por Anand Giridharadas
26 Septiembre 2016

del Sitio Web NYTimes

traducción de Adela Kaufmann
Versión original en ingles

 

 

 

 

El presidente Barack Obama

habla con el ex presidente Bill Clinton

detrás del escenario antes de dar declaraciones durante

la 'Iniciativa Global Clinton' en Nueva York

 

 

La gente está sintiendo la presión y el control de la globalización cerrándose sobre ellos en todas partes, y no les gusta para nada.

 

Sin embargo, los Globalistas que están promoviendo la globalización no tienen absolutamente ni idea de por qué están siendo rechazados.

Fuente
 


 

Globalistas Sitiados Ponderan sobre qué fue lo que salió mal

Hasta hace poco tiempo, usted no oía a la gente siendo referida como "globalista" muy a menudo. Pero en un tiempo de creciente nacionalismo, los que ven el lado positivo de la globalización se han convertido en una distinta - y a menudo asediada tribu.

 

La semana pasada, los Globalistas tuvieron una gran reunión de "familia" en Nueva York.

 

La reunión se centró en la Asamblea General de las Naciones Unidas, pero una creciente variedad de conferencias y cumbres laterales y cenas también atrajeron a preocupados internacionalistas de todo tipo:

  • humanitarios

  • líderes de organizaciones no gubernamentales

  • donantes

  • inversores

  • vendedores de aplicaciones

  • famosos/celebridades

 

El ex presidente Bill Clinton

Hablando en la reunión anual de

La Iniciativa Global Clinton en Nueva York este mes.

Crédito de Stephanie Keith / Imágenes Getty

 

 

Pero una ausencia angustió la semana.

 

Casi por definición, los nacionalistas y localistas están insuficientemente representados en estas reuniones globales.

 

Su escasez fue especialmente notable en esta ocasión, debido a los crecientes signos de nacionalismo - ya sea en la forma de,

... flotaba como un espectro sobre muchas de las discusiones.

 

Los Globalistas tienen elevados objetivos, por supuesto, al igual que trabajar hacia,

Pero parece haber una creciente conciencia de que resolver los problemas comunes de todo el mundo se vuelve más difícil cuando los Globalistas descuidan sus propios patios traseros.

 

Una y otra vez, en conversaciones privadas y en los foros públicos, los Globalistas hablan de sentirse asediados.

 

Tome el discurso de despedida del ex presidente Bill Clinton, el padre de familia de la reunión Globalistas. La Iniciativa Global Clinton es uno de los principales factores en ayudar a transformar lo que había sido una semana centrada en la diplomacia de las Naciones Unidas en un amplio Davos-en-el-Hudson para las aspiraciones internacionales.

 

El Sr. Clinton habló de la visión globalista de un mundo "juego-de-suma-cero" en la que todos ganan juntos y de cómo esa idea fue atacada por política tribal "suma cero".

 

En una discusión Clinton moderó sobre la prosperidad compartida, sus cuatro invitados fueron estimados Globalistas.

 

El panel incluyó a,

  • Mauricio Macri, ex empresario que recientemente derrotó a los arraigados populistas para ser presidente de Argentina

  • Matteo Renzi, el primer ministro italiano que labró su propia carrera en el progresismo pro-mercado que Clinton llamó la "tercera vía"

  • Ngozi Okonjo-Iweala, ex ministro de Finanzas de Nigeria y el funcionario del Banco Mundial

  • Sadiq Khan, el primer alcalde musulmán de Londres, que era un firme defensor de que Gran Bretaña permaneciese en la Unión Europea

 

"Argentina ha sufrido décadas de populismo", dijo Clinton en la bienvenida al Sr. Macri.

Clinton le dijo al Sr. Khan que era,

"Un ejemplo de la interdependencia positiva."

Pero la visión del panel fue limitada por la ausencia de cualquier persona que pudiera explicar con autenticidad la ira populista - que pudiera explicar por qué, como lo puso el Sr. Clinton,

"La intensidad de los sentimientos de la gente resistiéndose a nosotros es mayor que la intensidad de aquellos que están ganando de esto."

Los defensores de un mundo más densamente enredado parecían atrapados en un atado.

 

Su proyecto ha sido durante mucho tiempo para que la gente agrande los límites de su preocupación, a mirar más allá de las fronteras nacionales.

 

Pero ahora más que nunca, descuidar a los trabajadores desempleados en el Cinturón de Óxido, o ignorar la insatisfacción con Europa en el norte de Inglaterra, y se hace más difícil ayudar a los refugiados sirios o desbaratar el cambio climático.

 

Le pregunté a Clinton después de su conferencia sobre el reto de equilibrar la ayuda de Kenia con atender las necesidades de Kentucky, en una época en que la ira de Kentucky amenaza con empujar a los Estados Unidos hacia una menor participación en los problemas extranjeros.

"Lo que usted llama 'la ira de Kentucky' está siendo alimentada en parte por la sensación de que las personas más poderosas en el gobierno, la economía y la sociedad ya no se preocupan por ellos, o los miran de menos", respondió Clinton por correo electrónico.

 

"El dolor y la rabia del camino que vemos reflejados en la elección ha estado construyéndose durante un largo tiempo", agregó.

Pero él buscaba negar la inevitabilidad de la tensión entre la globalización y el nacionalismo, señalando el ejemplo de un programa que recientemente visitó que estaba construyendo nano-satélites en la Universidad Estatal de Morehead en el este de Kentucky.

 

Kentucky se beneficia del programa, pero también Kenia, según él, donde los satélites podrían, por ejemplo, detectar y ayudar a combatir el comercio de medicamentos falsos.

"Cuando las oportunidades se incrementan en una parte del mundo", dijo Clinton, "a menudo hay efectos positivos donde uno menos se lo espera."