por Sergio Pintado
11 Abril 2024
del Sitio Web
SputnikMundo
Los presidentes de Colombia,
Gustavo Petro,
y de Venezuela,
Nicolás Maduro,
durante un
encuentro en Caracas en abril de 2024
© AP Photo / Ariana Cubillos
El encuentro entre los presidentes
de Venezuela, Nicolás Maduro,
y
de Colombia, Gustavo Petro,
envía un mensaje al progresismo,
"ante la
posible derechización de la región",
dijo a Sputnik el politólogo
Felipe Mendoza.
El experto afirmó que América Latina
atraviesa una
etapa en la que vuelve una,
"radicalización ideológica de la
política"...
Más allá de los temas concretos en la agenda, el
sexto encuentro
mantenido entre los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de
Colombia, Gustavo Petro, puede ser clave para una región
latinoamericana en la que resurge una "radicalización ideológica" de
los Gobiernos.
Así lo consideró, en un diálogo con Sputnik, el politólogo
colombiano Felipe Mendoza, para quien el encuentro entre ambos
mandatarios debe valorarse "dentro de un contexto latinoamericano"
que incluye, por ejemplo, el
diferendo diplomático entre México y
Ecuador o los cruces del argentino Javier Milei
con sus homólogos
latinoamericanos.
"Desde la organización de los bloques ideológicos se están volviendo
a construir las condiciones ideales para una radicalización
ideológica de la política", advirtió el experto.
Para Mendoza, en la región hay actualmente,
"un intento por
desequilibrar lo que ya se había superado" en relación con que "las
cuestiones de gobernanza y de las necesidades de la gente iban más
allá de las relaciones ideológicas".
El experto consideró que es en
ese marco en el que se explican los cruces entre el mexicano Andrés
Manuel López Obrador y el ecuatoriano Daniel Noboa o entre
Milei y Petro.
El politólogo colombiano consideró, entonces, que el encuentro entre
los presidentes de Venezuela y Colombia cobra mayor relevancia en un
momento en el que,
"aquellas pequeñas alianzas cargadas desde lo
ideológico como el ALBA (Alianza Bolivariana para Pueblos de Nuestra
América) están volviendo a nacer".
Mendoza señaló que la entrevista entre Petro y Maduro también envía
directamente,
"un mensaje al progresismo latinoamericano" y permite
"marcar una línea de contención ideológica ante una posible
derechización del continente y una posible llegada de
Donald Trump
al Gobierno de EE.UU.".
"La presencia de Petro y Maduro articulados, tanto en relaciones
diplomáticas como el restablecimiento comercial, está marcando una
cimentación de una alianza a la que hay que ver si se suman otros
líderes como López Obrador o Boric.
Hay que ver cómo se va a
articular lo que se viene en torno a la radicalización del discurso
que se está planteando", agregó.
Mendoza sostuvo que, más allá de las contradicciones internas que
afronta al interior de Colombia, Petro apuesta a,
"un desdoblamiento
internacional" que le permita "consolidarse como un líder del
progresismo" latinoamericano en un momento de retracción de los
liderazgos de la región.
En ese sentido, el analista apuntó que el presidente brasileño,
Luiz
Inácio Lula da Silva,
dejará de cumplir ese rol
"por sus condiciones
y su edad", que el venezolano Nicolás Maduro no podrá hacerlo por la
coyuntura venezolana y que el chileno Gabriel Boric,
"ha direccionado
su política en un sentido que nadie esperaba".
El politólogo remarcó que, en su visita al presidente venezolano,
Petro busca ejercer "un efecto bisagra" en la región, ya que,
"no
está totalmente con Maduro pero tampoco totalmente con los intereses
de EE.UU." sino que apuesta por "los intereses internacionales que él
mismo ha determinado".
A su vez, Maduro encuentra en Petro un aliado que le permite
encontrar "un esquema de validación" al ciclo electoral venezolano
de 2024 que otros presidentes progresistas de la región no han dado
con énfasis.
"Maduro encuentra un aliado natural que no había encontrado con
Boric o con el propio López Obrador y que le había generado un
desequilibrio internacional en relación a la forma en que se estaba
proyectando el escenario electoral en Venezuela", concluyó.
|