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			 una gran cantidad de planetas acuáticos: la Tierra, Venus y Marte se gestaron a partir de diminutas partículas de polvo compuestas de hielo y carbono. El agua incrementa notablemente la posibilidad de hallar planetas con condiciones de habitabilidad 
			en la Vía Láctea... 
 
			
			 
 
			En la Vía Láctea hay por 
			lo menos 50 mil millones de planetas, de los que 6.000 
			millones serían como la Tierra, según otras estimaciones. 
 Considerando que la molécula de agua es relativamente frecuente, los científicos sostienen que es probable que todos los planetas de la Vía Láctea hayan contenido o contengan agua. 
 
			El punto decisivo para 
			saber si poseen agua líquida es la distancia que separa a cada 
			planeta de su estrella. 
 
			Sin embargo, hasta el 
			momento se sostenía que el agua llegaba casi de una forma azarosa 
			a planetas como la Tierra, por ejemplo gracias al impacto de un 
			asteroide conformado por hielo. 
 Ahora, la investigación efectuada en Dinamarca aporta un nuevo escenario al respecto. 
 
 
 
			 
 
			En el caso de la Tierra, 
			descubrieron que milimétricas partículas de polvo, hielo y carbono 
			se acumularon hace 4.500 millones de años en la estructura primaria 
			que posteriormente se transformaría en nuestro planeta. 
 Los especialistas creen que muchos otros planetas de la Vía Láctea podrían contener agua y, en consecuencia, se incrementarían considerablemente las posibilidades de hallar vida. 
 Sin embargo, las condiciones de temperatura deben acompañar para que este fenómeno pueda concretarse. 
 
 
 
			 
 
			
			
			Otra investigación 
			realizada en 2020 apuntaba a algo similar, indicando que podría 
			existir hasta un planeta similar a la Tierra por cada cinco 
			estrellas parecidas al Sol en la Vía Láctea. 
 
			Eso significa que 
			alrededor de seis mil millones de estrellas pueden contener bajo su 
			influjo planetas similares a la Tierra en el contexto de nuestra 
			galaxia. 
 Los astrónomos esperan que la irrupción de una nueva generación de telescopios avanzados y el avance de diferentes misiones espaciales actualmente en desarrollo puedan confirmar definitivamente estas teorías. 
 
 
 
			 
 
 
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