por Eduardo Martínez de la Fe
04 Febrero
2021
del Sitio Web
Tendencias21
Ilustración artística
de un brillante brote de rayos gamma
en una región de formación estelar.
Crédito: NASA
Swift/Mary Pat Hrybyk-Keith y John Jones.
En el
corazón de
la Vía Láctea
existen rayos cósmicos
convertidos en
aceleradores de partículas
que generan
rayos gamma
con una potencia
inimaginable
que luego
impactan en la Tierra...
Desde el disco de la Vía Láctea, la región de nuestra galaxia en la
que se acumulan la mayor cantidad de estrellas y planetas, están
emergiendo
rayos gamma con una potencia que
supera con creces cualquier cosa que se pudiera construir o imaginar
en la Tierra.
Lo ha descubierto una investigación del experimento
Tíbet AS-gamma, un observatorio de
rayos cósmicos situado en Yangbajing, China, a 4.300 metros sobre el
nivel del mar.
Los científicos chinos y japoneses que operan dicho observatorio han
producido en el pasado resultados significativos en astronomía
gamma, rayos cósmicos, física solar y física de partículas.
Ahora han vuelto a
asombrar al mundo.
Energía
inesperada
En un artículo que ha sido aprobado para publicación en la revista
Physical Review Letters, explican que los rayos gamma
detectados por este observatorio tienen una energía superior a la
del petaelectronvoltio o
PeV.
Si comparamos esta energía con la que es capaz de generar
el LHC del CERN en Ginebra,
comprobamos que este acelerador de hadrones ha llegado a los 14
teraelectronvoltios (TeV) de potencia.
Un PeV equivale a
mil TeV...
Según informa al respecto
ScienceNews, esos rayos gamma confirman la presencia de potentes
aceleradores de partículas cósmicas en el centro de la Vía
Láctea.
Los investigadores creen que esos aceleradores de partículas
originan los potentes rayos cósmicos, las misteriosas partículas que
atraviesan toda la galaxia y bombardean constantemente a nuestro
planeta.
Velocidad de
la luz
Esos
rayos cósmicos viajan a una
velocidad cercana a la de la luz y tienen cientos de veces más
energía que las partículas producidas en el acelerador más potente
jamás creado en nuestro planeta.
La mayoría de las partículas que componen los rayos cósmicos son
protones o núcleos de átomos y, cuando
chocan con desechos cósmicos esparcidos por la galaxia, pueden
producir los rayos gamma.
Los rayos gamma, un tipo de radiación electromagnética constituida
por fotones, se generan en fenómenos astrofísicos de gran violencia:
provocan brotes de
rayos gamma (GRB),
los eventos electromagnéticos más luminosos que ocurren en el
universo.
Comprobación
Los astrónomos siempre han sospechado que algunas regiones de la
galaxia en la que vivimos pueden acelerar partículas de rayos
cósmicos a más de un PeV (Peta
Electron Volt).
Sin embargo, hasta ahora no se había podido confirmar esa potencia
de los rayos gamma, ni tampoco la existencia de ningún acelerador
cósmico capaz de alcanzarla.
La nueva investigación ha comprobado ambos extremos:
esos aceleradores
existen y generan rayos gamma con energías que oscilan entre los
100 TeV y 1 PeV en el disco galáctico, tal como explican en su
artículo.
Los autores de la
investigación señalan además que esos potentes rayos gamma se
originan en los rayos cósmicos que vagan erráticos por la galaxia,
como resultado de la interacción de protones con el medio
interestelar.
Campos
magnéticos
Consideran por tanto que los rayos cósmicos se aceleran más allá de
las energías PeV en nuestra galaxia y que se extienden por el disco
galáctico, modulados por sus campos magnéticos.
Eso significa que,
nuestra galaxia está
repleta de rayos cósmicos mucho más potentes de lo que se
pensaba hasta ahora, y que han quedado al descubierto al
comprobarse la energía de los rayos gamma que generan.
Cuanto mayor es la
energía de los rayos gamma, mayor es la energía de los rayos
cósmicos de los que proceden, señalan los científicos.
El experimento 'Tíbet AS-gamma'
detecta rayos gamma de alta energía
al observar lluvias de partículas producidas
cuando un rayo gamma golpea la atmósfera de la Tierra.
Instituto de Física de Altas Energías
de la Academia China de Ciencias
Xinhua / Alamy Stock Photo
Fuente
Esta constatación confirma que los potentes rayos PeV no solo se
originan, sino que también se propagan por el disco galáctico,
produciendo un resplandor difuso de rayos gamma de energías extremas
que
un observatorio tibetano ha por fin
detectado y medido.
Referencia
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