18 Agosto 2019
del Sitio Web
Dinero
Versión en italiano
¿Quién tiene el poder de crear dinero
en la
economía moderna?
Foto:
Billetes dólares inversiones Getty
La mayor
parte del dinero
ya no es creado
por los gobiernos ni los bancos centrales.
Además, la mayor
parte del dinero
que circula hoy
en el mundo no son billetes.
¿Alguna vez te
preguntaste de dónde viene el dinero que usas para pagar por todo?
El papel moneda fue una invención china:
empezó a usarse por
primera vez alrededor del año 1000 en la provincia de Sichuan,
como sustituto del pago tradicional con monedas de oro y plata.
Un par de siglos más
tarde, el emperador
Kublai Kan adoptó el sistema a
nivel nacional, según el relato de Marco Polo de sus viajes
por Asia.
El primer papel moneda no era estrictamente de papel, sino una
lámina derivada de la corteza de un árbol que llevaba la firma de
varios funcionarios y, lo más importante, el sello rojo del
mismísimo emperador Kan, lo que le daba su valor.
Pero hoy, en la mayoría de los países del mundo, el dinero no es
mandado a hacer por monarcas, pero tampoco es fabricado
principalmente por gobiernos, como creen muchos.
Ni siquiera los bancos centrales autónomos son los
responsables de crear la mayor cantidad de dinero que circula en el
planeta.
En la mayoría de las economías modernas el dinero es creado por
los bancos privados, y la mayor parte ni siquiera es
tangible:
existe solamente en
computadoras.
Hablamos de los depósitos
bancarios, esas cifras que aparecen en tu cuenta de banco y se van
actualizando a medida que gastas o generas más ingresos.
Según el centro de investigación y campaña británico
Positive Money ("Dinero
Positivo"), en Reino Unido el 97% del dinero en la actualidad es
creado por los bancos y solo el 3% es creado por el gobierno.
"Como por arte
de magia"
En la serie
The New Age of Capitalism ("La
nueva era del capitalismo"), de BBC Radio 4, la directora ejecutiva
de Positive Money, Fran Boait, explica que el dinero se
genera cuando los bancos dan préstamos.
Y afirma que el nuevo
dinero aparece de golpe,
"como por arte de
magia"...
Funciona así:
imagina que tu
quieres comprar algo... por ejemplo, un auto. Pero no te alcanza
el dinero. Entonces vas al banco y pides un préstamo.
Si el banco accede a tu pedido, un empleado escribe unos números
en su computadora y ¡listo! Repentinamente aparece la plata en
tu cuenta.
Ese es dinero nuevo, que
un segundo antes no existía, y que tu puedes usar para comprar tu
auto (y luego tendrás que devolver, con intereses, pero esa es otra
historia...).
Es así, a través de préstamos bancarios, como se genera la mayor
parte del dinero en la economía moderna.
Dinero
electrónico vs. dinero real
Cuando pensamos en dinero solemos imaginar billetes.
Pero Sir Charles Bean,
ex-economista en jefe y vicegobernador de política monetaria del
Banco de Inglaterra (el
banco central de Reino Unido),
señaló a la BBC que en realidad la mayor parte del dinero hoy es
electrónico...
"(El papel moneda) es
una fracción muy pequeña de lo que los economistas consideran
dinero, que también incluye a los depósitos bancarios que pueden
ser transformados en efectivo, a demanda", explica Bean.
¿Cuánto dinero es
electrónico y cuánto es real?
La cifra va variando.
Pero Bean contó, a modo de ejemplo, que antes de las
crisis financiera de 2008, la
proporción en Reino Unido era de 25 a 1.
Es decir que había una libra física por cada 25 libras virtuales.
Esto significa que a la hora de prestarte plata, los bancos no están
limitados a sus activos o reservas y ni siquiera están limitados a
las reservas del banco central.
"Los bancos prestan
depósitos, que crean dinero, y pueden ir a buscar las reservas
después. No necesitan tener reservas para prestar el dinero.
Pueden prestar la
cantidad que quieran", destaca Boait.
Entonces, ¿quién impone
un límite a la creación de dinero?
"La cantidad de
préstamos que otorgan los bancos depende de su apetito por el
riesgo y de cuánta habilidad tienen para sostener pérdidas
contra las inversiones que hacen", responde Bean.
También depende de cuán
optimistas se sienten sobre el estado de la economía.
A veces, un optimismo desmedido puede generar problemas, como
ocurrió en los años previos a la debacle de 2008, generada por la
crisis hipotecaria.
¿Y el banco
central qué hace?
Un banco central tiene dos maneras de influenciar el tamaño del
sistema bancario de un país.
-
La primera es a
través de las políticas monetarias que dicta, en particular
la tasa de interés bancaria.
Una tasa más baja incentiva los pedidos de préstamos y los
plazos fijos. Pero una tasa demasiado baja puede llevar a
que la gente prefiera no bancarizar su dinero y guardar su
efectivo en casa.
-
La segunda forma
que tienen los bancos centrales de incidir en la economía es
creando dinero ellos mismos.
Por ejemplo, después de 2008, como bajar las tasas de
interés no estaba logrando reactivar la economía británica,
el Banco de Inglaterra decidió emitir más dinero para
inyectarlo en la economía.
Los peligros
Agrupaciones como Positive Money, sin embargo, consideran que
esta "solución" trajo nuevos problemas.
"Ha tenido efectos
secundarios muy negativos, aumentó la desigualdad de ingresos",
señala Fran Boait.
El problema es que los
bancos suelen otorgar préstamos a quienes ya tienen bienes, que
pueden usar como respaldo de ese crédito.
Por ende la inyección de
dinero benefició a quienes tenían más y perjudicó a quienes tenían
menos, porque hizo que los precios de las propiedades aumentaran.
Sin embargo, Bean considera que la emisión de dinero fue,
"una respuesta
necesaria" ante la gravedad de la crisis.
"Sin eso la actividad
se hubiera debilitado y el desempleo hubiera subido", aseguró.
¿Hay otra alternativa para la creación de dinero?
Positive Money
cree que sí, y ha lanzado una campaña para que el dinero llegue a
"la economía real".
Una manera que propone es esquivar a los bancos:
"El Banco de
Inglaterra podría crear el dinero y dárselo al gobierno para que
lo distribuya entre la población, por ejemplo a través de un
'dividendo ciudadano' que todos reciben por igual, o a través de
un programa de construcción de viviendas", sugiere Boait.
"Tenemos que romper este tabú de que las cosas son así y no
pueden ser de otra manera", sostiene.
La agrupación, y otras
afines en el resto de Europa, hacen campaña para que los bancos
dejen de tener el control sobre la creación de dinero y esa potestad
vuelva a estar exclusivamente en manos del Estado.
"La moneda nacional
es en esencia un monopolio natural y debería estar bajo control
público", sostiene Boait.
Sin embargo, por ahora
nadie - ni siquiera la crisis mundial de 2008 - ha logrado quitarle
poder a los bancos, que siguen siendo los reyes de la economía
moderna...
|