar para resolver la realidad del alma y del espíritu.

Los otros, los herederos del materialismo moderno, buscarán la vacuna para hacer el cuerpo "sano", es decir, hacer su constitución de tal modo que este cuerpo ya no hable tal basura como el alma y el espíritu, sino que tome una ‘buena’ visión de las fuerzas que viven en motores y en química y que dejen que los planetas y los soles surjan de las nebulosas en el cosmos.

Se les pedirá a los médicos materialistas que saquen las almas de la humanidad."

En otra conferencia, Hermandades Secretas y el Misterio del Doble Humano (Secret Brotherhoods and the Mystery of the Human Double) declaró,

"Un deseo surgirá (y se convertirá) en la opinión general: Todo lo que es espiritual, todo lo que sea del espíritu, es una tontería, es una locura!

Se harán esfuerzos para lograr esto, sacando remedios para ser administrados por medio de la inoculación al igual que las vacunas han sido desarrolladas como protección contra las enfermedades, sólo que estas vacunas influirán en el cuerpo humano de una manera que hará que se nieguen a dar cabida a las inclinaciones espirituales del alma.

Las personas serán vacunadas contra la inclinación de sostener ideas espirituales. Se harán esfuerzos en esta dirección; las inoculaciones serán puestas a prueba que ya en la infancia hará que la gente pierda cualquier necesidad para la vida espiritual ".

"Supongamos que exista hoy una vacuna que inocule a los niños a una edad temprana para guardarlos de tener un alma - ¿Qué señales de esto pudiéramos encontrar?”

Parecerá que existe alguna epidemia de niños nacidos, que no maduran como niños, que son incapaces de almacenar sentimientos de su primera infancia, que tendrían problemas para aclimatarse a otros seres humanos, que parecerán muy inteligentes, con fuertes habilidades de cálculo, con habilidades de precisión casi maquinal de dibujar y copiar.

¿No le suena esto familiar a las recientes preocupaciones de una repentina subida de la incidencia de autismo y su posible conexión a ciertos procesos de vacunación? ¿Será que ya comenzaron las vacunas anti-alma?"