Versión en italiano el presidente estadounidense Joe Biden calificó al presidente ruso Vladimir Putin de "carnicero", durante un encuentro con la prensa. Más tarde, en un discurso público, Biden exclamó: "¡Por el amor de Dios, ese hombre no puede seguir en el poder!" El Departamento de Estado ha tratado de restar importancia a esas declaraciones afirmando que Biden se refería sólo al hecho de ejercer el poder sobre los vecinos de Rusia,
sin
precisar dónde estaría ejerciéndose tal poder. no lo inició Rusia el 24 de febrero. Lo comenzó Ucrania una semana antes y la OSCE es testigo de ello.
Este conflicto periférico fue planificado por Washington para imponer un Nuevo Orden Mundial que excluiría a Rusia y después a China.
¡No
deje usted que lo engañen...!
La operación militar de Rusia en Ucrania comenzó hace un mes.
Como siempre, la propaganda de guerra de los anglosajones se coordina desde Londres.
En 1914, Londres logró convencer a su población de que el ejército alemán había violado mujeres masivamente en Bélgica y de que cada británico estaba en el deber de acudir en ayuda de aquellas pobres mujeres.
Aquello era más convincente que tratar de explicar que el Káiser Guillermo II estaba tratando de rivalizar con el Imperio colonial inglés. Al final del conflicto, la población británica exigió que las víctimas fuesen indemnizadas.
Se
procedió entonces a contabilizarlas y resultó que se había
exagerado extraordinariamente lo que realmente había sucedido.
declaró la guerra a Rusia cuando ordenó a los banderistas incorporados a su ejército atacar a los ciudadanos rusos del Donbass, ataque iniciado el 17 de febrero. Y después provocó a Moscú al declarar, ante los dirigentes políticos de los países miembros de la OTAN, que Ucrania se dotaría de la bomba atómica, en violación de los tratados internacionales firmados por ese país.
Según esa versión, Moscú estaría tratando de reconstituir la Unión Soviética y se dispondría a atacar una tras otra sus antiguas "posesiones".
Claro, esta versión es para los
occidentales más honorable que hablar de la "trampa de Tucídides",
la cual mencionaré más adelante.
Zelenski anunció allí que su país se dotaría del arma
atómica ante Rusia.
Hacía meses que no había combates en el Donbass, pero los observadores de la OSCE reportaron - a partir de la tarde del 17 de febrero - 1 400 explosiones diarias.
Inmediatamente, las provincias rebeldes de Donetsk y Lugansk - que seguían considerándose ucranianas aunque reclamaban la autonomía en el seno de Ucrania - evacuaron a más de 100 000 civiles para protegerlos de la lluvia de fuego desatada por las tropas de Kiev.
La mayoría de esos civiles se replegó hacia
el interior del Donbass y otros huyeron hacia Rusia. En 2014 y 2015, cuando se produjo la guerra civil entre Kiev, por un lado, y Donetsk y Lugansk del otro lado, los daños humanos y materiales eran una cuestión interna de Ucrania.
Pero, a partir de entonces, prácticamente toda la población del Donbass se planteó la posibilidad de emigrar y adquirió la nacionalidad rusa. Por consiguiente, los bombardeos que Kiev inició el 17 de febrero en el Donbass fueron un ataque contra rusos ucranianos.
Y Moscú acudió
en ayuda de sus ciudadanos a partir del 24 de febrero.
El presidente Zelenski puso
deliberadamente a su pueblo en peligro y sobre él recae - sólo sobre
él - la responsabilidad de lo que hoy sufren los ucranianos.
Desde el inicio de su mandato, Volodimir Zelenski mantuvo el apoyo del Estado ucraniano - apoyo iniciado por su predecesor Petro Porochenko - a las malversaciones de fondos que cometían sus padrinos estadounidenses y también mantuvo el respaldo a los extremistas de su país - los "banderistas".
El presidente ruso
Vladimir Putin calificó a los primeros de
"banda de drogadictos" y a los segundos de "neonazis".
1
Peor aún, el 1º de julio
de 2021, Zelenski firmó una ley racial que de hecho excluye a los
ucranianos de origen eslavo del ejercicio de los derechos humanos y
las libertades fundamentales. 2
Los propagandistas de Londres y sus casi 150 agencias de
comunicación 3 aseguran ahora que, luego de ser rechazado por la
gloriosa resistencia de los ucranianos, el ejército ruso ha
renunciado a su objetivo inicial, que sería tomar Kiev.
Al contrario, Putin siempre recalcó que sus objetivos de guerra eran "desnazificar Ucrania" y eliminar los arsenales de armamento extranjero (de la OTAN) acumulado en el país.
Eso es
exactamente lo que está haciendo el ejército ruso.
Hoy la propaganda manipula nuestras
emociones y, como
nadie habló de los bombardeos ucranianos iniciados contra el Donbass el 17 de febrero, la opinión pública de Occidente
responsabiliza a los rusos y los califica erróneamente de
"agresores".
De hecho,
los criminales sufren como los inocentes.
La delegación ucraniana ante la Corte Internacional de Justicia logró obtener una medida cautelar contra Rusia.
Sin embargo, como acabo de demostrar más arriba, el Derecho da la razón a Rusia.
Ucrania refirió el hecho que el presidente Putin había declarado, en su discurso sobre la operación militar especial rusa, que las poblaciones del Donbass eran víctimas de un "genocidio".
Ucrania negó ese "genocidio" y acusó
a Rusia de haber utilizado indebidamente ese argumento.
Durante los 8 últimos años entre 13 000 y 22 000 civiles fueron asesinados en el Donbass - Kiev afirma que fueron 13 000 y según las estadísticas de Moscú en realidad son 22 000.
Rusia, que envió a la CJI un alegato escrito, señala que su operación militar no se basa en la Convención para la Prevención y la Represión del Crimen de Genocidio sino en el Artículo 51 de la Carta de la ONU, que autoriza el uso de la fuerza en caso de legítima defensa - lo cual el presidente Putin ya había mencionado en su discurso.
Pero la CIJ aceptó como bueno el desmentido de Ucrania... sin proceder a ninguna verificación y concluyó que Rusia había utilizado injustificadamente la mencionada Convención.
Como Rusia no había creído necesario el envío de representantes y se había limitado a enviar su defensa por escrito, la CIJ aprovechó la ausencia física de representantes rusos para imponer a la Federación Rusa una decisión aberrante.
Segura de estar en su derecho, Rusia se negó a
aceptar la decisión y reclama ahora una conclusión sobre el fondo
de la cuestión, conclusión que no se presentará antes de finales
de septiembre.
Esa afirmación se basa en un concepto creado por el politólogo Graham Allison:
Con ese concepto, Graham Allison toma como referencia las guerras del Peloponeso que tuvieron lugar en el siglo IV aC entre Esparta y Atenas.
El estratega e historiador ateniense Tucídides analizaba que la guerra se había hecho inevitable cuando Esparta, que dominaba Grecia, comprendió que Atenas estaba conformando en el exterior un imperio que la llevaría a cuestionar la hegemonía espartana.
Aunque parece lógica, esa analogía es falsa...
Basta recordar que Esparta y Atenas eran
ciudades-Estados griegas vecinas mientras que Estados Unidos, Rusia
y China ni siquiera comparten la misma cultura.
Y es que China tiene su propia tradición de establecer una relación en la cual todos salgan ganando, lo que ha dado en llamarse "win win".
Pero cuando China propone ese tipo de relación no se refiere simplemente a contratos comerciales provechosos para ambas partes sino a su propia historia.
Veamos...
Desde la época de la China imperial, eso hacía que el emperador se viera obligado a delegar gran parte de su autoridad - incluso hoy China es el país más descentralizado del mundo.
Cuando el emperador emitía un decreto podía suceder que aquella medida, útil para ciertas provincias, no tuviese consecuencias prácticas para otras.
Pero el emperador tenía que asegurarse de cada gobernador local pusiera en aplicación su decreto, en vez de ignorarlo por considerar que no era importante para su provincia.
En aras de
preservar su autoridad, el emperador otorgaba entonces alguna
concesión extra a quienes pudiesen no tener un interés particular
en aplicar el decreto imperial y así garantizaba que aquellos
gobernadores estuviesen siempre interesados en respetar su
autoridad.
Erróneamente, Estados Unidos temió que China proporcionase armamento a Moscú. Pero eso no ha sucedido nunca.
China observa el desarrollo de los acontecimientos y se basa en esa experiencia para saber lo que podría suceder si ella misma tratara de recuperar Taiwán.
Resultado:
Pekín actúa con una visión de largo plazo y sabe, por experiencia, que si permite que Rusia sea destruida, los occidentales no tardarán en volverse nuevamente contra China.
Volvamos ahora a la "trampa de Tucídides".
Desde el siglo XIX, Rusia ha sabido defenderse evadiendo al enemigo.
Cuando Napoleón - en el siglo XIX - y Hitler - en el siglo XX - la invadieron, Rusia desplazó su población hacia el este y quemó sus propias ciudades antes de la llegada del invasor.
Los invasores se vieron así en la imposibilidad de aprovisionar sus tropas, tuvieron que enfrentar el invierno sin lo necesario y finalmente se vieron obligados a retirarse.
Esa estrategia
defensiva de "tierra quemada" funcionó porque Napoleón y Hitler no
tenían bases logísticas cerca de Rusia.
Es por eso que, en el momento de la disolución de la URSS, Rusia precisó que la OTAN nunca debería extenderse hacia el este.
Conocedores de la Historia, el presidente francés Francois Mitterrand y el canciller alemán Helmut Kohl, exigieron entonces a sus aliados occidentales que aceptaran ese compromiso.
Durante la reunificación alemana,
redactaron y firmaron un tratado que garantizaba que la OTAN nunca
cruzaría la línea Oder-Neisse, o sea la frontera germano-polaca.
Pero Estados Unidos violó ese principio:
El problema no es que esos países se hayan aliado a Washington sino que almacenan armamento estadounidense en sus territorios...
Nadie critica que
esos Estados hayan escogido sus aliados, lo que Moscú les reprocha
es que están sirviendo a Estados Unidos como bases en la
preparación de un ataque contra Rusia.
Victoria Nuland no conoció personalmente a Leo Strauss. Pero el pensamiento de Leo Strauss llegó a ella a través de su esposo, Robert Kagan. Este matrimonio - Victoria Nuland y Robert Kagan - fundó el Proyecto para el Nuevo Siglo Americano (PNAC, siglas en inglés), el "think tank" que expresó públicamente su deseo de que Estados Unidos sufriera una catástrofe similar a la Pearl Harbour para que ese país se decidiera por fin a aplicar su política. Para esa gente los atentados del 11 de septiembre de 2001 fueron una "sorpresa divina", que permitió prolongar el predominio de Estados Unidos.
Comenzó prometiendo que Washington invertiría en Rusia.
De las promesas la señora Nuland pasó a las amenazas y, como Moscú mantenía su posición, concluyó que Washington pondría al presidente Putin ante un tribunal internacional.
Después de ponerla a ella en la calle, Moscú respondió - el 17 de diciembre - enviando a Washington una proposición de tratado que garantizaría la paz sobre la base del estricto respeto de la Carta de las Naciones Unidas.
Y esa es la causa de la tormenta actual porque respetar la Carta de la ONU - basada en el principio de la igualdad y la soberanía de los Estados - implicaría tener que reformar la OTAN, cuyo funcionamiento establece precisamente una jerarquía entre los países miembros de esa alianza bélica.
Atrapado en la
"trampa de Tucídides", Estados Unidos fomentó los actos que
llevaron a la actual
guerra en Ucrania.
No tratan de rechazar militarmente al ejército ruso, tampoco tratan de coartar la acción del gobierno ruso sino que están empeñados en hacer desaparecer toda huella de la cultura rusa en Occidente.
Y de paso, debilitan a... la Unión Europea...
Pero, si bien los
bancos rusos se ven duramente afectados por esas medidas - que sin
embargo no afectan al gobierno ruso - lo interesante es que el
cese de la actividad de las empresas occidentales en Rusia en
realidad está beneficiando a Rusia al permitirle recuperar sus
inversiones a bajo costo.
El índice RTS retrocedió el primer día en un 4,26%, pero ese es el índice que mide principalmente valores especulativos. En cambio, el índice IMOEX, que mide la actividad económica nacional, registró un alza de 4,43%.
Los verdaderos perdedores resultan ser los países miembros de
la
Unión Europea, que cometieron la estupidez de adoptar las
"sanciones" contra Rusia.
Paul Wolfowitz entró en contacto con el pensamiento de Leo Strauss a través de su profesor de filosofía, Alan Bloom. Wolfowitz se convirtió después en alumno de Leo Strauss, en la universidad de Chicago. Leo Strauss lo convenció de que los judíos no tienen nada que esperar de las democracias y de que, para protegerse de un nuevo Holocausto, tienen que instaurar su propio Reich, según el principio de que siempre "es mejor ser martillo que yunque".
En aquella época, la URSS
estaba en ruinas y Wolfowitz designó a la Unión Europea como el
rival potencial que Estados Unidos tendría que abatir. 7
Paul Wolfowitz prohibió que Alemania y Francia pudiesen participar en la reconstrucción de Irak. 8
De eso hablaba también Victoria Nuland, en 2014, cuando instruyó al embajador estadounidense en Kiev,
Ahora, en 2022, Washington ordena a la Unión Europea poner fin a sus compras de hidrocarburos rusos.
Eso no sería un "daño colateral" sino el resultado de una
estrategia estructurada y claramente expresada en Washington hace
30 años.
El pretexto entonces no era la independencia de Crimea
- independencia que la población de Crimea ya reclamaba desde la
disolución de la URSS, meses antes de que Ucrania fuese
independiente - sino la incorporación de esa península a la
Federación Rusa.
Pero no
importa, el presidente estadounidense
Joe Biden volvió a la carga
sobre ese tema el 24 y el 25 de marzo, mientras se hallaba en
Europa.
Pero los principios básicos de la OMC ya están siendo gravemente cuestionados, no por Rusia sino por las medidas coercitivas unilaterales que Occidente instaura bajo la denominación de "sanciones".
El hecho es que sacar a Rusia de la OMC sería perjudicial para todos. Y sobre ese punto es conveniente releer los escritos de Paul Wolfowitz, quien escribía en 1991 que,
Eso implica, precisaba Wolfowitz, que para mantener su hegemonía Estados Unidos no debe vacilar en sufrir cierto daño... con tal de que los demás salgan mucho más perjudicados.
Estamos a punto de convertirnos en
víctimas de esa manera de "razonar".
Pero Washington no vacilará en pisotear ese documento, como ya lo ha hecho con tantos otros.
Salvo unas pocas excepciones, Estados Unidos ya ha entrado en contacto con todos los países miembros de la ONU.
Ya permeados por la propaganda anglosajona,
casi todos están convencidos de que un Estado miembro del Consejo
de Seguridad de la ONU ha emprendido una guerra de conquista contra
un país vecino y Washington podría alcanzar su objetivo si logra
convocar una Asamblea General extraordinaria de la ONU y modificar
los estatutos de la organización...
Se prohíben las actuaciones de artistas rusos, aunque sean notoriamente contrarios al presidente Putin.
La universidad X prohíbe el estudio de las obras del escritor antisoviético Solzhenitsin mientras que la universidad Y prohíbe el estudio de Dostoievski - el campeón del debate y del libre arbitrio.
Por acá, se cancela la actuación de un director de orquesta... porque es ruso y más allá se suprimen las obras de Chaikovski del repertorio de las orquestas.
Todo lo que es ruso
tiene que desaparecer de nuestras mentes, como cuando el Imperio
Romano arrasó Cartago y destruyó metódicamente toda huella de su
existencia, tanto que aún hoy no sabemos gran cosa sobre aquella
civilización.
Ante un auditorio de jefes de empresas, Biden declaró:
Ese nuevo orden 12
dividiría el mundo en dos bloques herméticos,
sería un corte como no se ha visto nunca antes, como no se ha
visto ni siquiera en la época de la guerra fría.
Por ejemplo, el general polaco Waldemar Skrzypczak acaba de reclamar que el enclave ruso de Kaliningrado sea puesto en manos de Polonia. 13
Y, en efecto, después de la división del mundo,
Referencias
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