04 Mayo
2017
del Sitio Web
ElRobotPescador
A continuación reproducimos un artículo de la Web Gizmodo
sobre un tema relacionado con la Internet que parece menor, pero que
en realidad, puede acabar siendo de suma importancia a muchos
niveles…
mmmm
QUÉ HA
CAMBIADO EN LA BATALLA POR LA NEUTRALIDAD DE LA RED (Y POR QUÉ
DEBERÍA IMPORTARTE)
¿Otra vez la neutralidad de la red? ¿Eso no se había resuelto hace
tres años?
Ojala.
La guerra por la neutralidad de la red llegó a una especie de tregua
durante la
administración
Obama, pero el nuevo gobierno
republicano de Trump se prepara para un segundo asalto.
Esto es lo que necesitas
saber.
¿QUÉ ES LA
NEUTRALIDAD EN LA RED?
La Neutralidad de la red no es una ley o una norma impuesta desde
algún organismo estadounidense.
Tan solo es un principio
teórico de funcionamiento. Es una buena práctica, si lo prefieres.
En virtud de ese
principio, ninguna compañía que ofrezca conexión a la Internet puede
bloquear o priorizar el acceso a los contenidos por razones
económicas.
¿EN QUÉ SE
DIFERENCIA PRIORIZAR EL TRÁFICO DE UN SERVICIO DE PAGO?
Probablemente estés pensando que eso de priorizar el tráfico ya
existe ¿no?
la Internet está lleno de
servicios premium que ofrecen música sin publicidad (Spotify
Premium), cine y series en tarifa plana (Netflix) o acceso
prioritario con mayor ancho de banda a servicios de almacenamiento
online (Mega).
La diferencia está en que esos servicios ofrecen acceso prioritario
al contenido de sus propios servidores, que para eso son suyos.
En otras palabras, una
vez los paquetes de datos salen de sus servidores y circulan por la
Internet hasta llegar a tu casa nada, salvo los problemas técnicos
propios de cualquier conexión, se interpone en su camino.
¿ESTO NO ES
IGUAL QUE LA CENSURA O LOS BLOQUEOS REGIONALES?
De nuevo, quizá estés pensando que ya hay muchos países en los que
los gobiernos o las empresas prohíben el acceso a determinados
contenidos. Es cierto, pero no tiene que ver con la neutralidad de
la red.
Un ejemplo de ello es la
Web Dolar Today, a la que es imposible acceder desde
Venezuela porque ofrece información sobre tipos de cambio no
oficiales que no gusta al gobierno del país.
a palabra que define esto
es censura.
Lo mismo ocurre cuando un vídeo concreto no se puede reproducir
desde tu país porque una compañía de cine o una discográfica no ha
llegado a acuerdos de distribución para ese contenido en esa región.
La diferencia está en que
el bloqueo a ese contenido se hace a petición de su legítimo
propietario.
La operadora de telefonía
no decide sobre ello.
¿CÓMO SERÍA la
Internet SIN EL PRINCIPIO DE NEUTRALIDAD?
Si el principio de neutralidad desapareciera, los operadores de
telefonía tendrían total libertad para regular el tráfico en virtud
de sus intereses o de los acuerdos que lleguen con otras compañías.
Huelga decir que a las
empresas que te proveen de conexión les encantaría que esto fuera
así, porque les haría ganar mucho dinero.
Un ejemplo muy cercano de esto lo tuvimos hace meses entre Netflix y
Telefónica.
Cuando Netflix llegó a
España, los usuarios del popular servicio de streaming que
tenían su conexión con Movistar comenzaron a quejarse de que Netflix
les iba muy lento.
Las métricas de Netflix
confirmaban el bajón de velocidad para su servicio, y no falta quien
sospecha que Movistar alteró el tráfico a propósito porque Netflix
es competencia directa con sus propios servicios de vídeo.
Desde Movistar, por supuesto, negaron estar alterando el tráfico.
Después de que responsables de Netflix y de Movistar se reunieran,
la incidencia quedó resuelta.
No vamos a entrar a
valorar si Movistar realmente hizo trampas y trató de perjudicar a
su competencia, pero es el ejemplo perfecto de lo que ocurriría en
un mundo sin neutralidad de la red.
Los operadores podrían beneficiar los servicios que más les paguen.
El resultado es que, como
usuario, no tendrías la misma calidad de acceso a todo. Algunas
páginas cargarían más rápido, otras lo harían mucho más lento sin
que haya un motivo técnico detrás.
Incluso podría llegar el
caso de que no puedas acceder en absoluto a un servicio o una página
concretos porque a tu compañía telefónica sencillamente le viene
bien priorizar otro. Despídete de tu libertad de elección online.
No solo es una cuestión que afecta a los usuarios.
Para las pequeñas
compañías o los emprendedores sería un desastre. La desaparición del
principio de neutralidad les impediría ofrecer sus contenidos o
servicios en igualdad de condiciones con las grandes.
En un mundo sin
neutralidad de la red, en definitiva, el acceso igualitario a la
Internet pasaría a estar regulado por una sola cosa: el dinero.
Cabe destacar que
cuando Obama impulsó las leyes para garantizar esa supuesta
neutralidad en la red, gran cantidad de medios alternativos
(de derecha y próximos al partido Republicano, obviamente),
montaron en cólera, acusando a Obama de impulsar leyes para
instaurar la censura en la Internet.
Tenían buena parte de razón al protestar por la intervención del
gobierno de EE.UU. en la red, pero la alternativa que proponen,
es dar libertad a las corporaciones (en este caso, los
operadores de telefonía) para que decidan qué debemos ver y qué
no, según sus intereses económicos.
Es decir, la alternativa que proponen estos "defensores de la
libertad", es una censura de facto, no efectuada por el
"malvadísimo gobierno", sino por las corporaciones
"benefactoras", que ahora se presentan como "garantes de la
libertad".
Es curioso como algunos se han apoderado de la palabra
"libertad" para engañar a los bobos y apoderarse de todo, ¿no?
Es el mismo tipo de gentuza que engañó a grandes masas de
incautos, haciéndoles creer que
Trump era un,
"revolucionario
anti-establishment y un anti-sistema".
El hombre que entrega
el poder de facto a las grandes corporaciones e instaura las
auténticas bases
del Nuevo Orden Mundial.
¿Porqué se creen que
está Goldman Sachs detrás de él...?
¿NO PUEDO
SOLUCIONAR ESO INSTALANDO UN VPN?
Sí y no.
Instalar
un VPN te permite acceder a ciertos
contenidos si tu operador decide bloquearlos, pero los VPN no son la
panacea.
Todos ellos ralentizan el
tráfico en mayor o menor medida.
En otras palabras, si tu problema es precisamente que el operador
ralentiza el tráfico proveniente de determinados servicios, acceder
a ellos desde un VPN no te va a ayudar en nada.
¿QUIÉN DECIDE
SI LA RED ES NEUTRAL O NO?
Depende de cada país.
En España, por ejemplo,
las operadoras de telefonía están obligadas a garantizar la calidad
de su red a servicios como Netflix en virtud de un acuerdo con la
Comisión Nacional de los Mercados, que es el organismo que se
encarga de velar porque el acceso sea igualitario.
En Estados Unidos, la neutralidad de la red la decide la Comisión
Federal de Telecomunicaciones (FCC). Durante el mandato de Obama,
la FCC decidió mantener ese principio a petición del presidente.
En octubre de 2004, el presidente Obama salió en defensa de la
neutralidad de la red en Estados Unidos y pidió al organismo que
redactara una normativa para garantizar el tráfico igualitario.
El presidente de la FCC, Tom Wheeler, accedió. En febrero de
2015, Wheeler propuso convertir la Internet en un servicio básico
bajo el amparo del Título II del Acta de Telecomunicaciones
de 1996.
La neutralidad de la red había ganado una batalla, pero no la
guerra.
¿QUÉ ES LO QUE
QUIEREN CAMBIAR AHORA?
La clave de todo es definir qué es el acceso a la Internet.
En la actualidad, la FCC
lo considera un servicio básico de telecomunicaciones y, como tal,
debe estar garantizado en igualdad de condiciones. Las compañías que
proveen el servicio quieren cambiar esto, y para ello están
presionando al gobierno con todos los medios a su alcance.
El resultado de esta presión es el Acta para restaurar la libertad
en la Internet (Restoring la Internet Freedom Act).
Su nombre no puede ser
más engañoso. Se trata de una propuesta iniciada por nueve senadores
que busca privar a la FCC de la potestad para designar a los
operadores de la Internet como empresas de telecomunicaciones bajo
el Titulo II del Acta de Telecomunicaciones de 1996.
Si la propuesta sale adelante, los operadores de la Internet dejarán
de estar obligados a garantizar un servicio básico e igualitario. No
se trata de liberar la Internet.
Se trata de liberalizarlo
como mercado. Los senadores detrás de esta propuesta ya trataron de
hacer lo mismo en 2016 sin éxito. También son los responsables de la
reciente ley que básicamente permite a los ISP vender tus datos de
navegación.
A modo de inciso, una
noticia también aparecida en Gizmodo a principios de marzo…
Tras el voto favorable de la Cámara de Representantes, Donald
Trump ha firmado la ley que desmantela las normas de privacidad
en la Internet promulgadas por Obama.
Las operadoras podrán
seguir compartiendo los datos de navegación de los
estadounidenses sin su permiso explícito.
El Congreso de Estados Unidos ahora permite que los proveedores
de la Internet vendan tu historial de navegación sin tu permiso
NO VIVO EN
EE.UU. ¿POR QUÉ DEBERÍA IMPORTARME?
Como dice el refrán:
Cuando las barbas de
tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar.
Si Estados Unidos aprueba
una legislación que mate la neutralidad de la red, se sentaría un
precedente muy válido para que las operadoras del resto del mundo
pidan a sus gobiernos hacer lo propio, y lo peor es que no les
faltaría razón.
La falta de neutralidad
en un país afectaría a la competencia de las empresas que no son de
ese país. Además hay que tener en cuenta que una amplia mayoría de
servicios de la Internet nos llega precisamente de Estados Unidos.
Si allí acaban con el
principio de neutralidad, todo la Internet tendría que adaptarse a
las nuevas normas, y los usuarios no saldríamos ganando.
¿QUÉ PUEDO
HACER AL RESPECTO?
Desgraciadamente, la respuesta a esa pregunta es "muy poco".
Puedes manifestarte muy
enfadado, pero la pelota de la decisión sobre la neutralidad de la
red está en el tejado del senado estadounidense, la FCC, las
operadoras del país y el tremendo embrollo de intereses.
Por mucho que nos
indigne, de momento lo mejor que podemos hacer es estar informados
sobre el tema, transmitir ese conocimiento, y no dejarnos engañar
por nombres que invocan libertades.
Todos los bits de información que circulan por la Internet deben ser
tratados igual. De ello depende que la red que conocemos y amamos
siga siendo cómo es.
Si finalmente nuestros
mandatarios nos la juegan, quizá sea el momento de pensar seriamente
en elegir mandatarios mejores la próxima vez.
COMENTARIO
ADICIONAL
No compartimos la última frase, propia de una Web de ideología
próxima a los demócratas.
El problema no reside en votar a unos u otros (que también), sino
que reside en que tanto unos como otros, son dos caras diferentes de
un mismo mal (y en el mejor de los casos, dos males diferentes, como
sucede en las elecciones francesas, aparentemente).
El problema es que hemos permitido la corrupción total del sistema y
eso ya no se soluciona "votando a otros".
Esa corrupción del sistema, encarnada en la figura de los políticos,
está sentando las bases
del Nuevo Orden Mundial, basado en
la privatización y liberalización de todos los aspectos de la
sociedad, hasta otorgar el control total del mundo a las grandes
corporaciones.
La clase política está siendo vilipendiada en todo el mundo,
calificada de ineficiente y corrupta, como de hecho es.
Pero esto no es algo casual. Forma parte del plan para instaurar el
nuevo paradigma.
La "solución" que se nos presentará a esta putrefacción, será que
los políticos sean sustituidos por "personas capacitadas" en el
ámbito de la gestión, figuras que serán desde grandes empresarios o
magnates, hasta tecnócratas.
Ya estamos viendo la sustitución de los políticos tradicionales por
figuras salvadoras que, con la palabra "libertad" en la boca, abogan
por entregar el poder total y absoluto a las grandes corporaciones.
Trump y los representantes de las corporaciones y Wall Street
que colman su administración, son un claro exponente de ello.
Y reiteramos lo que ya dijimos hace meses (y que nos valió un ataque
masivo de
trolls):
si las élites han
situado a Trump en el poder, entre otros factores, es por que
sienta el precedente a nivel social, de la sustitución de los
políticos tradicionales por magnates, grandes empresarios y
altos ejecutivos como mandatarios, el paso indispensable para
instaurar el Nuevo Orden en el que las corporaciones tendrán el
gobierno de facto del mundo.
Trump es el primer paso
hacia ese Nuevo Orden y tras él, emergerán más grandes "empresarios
de éxito", dispuestos a,
"llevar los países
como una empresa".
¿Les suena un tal
Mark Zuckerberg...?
Aún es un rumor, pero su
nombre ya empieza a sonar como posible presidenciable para 2020… es
un pésimo indicio de lo que venimos advirtiendo desde hace tiempo...
Fuentes
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