del Sitio Web AndyLloyd
traducción de
Adela Kaufmann
Su dependencia de una fuerte colisión planetaria va en contra del pensamiento general, porque tales eventos generalmente son considerados remotamente posibles, a nivel estadístico. (1)
Sin embargo, la evidencia que emerge de la exploración de Júpiter
por la sonda espacial Juno indica que algo muy importante irrumpió
el núcleo del gigante gaseoso desde el principio. (2)
En cambio, el núcleo parece ser más una mezcla nebulosa de
materiales de partida y materiales atmosféricos.
Algo parece haberlo interrumpido desde el principio, un evento que
tuvo consecuencias duraderas a lo largo de la vida útil del sistema
solar. Piense en el impacto de
En poco tiempo, el planeta gigante volvió a su aspecto normal, aunque los impactos causaron cambios sustanciales en su interior.
Para parar el núcleo en sí, el impacto tendría que afectar el núcleo del planeta en sí mismo:
El impactador no solo necesitaría golpear la 'ojo de buey central', sino que también necesitaría permanecer intacto durante su descenso.
Un planeta alrededor de 10 veces la masa de la Tierra sería suficiente para la tarea, sugiere el modelo por computadora: (2)
La interrupción interna de Júpiter tomaría literalmente miles de millones de años para recuperarse.
Incluso 4,500 millones de años después, el planeta gigante
estaría todavía con problemas en el fondo, sugieren los datos de Juno
Dado que hay evidencia de otras colisiones significativas dentro del sistema solar:
...parecen que las colisiones planetarias eran la norma en el sistema solar temprano.
Los investigadores involucrados en este trabajo piensan que este tipo de eventos catastróficos pueden ser más comunes de lo que se pensaba anteriormente.
La inmensidad de estos eventos de colisión puede explicar las erupciones de calor alrededor de las estrellas jóvenes, donde parte de la luz estelar se ha visto afectada temporalmente por inmensos campos de escombros poscolisión que orbitan la estrella. (1)
Otros científicos pueden ser escépticos de estas afirmaciones (a pesar de que están respaldadas por algunos conjuntos de números fuertes), pero esta nueva hipótesis puede demostrar tener buenos poderes predictivos.
Más aún, ilustra la naturaleza muy caótica del sistema solar temprano y el alto potencial de colisiones planetarias durante ese tiempo.
Referencias
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