por Tanaaz 
Mayo 2018

del Sitio Web ForeverConscious

traducción de Adela Kaufmann
Versión original en ingles

Ilustraciones de la imagen

de Josephine Wall

Si bien siempre debemos cuidar y tratar al planeta Tierra con respeto y amor, en los próximos años será aún más importante dirigir nuestra atención y conciencia hacia el estado de nuestro hogar.

De 2018 a 2026, hay cambios cósmicos ocurriendo, que nos ayudarán a todos a despertar a cómo nuestras acciones y pensamientos están dañando y ayudando al planeta.

Estos cambios cósmicos incluyen que el planeta Urano se mueva hacia el signo de Tauro:

Tauro es el signo que gobierna sobre el planeta Tierra y Gaia, la diosa de nuestro hogar en este Universo.

En la mitología griega antigua, Urano y Gaia eran amantes y es esta reunión y unión de energía lo que va a activar el despertar a cómo hemos estado tratando nuestro hogar. 

Bajo esta energía, no vamos a poder ignorar las señales de advertencia que Gaia nos ha estado dando.

Ya no podemos pretender que ciertas prácticas no están causando daños a largo plazo:

ha llegado el momento de ver la verdad.

Durante años, nuestro planeta ha sido objeto de abuso y exceso de trabajo, durante años la hermosa naturaleza de este planeta se ha visto comprometida.

Pero no se trata de señalar con el dedo a una sola persona u organización, sino que se trata de poseer el hecho de que somos todos responsables, y todos tenemos un papel que desempeñar.

Podemos aparecer separados, pero todos somos Uno. Y todos nuestros pensamientos, vibraciones y acciones crean la vida que experimentamos en este planeta. Juntos, todos estamos jugando un papel en dar forma a la realidad en la que vivimos. 

Cómo pensamos , sentimos y actuamos no solo afecta la realidad que vemos y experimentamos, sino que también refleja la realidad para el todo también.

Todos estamos conectados y trabajando en equipo, y depende de todos nosotros cambiar la realidad a través de elevar nuestra vibración y nivel de conciencia.

• Si bien es necesario tomar medidas para proteger el planeta, esto es mucho más profundo.

   

• Si bien todos debemos ahorrar agua, elegir productos sostenibles, reciclar, caminar o andar en bicicleta, etc., también debemos observar la contaminación energética que emana de nuestro ser.

Esta contaminación energética proviene de nuestra vibración y de cómo nos tratamos a nosotros mismos, a los demás, a los animales y a las plantas.

Cuando llevas tu vida con amor en el asiento del conductor, tu vibración ayuda a sanar a los demás y a este planeta. Pero cuando permites que el miedo entre en el asiento del conductor y eres impulsado por tu ego, reduces tu vibración y, en consecuencia, reduces la vibración del planeta. 

Por supuesto, no es tan blanco y negro como este, pero ser consciente de tu energía no solo es bueno para ti, sino que también es bueno para todos y para el planeta en su conjunto. 

En los próximos años habrá un aumento de la conciencia sobre cómo tratamos a nuestro planeta y a los seres que lo habitan.

Las cosas que hemos podido ignorar serán cada vez más difíciles de ignorar, y la Tierra también puede responder por sí misma mostrándonos cómo estamos causando el daño y caos. 

Esto no es nada a lo que hay que temer, en su lugar tenemos que levantarnos y comenzar a encontrar lo sagrado en Gaia, nuestra Madre Tierra.

Todos los días, el suelo debajo de ti te ayuda, todos los días eres alimentado por esta Tierra, y ésta te nutre. Al realmente honrar esto, al realmente sentir esto, todos podemos volver a encontrar lo sagrado de nuevo. 

Hace años, nuestros antepasados adoraban la Tierra y la trataban como un ser vivo que respira.

Esto ha sido olvidado y olvidado por muchos, pero ahora eso está cambiando y ahora estamos siendo guiados para abrir nuestras mentes, nuestros corazones y escuchar lo que nuestra Madre nos dice. 

Lo mejor que puedes hacer para avanzar es ser consciente de tu vibración energética tanto como sea posible, y tomar medidas que causen el menor daño al planeta.

Por supuesto, la mayoría de nosotros no podemos evitar conducir un automóvil, comprar plásticos, etc., pero la simple conciencia atenta y el cambio de algunos hábitos pueden hacer una gran diferencia.

Estar agradecidos por el planeta Tierra, tratarlo como algo sagrado, pasar tiempo en la naturaleza e irradiar amor desde tu corazón son todas formas en que podemos hacer una diferencia duradera y apoyar el surgimiento de una nueva forma de vida.