por Dr. Joseph Mercola
01 Junio
2022
del
Sitio Web
Mercola
Versión
en ingles
Historia en Breve
-
Los
investigadores encontraron 39 microplásticos en las
muestras quirúrgicas de pulmón de 11 personas, de las 13
que se analizaron. Entre ellos, se encontraron 12 tipos
que suelen estar presentes en botellas de plástico,
hilos, ropa y cubrebocas quirúrgicos
-
Un
especialista en mascarillas respiratorias afirma que los
cubrebocas quirúrgicos no cumplen la definición legal,
sino que son "barreras respiratorias" y enfatizó que
desprenden microplásticos que son tan pequeños como para
inhalarlos
-
Se
llevó a cabo un análisis de datos de diversos casos,
hospitalizaciones y muertes en Kansas, el cuál reveló
que los condados en los que
se exigía el uso de cubrebocas
tenían tasas de mortalidad más alta que los que no
imponían esa norma
-
Una
vez que se inhalan o se consumen, los microplásticos
pueden llegar al torrente sanguíneo o, incluso, cruzar
las barreras de la membrana si se trata de partículas
muy pequeñas. De igual manera, es posible encontrarlos
en las primeras heces de un bebé, lo cual sugiere
exposición materna; un estudio que se realizó en
animales reveló que había partículas de nanopoliestireno
en el tejido del cerebro, hígado, riñón y pulmón del
feto después de 24 horas de que su madre se expusiera a
las mismas
En todas partes se encuentran pequeños trozos de plástico del tamaño
de una semilla de sésamo o aún más pequeños.
Los titulares de las
noticias a menudo muestran bolsas de plástico intactas, anillos y
botellas como las principales amenazas para el medio ambiente, y de
hecho son perjudiciales para la vida marina y más, pero los
pedazos de microplástico más pequeños e insidiosos pueden
ser aún más dañinos.
Un estudio 1
de Gran Bretaña 2 encontró microplásticos en los pulmones
de 11 pacientes, de los 13 que se analizaron.
En 2013, se produjeron 299 millones de toneladas de plástico a nivel
mundial, gran parte de las cuales terminaron en los océanos, lo que
amenaza la vida silvestre y el medio ambiente. 3
Esa cifra aumentó a 418
millones de toneladas en 2021. 4
En 2018, Estados Unidos
produjo 35.7 millones de toneladas de plástico y envió 27 millones
de toneladas a los rellenos sanitarios, lo que representa el 18.5 %
de todos los residuos municipales. 5
Se sabe que las
sustancias químicas que se encuentran en los productos de
plástico actúan como disruptores endocrinos. 6
Dichas sustancias
tienen una estructura similar a la de las hormonas sexuales
naturales e interfieren con el funcionamiento normal de las
mismas. 7
Esto es un problema,
en particular, para los niños que se encuentran en una etapa de
crecimiento y desarrollo.
El precio que la sociedad
pagará por el uso y distribución de partículas de plástico aún no se
ha cuantificado.
La evidencia sugiere que
la exposición a largo plazo a sustancias químicas que alteran el
sistema endocrino, como los ftalatos, representa un peligro para la
salud y la fertilidad.
Pero cada año crece la cantidad de plástico que termina en el medio
ambiente, ya que los fabricantes siguen elaborando productos
desechables porque los consumidores se niegan a dejar de
utilizarlos.
En un momento en que los
grupos de defensa advierten que el plástico representa una gran
amenaza 8 y se ha convertido en un grave problema
mundial, 9 la 'pandemia' del COVID-19 llegó para emporar
aún más esta situación.
Un estudio
encuentra microplásticos en los pulmones de 11 pacientes
Las investigaciones que se han realizado durante varias décadas han
demostrado que las personas respiran micropartículas de
contaminantes que se encuentran en el aire y los consumen a través
de los alimentos y el agua.
Una autopsia que se llevó
a cabo en 2021 10 reveló que había microplásticos en 13
de las 20 personas que se analizaron y hace más de 20 años, un
estudio de cáncer de pulmón que se realizó en Estados Unidos en 1998
11 encontró plástico y fibras en 99 de las 114 muestras
de pulmón que se examinaron.
De acuerdo con el Museo de Historia Natural, 12
los microplásticos
miden menos de 5 milímetros...
Se refieren a ellos como,
"uno de los mayores
desastres que ha provocado el hombre actual".
Aunque tienen usos
industriales, la mayoría se forman cuando se separan de productos de
plástico más grandes en el medio ambiente.
Los microplásticos
primarios son los que se producen en tamaños pequeños para uso
industrial, como en arenadora, cosméticos o ropa de microfibra.
Los microplásticos
secundarios se producen cuando se descomponen productos
plásticos más grandes debido a que se expusieron a factores de
estés ambiental. 13
Un equipo de científicos
de la Hull York Medical School se dispuso a analizar el impacto que
sufre el tejido humano cuando se inhalan microplásticos.
En el pasado, diversas
investigaciones encontraron fibras sintéticas en el tejido pulmonar,
sin embargo, los investigadores escribieron que no había estudios
sólidos que confirmaran la presencia de microplásticos en el mismo.
El estudio que nos
ocupa analizó el tejido pulmonar de 13 pacientes que se habían
sometido a cirugía de pulmón.
Se descubrió contaminación por microplásticos en 11 de los 13
pacientes que se analizaron. 14
El equipo encontró 39
piezas en 11 muestras de tejido pulmonar.
Laura Sadofsky,
profesora titular e investigadora principal del estudio, comentó lo
siguiente acerca de la importancia de los resultados: 15
"En el pasado, ya se
habían encontrado microplásticos en muestras de autopsias de
cadáveres humanos, no obstante, este es el primer estudio sólido
que revela la presencia de estos en los pulmones de personas
vivas.
También demuestra que
se encuentran en las partes inferiores del pulmón.
Nadie imaginó que
pudieran depositarse en las vías respiratorias de los pulmones
debido a que son muy estrechas, sin embargo, es evidente que
existe esa posibilidad.
Estos datos representan un avance importante en el campo de la
contaminación del aire, los microplásticos y la salud humana.
Ya que caracterizamos
los tipos y niveles de microplásticos que encontramos, esto nos
da a conocer las condiciones realistas a considerar en los
experimentos de exposición en el laboratorio, con el objetivo de
determinar los impactos en la salud".
Los autores del estudio
descubrieron que los pacientes albergaban 12 tipos de
microplásticos,
"los cuales tienen
diversos usos y suelen estar presentes en envases, botellas,
ropa, cuerdas o hilos y numerosos procesos de fabricación.
Asimismo, los hombres
presentaron niveles mucho más altos de microplásticos que las
mujeres". 16
Otro hallazgo inesperado
fue que se encontraron mayores cantidades en las partes inferiores
del pulmón.
Los tipos de
microplásticos que se encontraron en mayor proporción fueron el
polipropileno (PP)
y el tereftalato de polietileno (PET).
17
Este descubrimiento
apunta al uso generalizado de cubrebocas quirúrgicos de color
azul que se han usado durante la 'pandemia', ya que el PP es el
componente plástico que más se utiliza en su elaboración.
Experto explica que
las mascarillas que se usan como protección contra el COVID no
cumplen la función de un cubrebocas
Un estudio 18 publicado en 2021 analizó los riesgos de
usar cubrebocas quirúrgicos e inhalar microplásticos.
Los investigadores
descubrieron que reutilizar los cubrebocas podría implicar un mayor
riesgo de inhalar partículas microplásticas y que las las
mascarillas N95 liberan la menor cantidad de microplásticos, en
comparación con no usar un cubrebocas.
Afirmaron que:
"el uso de cubrebocas
quirúrgicos, de algodón, de moda y de carbón activado presenta
un mayor riesgo de inhalar microplásticos similares a las
fibras..." 19
...y, a pesar de eso,
Chris Schaefer, especialista en mascarillas respiratorias y
experto en capacitación, asegura que
los cubrebocas que usan millones de personas
en todo el mundo no tienen las características apropiadas
para cumplir su función. 20
Schaefer los denomina "barreras respiratorias" ya que "no cumplen
con la definición legal" de un cubrebocas.
Enfatizó que los
cubrebocas quirúrgicos que se utilizan en Canadá, Estados Unidos y
el mundo, están liberando microplásticos que son tan pequeños como
para inhalarse. 21
"El diseño de un
cubrebocas [adecuado] cuenta con aberturas frente a la boca y la
nariz para garantizar que las personas respiren sin dificultad
ni esfuerzo.
Cuando no es así, se
cierra una barrera respiratoria sobre la boca y la nariz y el
dióxido de carbono que exhala permanece ahí, lo cual lo obliga a
inhalarlo de nuevo; esto reduce sus niveles de oxígeno y provoca
un exceso de dióxido de carbono.
Es por ello que no
son seguros".
Schaefer alienta a las
personas a cortar uno para apreciar las fibras sueltas que se
desprenden con facilidad al interior del producto. 22
"El calor y la
humedad que almacenan provocan que la degradación de esas fibras
las fragmente aún más.
En verdad, las
personas están inhalando [partículas microplásticas].
Durante los últimos
dos años, he escrito mucho sobre los riesgos de estas barreras
respiratorias y he hablado con científicos [y otras] personas
sobre la inhalación de fibras.
Si tiene la sensación de tener un poco de pelo de gato en la
parte posterior de la garganta o algún tipo de irritación
después de usar cubrebocas, eso significa que está inhalando
fibras".
Señaló que cualquier
persona que se exponga a este tipo de fibras en su entorno laboral
debe usar protección.
Pero, en lugar de eso,
las personas usan productos que implican un mayor riesgo de inhalar
fibras que,
"se fragmentan en
partículas muy pequeñas y, bueno, supongo que, después de
algunos años, descubriremos los efectos de esto en la función
pulmonar de las personas, así como en la sobrecarga de toxicidad
en su cuerpo". 23
Los cubrebocas
también incrementan la tasa de mortalidad por COVID-19
El Dr. Zacharias Fögen, quien es un médico alemán, publicó un
estudio 24 en la revista arbitrada Medicine, que analizó
los datos de los condados de Kansas y comparó las zonas en las que
se exigió el uso de cubrebocas contra las que no lo hicieron.
Descubrió que el uso obligatorio de cubrebocas aumentó la tasa de
mortalidad en un 85 %.
La tasa de mortalidad
permaneció un 52 % más elevada en los condados que exigían el uso de
cubrebocas, incluso cuando el análisis tomó en cuenta varios
factores de desviación.
Fögen escribe que un
análisis posterior de los datos demostró que el 95 % del efecto,
"solo se puede
atribuir al COVID-19, así que no se trata de CO2,
bacterias ni hongos por el uso de cubrebocas". 25
Él denominó esto como el
Efecto Foegen, en el que se vuelven a inhalar las partículas virales
atrapadas en las gotas que se depositan en el cubrebocas, lo que
empeora los resultados.
Menciona lo siguiente:
26
"El hallazgo más
importante de este estudio es que, aunque la idea aceptada es
que hay menos muertes debido a que los cubrebocas reducen las
tasas de infección, este no fue el caso.
Los resultados de
este estudio sugieren que el uso obligatorio de cubrebocas
ocasionó que las muertes aumentaran un 50 % (1.5 veces) en
comparación con las zonas que no impusieron esta norma.
Este mandato en sí mismo aumentó la tasa de letalidad en
1.85/1.58 o en 85%/58% en los condados que lo impusieron.
De igual forma, se
descubrió que casi todas estas muertes adicionales se
atribuyeron al COVID-19.
Este estudio reveló
que el uso de cubrebocas podría representar un
gran riesgo para las personas, así que no vale la pena usarlos
para reducir la tasa de infección.
Por lo tanto, el uso de cubrebocas podría ser inadecuado, si no
contraindicado, como intervención epidemiológica contra el COVID-19".
Fögen señala otros dos
estudios importantes que arrojaron resultados similares en lo que
respecta a tasas de letalidad.
El primero se publicó en
la revista Cureus 27 y no reveló ninguna relación entre
el número de casos y el uso de cubrebocas en Europa, pero sí se
asoció con las muertes.
El segundo estudio 28 se publicó en PLOS|One y demostró
una relación entre los resultados negativos de COVID y el uso de
cubrebocas en 847 000 personas de 69 países.
Los investigadores
estimaron que dejar de exigir el uso de cubrebocas ayudaría a
reducir el número de infecciones, sin tener ningún efecto sobre las
hospitalizaciones o las muertes.
Los plásticos
causan daño y muerte celular
Varias investigaciones previas han destacado el impacto que tienen
los microplásticos en el medio ambiente, la vida silvestre y la
salud humana.
Sin embargo, muchos
estudios no han establecido una relación entre consumir o inhalar
microplásticos y enfermedades específicas, pero señalan algunas
lagunas en la investigación y recomiendan realizar más estudios al
respecto. 29
Un artículo 30 publicado en abril de 2022 sugiere la
causa de que estos datos no sean consistentes.
Los datos de laboratorio
fueron los primeros en revelar que los microplásticos dañaban las
células humanas a niveles relevantes para la cantidad de partículas
que consumen o inhalan las personas.
El estudio fue un análisis de metarregresión sobre el impacto
toxicológico en las células humanas a través de 17 estudios que
compararon el nivel de microplásticos que causan daño celular.
Además, los
investigadores encontraron que eran los microplásticos irregulares
los que causan daño celular y no los microplásticos esféricos que
suelen usarse en los experimentos de laboratorio.
Esto sugiere que los datos de investigaciones pasadas de laboratorio
en las que se usaron microplásticos esféricos no representan con
precisión el daño que los microplásticos pueden causar en la salud
humana.
Evangelos Danopoulos,
de la Facultad de Medicina de Hull York en el Reino Unido, dirigió
el estudio y comentó por qué hay cada vez más investigaciones de
esta índole:
"Cada vez son más y
esto se debe a una buena razón. Todos los días entramos en
contacto con estas partículas: las comemos, las inhalamos.
Y, en realidad, no
sabemos cómo reaccionan con nuestro cuerpo una vez que entran a
él". 31
¿En qué parte
del cuerpo residen los contaminantes plásticos?
Los investigadores descubrieron que los microplásticos más pequeños
no solo se depositan en los pulmones y el
intestino, sino que también pueden flotar en la sangre.
Investigadores de los
Países Bajos analizaron muestras 32 de 22 voluntarios
sanos y encontraron partículas de plástico en el 77 % de las mismas.
Estas partículas tenían
una dimensión igual o mayor a los 700 nanómetros, un tamaño que se
puede absorber a través de las membranas.
Algunas muestras
contenían hasta tres tipos distintos de plástico...
El autor del estudio dijo
para The Guardian:
"nuestro estudio es
la primera señal de que tenemos partículas de polímero en la
sangre; y eso es un resultado muy innovador.
Pero tenemos que
ampliar la investigación y aumentar el tamaño de las muestras,
la cantidad de polímeros evaluados, etc". 33
Los investigadores
escribieron que también es necesario hacer más estudios para
descubrir dónde terminan las partículas de plástico que entran al
cuerpo.
Afirmaron que, en
términos científicos, es plausible que las partículas de plástico se
transporten por el torrente sanguíneo y lleguen hasta los órganos,
ya que se basaron en datos que demuestran que las perlas de
poliestireno de 50, 80 y 240 nm, al igual que el polipropileno de
tamaño micro, pueden penetrar la placenta humana. 34
Después de que estos microplásticos atraviesan la barrera de la
placenta, terminan en las primeras heces del recién nacido, lo cual
significa que migran de su torrente sanguíneo al intestino.
Un estudio piloto 35
publicado en 2021 analizó la magnitud de la exposición humana a los
microplásticos y reveló haber encontrado tereftalato de
polietileno (PET) en muestras de meconio, presentes en la
primera deposición de un bebé.
Las heces de los bebés contenían una cantidad de PET 10 veces mayor
que la que se encontró en muestras de adultos, lo que sugiere que el
sistema de los bebés alberga el plástico que absorben de su madre.
Todavía se estudia
cómo afectará esto a la salud humana...
Un estudio que se realizó
en animales reveló que solo 24 horas después de la exposición por
inhalación de la madre, se podían detectar partículas de
nanopoliestireno en la placenta, el cerebro, los pulmones, el
hígado, el corazón y los riñones del feto. 36
Parece que inhalar o consumir microplásticos permite que las
micropartículas accedan al torrente sanguíneo y, después, a los
órganos vitales.
A pesar de que los
investigadores han demostrado que los microplásticos irregulares que
se encuentran en el medio ambiente provocan daños y muerte celular,
aún no se han identificado los efectos que tienen a largo plazo
sobre las enfermedades.
Aun así, puede estar
seguro de que el daño y la muerte celular tienen graves
consecuencias.
Fuentes y
Referencias
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International 2022; doi.org/10.1016/j.envint.2022.107199 3.2
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