por Jorge Ramos
11 Agosto 2014

del Sitio Web PreparemonosParaElCambio

 

 

 

 

 

 

 

Al Finalizar su Conferencia,

todos Estaban tan Avergonzados

que No Pudieron ni Aplaudir...
 

 

Es una breve charla de 6 minutos que convocó a un grupo de profesionales con la promesa de exponer los trucos y curiosidades que usa la industria de la alimentación para incrementar sus ventas.

 

Conforme avanza el vídeo, la vergüenza asoma en nuestras mejillas a la vez que lo hace en las de los asistentes.

 

Merece la pena ver el vídeo y las caras de sorpresa y rechazo de los espectadores ante la sinceridad y el cinismo de la conferenciante que ofreció a los asistentes una charla que no esperaban oír.
 


 

 

 


Quien está detrás de la charla es la organización Compassion in World Farming.

 

Y Kate Cooper era realmente una actriz actuando en el papel de experta en marketing para poder exponerles con frialdad y claridad cómo nos engañan para que compremos lo que no necesitamos y cómo nos manipulan para hacernos creer una producción idílica de alimentos que no se corresponde con la realidad.

 

Nos lo advierte claro:

"La producción de alimentos actual es crueldad sistematizada a una escala masiva y nosotros solo tenemos éxito porque todo el mundo está dispuesto a mirar hacia otro lado".

Estos son los 3 secretos del marketing de alimentos que detalla en el vídeo:

  1. Todo el mundo cree lo que pone la etiqueta pero conceptos como "natural", "de granja", "como lo hacía tu abuela" son engañosos.

     

  2. Se ha asociado el progreso a la industrialización de la comida y esto tiene un precio (el 50% de los antibióticos en el mundo se usan en animales de granja).
     

  3. La ignorancia voluntaria y protectora: los consumidores prefieren no saber de dónde vienen los alimentos.

¿Piensas que no has sido engañado aún? Si te ha gustado el vídeo déjanos enseñarte otros casos algo más sencillos y que puedes encontrar en el supermercado.

 

Por ejemplo, la legislación actual en España prohíbe usar "artesanas" o "bio" si la producción no es realmente artesana o biológica. Pero las marcas encuentran cualquier truco, por tonto que sea (o quizás porque nos toman por tontos) para engañarnos.

 

Mira estos dos ejemplos:
 

1 - Como no puede ser Biocentury ahora lo llaman "Bicentury" (igual que Biofrutas, que pasó a ser Bifrutas).

 


 


2 - Aún más "vergonzoso" es el caso de las Lays "Artesancis" ya que no pueden ser "Artesanas". A pesar de ello, a penas modificaron su tipografía para engañarte y hacerte seguir leyendo "Artesanas".