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			08 Marzo 2018 
			del 
			Sitio Web 
			Tendencias21 
			
 
 
 
  Imagen de la corona solar.
 
			Foto: 
			NASA.
 
 
 Las ondas magnéticas
 
			rompen en las capas más altas
			 
			calentando su atmósfera...
 
			  
				
					
						
							
							Analizando en 
							detalle las manchas solares, un equipo de astrónomos 
							ha descubierto que las ondas magnéticas que se 
							propagan por la atmósfera del Sol suben desde la 
							superficie hasta las capas más altas, donde liberan 
							enormes cantidades de energía en forma de calor.
							   
							El hallazgo es 
							útil para la astronomía, la generación de energía y 
							el diagnóstico médico. 
			  
			Un equipo internacional de científicos ha descubierto que las ondas 
			magnéticas que se propagan por la atmósfera del Sol son claves para 
			calentar su atmósfera y propulsar el viento solar.
 
 El descubrimiento abre una nueva ventana a la comprensión de estos 
			fenómenos que se dan en muchos otros ámbitos, incluyendo generadores 
			de energía o aparatos de diagnóstico médico.
 
			  
			Los resultados (Alfvén 
			Wave Dissipation in the Solar Chromosphere) se publican 
			en Nature Physics.
 En 1942, el físico 
			
			Hannes Alfvén predijo la 
			existencia de un nuevo tipo de ondas debidas al magnetismo actuando 
			sobre un plasma, lo que le llevó a obtener el Premio Nobel de Física 
			en 1970.
 
 Desde su predicción, las ondas de Alfvén han estado asociadas con 
			una variedad de fuentes, incluyendo reactores nucleares, la nube de 
			gas que envuelve a los cometas, experimentos de laboratorio, 
			diagnóstico médico por resonancia magnética y también la atmósfera 
			del Sol.
 
 De forma similar a las olas del mar, las ondas de Alfvén se propagan 
			hacia arriba desde la superficie solar hasta "romper" en las capas 
			más altas, liberando allí enormes cantidades de energía en forma de 
			calor.
 
 Sin embargo, hasta la fecha no se había tenido evidencia directa 
			concluyente de que estas ondas pudiesen convertir su movimiento en 
			calor, algo que intrigaba a los físicos desde la confirmación de su 
			existencia.
 
 
			  
			  
			Manchas 
			solares
 
 Según el nuevo estudio, en la turbulenta atmósfera solar, con 
			temperaturas que llegan a alcanzar millones de grados, las ondas de 
			Alfvén juegan un papel importante para mantener tan elevadas 
			temperaturas.
 
 Esta investigación detectó el calentamiento producido por
			
			ondas de Alfvén en una mancha 
			solar, algo que ya se había predicho teóricamente hace 75 años.
 
			  
			Las manchas solares 
			tienen campos intensos similares a las máquinas de resonancia 
			magnética modernas en los hospitales y son mucho más grandes que el 
			tamaño de nuestro propio planeta.
 Los investigadores se basaron en observaciones avanzadas de alta 
			resolución del 
			
			Telescopio Solar Dunn en Nuevo 
			México (USA), junto con observaciones complementarias del 
			
			Observatorio de Dinámica Solar 
			de la NASA, para analizar los campos magnéticos más fuertes que 
			aparecen en las manchas solares.
 
 Según explica uno de investigadores, Samuel Grant, en
			
			un comunicado de la Queen 
			University de Belfast, al dividir la luz del Sol en sus colores 
			integrantes, este equipo internacional de investigadores pudo 
			examinar el comportamiento de ciertos elementos de la tabla 
			periódica dentro de la atmósfera del Sol, incluidos el calcio y el 
			hierro.
 
 
 
 
 Cálculos 
			complejos
 
				
				"Una vez que se 
				extrajeron estos elementos, se detectaron intensos destellos de 
				luz en las secuencias de imágenes.    
				Estos destellos 
				intensos tienen todas las características de las ondas de Alfvén 
				convirtiendo su energía en ondas de choque, de forma similar a 
				un avión supersónico que crea un estruendo cuando excede la 
				velocidad del sonido.    
				Las ondas de choque 
				se propagan a través del plasma circundante, produciendo calor 
				extremo.    
				Usando 
				superordenadores, pudimos analizar los datos y mostrar por 
				primera vez en la historia que las ondas de Alfvén eran capaces 
				de aumentar las temperaturas del plasma violentamente por encima 
				de su fondo en calma", añade Grant. 
			En el equipo 
			internacional de esta investigación figuran expertos del 
			Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) y de la 
			Universidad de La Laguna (ULL).  
			  
			La contribución del IAC 
			ha consistido en el análisis de los perfiles espectrales producidos 
			por los átomos de calcio ionizado, cuya huella en la luz observada 
			permite determinar las condiciones físicas existentes en las capas 
			altas de la atmósfera así como seguir su variación con el tiempo. 
				
				"Este análisis - 
				explica el investigador del IAC/ULL y coautor del artículo, 
				Héctor Socas-Navarro - se basa en complejos cálculos con 
				superordenadores sobre cómo estos átomos responden a la 
				radiación y dejan su firma en las propiedades de la luz que nos 
				llega, aspectos en los que el grupo del IAC es considerado 
				puntero a nivel internacional." 
			  
			
 Referencia
 
				
			 
			  
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