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por Elva Thompson 23 Julio 2014 del Sitio Web HeartStarTheBooks
traducción de
Adela Kaufmann
Hace un par de años, vi un vídeo de Cristóbal Vila llamado 'Nature by Numbers'.
El cortometraje fue impresionante, pero resultó que mi percepción del mundo natural al revés, demostrando que la naturaleza no es más que una construcción matemática animada.
La creación según las Escrituras
Génesis 1 nos dice que Dios creó el cielo y la tierra 'sin forma y en vacío'.
En Génesis 2 y 5 leemos que dios creó cada planta en el campo antes de que creciera, porque él no había hecho llover sobre la tierra. Esto implica que dios creó las ideas arquetípicas de todas las cosas vivas antes de hacerlas manifiestas.
Él creó todo, desde las plantas que dan semillas hasta ballenas, según su género.
Su 'género' se refiere a las diferentes plantillas genéticas que crean la diversidad de la naturaleza. Todas estas plantillas están basadas en la Numero Áureo y la Espiral de Fibonacci, y están hechas de combinaciones de campos de ADN llamados "arquetipos", y hay un plan energético para cada especie.
Todos los animales tienen alma de grupo [mentalidad de colmena] y esto se demuestra fácilmente en una colmena de abejas, y los patrones de migración de la fauna silvestre.
Cada año, las golondrinas dejan África para Europa en abril, y vuelven de nuevo a África en septiembre.
Si somos capaces de imaginar el arquetipo golondrina como una mano, y las golondrinas como sus dedos, sigue que cuando el arquetipo piensa desde África hasta Inglaterra, todas las golondrinas se mueven con el programa.
Ninguna de las golondrinas son
conscientes de por qué están volando tales grandes distancias.
Muchos mueren en el camino. Las aves están en piloto automático
siguiendo
las líneas electromagnéticas de la cuadrícula
cableadas en su software.
La Proporción Áurea
Los arquetipos de todas las criaturas,
incluyendo nosotros mismos somos construidos en proporciones
matemáticas precisas.
Junto con la secuencia de Fibonacci que
son los bloques de
construcción geométrica de la vida.
No importa dónde miremos, vemos la
geometría fractal.
El hecho de que nuestro cuerpo y el de
los animales, aves, peces, insectos, microorganismos, plantas y
árboles estén conformados por una específica fórmula matemática
demuestra que han sido especialmente creados, cada especie tiene sus
propias proporciones sobre la base de la ración de Oro y la
secuencia de Fibonacci.
Pensar que estas complicadas fórmulas matemáticas se han creado a sí mismas por selección natural es ridículo.
Aunque pequeñas adaptaciones evolucionan
a través de la necesidad, el proyecto original de todas las especies
fue creado por "alguien" o algo. Sin duda este es el trabajo
práctico del pequeño dios del Génesis 1 que hizo todas las cosas
vivientes según su género, y en el proceso creó una
prisión geométrica para todo tipo de vida llamada la
Tercera Dimensión.
Dividiendo los sexos
La tecnología actual de la separación de los sexos es capaz de clonar seres vivos y crear cuerpos (programas de software biológicos) en laboratorios.
Conociendo la secuencia del ADN fractal de los seres vivos es un paso en el camino de ser capaz de implantar este software en otros planetas, incluso si tienen que ser terra-formados por medio de la geo-ingeniería para que apoyen la vida.
Esta puede ser la razón de los dos
relatos de la creación en Génesis. El pequeño dios hizo el programa
Tierra y todas sus criaturas, antes de que él crease a Adán ya Eva.
La división de los sexos habría creado inmediatamente la tercera dimensión de la dualidad y la "caída" del hombre.
La Unicidad de todo había sido dividida
en dos.
Haciendo Añicos el Programa
La dualidad de la trampa geométrica fija la humanidad para una vida útil de prisión en el programa de nacimiento/muerte, amor/odio, ad infinitum.
Cada acto que cometemos, conlleva, ya sea una carga positiva o negativa y, debido a nuestro 'heredado' cerebro dinosaurio, es casi imposible llevar una vida de amor e inocuidad. ¡Tenemos que matar para vivir!
Y así, transgredimos la ley del amor y
creamos un carga negativa y, como resultado de la polaridad quedamos
atascados en la tercera dimensión, vida tras vida, tratando de
equilibrar las cuentas-y convertirnos en una fuente constante de
alimento emocional para nuestro creador.
El Rebaño
El pequeño yo, el ego, no tiene ni idea
de nada de este programa y tampoco le importa; mas nuestro verdadero
yo lo sabe y la naturaleza aterradora de este conocimiento no nos
deja otra opción más que convertirnos en guerreros espirituales y
abrir nuestra conciencia a toda posibilidad. Hay un libro maravilloso llamado El Kybalion para cualquiera de ustedes que deseen aprender la sabiduría de Los Tres Iniciados.
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