PREFACIO - EL PASADO, EL FUTURO

"¿Cuándo volverán?"

Esta pregunta me la han formulado montones de veces gente que ha leído mis libros, y se refiere a los ‘Anunnaki’—los extraterrestres que vinieron a la Tierra desde su planeta Nibiru y fueron reverenciados en la antigüedad como dioses.

  • ¿Ocurrirá cuando Nibiru en su elongada órbita vuelva a nuestra cercanía?

  • ¿Habrá en la Tierra paz, o un Armagedón?

  • ¿Un milenio de problemas y tribulaciones, o una mesiánica Segunda Venida? ¿Ocurrirá en el 2012, o más tarde, o nunca?

Estas son preguntas penetrantes que combinan las más profundas esperanzas y ansiedades con expectativas y creencias religiosas, interrogantes compuestas por varios sucesos actuales: guerras en las tierras donde comenzó el entrelazamiento de los asuntos del hombre con los dioses; las amenazas de holocaustos nucleares; la alarmante ferocidad de los desastres naturales.


Estas son preguntas que no me he atrevido a responder en todos estos años—pero ahora son asuntos cuyas respuestas no puedo—no debo—dilatar.


Las preguntas en relación al Regreso, hay que darse cuenta, no son nuevas; se hallan inexorablemente ligadas en el pasado—igual como ahora—a la expectativa y aprehensión del ‘Día del Señor’, el Fin de los Días, Armagedón.

 

Hace cuatro milenios, el Cercano Oriente fue testigo de la promesa del Cielo en la Tierra por parte de un dios y su hijo. Hace más de tres milenios, el rey y el pueblo de Egipto añoraban la época mesiánica. Dos mil años atrás, la gente de Judá se preguntaba si el Mesías había aparecido, y nosotros aun estamos encerrados con los misterios de estos sucesos.

 

¿Se están cumpliendo las profecías?


Trataremos, a partir de las extrañas respuestas que fueron dadas, de resolver antiguos enigmas, descifrar el origen y significado de símbolos—la Cruz, los Peces, el Cáliz. Describiremos el rol de los sitios relacionados espacialmente con los sucesos históricos, y será mostrado como el Pasado, el Presente y el Futuro convergen en Jerusalén, el lugar del ‘Enlace Cielo-Tierra’.

 

Y consideraremos el por qué nuestro actual siglo 21 d.C. es tan similar al siglo 21 a.C.

  • ¿Está la historia repitiéndose a si misma—está destinada a repetirse a si misma?

  • ¿Está todo guiado por un Reloj Mesiánico?

  • ¿Está esa fecha, a la mano?

Hace más de dos milenios, Daniel en el ‘Libro de Daniel’ del Antiguo Testamento repetida e incontablemente le preguntaba a los ángeles:

  • ¿Cuándo?

  • ¿Cuándo ocurrirá el Fin de los Días, el Final del Tiempo?

Hace más de tres siglos atrás, el famoso Sir Isaac Newton, quién elucidó los secretos de los movimientos celestiales, compuso tratados en relación al Libro de Daniel de Antiguo Testamento y al Libro de las Revelaciones del Nuevo Testamento; serán analizados sus cálculos recientemente hallados en relación al fin de los días, junto con otras predicciones más recientes, del Final.


Tanto la Biblia Hebrea como el Nuevo Testamento afirman que los secretos del futuro se hallan incrustados en el Pasado, que el destino de la Tierra está conectado con el Cielo, que los asuntos y sino de la Humanidad están enlazados con los de Dios y los dioses. Al meternos con aquello que aun está por suceder, atravesamos desde la historia a la profecía; la una no puede ser comprendida sin la otra, e informaremos de ambas. Con lo anterior como guía, miremos lo que viene a través de los lentes de lo que ha ocurrido.

 

Las respuestas serán ciertamente una sorpresa.

Zecharia Sitchin
New York

Noviembre 2006

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