por
Manuel Freytas
2010
del Sitio Web
IARNoticias
Manuel Freytas
es periodista, investigador, analista de estructuras del
poder, especialista en inteligencia y comunicación
estratégica. Es uno de los autores más difundidos y
referenciados en la Web. |
Parte I
Cuidado - Hay visitantes extraños en tu cabeza
23 Febrero 2010
Las fuerzas dominantes están en guerra de conquista, y el nuevo
teatro de operaciones, la batalla final, ya no se desarrolla en
espacios físicos abiertos sino dentro de tu propia cabeza. Esa
guerra es invisible, si no tienes el programa y la configuración
mental para detectarla, te convertirás de a poco, y sin sospecharlo,
en un robot mutante de los conquistadores pensando que actúas por
voluntad propia.
Hoy abrimos un prólogo, una primera aproximación
filosófica, que abrirá a su vez un espacio continuado de varios
informes (más específicos) orientados a revelar, paso por paso, con
afán didáctico, el qué, el porqué y el para qué de esa guerra que se
desarrolla por todos los espacios mentales, psicológicos y sociales
de la vida que te tocó en suerte dentro del sistema. Del que,
seguramente, tampoco sabes mucho de que se trata.
Y al que
comenzarás a ver y a identificar en la medida que avances por los
diversos teatros de operaciones de esta guerra sin fronteras ni
espacios visibles que ha convertido a los humanos en víctimas y
carceleros de su propia existencia. Bienvenido a bordo, vamos a
navegar por los pliegues de lo desconocido: Tu cerebro. |
No lo sabes, pero eres el cobayo, el blanco y el módulo experimental
de una nueva estrategia de dominio para convertirte en un robot
satisfecho del mundo diseñado por tus propios conquistadores.
Mientras trabajas, mientras descansas, mientras piensas o ejecutas,
mientras te diviertes, un ejército invisible se apodera de tu mente,
de tu conducta y de tus emociones. No puedes hacer nada para
evitarlo, por la sencilla razón de que no lo ves ni sabes de que se
trata.
En esta guerra que se disputa dentro de tu cabeza el nuevo teatro de
operaciones es invisible, las acciones de conquista no son militares
sino psicológicas.
Los blancos ya no son físicos (como en el orden militar tradicional)
sino psicológicos y sociales. El objetivo ya no apunta a la
destrucción de elementos materiales (bases militares, soldados,
infraestructuras civiles, etc.), sino al control del cerebro humano.
El tuyo.
Ya no se trata de una guerra por conquista de territorios, sino de
una guerra por conquista de cerebros, donde eres el blanco
principal.
El objetivo ya no es matar, sino controlar. Las balas ya no
apuntan a tu cuerpo, sino a tus contradicciones y vulnerabilidades
psicológicas para convertirte en un soldado mental de su
civilización y de sus valores.
Durante las 24 horas, tu mente y su psicología están siendo
sometidas a operaciones extremas. Una guerra sin frentes ni
retaguardias, una guerra sin tanques ni fusiles, donde eres a la vez,
la víctima y el victimario.
A diferencia de las guerras militares, aquí el conquistador no está
afuera sino adentro de tus pensamientos y de tu conducta. En esta
guerra no hay cárceles ni encierros. El carcelero eres tú mismo.
Los conquistadores ya no necesitan torturarte para sacarte
información, tu mismo se lo provees por medios que ni siquiera te
imaginas.
Nadie busca tu cuerpo, a los conquistadores no le interesa tu alma,
no les interesa lo que pienses o digas. Les interesa tu procesador
humano, tu mente, para actuar sobre tus emociones, manipular tu
voluntad, programar paso por paso tus pensamientos y tu conducta.
Vaciarte de voluntad, convertirte en un zombie sedado y sin
perturbaciones.
Te quieren vivito, rozagante, lleno de ilusiones, con pautas
familiares, con pautas amigueras. Te quieren sin conflictos ni
contradicciones con el mundo que te rodea. Te quieren un animal
social, integrado, amable, dialoguista, pacífico. Un individuo sin
más trámite, un ser pensante sin mucho espacio, que más que
interrogarse sobre el mundo, se interrogue continuamente sobre sí
mismo.
La guerra para conquistarte, aunque no la veas ni sospeches, está
instalada durante las 24 horas de cada día que transcurres.
-
cuando te levantas
-
cuando te acuestas
-
cuando abres la heladera
-
cuando enciendes la TV o la compu
-
cuando te entretienes
-
cuando
haces el amor
-
cuando contraes matrimonio
-
cuando te divorcias
-
cuando estás de vacaciones
-
cuando te compras tu ropa favorita
-
cuando chateas
-
cuando besas a tus niños
-
cuando consumes fiestas y
productos,
...tienes una guerra de conquista funcionando en tu cabeza
sin que lo sepas.
Tu situación, varía objetivamente entre seguir como hasta ahora (víctima
y soldado de tu propia destrucción) o tomar la ofensiva para darle
la batalla a tus conquistadores en el terreno adecuado.
Para combatir con cierta chance contra tus conquistadores en esta
guerra invisible, es preciso primero conocer el teatro de
operaciones donde se desarrolla: Tu cabeza.
-
¿Qué es tu cabeza?
-
¿Cómo se configuran y programan tus pensamientos
y tu imaginación?
-
¿Qué te convierte en ser humano y no en animal?
-
¿Que
te convierte en objetivo de una guerra de conquista invisible que
tal vez te parezca ciencia ficción?
-
¿Porqué los conquistadores ya no utilizan las balas ni la fuerza
física para dominarte?
-
¿Y porqué y para qué te han convertido en variable de ajuste de una
guerra psicológica sin fronteras?
Si tienes paciencia, con afán didáctico, haciendo lo difícil en
llevadero, de a poquito, vamos a llegar al punto.
Parte II
Configuración mental - Descubriendo tu propia cabeza
25 Febrero 2010
No eres, como crees, un ente individual que funciona por ideas
venidas del cielo o de tu genio creativo. Lo que tú crees que son
tus pensamientos propios, vienen de un programa instalado en tu
cerebro que sólo descubrirás cuando sepas cómo funciona y cuáles son
sus contenidos.
Este informe es una clave, un primer paso, para
identificar el territorio donde operan, hacen estrategias y se
infiltran tus conquistadores invisibles. Es una puerta, un punto en
el horizonte, un primer intento, para que no te mueras convertido en
un robot satisfecho. |
¿En que andábamos? Ah sí, en tu cabeza. Tu cabeza, que no es poca
cosa.
Tu cabeza es un campo de experimentación y un teatro de guerra que
los conquistadores usan para dominar tu mente y controlar tu
conducta y tus emociones. Eres un cobayo, un embrión humano sin
terminar, del robot del futuro. Por ahora, sólo eres un consumidor
de ideas y programas ajenos, creyendo que piensas por ti mismo.
Tu cabeza, es por donde empieza todo. Un largo camino de
disciplinamiento, de programación niveladora, que te va a convertir
(si no eliminas a tus conquistadores de tu cerebro) en un modelo
final de robot satisfecho del sistema. Y lo peor, creyendo que
tienes pensamiento propio.
Seguramente me dirás con cara de sabelotodo ¡Tío, que dices, si yo
pienso por mí mismo? No, no piensas por ti mismo.
Piensas por medio
de un programa, cuya creación no te pertenece. Y no es un programa
de Windows o de esos que usas habitualmente para entretenerte con tu compu adosada a tu cerebro. Los conquistadores quieren que tú y los
demás piensen que razonas y actúas por tu propia voluntad. Quieren
que pienses que eres autosuficiente. Que te la sabes todas, porque
manejas tecnología digital de última generación.
Sabes, cuando (al
final de nuestro viaje) descubras la realidad por ti mismo, tu
asombro no tendrá límites. Y descubrirás un programa nuevo. El tuyo.
O seguramente también me dirás ¡A mí tu argumento no me cabe, yo soy
de izquierdas, y a mí este sistema no me jode!. Lamento informarte,
tu izquierda no llegó al cerebro. Sólo llegó a la ideología. Y la
ideología (que no es pensamiento racional) forma parte del programa
de los conquistadores.
Ellos quieren que tu pienses que puedes
cambiar el mundo con ideología y sin saber de que se trata el
sistema. Quieren que pienses que eres "antisistema" para adosar un
toque "alternativo" falso a su propio sistema de dominio. Tú eres un
cobayo más, cuando lo descubras, seguramente sustituirás la
ideología por la investigación y el pensamiento procesado. Sólo ahí
tendrás tu propio programa. Mientras tanto, eres territorio de
conquista creyendo ser tu propio conquistador.
Retomemos el hilo:
Durante las 24 horas, sin descanso ni
interrupción, eres el cobayo, el blanco y el módulo experimental de
una nueva estrategia de dominio para convertirte en un robot
satisfecho del mundo diseñado por tus propios conquistadores.
Primera consigna:
Si quieres conocer a tus conquistadores, sus
modus
operandi, sus estrategias, sus tácticas de infiltración, debes
conocer el territorio donde operan: tu cerebro (tu máquina
procesadora humana) y sus programas (tus pensamientos y conductas).
Hardware y software
Según
Wikipedia, el cerebro,
"es un órgano del sistema nervioso rico
en neuronas con funciones especializadas, localizado en el encéfalo
de los animales vertebrados y la mayoría de los invertebrados. En el
resto, se denomina al principal órgano ganglio o conjunto de
ganglios".
¿Y para qué se usa el cerebro? Wikipedia dice que para pensar.
¿Pensar qué y para qué? Wikipedia no se ocupa de eso, y si lo hace,
lo realiza por separado. Si quieres
profundizar en el tema tienes
que consultar con algún psicólogo. Que te va a atomizar el cerebro
con leves incisiones de psicoanálisis.
En primer lugar, no eres, como lo crees, un ente individual que
funciona por ideas venidas del cielo o de tu genio creativo. Lo que
tu crees que son tus pensamientos propios, vienen de un programa
instalado en tu cerebro que sólo vas descubrir cuando sepas cómo
funciona.
Primer axioma para llegar al conocimiento transformador:
Tú no
piensas, los programadores piensan por ti.
Pero no te aflijas, cuando más avances conmigo en esta aventura,
cuando más profundices en tu verdadera raíz, irás descubriendo como
te controlan, como te manejan hasta la última neurona y célula de tu
cuerpo.
Sólo un programa alternativo al de los conquistadores, un modelo
mental propio, puede devolverte tu humanidad perdida. Sólo cuando
tengas tu propio modelo mental, tu propio procesador cerebral y
programa, podrás ver a tus invasores. Antes no, son invisibles.
Segundo axioma:
Tú no eres contenido sino continente. Tu cerebro es
propio, pero tu mente no te pertenece. Pertenece al programa de tus
conquistadores. A tus verdugos invisibles.
¿Qué es cerebro y que es mente? Te lo defino sin Wikipedia: Tu
cerebro es el hardware y tu mente es el software.
¿Y quién programa tu mente? ¿Quién te adosa el software?.
Los conquistadores, ellos te plantan el software y te lo actualizan
durante las 24 horas.
Registra esto:
Tu mente es una herramienta, que funciona con un
software. Y un contenido (el software) que procesa tu cerebro. Tu
eres el dueño de la herramienta (el cerebro) pero el dueño del
contenido son tus conquistadores (los programadores).
La pregunta central:
¿Qué programación te plantan en el cerebro los
conquistadores para controlarte?
Aquí tenemos dos problemas conceptuales a resolver para avanzar:
Te crees que eres un inventor:
Pero tú no grabas nada propio en tu
herramienta mental, todo te viene configurado y predeterminado. Lo
único propio es tu cerebro (tu factor constitucional para
desarrollar conductas y pensamientos), tu mente es prestada,
prolijamente diseñada por tus conquistadores.
El punto:
No es saber que tienes una herramienta (tu mente) sino
quién te la carga y con que programa funciona durante las 24 horas.
Herramienta
¿Qué es la mente? Básicamente, tu herramienta procesadora de
supervivencia y de convivencia social .
Mira como la define Wikipedia:
"La mente es el nombre más común del
fenómeno emergente que es responsable del entendimiento, la
capacidad de crear pensamientos, el raciocinio, la percepción, la
emoción, la memoria, la imaginación y la voluntad, y otras
habilidades cognitivas".
Lo que seguramente no vas a encontrar en Wikipedia ni en ninguna
enciclopedia del sistema es quién programa (y para qué lo hace) los
contenidos de las funciones asignadas a la actividad mental.
Ninguna enciclopedia del sistema nos habla del contenido del
software que hace funcionar la mente humana. Sólo nos describe la
funcionalidad dinámica, pero no nos describe el qué y el para qué de
nuestros pensamientos.
En otras palabras, nadie describe al autor oculto de la programación
que rige nuestro sistema de comprensión y de realización del mundo
que nos toca vivir. Y eso no ocurre por casualidad.
La mente, en primer lugar, procesa ideas (el pensamiento) y resuelve
el marco de la conducta humana (la acción).
Cuanto dices voy al cine, voy a hacer el amor, voy a fumar un porro,
voy a hacer la revolución, o voy a concebir un hijo para que me
herede, recreas un aprendizaje vivencial (una conducta). Pero ese
aprendizaje no funciona en el aire. Para que exista pensamiento
abstracto (lo que nos diferencia de los animales) debe haber un
marco de referencia social.
O sea debe haber un contenido (los
valores referenciales) escrito dentro de tu software (el programa de
acción).
Aquí entonces, es donde tu mente (tu herramienta cerebral) ingresa
en el terreno social. En el terreno de la convivencia humana, donde
tú supones que te realizas y te construyes según tus propias ideas (que
más adelante vas a comprobar que no son tuyas). O sea, ingresas en
el terreno del programador (o sea, el conquistador), creyendo que
ingresas en una sociedad de libre albedrío.
¿Te empieza resultar arduo y pesado? ¡No sabes lo que me costó a mí!.
Pero sólo con sangre, sudor y lágrimas, irás detectando a tus
invasores hasta crear el antivirus para expulsarlos de tu cerebro.
¿Cómo se programa tu mente?
Dejando de lado a los curas que tienen la teoría de Dios, los
psicólogos del sistema (si has tenido la desgracia de conocerlos),
te dirán que tu mente y su recámara (el inconsciente) se programan a
partir de tu familia y de tu experiencia individual dentro de la
sociedad.
La pregunta que no pueden responder los psicólogos del sistema:
¿Quién
programa a la sociedad?
Ese es el punto, por donde se empiezan a filtrar tus conquistadores
mentales. A los que te voy a presentar más adelante.
Mientras tanto tienes que subir peldaños (de comprensión
sistematizada).
Configuración
Para conocer cómo funciona tu herramienta de pensamiento y acción
(la mente) debes conocer de dónde vienen los contenidos
referenciales de tus pensamientos y códigos de conducta social.
Es allí, donde se alojan y operan tus conquistadores invisibles.
¿Sabes que si al nacer te hubieran abandonado en una selva sin
contacto humano, no tendrías pensamiento humano?
¿Y que serías? Si lograras sobrevivir (si algún animal
hipotéticamente te alimentara y te diera calor hasta que pudieras
manejarte por ti mismo) no serías un ser humano, sino un animal
humano que desarrollaría en su cerebro un programa de comportamiento
y supervivencia adaptado al entorno.
Tendrías que cazar como los animales, gruñir como los animales, y
defender tu territorio matando como los animales. En otras palabras,
no serías un ser humano sino un animal con cerebro humano programado
por el entorno de supervivencia de la selva. Deberías sobrevivir
registrando en tu cerebro un programa aprendido de conductas
animales. Si en vez de caer en la selva, cayeras en un lugar vacío,
sin puntos de referencia, no serías nada. Estarías en blanco. No
tendrías pensamiento.
Eso te explica un primer punto:
Tienes pensamiento (mente), porqué
tienes punto de referencia, en este caso, no la selva sino la
sociedad en la que convives.
Y, eso a la vez te explica un segundo punto: Los contenidos de tus
pensamientos (valores referenciales) provienen de un registro
procesado de tu entorno social (y del mundo) de donde mamas tus
conductas de convivencia y de supervivencia.
Tus pensamientos, tus procesamientos mentales, no nacen del aire,
provienen de un código, de un marco referencial de reglas y normas
sociales aprendidas que le dan sentido y explican tus conductas y
acciones.
Tú no piensas desde ti, desde tu exclusivo ámbito individual, sino
que lo haces en interactividad con el mundo. Y el mundo, sólo se
hace real a partir del programa que cargas en tu cerebro procesador.
Y el mundo que llevas en tu procesador, es el mundo que tus
conquistadores quieren que veas. Es el mundo que diseñaron para que
tú hables, te comportes y pienses con valores y reglas de acción
funcionales a sus intereses, a su civilización, a sus estrategias de
control, establecidas como un "estado natural" de las cosas.
El mundo que se referencia en tu mente, es el mundo de tus
conquistadores. Toda tu actividad mental, se rige en esa escala, tu
visión del cosmos, tu visión individual, tu visión de la sociedad,
se rige en esa escala.
Captas y procesas información, experimentas emociones, interactúas
pensamientos, te comunicas, emites y recepcionas, normatizado dentro
de un marco referencial. Tu no eres tú, sino tú y tu programa de
procesamiento mental reflejado en el mundo. Y miras la realidad,
miras el mundo, según el marco de valores referenciales codificados
en tu mente.
Percibes los colores, las formas, los sonidos, las voces, y tienes
un concepto de lo humano y lo inhumano marcado por tu programa de
procesamiento mental.
El mundo, es lo que quieren que veas tus conquistadores. El mundo
que tú ves es el programa que tienes incorporado. Tu mente recopila
información, la procesa y la sintetiza dentro de parámetros fijados
dentro de un código (los valores referenciales normatizados).
Si te formatearas el cerebro, si te cargaras un nuevo programa,
verías y procesarías el mundo de otra manera. Seguirías utilizando
las mismas herramientas (cerebro, mente y procesamiento) pero tu
concepción y visión del mundo sería otra.
Ese programa aún no fue construido. Lo estamos construyendo, de a
poco, por paso, y sólo se va a poner en marcha cuando tus
conquistadores mentales dejen de ser invisibles. Cuando puedas
comprender por ti mismo que sólo eres un programa, y puedas tomar tu
propia decisión de cambiarlo.
Pero antes, tienes que identificar a tus conquistadores, el primer
paso para conocer tu propia identidad. En eso estamos. Si me sigues,
comenzarás a mirar y a pensar el mudo de otra manera.
Y llegamos a la síntesis por hoy:
-
Tu cerebro es el medio, tu mente la herramienta y el contenido.
-
Existes, tienes vida mental y conducta social, porque tienes un
programa y un marco referencial de pensamiento y de acción
registrado en tu mente.
-
Ese programa, sus contenidos, son el reflejo de la sociedad que te
posibilitó ser un animal pensante, tener vida social y tomar
decisiones.
-
Pero tus puntos de referencia asociativos no son tuyos sino de la
sociedad y del mundo que te programó.
¿Pero quién programó a la sociedad y al mundo que te programó?
Aquí es donde llegamos al territorio de los conquistadores:
Los
programadores de contenido de tu modelo mental.
En el próximo informe, vas a ingresar lentamente a una palabra que
rige tu vida: Sistema.
Comenzarás a ver la fragua y el universo donde te modelaron.
Lo que hizo que no seas un pensamiento propio, sino un sistema
alimentado por un pensamiento ajeno, operado, durante las 24 horas,
por tus conquistadores invisibles para convertirte en un robot.
Parte III
Modelo mental - Desconfía de tus ideas
20 Abril 2010
Miras y analizas el mundo, interactúas con otros humanos, te
realizas socialmente, consumes, no consumes, vives, formas familia,
te jubilas, te mueres, según el marco de valores referenciales de un
software implantado en tu cerebro.
Y a pesar de que te hiciste todas
las preguntas existenciales, hay una que te falta: ¿Quién programa
mi cerebro?
Si respondes "yo", te saltearías una página clave. |
Tus pensamientos, tus procesamientos mentales y los contenidos que
los referencian, no nacen del aire, provienen de un código, de un
marco referencial de reglas y normas sociales aprendidas que le dan
sentido y explican tus conductas y acciones.
¿Sabes que si al nacer te hubieran abandonado en una selva sin
contacto humano, no tendrías pensamiento humano?¿Y qué serías?
Si lograras supervivir (si algún animal hipotéticamente te
alimentara y te diera calor hasta que pudieras manejarte por ti
mismo) no serías un ser humano, sino un animal humano que
desarrollaría en su cerebro un programa de comportamiento y
supervivencia adaptado al entorno.
Tendrías que cazar como los animales, gruñir como los animales, y
defender tu territorio matando como los animales.
En otras palabras, no serías un ser humano sino un animal con
cerebro humano elemental programado por el entorno de supervivencia
de la selva.
Deberías sobrevivir registrando en tu mente un programa aprendido de
conductas animales. No serías humano, serías animal, sin el contexto
socializado del humano.
En cambio, si en vez de caer en la selva, cayeras en un lugar vacío,
sin puntos de referencia, no serías nada. Estarías en blanco. No
tendrías pensamiento. Ni humano ni animal.
Eso te explica un primer punto:
Tienes pensamiento (mente y
reflexión), porqué tienes punto de referencia, en este caso, no la
selva sino la sociedad y el mundo en el que convives.
Y, eso a la vez te explica un segundo punto: Los contenidos de tus
pensamientos (valores referenciales) provienen de un registro
procesado de tu entorno social (y del mundo) de donde mamas tus
conductas de convivencia y de supervivencia.
Tú no piensas desde ti, desde tu exclusivo ámbito individual, sino
que lo haces en interactividad con el mundo.
Y el mundo, sólo se
hace real y adquiere sentido a partir del programa y los marcos
referenciales (el contenido individual social) que cargas en tu
cerebro procesador.
El sistema
¿Y quién elabora los contenidos referenciales del programa insertado
en tu cerebro procesador?
El sistema capitalista, cuyos valores referenciales económicos,
políticos, sociales, culturales y morales rigen la civilización, hoy
nivelada universalmente como "mundo único".
El mundo que tú ves (y procesas), y que la maquinaria mediático-cultural -
te presenta como un "orden natural", está conformado por los
programas y los contenidos referenciales del sistema capitalista,
que tienes incorporado en tu cerebro.
El mundo, es lo que quiere que "veas, sientas y pienses" el sistema
que parametra tus pensamientos y marcos de acción en la sociedad en
que vives. Que no es otra cosa, que el fiel reflejo de los
contenidos y los valores del sistema capitalista que hegemoniza los
contenidos de tus conductas y pensamientos.
Tu mente recopila información, la procesa y la sintetiza dentro de
parámetros fijados por un código (los valores referenciales
normatizados del sistema capitalista).
Tu cerebro acopia y procesa información, experimentas emociones,
interactúas pensamientos, te comunicas con otro, emites y
recepcionas, a partir de un código y de un programa de pensamiento y
acción, cuyo marco referencial no nace de tu cerebro sino del
sistema (capitalista) que domina el mundo como "civilización única".
Miras la realidad, miras el mundo, según el marco de valores
referenciales codificados en tu mente. Y quien carga esos programas,
es el sistema capitalista que le confiere contenidos a tu cerebro
mediante,
-
un "modelo económico"
-
un "modelo social"
-
un "modelo
cultural"
-
un "modelo moral",
..del cual se nutren todos tus
pensamientos y acciones.
Modelo mental
En el "modelo mental" (siempre oculto) se resume toda nuestra
configuración conductal y sistema de ideas y creencias parametradas
y realizadas a partir de las herramientas (mentales y psicológicas)
programadas en nuestro cerebro por el capitalismo.
Estas normas de pensamiento y acción social impresas en nuestro
cerebro a través de programas, son aceptadas, sin cuestionar, como
una expresión de "ordenamiento social natural" y sin ningún
cuestionamiento sobre el contenido de sus fines y sobre la validez
de su funcionalidad y el para qué de sus instrumentación.
Quien rechace y ponga en duda la legitimidad del "orden social" (reglas
institucionales y culturales del sistema capitalista) establecido
como "norma universal" de pensamiento y acción, se expone a un
dictamen último y feroz de los
psiquiatras y psicólogos del sistema:
Psicópata.
Esta palabra, a modo de resolución última, marca la frontera final
entre "normalidad" y "anormalidad" establecida por la escala de
valoración social y cultural del sistema que crea sus propias
herramientas para imponer sus valores en la mente y en la psicología
humana.
La concepción de "normalidad" o "anormalidad" no se basa en un
dictamen científico, sino en una conclusión ideológica alimentada
por las reglas normatizadas de sistema cuyo cumplimiento, o no
cumplimiento, marca la inclusión o la exclusión de un individuo
dentro de la sociedad.
El dominador en la cabeza
Los medios, los comunicadores del sistema, son activadores
interactivos que "actualizan" a cada segundo el programa del modelo
mental en la cabeza de los dominados-alienados.
Su poder controlador, contenedor y represivo, se posibilita por el
manejo de la hegemonía del mensaje a través del control de los
medios de producción del mensaje.
Contra eso no se puede luchar, salvo que tomes el poder en tu propio
cerebro y construyas otro mensaje con "otro programa".
Esa, en términos técnicos, sería la revolución
(re-evolución), el cambio del
programa en la cabeza.
Que si no se acompaña con un cambio de la estructura externa del
sistema (la sociedad planetaria) no cumple ninguna función ni
correlato con la realidad.
Los antiguos revolucionarios cambiaron el programa en la realidad,
pero lo dejaron en la cabeza. Por eso el proceso no cerró.
La nueva izquierda, por ejemplo combate el modelo económico, el
modelo político, pero no combate el modelo social, cultural y
mediático (resumido en la sociedad de consumo) implantados como "modelo
de pensamiento" en el cerebro de los humanos del sistema.
Por eso el análisis de la izquierda (en todas sus variantes), en
términos funcionales y teóricos, es incompleto.
Precisamente porque no aborda del sistema capitalista como programa
metido como regla de valores normatizados y aceptados en la cabeza
del humano.
Esta carencia de análisis totalizado del sistema, lleva a la
izquierda una parcialización en sus posturas estratégicas,
doctrinarias y organizativas.
En términos reales, mientras el dominio del sistema capitalista está
en la cabeza, la izquierda plantea como una salida la guerra contra
la "derecha" militar y política, una concepción superada tras el fin
de la guerra fría, cuando el sistema se unificó en "mundo único".
De esta manera, sin programa propio, sin análisis totalizado del
sistema como programa implantado en la cabeza del humano capitalista,
la izquierda pasa a ser una alternativa "por izquierda" del mismo
programa.
Programa alternativo
Si quisieras salirte del sistema que rige el llamado "mundo humano"
de la civilización capitalista, tendrías que cargar otro programa "alternativo"
en tu cerebro, previo formateo de tu máquina procesadora (en sentido
figurado).
Entonces ya no serías un "psicópata" (sin programa alternativo) sino
un "revolucionario" con un programa y un contenido referencial de
pensamiento y acción propios, que te convertiría en dueño de tu
propio cerebro.
Pero allí se te presentaría un problema:
Si quisieras insertar tus
propios programas y marcos referenciales de acción y de pensamiento
en el cerebro humano, hoy masivamente programado por los "modelos" y
los valores del sistema capitalista, tendrías primero que terminar
con los instrumentos de dominación y de control del poder
capitalista.
En otras palabras, tendrías que terminar con,
-
el "modelo económico"
-
el "modelo político"
-
el "modelo militar"
-
el "modelo jurídico"
-
el
"modelo científico"
-
el "modelo cultural"
-
el "modelo social"
-
el "modelo
mental",
...con los que hoy se articula el dominio del
capitalismo en
la cabeza del humano.
¿Te parece fantástico?
Lo que te acabo de describir tiene un nombre: Revolución.
Hasta ahora, los distintos experimentos que se hicieron fracasaron
por una razón matemática:
Nadie consiguió cambiar el "modelo mental"
del sistema capitalista nivelado como "mundo único" en la cabeza del
humano.
Dije, hasta ahora:
El sistema y sus procesos continúan, y ninguna
ciencia podría predecir que va a pasar cuanto el Apocalipsis que se
avecina (por implosión, en sus variantes económica, medio ambiental,
nuclear o social) dejen al capitalismo "sin sistema".
Entonces habrá llegado la hora de los programas y sistemas "alternativos".
Para eso nos preparamos.
Continuará...
|