por Andrew M. Lobaczewski
del Sitio Web
Ponerology
traducción de
Adela Kaufmann
Versión
original en ingles
PONEROLOGÍA – EL ESTUDIO DEL MAL
“En la opinión del autor, la Ponerología se revela a sí misma como una nueva
rama de la ciencia, nacida de la necesidad histórica y las realizaciones más
recientes de la medicina y la psicología. A la luz de un lenguaje objetivo,
naturalísimo, estudia los componentes causales y procesos del génesis del
mal, sin importar el último alcance social.
Podemos procurar analizar estos procesos ponerogénicos, los cuales han dado
realce a la injusticia humana, armados con el conocimiento apropiado,
particularmente en el área de la psicopatología. En repetidas ocasiones,
como descubrirá el lector, en tal estudio, nosotros nos encontramos con los
efectos de factores patológicos cuyos portadores son gente caracterizada por
un cierto grado de varias desviaciones o defectos psicológicos.”
(Lobaczewski, 42)
Con muy pocas excepciones a través de las edades, las discusiones sobre
filosofía moral – el estudio de la conducta correcta – han fallado en
investigar sistemáticamente el origen, naturaleza y, por supuesto el curso
del mal de una manera libre de imaginaciones supernaturales.
El Mal fue a
menudo considerado como algo que debía sufrirse y aguantarse en vez de algo
que podría ser comprendido y eliminado con medidas racionales.
Y – tal como lo demuestra Lobaczewski – el origen del mal realmente yace
fuera de los límites del punto de vista convencional del mundo, dentro del
cual las anteriores investigaciones morales y exploraciones literarias
fueron conducidas. El Mal requiere un acercamiento verdaderamente moderno y
científico para
descubrir sus secretos.
Este acercamiento es llamado “ponerología”, el estudio del mal, del griego
“poneros” = el mal.
El manuscrito original para este libro fue a la hoguera minutos antes de una
incursión en la Polonia comunista. La segunda copia, dolorosamente
reensamblada por científicos trabajando bajo imposibles condiciones de
violencia y represión, fue enviado vía courrier
al Vaticano. El recibo del
mismo nunca fue reconocido – el manuscrito y toda la valiosa información se
perdieron.
En 1984, la tercera y última copia fue escriba de memoria por el último
sobreviviente de los investigadores originales: Andrew Lobaczewski.
Zbigniew Brzezinski
bloqueó su publicación.
Después de medio siglo de supresión, este libro está finalmente disponible.
Ponerología Política es shockeante en sus descripciones clínicamente parcas
de la verdadera naturaleza del mal. Es conmovedor en sus pasajes más
literarios que revelan el inmenso sufrimiento experimentado por los
investigadores, contaminados o destruidos por la enfermedad misma que
estaban estudiando.
La Ponerología Política es un estudio de los fundadores y partidarios de
regimenes políticos opresivos. El acercamiento de Lobaczewski analiza los
factores comunes que conllevaron a la propagación de la inhumanidad del
hombre al hombre. La moralidad y el humanismo no pueden resistir por mucho
tiempo las depredaciones de este mal.
El conocimiento de su naturaleza – y su efecto insidioso sobre ambos
individuos y grupos – es solamente el antídoto.
PSICÓPATAS:
CASI HUMANOS
INTRODUCCIÓN
“La experiencia ha enseñado al autor que el mal es similar en naturaleza a
la enfermedad, auque posiblemente más complejo y elusivo para nuestro
entendimiento. Su génesis revela muchos factores patológicos, especialmente
psicopatológicos, en carácter, cuya esencia, la medicina y la psicología ya
han estudiado… [Una] comprensión de la esencia y génesis del mal
generalmente usa información de [biología, medicina y psicología]. Solamente
una reflexión filosófica es insuficiente.”
(Lobaczewski, 98)
Como un hombre daltónico incapaz de distinguir el rojo del verde, una
pequeña minoría de la población humana no experimenta ni comprende
completamente el rango normal de las emociones humanas. Y como aquellos
daltónicos que pudieran encubrir su condición usando las palabras correctas
mientras no están entendiendo su significado. (por ejemplo, la luz de color
que está arriba es “roja”, la de abajo es “verde”) – así, esta minoría
encubre su condición actuando señales de emociones exteriores (expresiones
faciales, exclamaciones, lenguaje corporal).
Sin embargo, ellos realmente no experimentan la emoción en cuestión.
Su engaño es revelado en el laboratorio, donde ellos responden a palabras
como MUERTE, CÁNCER, ENFERMEDAD, como si fuesen DÍA, CREMA o PAPEL. Ellos
carecen de la habilidad para comprender el “golpe” emocional que contienen
ciertas palabras. Ellos osan las reacciones emocionales de otros como pistas,
y ajustan su comportamiento para retratar el comportamiento ‘emocional’
correcto.
(Hare, 129-30)
Estos individuos son conocidos como psicópatas.
Ellos no solamente no sienten dolor por otros, ellos a menudo parecen causar
dolor a otros deliberadamente. Lobaczewski se refiere a este desorden como
una “psicopatía esencial” para distinguirlos de otros con déficits en su
dotación genética/instintiva, la psicopatía esencial siendo la más severa y
perturbadora.
Muchos individuos supuestamente “antisociales” adquieren características
similares en el curso de su vida, ya sea causado por daño cerebral a ciertas
áreas del cerebro, o funcionalmente, por el contacto cercano e influencia
por tales individuos. Lobaczewski denomina a tales individuos
caracteopáticos. La extensa mayoría de ambos grupos no puede cambiar.
Los actos que nosotros llamamos malvados (especialmente a nivel macro
social) pueden ser rastreados hacia atrás a esta minoría irregular de seres
humanos y a los efectos de sus acciones en su familia, amigos y sociedad.
Lesiones del tejido cerebral y desviaciones adquiridas
A. Caracteopatía Paranoica B. Caracteopatía Frontal C. Caracteopatía inducida por drogas
“En cuanto a los factores patológicos de procesos ponerogénicos, los daños
perinatales [cerebrales] o de la temprana infancia tienen más resultados
activos que los daños que ocurren más tarde [en la vida].”
(Lobaczewski,
105)
“Estas [anomalías de carácter desarrollándose como resultado de un taño al
tejido cerebral] abren la puerta a la influencia de otros caracteres
patológicos que más frecuentemente acarrean algunas desviaciones
psicológicas heredadas; éstas, entonces, empujan a los individuos
caracteopáticos a las sombras y proceden con su trabajo ponerogénicos. Esto
es porqué varios tipos de caracteopatía participan durante los períodos
iniciales del génesis del mal, tanto a escala macro social como a escala
individual de familias humanas.”
(Lobaczewski, 120)
Ciertas lesiones cerebrales y sus efectos en la personalidad juegan un
importante papel el génesis del mal. Mientras que los resultados bien
conocidos de tales lesiones, como la epilepsia, son fácilmente observados
temprano en la vida, muchas lesiones cerebrales solamente afectan a las
personalidades de sus portadores con el tiempo. Los efectos de estas
lesiones variarán dependiendo en la ubicación del daño cerebral, el tiempo
de su origen, y el estilo de vida del portador después de ocurrir el daño.
Lobaczewski llama a estos desórdenes de carácter o personalidad “caracteopatías”.
La materia cerebral sin daño retiene las respuestas emocionales e
instintivas naturales de nuestra especie. Esto incluye, por ejemplo, la
habilidad de formar lazos emocionales con otros y empatizar (lo que
Lobaczewski llama intuir una situación psicológica). Sin embargo, los
procesos del pensamiento caracteopáticos difieren, y son caracterizadas por
violencia emocional aumentada y egotismo patológico. Su presunción y
auto-importancia narcisista y psicología irregular tienen un efecto que
traumatiza a la gente normal, disminuyendo grandemente el sentido común de
sus víctimas hasta el punto donde se infectan con el pensamiento patológico.
Mientras más joven o más ingenuo es el individuo, más fácilmente pueden ser
transmitidos estos rasgos.
DESÓRDENES PARANOICOS DE CARÁCTER
“Es característico del comportamiento paranoico el que las personas sean
capaces de razonamiento relativamente correcto y discusión mientras la
discusión involucre diferencias menores de opinión. Esto se detiene
abruptamente cuando las discusiones de parejas comienzan a minar sus ideas
supervaloradas, o estrellan sus largamente sostenidos estereotipos de
razonamiento, forzándolos a aceptar una conclusión que previamente hayan
rechazado subconscientemente. Tales estímulos liberan sobre la pareja un
torrente de elocuciones pseudológicas, grandemente para-moralísticas, y a
menudo insultantes, que siempre contienen algún grado de sugestión.”
(Lobaczewski, 110)
-
Hechizante: Mientras que la gente culta y lógica tienen a evitar a los
individuos paranoicos por su lenguaje vulgar y violento, los paranoicos
tienen una notable capacidad para esclavizar mentes menos críticas. Entre
los susceptibles a esto son los jóvenes, las personas psicológicamente
deficientes y aquellos que han sido victimizadas por egotistas patológicos.
Por ejemplo, aquellos seguidos por personas con patología de carácter
tendrán algún grado de daño psicológico que los prevenga de analizar
críticamente la ideología paranoica y la falsa lógica. Tal víctima se
encuentra a sí mismo estando de acuerdo con una vista tergiversada del
mundo, y cualquier desacuerdo se limita a puntos menos importantes. Este
patrón de pensamiento afirma que las premisas tergiversadas y la
correspondiente ideología paranoica son ‘correctas’ aunque pueden estar
seriamente dañados. Los individuos paranoicos están bien conscientes de su
habilidad de esclavizar a otros, y tomar ventaja de esto muy temprano en la
vida.
-
Rigidez de Creencias: individuos paranoicos son similares a los psicópatas
en que son incapaces de sentir dudas de sí mismos, o cuestionar seriamente
sus creencias. Cualquier tal conflicto interno ocurre sin auto-control, sin
auto-conciencia o jerarquía de valores. En pocas palabras, ellos pudieran
encontrar momentos de tensión interna causados por alguna confrontación de
sus propias creencias con información contradictoria, en sus propias mentes,
ellos jamás están equivocados.
-
Causa Fisiológica: Lobaczewski rastrea la causa de esta patología de
carácter a daños en el tejido cerebral, usualmente en la región diencefálica
del cerebro. Su vista paranoica de la realidad puede variar de relativamente
ingenuo a violentamente revolucionario, como fue el caso con el
revolucionario ruso Vladimir Lenin.
-
Causa Funcional/Conductual: Aquellos sin daño en el tejido cerebral a
menudo desarrollan características paranoicas como resultado de inducción
psicológica por algún paranoico con patología de carácter. Una educación
llena de terror da lugar al pensamiento rígido y estereotipado, y le hace
difícil al individuo desarrollar una vista de mundo saludable.
CARACTEOPATÍA FRONTAL
“El carácter patológico de tales personas, generalmente conteniendo un
componente de histeria, se desarrolla a través de los años. Las funcionas
psicológicas sin daño se vuelven sobre desarrolladas para compensar, lo que
significa que predominan las reacciones instintivas y [emocionales].
Personas relativamente vital se vuelven beligerantes, tienden a tomar
riesgos alegremente y son brutales en palabras y hechos.”
(Lobaczewski, 114)
Los daños en la corteza frontal durante el parto o cerca del mismo,
(especialmente entre infantes prematuros) ha sido la causa más común para
esta caracteopatía. Como resultado de avances modernos en los cuidados
médicos para mujeres embarazadas y neonatos, el espectacular papel que juega
este desorden en la ponerogénesis es más bien característico de generaciones
pasadas.
Estos individuos son impulsivos, irritables y agresivos, tienen baja
tolerancia a la frustración, emociones superficiales y demuestran
socialmente un comportamiento inapropiado.
-
Procesos de Pensamiento Inhibidos: Este tipo de daño cerebral no deteriora
la memoria, inteligencia o la capacidad de intuir exactamente una situación
psicológica. No obstante, inhibe la habilidad de visualizar mentalmente y
manipular piezas de información en el campo de conciencia del caracteópata,
o memoria de trabajo. Esto inhibe los sistemas llamados “ejecutores”, los
cuales manejan los procesos de pensamiento. Como tal, los caracteópatas
frontales son caracterizados por niveles anormales de agresión reactiva
(como opuesta a la agresión instrumental que caracteriza a los psicópatas
esenciales).
-
Impulsividad y poca capacidad para planificación a Largo Plazo: Por esta
incapacidad de manipular información en la memoria a corto plazo, los
individuos con daño cerebral frontal deben desarrollar atajos mentales. Esto
resulta en que toman decisiones en fracciones de segundos, y tienen acciones
y palabras que son consideradas absolutas e irrevocables. Ellos incluso ven
su ‘espontaneidad’ (lo cual realmente es solo una muy pobre toma de
decisiones) como señal de su superioridad sobre las personas normales,
cuando, de hecho, estas decisiones sobre-simplificadas son ultimadamente
auto-destructivas.
-
Hipnotizando: Tal creencia despiadada y egotista traumatiza e hipnotiza a
las personas normales, disminuyendo su habilidad para el sentido común.
Algunos aun vienen a ver a los caracteópatas frontales como que tienen
poderes especiales. Si un padre o madre poseen este desorden, todos sus
hijos usualmente muestran evidencia de este hecho en sus personalidades.
Lobaczewski caracteriza a Joseph Stalin como tipificando tal caracteopatía.
-
Confusión con Psicopatía: Un individuo con daño cerebral frontal muestra
algunas similitudes de conducta con psicopatía esencial, lo cual ha
conducido a la conclusión errónea que la psicopatía es causada por daño
cerebral frontal.
-
Una típica descripción de un caso extremo podría incluir lo siguiente:
brutal, carismático, encantador, la toma de decisiones irrevocables,
crueldad inhumana, venganza patológica, una creencia egotista en su propio
genio.
CARACTEOPATÍAS INDUCIDAS POR DROGAS
“Las anomalías de carácter que se desarrollan como resultado de daño del
tejido cerebral [por medicaciones] se comportan como factores ponerogénicos
insidiosos… su influencia fácilmente se ancla en las mentes humanas,
traumatizando nuestras psiques, empobreciendo y deformando nuestros
pensamientos y sentimientos, y limitando la habilidad de los individuos y
sociedades para usar el sentido común y poder leer con exactitud una
situación moral o psicológica. Esto abre la puerta a la influencia de otros
caracteres patológicos, que más frecuentemente acarrean algunas desviaciones
psicológicas heredadas.
(Lobaczewski, 119-120)
Con la actualización de la medicina moderna vino el uso de drogas muy poco
entendidas, que dejan daños permanentes en el sistema nervioso. Algunos
tratamientos tumorales (como por ejemplo las drogas citostáticas) a menudo
atacan más que las más primitivas partes del cerebro, dejando a tales
individuos emocionalmente embotados, incapaces de empatizar. Mientras
conservan su inteligencia, ellos se vuelven vengativos y egocéntricos que
buscan adulación, indiferentes al dolor que le causan a otros.
Ciertos virus (por Ej. paperas, difteria, polio) y toxinas como metales
pesados, pesticidas, aditivos de los alimentos y químicos hogareños pueden
tener efectos similares.
INHERITED DESVIACIONES HEREDITARIAS
A. Psicopatía Esquizoidal B. Psicopatía Esencial C. Otras Psicopatías
“El trágico papel jugado por la hemofilia hereditaria entre la realeza
europea (European
royalty) es bien conocido. Personas responsables en países
donde el sistema de monarquía todavía sobrevive están ansiosas de no
permitir que una carrera de tal gen se convierta en reina. Cualquier
sociedad que ejerce tanto la preocupación sobre individuos con insuficiencia
de coagulación en la sangre u otras serias y peligrosas patologías
protestarían si un hombre afectado con tal condición fuera asignado a un
alto cargo con responsabilidad para muchas personas. Este modelo de conducta
debería ser extendido a muchas patologías, incluyendo anomalías psicológicas
hereditarias.”
(Lobaczewski, 120)
El aspecto temprano del comportamiento psicopático en niños y la similitud
con algunas formas de daño cerebral son evidencia de la base genética y
biológica para la psicopatía. Algunas psicopatías hereditarias, y por lo
tanto irreversibles juegan un importante papel en el génesis del mal a nivel
macro social, mientras que otros juegan menores papeles. Esto incluye muchos
desórdenes comunes de personalidad.
Nota:
Según Lobaczewski, el estudio de la psicopatología fue avanzado más a fondo
en Europa del Este que el la actual psiquiatría occidental. Mientras que los
inventarios actuales de la personalidad pueden ser útiles en diagnosis
exacta, no son útiles en distinguir entre los varios desórdenes de la
personalidad. Como tal, usando terminología occidental, un esquizoide se
puede diagnosticar como esquizoide y/o desorden paranoico de la
personalidad. Un psicópata esencial puede ser diagnosticado como desorden
narcisista y antisocial de la personalidad.
Teniendo esto presente, aquí presentamos las descripciones de Lobaczewski de
las varias psicopatías, junto con la diagnosis occidental más cercana.
PSICOPATÍA ESQUIZOIDE
“[Esquizoides] son hipersensitivos y desconfiados, mientras que al mismo
tiempo le ponen poca atención a los sentimientos de otros. Ellos tienden a
asumir posiciones extremas y están ansiosos por tomar represalias por
ofensas menores o sin importancia. A veces son excéntricos y extraños. Su
poco sentido de la situación y realidad psicológicas los conduce a sobre
poner interpretaciones erróneas, peyorativas sobre las intenciones de la
gente. Fácilmente llegan a estar implicados en actividades que son
ostensiblemente morales, pero realmente inflingen daño a sí mismos y a
otros. Su reducido punto de vista del mundo los hace típicamente pesimistas
respecto a la naturaleza humana.”
(Lobaczewski, 123-4)
-
Irrealidad Emocional: Las principales
características de la esquizoidia (o desorden de personalidad
esquizoide) son emociones entumecidas y carencia de sensación para las
realidades psicológicas, y es probablemente heredada
autosomaticamente.
Su carencia de emoción les permite desarrollar su razonamiento especulativo,
el cual es útil para las disciplinas no-humanísticas (es decir teoría
política y económica).
-
Estados Psicóticos: Bajo experiencias de tensión extrema, los esquizoides
colapsan a un estado muy parecido a la esquizofrenia, sofocando su capacidad
de pensamiento.
-
Declaración Esquizoide: Esquizoides a menudo traicionan su característica
opinión de la naturaleza humana en sus afirmaciones y escrituras.
Irónicamente, las personas normales, bajo la influencia de esquizoides y su
distorsionada opinión de la realidad, tenderán satisfacer tal opinión de la
naturaleza humana. Tales declaraciones tan abiertamente esquizoides son
evidentes en los trabajos de Marx y Engels, Hobbes y varios líderes
intelectuales neoconservadores.
ROL EN EL ORIGEN DEL MAL
-
En relaciones: Los esquizoides a menudo causan muchos problemas en su
familia y son a menudo malos madres. Son fácilmente manipulados para
beneficio de individuos más listos, a menudo jugando el papel de
quo-at-quo. Su vista simplista de “negro o blando” de la realidad
humana a menudo tuerce sus buenas intenciones en malos resultados.
-
En Humanidad: Si se publican las visiones esquizoides y se distribuyen
ampliamente (como los escritos de Marx o de Leo Strauss), ellos pueden jugar
un gran papel en el origen del mal en una escala masiva. Cuando la gente
normal lee el trabajo de un esquizoide, a menudo no están conscientes de la
verdadera naturaleza del autor que están leyendo. Debido a su vista del
mundo psicológicamente más rica, tienden hacia una ‘interpretación
correctiva’ de la escritura, lo cual, de hecho, es patológico.
De esta manera, la psicología desviada pueda también ser aceptada por
individuos ingenuos. Solamente con una apropiada comprensión de la
naturaleza patológica de esta material puede uno efectivamente leer a través
de ello e inmunizarse contra la infección.
PSICOPATÍA ESENCIAL
“Los psicópatas son predadores sociales que encantan, manipulan y
despiadadamente se rascan su camino a través de la vida, dejando un amplio
rastro de corazones rotos, expectativas destruidas y bolsillo0s vacíos.
Totalmente careciendo de consciencia y sentimientos para otros, egoístamente
toman lo que desean y hacen lo que quieren, violando las normas sociales y
expectativas sin el menor sentido de culpa o arrepentimiento. Sus
desconcertadas víctimas desesperadamente se preguntan, ‘¿Quienes son estas
personas? ‘¿Que es lo que las hace ser como son’? ‘¿Cómo podemos
protegernos?’”
(Hare, xi)
Los psicópatas tienen lo que toma para defraudar, estafar y engañar a otros:
Ellos tienen facilidad de conversación, son encantadores, seguros de sí
mismos, tienen facilidad para situaciones sociales, mantienen la calma bajo
presión, no se desconciertan por la posibilidad de ser descubiertos, y son
totalmente despiadados.” (Hare 121)
Una típica descripción de un psicópata, de un artículo sobre el criminal más
notorio de Canadá, Clifford Olson:
“El era un hombre violento con un genio que se disparaba con cualquier
pequeñez. Per también podía ser encantador, de suave lenguaje cuando trataba
de impresionar a las personas… Olson era también un conversador compulsivo …
El es un suave conversador, tiene el don de la labia … Siempre estaba
contando grandezas … El hombre era un gran mentiroso … El siempre quería
probar los límites de la gente. Quería ver hasta donde podía llegar antes de
que usted le protestara … El era un manipulador … Olson era un parlanchín
charlatán … Después de un tiempo nosotros aprendimos a no creerle nada de lo
que decía porque decía tantas mentiras. … Jamás mostró ninguna culpa o
remordimiento por sus depredaciones; por el contrario, el continuamente se
queja por el tratamiento por parte de la prensa, el sistema penitenciario y
la sociedad”.
(Citado por Hare, 133)
Durante su juicio el posó dramáticamente para las cámaras y mientras estuvo
en la cárcel incluso les escribió a numerosos departamentos de criminología
ofreciendo ayuda para comenzar un curso dedicado a estudiarlo a él.
La psicopatía esencial se extiende desde apenas perceptible (“Psicopatía
subclínica”) a reconocible diagnosticable por profesionales (“Plena
manifestación clínica”). El anterior juega el papel principal en el fenómeno
macrosocial, mientras el último (acerca del cual Cleckley escribió su libro
La Máscara de Cordura --
The Mask of
Sanity - y de la cual Charlie Carewe en la novela de Mary
Astor, El Increíble Charlie Carewe -
The Incredible Charlie Carewe
- es el ejemplo) no logran evitar
frecuentes períodos en prisiones o instituciones mentales, a menudo rotando
entre ambos.
Con aquellos que logran mantener sus máscaras de cordura más
consistentemente en su búsqueda de poder, y quienes son, así, más exitosos
en sus esfuerzos, se trata en el libro Serpientes en Trajes (Snakes
in Suits) de Paul Babiak
y Robert Hare.
PRINCIPALES RASGOS
“Los psicópatas están generalmente muy satisfechos con ellos mismos y con su
paisaje interno por muy triste y desolado como pueda parecerles a los
observadores exteriores. No ven nada malo con ellos mismos, experimentan
poca miseria personal, y encuentran su comportamiento racional, que vale la
pena y satisfactorio; ellos nunca miran hacia atrás con arrepentimiento o
hacia delante con preocupación. Ellos se perciben a si mismos como seres
superiores en un mundo hostil de perro que come perro en el cual otros son
competidores por poder y recursos. Los psicópatas sienten que es legítimo
manipular y engañar a otros para obtener sus “derechos”, y sus interacciones
sociales están planeadas para maniobrar hacia fuera la malevolencia que ven
en otros.”
(Hare, 195)
1. Locuacidad: El rasgo más notable de la psicopatía esencial es un torrente de locuacidad,
fácilmente mezclando verdades y ficción. Sin sentir culpa alguna, ellos sin
ningún esfuerzo desvían la atención de previas mentiras con más mentiras.
Ellos pueden hablar durante horas en un extremo y aparecer extremadamente
informados en cuanto a cualquier número de temas. Sin embargo, tienden a
ignorar lo que es considerado como temas importantes, y evitarán hablar de
valores abstractos y sensaciones desconocidas para ellos. Si uno llega a
hablar de tales cosas, surgen anomalías.
En un momento, un psicópata puede estar hablando de su amor profundo por su
madre, el próximo, de cómo una mujer que conoció como niño fue la mujer que
el más amó, ¡aun más que a su madre!
“Ellos conocen las palabras, mas no la música; exhiben una facilidad de
palabra que significa poco para ellos, formadas sin sustancia”
(Hare,
128-129).
Bajo cuidadoso análisis, estas exhibiciones de emoción es demostrado que
carecen de comprensión real de las emociones en cuestión. Es caso como si
creen que el débil impulso o emoción débil que sienten es representativo de
la verdadera emoción sentida por un ser humano normal. Similarmente, sus
flujos de pensamiento son ostensiblemente lógicos, pero, de nuevo, un
cuidadoso análisis muestra que tienen paralogismos sugestivos. Por ejemplo,
cuando son confrontados acerca de su carencia de empatía, un psicópata
pudiera evadir el tema y decir,
“Que hay sobre alguna empatía para mi? ¿Tiene alguna idea de lo que he
tenido que tolerar?”
2. Ningún sentido de culpa: La vida de la gente normal que ellos lastiman es incomprensible para ellos.
La conciencia, para un psicópata, es meramente “conocimiento intelectual de
las reglas que otras gentes componen”, y nada más. (Hare, 132). Para los
psicópatas esenciales, la vida es la búsqueda de atracciones inmediatas,
momentos de placer y sensaciones temporales de poder. A menudo actúan en un
capricho y alcanzan sus metas a expensas de otros, con completa indiferencia
para sus víctimas.
Como analogía, imagínese teniendo una leve
urgencia para un bocado. No obstante, la puerta de la cocina está cerrada,
con candado y con un sistema de alarma. Viendo que la puerta está con llave,
recogen un hacha para derribarla (de todas formas, pronto la iba a
sustituir). Al tajar la puerta, la alarma suena molestamente hasta que usted
la destruye también. Después de demoler la puerta, usted entra a la cocina y
come su bocado. Ahora imagínese como psicópata y la puerta es un ser humano,
la molesta alarma, sus gritos de dolor y agonía. Después de destajar al
humano, sofocando sus molestos gritos, ¡se sienta a gozar su bocadillo!
3. Inhabilidad de amar: Los psicópatas esenciales ven el ‘amor’ de una pareja como un cuento de
hadas del ‘otro’ mundo de humanos normales. Al igual los conceptos
religiosos o morales como ‘amar al prójimo’ son vistos como ingenuidades
infantiles. Para ellos el amor es meramente un fenómeno efímero dirigido a
una aventura sexual. Mientras puedan profesar convincentemente de las
maneras más románticas y significativas, estas exhibiciones son pronto
reemplazadas con egoísmo, arrogancia y hedonismo.
OTRAS CARACTERÍSTICAS
“Reacciones humanas naturales … golpean al psicópata como extrañas,
interesantes y aun cómicas. Por lo tanto nos observan … Se vuelven expertos
en nuestras debilidades y a veces efectúan despiadados experimentos.”
(Lobaczewski, 90)
-
No-psicóticos: Los Psicópatas no son perturbados emocionalmente ni
mentirosos no fuera de contacto con la realidad. Ellos son completamente
racionales y concientes de lo que están haciendo. Como tales, son juzgados
como sanos por los estándares actuales judiciales y psiquiátricos.
(Hare,
22-3).
-
Hacen presas de las debilidades: Ellos pueden fácilmente percibir
deficiencias en los conocimientos de conceptos psicológicos y morales de las
personas, y explotar estas debilidades para su propio uso.
-
Baja Inteligencia: Los psicópatas están levemente debajo del promedio en
inteligencia, sin casos de inteligencia o creatividad más alta. Mientras que
pueden ser expertos en ciertas ciencias que no requieren una vista
humanística del mundo, de acuerdo a Lobaczewski, ellos carecen de
habilidades técnicas o artesanales. También tienen una baja “sabiduría
social” e “imaginación socio-moral”. El éxito académico o de negocios es a
menudo el resultado de fraude, coerción o del uso del trabajo de otros.
-
Comportamiento auto-destructivo: Los psicópatas tienen una inhabilidad
para aprender de la experiencia y carecen de habilidades para el
planeamiento realista para el futuro. James Weiss, citado por Hare describe
soldados
GIs posiblemente psicópatas:
La habilidad de sentir respuestas emocionales como miedo y ansiedad está
directamente relacionada a la conciencia y a la habilidad de controlar el
comportamiento de uno. El miedo o amenaza de castigo no significa nada para
un psicópata. Mientras que pueden vagamente imaginarse lo que les sucederá,
esto no tiene ningún contenido emocional. El deseo de inmediata
auto-gratificación sopesa cualquier ‘temor’ de ser pillado.
-
Déficit de transformación de estímulo: Así como el mundo normal de color
es incomprensible a una persona daltónica o con ceguera de colores (es decir
que hay un déficit en la transformación de estímulo sensorial), el mundo
normal de reacciones humanas instintivas (de lazos emocionales, de
respuestas a favor del factor social), conceptos, sensaciones y valores son
para los psicópatas esenciales como incomprensibles y sin ninguna
justificación obvia.
Éstos son consideradas como convenciones extrañas, inventadas por algún
poder externo. Ted Bundy llamaba a la culpa “una ilusión… una clase de
mecanismo de control social”. Ellos son incapaces de tratar a otros humanos
como seres sensibles y pensantes.
-
Fragmentos de Pensamiento: Las declaraciones contradictorias de los
psicópatas parecen estar relacionadas a su inhabilidad de combinar
exactamente ideas hacia un todo coherente. Por ejemplo, un psicópata, si es
preguntado si alguna vez ha cometido una ofensa violenta, dijo,
Los psicópatas frecuentemente cambian tópicos, van en tangentes y rechazan
dar respuestas directas a preguntas. Movimientos de manos dramáticos y que
distraen, “conversaciones-íntimas” y un contacto visual intensivo, todo lo
cual tiende a confundir al oyente, a menudo acompañan su discurso largamente
extendido. La mayoría de sus víctimas son arrobadas, no por lo que dicen,
sino cómo lo dicen.
-
Naturaleza genética: La presencia de psicopatía en un porcentaje mucho más
grande de hombres que mujeres sugiere una herencia ligada al cromosoma-S. El
alcance de la psicopatía esencial va desde apenas notable (aun a
observadores con experiencia) hasta obviamente patológica.
-
Conocimientos especiales: Los psicópatas esenciales poseen la habilidad de
reconocerse mutuamente en una multitud. Son conscientes de ser diferentes y
ven a las personas normales como ‘los otros’. Una camuflada ‘máscara de
cordura’ acompaña este conocimiento.
-
Máscara de cordura: Como los psicópatas esenciales son psicológicamente
incapaces de incorporarse a una vista del mundo de una persona normal, ellos
solamente pueden copiar o imitar la conducta humana normal. Los humanos
normales, inconscientes de las diferencias psicológicas entre los psicópatas
y ellos mismos, asumen que estas exhibiciones de emociones son evidencia de
una emoción real.
Cleckley hipotiza que los psicópatas no pueden distinguir entre sus
pseudo-intenciones, pseudo-sensaciones, pseudo-remordimiento y el de sus
contrapartes humanos normales. En vez de pensar que los humanos normales
tienen algo que los psicópatas no tienen (es decir, la conciencia), ellos
perciben las reacciones de los humanos normales como extrañas e infantiles.
Son como una persona daltónica que piensa que todo el mundo está loco por
responder de manera diferente a tantos tonos del mismo color.
Su egotismo patológico les prohíbe encontrar falta alguna en ellos mismos,
proyectando así toda la culpa a una causa externa.
CONCEPTOS EQUIVOCADOS ACERCA DE LA PSICOPATÍA
-
Desorden de Personalidad Antisocial: La Asociación Americana de
Psiquiatría compara el desorden de personalidad antisocial (DPA) con la
psicopatía. No obstante, el DPA se refiere específicamente a un grupo de
comportamientos antisociales. Como tales, muchos criminales son etiquetados
como DPA sin ser, de hecho, psicópatas. A la inversa, muchos psicópatas
nunca son etiquetados como DPA.
(Hare, 24-5).
-
Mala niñez: Mientras muchos creen que los psicópatas son como son por
experiencias de abuso infantil, no hay evidencia que sugiera que esto es
cierto. La mayoría de los niños que sufren de abuso en la niñez no se
vuelven psicópatas, y muchos psicópatas crecen en familias sanas. Algunas
dificultades de vínculos o lazos en la infancia son un síntoma de
psicopatía, no una causa.
(Hare, 170, 172, 175)
-
“El puede cambiar!”: Los psicópatas no pueden cambiar, ni quieren hacerlo.
Un violento ofensor fue forzado a tomar terapia de grupo. Mientras el
dominaba al grupo, el trapista eventualmente dijo que veía mejoría y
arrepentimiento en el sujeto. Más tarde, cuando fue entrevistado por alguien
del personal de Hare, el paciente reveló,
En el tema de terapia obligatoria en la prisión, un psicópata dijo:
-
Asesinos en serie: Un insignificante número de psicópatas son también
asesinos seriales. Mientras hay quizás solamente 100 asesinos seriales en
los Estados Unidos, Hare calcula que de cada asesino serial psicopático, hay
de 20 a 30 mil psicópatas que no cometen asesinatos seriales. Su cálculo del
número total de psicópatas en los Estados Unidos (de 2 a 3 millones) es una
proyección conservadora. (Hare, 74)
-
Un Modelo Natural/Alimentado de Psicópata:
-
“La posición que yo favorezco es que la psicopatía emerge de un complejo –
y una pobremente comprendida – interacción entre factores biológicos y
fuerzas sociales. Está basado en evidencia de que factores genéticos
contribuyen a las bases biológicas de la función cerebral y a la estructura
básica de la personalidad, lo que, a su vez, influencia en la manera en la
que el individuo responde a, e interactúa con las experiencias de la vida y
el ambiente social. En efecto, los elementos necesitados para el desarrollo
de la psicopatía – incluyendo una profunda inhabilidad de experimentar
empatía y todo el rango de emociones, incluyendo miedo – son en parte
suministrados por la naturaleza y posiblemente por algunas influencias
biológicas desconocidas en el feto y el neonato en desarrollo. Como
resultado, la capacidad para desarrollar controles internos y de conciencia,
y para hacer “conexiones” emocionales con otros es grandemente reducida.
“Esto no significa que los psicópatas están destinados a desarrollarse a lo
largo de una pista fijada, nacidos para desempeñar un papel social desviado
en la vida. Pero sí significa que su dotación biológica – la materia prima
que las experiencias ambientales, sociales y de aprendizaje forman a un
individuo único – suministran una base muy pobre para la socialización y la
formación de conciencia. Para usar una simple analogía, el torno es
instrumental para moldear alfarería de arcilla (crianza), pero las
características de la alfarería también dependen de la clase de arcilla
disponible (naturaleza).
“Aunque la psicopatía no es principalmente el resultado de malos padres o
experiencias adversas en la niñez, yo creo que juegan un papel importante
formando lo que la naturaleza ha proporcionado. Factores sociales y
prácticas de los padres influencian la manera en que se desarrolla el
desorden, y es expresado en el comportamiento.
“Así, un individuo con una mezcla de rasgos psicopáticos de personalidad que
crece en una familia estable y tiene acceso a recursos sociales y
educacionales positivos pudiera volverse un artista de la estafa o un
criminal de cuello blanco, o quizás algo como un sombrío empresario,
político o profesional. Otro individuo, con muchos de los mismos rasgos de
personalidad, pero con un fondo de privaciones y disturbios podría volverse
un vagabundo, mercenario o un violento criminal.
“En cada caso, los factores sociales y prácticas de los padres ayudan a
formar la expresión conductual del desorden, pero tienen menos efectos en la
inhabilidad del individuo de sentir empatía o de desarrollar una conciencia.
Ninguna cantidad de condicionamiento social por sí misma generará una
capacidad de cuidar de otros o a una ponderosa sensación de bueno o malo.
Para extender mi analogía anterior, la “arcilla” psicopática es menos
maleable de lo que es la arcilla con la que usualmente los alfareros de la
sociedad tendrán que trabajar.
“Una implicación de esta visión para el sistema de justicia criminal es que
la calidad de vida familiar tiene mucha menos influencia en los
comportamientos antisociales de los psicópatas de lo que lo tiene en el
comportamiento de la mayoría de personas.”
(Hare, 173-4)
LISTA DE COMPROBACIÓN DE LA PSICOPATÍA DE ROBERT HARE
“El te elegirá, te desarmará con sus palabras y te controlará con su
presencia. El te deleitará con su ingenio y con sus planes. Te mostrará un
buen rato, pero siempre te pasa la factura. El te sonreirá y te engañará, y
te asustará con sus ojos. Y cuando ha terminado contigo, y sí que terminará
contigo, te abandonará y se llevará con el tu inocencia y tu orgullo. Te
dejarán mucho más triste, pero no mucho más sabio, y por largo tiempo te
preguntarás que es lo que pasó y que fue lo que hiciste mal. Y si otro de su
clase viene a tocar tu puerta, ¿la abrirás?”
(citado por Hare, “Sin
Conciencia, 21)
“Cuando estoy trabajando, lo primero que hago es agarrarte. Busco un ángulo,
una esquina, averiguo lo que necesitas y te lo doy. Luego es tiempo del
reembolso, con intereses. Aprieto los tornillos.”
(citado por Hare, 147)
-
De Mucha Labia y Superficiales: Los
psicópatas son encantadores y articulados conversadores. Ellos son
experto en contar historias “inverosímiles pero convincentes” acerca de
ellos mismos, y a menudo procuran aparecer bien versados en cualquier
número de temas, usando lenguaje técnico que engaña a la mayoría de los
laicos, (pero no a un experto). Para observadores experimentados, las
dramáticas exhibiciones parecen demasiado pulidas y superficiales, como
si el psicópata estuviera simplemente leyendo las líneas de un escrito.
(Hare, 34-5)
-
Excéntricos y Grandiosos: Hare escribe,
-
“Los psicópatas tienen una visión narcisista y muy agrandada del
auto-valor e importancia, una verdadera y asombroso egocentrismo y sentido
de derecho, y se ven a ellos mismos como el centro del universo, como seres
superiores que están justificados a vivir de acuerdo con sus propias leyes…
Los psicópatas son arrogantes, jactanciosos – muy seguros de sí mismos,
testarudos, dominantes y engreídos. Ellos aman tener poder y control sobre
otros y parecen incapaces de creer que otra gente tiene opiniones válidas
que son diferentes de las de ellos. Ellos parecen carismáticos o
‘electrizantes’ para algunas personas.”
(Hare, 38).
Un psicópata, cuando le pidieron que se calificara a el mismo en una
escala de 10 puntos,
-
“y todo alrededor del 10, yo hubiera dicho que 12, pero esto sería parecer
engreído. Si yo tuviese una mejor educación, yo sería brillante.”
El dijo también que su única debilidad era que le importaba mucho todo!
(Hare, 38)
-
Carencia de Remordimiento o Culpa: Los psicópatas tienen una completa
carencia de culpa por el gran daño que le hacen a otros. Cuando encaja sus
necesidades, ellos podrían proclamar sentir remordimiento, pero sin dares
cuenta se estarían contradiciendo a ellos mismos en palabras y acciones.
Ellos podrían, por ejemplo, decir,
Son también extremadamente expertos racionalizando su comportamiento, a
menudo viéndose a ellos mismos como las víctimas (y culpando a sus víctimas
verdaderas). Un psicópata dijo que el hombre a quien mató se había
beneficiado de ello, aprendiendo una dura lección sobre la vida.
Otro dijo,
Una mujer psicópata quien había asesinado a sus hijos se quejaba que a nadie
le importaba el hecho que ella había perdido a sus dos niños.
(Hare, 40-3)
-
Carencia de Empatía: Los psicópatas son incapaces de construir un
“facsímil mental y emocional” de otra persona. Ellos ven a las otras
personas como objetos para su auto-gratificación. Un violento psicópata
puede, como lo pone Hare,
-
Engañadores y Manipuladores: Mentir es tan fácil como respirar para los
psicópatas, y están orgullosos de esta habilidad, de poner a unos contra
otros. No solo pueden mentir sin esfuerzo, ellos son completamente
descarados cuando son pillados en una mentira. Ellos simplemente volverán a
darle vuelta a su historia con más mentiras, para el asombro de aquellos que
saben mejor.
Los psicópatas se ven a sí mismos como predadores, y a sus
víctimas como su presa, y su capacidad de mentir les permite engañar,
estafar y manipular sin la menor inhibición.
(Hare, 46-9) Esto les permite
fácilmente engañar a las tradicionales pruebas de ‘detector de mentiras’.
-
Emociones Superficiales: Mientras que los psicópatas a menudo usarán un
lenguaje altamente expresivo y emocional, una observación más allá muestra
que, de hecho, no entienden lo que implican realmente estas emociones. Ellos
conocen las palabras, pero no tienen comprensión del contenido emocional
detrás de las mismas. Aun violentos estallidos de “rabia” son exhibiciones
cuidadosamente controladas. El psicópata no tiene emociones que controlar;
toda exhibición de emoción es un acto.
Un psicópata reveló,
-
“Hay emociones – un completo espectro de ellas – que conozco solamente a
través de palabras, a través de lecturas y de mi inmadura imaginación. Puedo
imaginarme sentir esas emociones (conocer, entonces, lo que son), pero no es
así.”
(Hare, 52-3)
-
Impulsivos: En la búsqueda de auto-gratificación, los psicópatas toman
decisiones impulsivas con mínima previsión o planeamiento. A menudo viven el
día a día sin serios pensamientos para el futuro. (Hare, 58-9) No
obstante, son también capaces de elaborar planeamientos.
-
Controles muy pobres de Conducta: Los psicópatas tienen una respuesta de
disparo rápido a insultos percibidos, o a la más leve provocación. Ellos
responden a la frustración, al fallo, a la disciplina y la crítica con
violencia, amenazas y abuso verbal. Sin embargo, estas exhibiciones carecen
de excitación emocional que sienten las personas normales en tales
situaciones; ellos están en control total de “enojarse”. En otras palabras,
su agresión es ‘instrumental’.
(Hare, 59-60)
-
Necesidad de Excitarse:
-
“Los psicópatas tienen una necesidad constante y excesiva de excitarse –
ellos desean vivir en la línea rápida o ‘al limite’, donde está la acción... Algunos psicópatas usan una amplia variedad de drogas como parte de su
búsqueda general de algo nuevo y excitante.”
-
Un psicópata, cuando le preguntaron si alguna vez sintió los efectos
físicos de ciertas emociones, respondió: “¡Por supuesto! No soy un robot.
Realmente me llena tener sexo o involucrarme en una pelea.”
De otra manera, los psicópatas se aburren fácilmente. Ellos no pueden
tolerar actividades monótonas o repetitivas, o nada que requiera períodos
extendidos de concentración.
(Hare, 54, 61-2)
-
Carencia de Responsabilidad:
Mientras que afirman amar a sus hijos los ven como una inconveniencia. Un
psicópata mostró más enojo cuando su carro fue confiscado que cuando las
autoridades le quitaron a sus hijos por negligencia
(Hare, 62-3)
-
Problemas Conductuales Tempranos: Por la edad de 10 o 12 años, la mayor
parte de psicópatas exhiben serios problemas de conducta. Por ejemplo:
mentir, engañar, robar, prender fuego, faltan a la escuela, interrumpen la
clase, abuso de sustancias, vandalismo, violencia, tiranizan, se escapan,
sexualidad precoz, crueldad a los animales. Un psicópata sonrió cuando
recordaba acerca de amarrar a cachorros a un carril para usar sus cabezas
para practicar el bate de béisbol.
-
(Hare, 66-67)
-
Conducta Antisocial Adulta:
Mientras que un estimado 20% de las poblaciones de prisiones
estadounidenses (y el 25% de ofensores jóvenes, masculinos) son psicópatas,
estos psicópatas son responsables por más del 50% de los crímenes.
(Hare,
67, 87)
En Sus Propias Palabras:
UN PSICÓPATA RESPONDE A LA LISTA DE COMPROBACIÓN DE HARE
-
Fácil y Superficial: “Que hay de negativo en las habilidades de articulación?”
-
Egocéntrico y Grandioso: “¿Cómo puedo lograr algo si no alcanzo hasta arriba?”
-
Carencia de Empatía: “La Empatía hacia el enemigo es una señal de debilidad.”
-
Mentiroso y Manipulador: “¿Porqué ser veraz con el enemigo? Todos nosotros somos manipuladores hasta
cierto grado. . ¿Qué no es común la manipulación positiva?”
-
Emociones Superficiales: “La cólera puede conducir a ser etiquetado como psicópata.”
-
Impulsivos: “Podría ser asociado con creatividad, viviendo en el ahora, siendo
espontáneo y libre.”
-
Controles de Conducta muy pobres: “Arrebatos violentos y agresivos podrían ser un mecanismo de defensa, un
falso frente, una herramienta para la supervivencia en la jungla.”
-
Necesidad de emociones: “Valor para rechazar la rutina, lo monótono o no interesante. Viviendo al
borde, haciendo cosas que son riesgosas, emocionantes, desafiantes, viviendo
la vida de lleno, estando vivo en vez de lo monótono, aburrido y casi
muerto.”
-
Carencia de responsabilidad: “No debería uno centrarse en las debilidades humanas que son comunes.”
-
Problemas tempranos de conducta y comportamiento antisocial de adulto: “¿Es un récord criminal reflectivo de maldad o disconformidad?”
-
Carencia de remordimiento o culpa: Sin respuesta (Citado por Hare, 69-70)
UNA VISIÓN DEL AMOR
“ Después de dispararle a sus hijos [Diane Downs] tuvo una aventura con
Jason Redding y escribió: “Pero Bert estaba en el pasado, y Jason en el
presente. De verdad, estaba escribiéndole a Bert contándole cuanto lo amaba,
que el fue el único hombre en la tierra para mi. Cuando comenzó a rechazar
las cartas, yo comencé a guardarlas en un cuaderno, haciendo una entrada
cada noche, la mayor parte de veces un párrafo o dos, una página como
máximo.
Sus entradas eran iguales, apenas con diferente fraseología: ‘Yo te amo,
Bert, ¿porqué no estás aquí, te necesito, tu eres el único hombre para mi.’
… Me mezclé un trago y escribí mis vacías palabras de amor a Bert mientras
me hundía en un baño caliente de espuma. … Pensé en Bert. … Minutos más
tarde, Jason tocó la puerta, y al volar hacia debajo de las escaleras me
encontré con el, y mis pensamientos sobre Bert volaron también.” Las
“palabras vacías de amor” de Diane eran una fuente de orgullo para ella,
como si su uso fuese enteramente intencional, diseñadas para un propósito en
particular.”
(Hare, 132)
OTRAS PSICOPATÍAS
Hay un grupo de psicopatías que ocurren dos o tres veces más que aquellas de
psicopatía esencial (de las cuales Lobaszewski calculó como un 0.6% en
Polonia), en aproximadamente 2-3% de la población general. Estos individuos
también intentan enmascarar su mundo de experiencias diferente, aunque
pudieran intentar jugar el papel en el mundo de gente normal; esta no es una
típica “máscara de Cleckley”.
Los casos menos extremos logran ajustarse a la vida social, a menudo tomando
ventaja de la apreciación de la gente normal de las artes, con sus
extravagantes y desviadas creaciones literarias, a menudo sádicas. Ellos
logran insinuar que su mundo de ideas y experiencias es auto-evidente, de
esa manera esclavizando mentes menos críticas. La más frecuente de estas
psicopatías es la psicopatía asténica.
Otras psicopatías que juegan un papel menor en la ponerogénesis macrosocial
incluyen la psicopatía anancástica (Obsesiva-compulsiva), psicopatía
histérica (histriónica) y la psicopatía esquirtoidal.
Mientras que el desorden de personalidad dependiente pueda haber surgido de
la clasificación antigua de desorden de personalidad asténica, como
observado arriba, los diagnósticos pueden haber vagado lo suficientemente
aparte como para ya no aplicar al mismo desorden específico.
PSICOPATÍA ASTÉNICA
Como la psicopatía esencial, la psicopatía asténica presenta cada nivel
posible de intensidad. Tales individuos carecen de vigor y son hiper
sensitivos. Ellos típicamente emulan una nostalgia superficial y pueden
mostrar punzadas superficiales de conciencia después de una conducta
culpable, mostrando que sí tienen alguna habilidad para juzgar una situación
psicológica.
Son generalmente menos inteligentes Son usualmente menos inteligentes que la
gente normal, y demuestran habilidades inconsistentes e inexactas de
razonamiento. Los casos más severos son bastante anti-psicológicos y
despectivos de la gente normal, y son más activos en una escala más grande
(es decir, en el mundo literario o en la arena política) que en las
relaciones personales.
Como resultado de su visión falsificada del mundo, raramente se puede
confiar su opinión sobre otros. Una máscara de cordura cubre sus desviadas
aspiraciones personales y capacidades, y mientras es amistoso con aquellos
que no notan sus fallas, son hostiles con aquellos con un conocimiento
psicológico exacto.
Estos individuos son menos vitales sexualmente que los psicópatas
esenciales, a menudo repelidos por las sexualidad humana normal. Como
resultado, pueden fácilmente aceptar el celibato como modo de vida, (quizás
inspirando la viciosamente antipsicológica actitud de la Iglesia católica).
Acompañando su afecto superficial, los psicópatas asténicos tienen sueños
idealistas de reformar el mundo. Sin embargo, no pueden ver los resultados o
implicaciones para sus planes. Por ejemplo, pueden volverse firmes
comunistas (como Dzerzhinsky), y en su deseo para un mundo mejor, matan a
millones.
Individuos más ingenuos podrían ver pobres condiciones sociales como
justificación para tal visión radicalizada.
PSICOPATÍA ESQUIRTOIDAL
“Si ese fuera el caso [es decir que el
esquirtoidismo (skirtoidism) es un fenómeno biodinámico
resultante del cruce de grupos étnicos extensamente separados], los
Estados Unidos debería de estar lleno con esquirtoides, una hipótesis
que merece observación.
(Lobaczewski, 136)
Los extravagantes esquirtotímicos (Skirtotymic¿?),
en contraste con los asténicos, son individuos vitales, egotistas y de
pellejo grueso. Como tales, hacen muy buenos soldados. Ellos poseen alta
resistencia física y psicológica en tiempos turbulentos, sintiéndose mucho
más en casa en el campo de batalla que con una familia.
CHACALES
Estos Individuos son todavía un misterio. ¿Cómo clasificar a estos
mercenarios contratados y asesinos profesionales que son rápidos tomando las
armas y ejecutando un deber según lo dirigido? Ningún sentimiento ni
sensación les inhibe su ejecución, y no obstante, ninguna de las
descripciones de psicopatías o caracteropatías aplican a ellos. Ellos
carecen de locuacidad e impulsividad de los psicópatas esenciales, o el
falso idealismo de los asténicos.
Posiblemente son híbridos de las otras psicopatologías (psicopatía
esquizoidea y esencial, o esquirtoidismo (skirtoidism).
PONEROLOGÍA:
EL MAL ES UNA ENFERMEDAD
SOBRE LA MALDAD: BATALLANDO
CONCEPCIONES ERRÓNEAS
A. Psicopatía: La Causa del Mal
B. Ponerología: Una Nueva Ciencia
“La sobre-simplificación del cuadro causativo en lo que concierne al
génesis del mal, a menudo a una sola causa fácilmente comprendida o
un perpetrador, por sí mismo, se vuelve una causa en este génesis…
Cualquier intento de explicar las cosas que ocurrieron durante la
primera mitad de nuestro siglo (veinte) por medio de categorías
generalmente aceptadas en el pensamiento histórico, deja una
sensación molesta de insuficiencia. Solamente un acercamiento
ponerológico puede compensar este déficit en nuestra comprensión,
como lo hace la justicia al papel de los varios factores patológicos
en el génesis del mal en cada nivel social.”
(Lobaczewski, 144, 109)
Nuestra moderna cultura occidental carece de un
marco adecuado para entender las causas y procesos de lo que comúnmente nos
referimos al mal en nuestra historia. El Tercer Reich, la Revolución
Bolchevique, Stalinismo… Nuestro cuerpo literario, las ciencias sociales y
nuestro sentido común de moralidad solamente rascan la superficie de una
verdadera comprensión de la naturaleza del mal.
Así, las personas que, de hecho, son los
iniciadores de la mayor actividad ponerogénica pasan desapercibidos. Nuestra
carencia de entendimiento inevitablemente conducirá a los problemas que la
mayor parte de la humanidad busca prevenir.
En la literatura y las películas, el mal es romantizado; retratado como
misterioso, pero con todo hermoso; oscuro y en conflicto. Siempre hay un
corazón de oro debajo del exterior de sangre fría. El psicópata de
Hollywood, raramente descrito con exactitud, evoca nuestro disgusto y
nuestra simpatía; héroes de Guerra matan a sus enemigos despiadadamente,
viviendo, no obstante, vidas llenas le amor como esposos y padres. Si el
villano no tuvo una infancia difícil, o no muestra ningún signo de una lucha
de conciencia, es visto como “de dos dimensiones” y “poco realista”.
Los principales científicos sociales y psicológicos promueven una visión
similarmente estrecha del mal, tratando solo con sus aspectos sociales y
morales. En otras palabras, ellos estudian los efectos, no sus
causas.
Uno de esos investigadores discute que,
“la mayor parte del mal es más bien el
producto de gente ordinaria pillada en circunstancias inusuales, que no
están equipados para hacerle frente de modos normales, que han trabajado
en el pasado para escaparlas, evitarlas o desafiarlas, mientras están
siendo reclutados, seducidos, iniciados al mal por autoridades
persuasivas o presión obligatoria.”
Según este investigador, la línea de distinción
entre un torturador sadista en Abu Ghraib, y un activista no-violento de paz
es simplemente de una ocasión.
Estas visiones un poco ingenuas sobre el mal no están enteramente
incorrectas. Las películas pueden describir con exactitud a un psicótico, o
aun un asesino serial psicopático; la visión común del mal puede aceptar que
las fragilidades humanas y las ambiciones a menudo degeneran en locura
sangrienta. Sin embargo, ambos puntos de vista demuestran una completa
ignorancia del papel casual de la psicopatología (especialmente la
psicopatía esencial) en el génesis del mal, o ponerogénesis.
Las películas ignoran un análisis del padre psicopático que crea al niño
traumatizado; las ciencias sociales ignoran la influencia de la psicopatía
en las mentes de humanos normales y el proceso específico que de surgimiento
a ignorar la propia conciencia.
Más aun, la visión común del mal todavía justifica parcialmente las
soluciones manchadas de sangre de políticos anteriores, presentes y futuros.
De tal manera está justificada la destrucción de Hiroshima y Nagasaki, las
bombas en Dresden, hasta la ocupación actual de Irak y Palestina. Y sin un
entendimiento del papel de la psicopatía, cualquier intento de evaluar
objetivamente tales síntomas de maldad macrosocial, sin importar cuan
exactos.
De tal manera, una verdad parcial puede ser usada como justificación y como
un punto de reunión para más destrucción.
PSICOPATÍA - LA CAUSA DEL MAL
Los desórdenes psicológicos hereditarios o adquiridos y la ignorancia de su
existencia, así como la naturaleza son las causas primarias de la maldad. El
mágico número del 6% parece representar el número de humanos portadores de
genes responsables para la maldad biológica, o quienes adquieren tales
desórdenes en el curso de su vida.
Este pequeño porcentaje es el responsable de la gran mayoría de miseria y
crímenes humanos, y de infectar a otros con su agrietada visión del mundo.
El alcance del mal no respeta ningún límite de raza, doctrina o ideología.
Todas las razas portan los genes, y todas las escuelas de pensamiento son
susceptibles a su influencia. Estos factores patológicos que influencian la
conducta forman una compleja red. Solamente dentro de esta red puede ser
entendido el “mal ambiental”, donde cualquier circunstancia puede
influenciar a una persona normal a cometer actos dañinos
De 5,000 pacientes psicóticos, neuróticos y sanos, Lobaczewski
identificó a 384 (un 7.7%) que causaron serio daño (físico y/o emocional) a
otros. Algunos de estos han sido penalizados por sus acciones, y algunos han
sido protegidos por el gobierno comunista de ese tiempo. Al contrario de la
interpretación común moralista de malas acciones (“el mal consiste en tomar
opciones malvadas”), y también contrario a los sistemas legales, los cuales
ven a los psicópatas como cuerdos y así responsables de sus acciones. La
gran mayoría (85%) de estos 384 individuos mostraron factores
psicopatológicos influenciando su conducta.
Es probable que, sin la presencia de estos factores, las acciones dañinas no
hubieran sucedido. Estos factores psicológicos limitan la habilidad del
sujeto para controlar sus acciones. En este sentido, una interpretación
moralista para la conducta psicopática es fundamentalmente errada.
Mientras que un sentido moral (del cual carecen los psicópatas) puede ser
visto como necesario para ser considerado moralmente responsable, por no
decir que los psicópatas deberán tener rienda suelta para destruir vidas.
Individuos psicopáticos pueden tener un número de efectos sobre las personas
normales: pueden fascinar, traumatizar, causar desarrollo patológico de
personalidad, o inspirar emociones de venganza (un resultado de ver el mal
como una simple “opción”).
Un ejemplo de esta variedad puede verse en la hueste de grupos, amigos por
carta, partidarios y admiradores enamorados que conduce hacia peligrosos
asesinos seriales como Richard Ramirez y Ted Bundy.
Un admirador de Ramirez dijo,
“Cuando yo lo veo, veo a un tipo realmente
guapo que simplemente ensució su vida porque jamás tuvo a nadie quien lo
guiara.”
Estos efectos y la confusión que engendran
puede, entonces, conducir a y reafirmar nuestra ignorancia colectiva de
tales individuos. Raramente hacemos responsable al individuo que influencia
a otro a cometer el mal, sino que en vez de esto, solamente castigamos
moralmente al agente de un acto. La verdadera causa de las acciones
“malvadas” quedan sin castigo, tanto como se castigan a individuos en el
ejército por los crímenes de sus superiores.
De hecho, la verdadera fuente del “mal” puede estar separada de una acción
específica durante grandes extensiones en el tiempo (es decir, en la
literatura y la tradición), y a grandes distancias (medios masivos de
comunicación).
“El valor práctico de nuestra visión natural
del mundo generalmente termina donde comienza la psicopatía.”
(Lobaczewski, 145)
PONEROLOGÍA: UNA NUEVA CIENCIA
Sin importar cuan elocuente y exacto los autores (novelistas, dramaturgos,
poetas, historiadores) describan la ocurrencia del mal, una enfermedad no
puede ser curada únicamente a través de su descripción. Nuestro lenguaje
natural no puede adecuadamente explicar los conceptos rodeando tales
fenómenos.
Solo una comprensión científica sacada de conceptos psicológicos, sociales y
morales pueden acercarse al entendimiento necesario para prevenir la
emergencia de locura total, vista muchas veces en la historia de nuestro
planeta.
La Ponerología describe el génesis, existencia y extensión de la
enfermedad macrosocial llamada maldad. Sus causas son rastreables y
pueden ser repetidamente observadas y analizadas.
Cuando la humanidad logre incorporar este conocimiento a su apreciación
natural del mundo, podrá tener un potencial defensiva, hasta ahora sin
realizar.
SUSCEPTIBILIDAD: LA
FORMA NATURAL DE VER EL MUNDO
1. Tendencias de Deformación de la Realidad
2. Condiciones de Vida
3. Procesos Inconscientes
4. Buenos Tiempos, Malos Tiempos: Los Ciclos Histeroides
Muchos factores contribuyen al desarrollo de
nuestra personalidad. Nuestra visión natural del mundo y nuestra conducta
están condicionadas por nuestra educación de la sociedad y familia, y por
nuestra dotación genética individual y colectiva: nuestro substrato
instintivo.
Mientras que el substrato emocional instintivo activo de los animales es el
dictador principal de su conducta, el nuestro es más receptivo al control
del razonamiento. Su base emocional forma la fundación para nuestros
sentimientos y lazos sociales, los cuales nos permiten percibir estados
psicológicos, costumbres humanas y morales. En resumen, está diseñado para
apoyar la cooperación social y la supervivencia del grupo, a veces en
contraste al igualmente fuerte instinto de auto-preservación.
Las diferencias entre individuos y entre naciones son así, igualmente
influenciadas, dando surgimiento a lar ricas y variadas culturas del mundo.
Perceptiblemente, las semejanzas entre las culturas muestran ciertas
características universales, lo cual obviamente derivan de la naturaleza
genética de nuestra especie. Las diferencias interraciales en el substrato
instintivo son mucho menos llamativas que la diferencia entre los seres
humanos normales y por portadores de ciertos defectos del substrato
instintivo de la misma raza.
Mientras que la objetividad es posible rastreando las causas de nuestra
personalidad, usando los mismos principios lógicos y metodológicos como en
otras ciencias, tenemos una tendencia natural para afirmar que elegimos
libremente nuestras propias intenciones y comportamientos. Rechazamos las
condiciones externas que influencian nuestras acciones y forman nuestras
personalidades. Así, nuestra visión natural del mundo no es perfecta. No
siempre refleja una realidad objetiva, y a menudo somos ilógicos en nuestras
creencias y nuestras toma de decisiones, como resultado.
Por suerte, mientras mejor sea nuestra comprensión de las causas humanas,
mejor podremos liberarnos del condicionamiento que obstaculiza nuestra
comprensión y toma de decisión.
TENDENCIAS QUE DEFORMANTES DE LA REALIDAD
-
Reacciones Emocionales: Como
resultado de nuestro instinto y errores en nuestra educación, nuestras
reacciones emocionales (algunas de las cuales son explicadas abajo) son
escasamente apropiadas a las situaciones que las detonan. Un ejemplo
común sería ofenderse a una crítica objetiva y haciendo una impetuosa
decisión basada en una reacción emocional temporal.
-
Interpretación moralizante: Los
humanos natural e instintivamente no pueden distinguir por instinto
entre maldad moral y maldad biológica. Dotamos a menudo con juicio
moral, como si nuestra manera de pensar fuese la mejor, simplemente
porque es la nuestra. Cuando aplicamos este modo de pensar a otros cuyo
comportamiento vemos como impropio. Así, juzgamos a tales individuos
como “malos”, infiriendo que tienen intenciones negativas en vez de
tratar de comprender las condiciones psicológicas que los están
conduciendo, y que los convence de que lo que están haciendo está bien.
A menudo estas condiciones incluyen daño cerebral o
psicopatologías hereditarias.
El acercamiento común ‘moralista’ puede ser resumido de la siguiente
manera:
Los psicópatas tienen poca o ninguna
oportunidad en cómo actúan, ya que no se identifican ni simpatizan con
nadie; ellos no pueden ver a otros humanos como ninguna otra cosa sino
objetos a ser usados a su ventaja – ellos “carecen del ‘hardware’, por
así decirlo. Deberíamos ser compasivos, porque ellos literalmente no
tienen opción en el asunto. Su mismo código genético los
predispone hacia una conducta depredadora.
Ellos son, como los denomina Robert Hare, una inter-especie
depredadora.
Una interpretación moralista a menudo conduce a comportamiento erróneo,
tal como un deseo de venganza, el cual, en sí mismo, abre la puerta a
más factores ponerogénicos.
A menudo, exhibiciones exageradas de tales interpretaciones
emocionalmente cargadas (tales como aquellas de Bill O'Reilly o
Glen Beck, por ejemplo), son por sí mismas indicadores de
egotismo patológico.
-
Interpretación Crítica Correctiva:
Opuesto a una aceptación patológica por el desvío psicológico del
trabajo de otro, los humanos normales a menudo aplican a una
críticamente correctiva interpretación de tal material. Por su visión
psicológica más rica del mundo, las personas normales a menudo
trivializan evidentes errores y proyectan su propio entendimiento al
trabajo de alguien que carece de tales habilidades. Esto puede causar
que un individuo a aceptar material que es realmente contrario a su
moral o a sus creencias, como por ejemplo el trabajo de Marx o
aun Adolf Hitler.
-
Reflejo de Auto-Protección: Nuestra
rapidez en el reflejo–cercano controlando a alguien que se presenta como
amenaza a nuestro grupo es codificado a nivel instintivo. Este reflejo
va acompañado por una interpretación moralista de la conducta humana.
-
Tipos Psicológicos Normales: Entre
los humanos normales, el dinamismo del substrato instintivo es
diferente. Por alguna razón fácilmente domina al instinto emocional;
para otros, los instintos dominan al intelecto. Algunos parecen tener un
substrato más rico y más desarrollado que otros. Estas diferencias deben
ser tomadas en cuenta al tratar de alcanzar una visión objetiva de la
realidad.
-
Carencia de Universalidad: La visión
natural solamente aplica a la gran mayoría de la humanidad. Hay, no
obstante, un segmento, estadísticamente pequeño, de la población humana
que tienen una visión bastante diferente del mundo. Estos individuos son
discutidos en la sección arriba, titulada
Psicópatas: Casi Humanos. Como
tales, la visión natural del mundo tiene aplicabilidad limitada.
Nosotros vivimos nuestras vidas con solo el pensamiento emocional y la
búsqueda de la felicidad, ero estas herramientas son insuficientes
cuando tratamos con una psicopatología.
-
Egotismo y la Visión Natural del Mundo:
Algunas personas con una altamente desarrollada visión natural de los
aspectos psicológicos, sociales y morales, tienden a sobrevaluar su
propia visión del mundo, viéndola como una base objetiva para juzgar a
otros. Mientras que esto es la forma menos perniciosa de egotismo,
basada en principios humanísticos, la negación a admitir la posibilidad
de error puede tener un efecto opresivo en medidas contractivas en
contra de la enfermedad macrosocial.
Por ejemplo, una fuerte creencia de que todos los humanos nacen igual
y son creados a la imagen de Dios puede conducir a una aceptación
“igualitaria” de individuos patológicos y su visión del mundo
distorsionada. Dinámicas similares ocurren con fuertes creencias en la
libertad de expresión, libertad de buscar felicidad, la “bondad” de la
humanidad, etc. Una visión objetiva del mundo debe ser práctica y
enraizada en realidades biológicas.
No obstante, debe explicar adecuadamente lo que la biología no hace.
Debe tomar en cuenta los “errores de lectura” de la visión natural del
mundo.
CONDICIONES DE VIDA
Además de procesos psicológicos internos, otras condiciones contribuyen a la
ponerogénesis. Por ejemplo, déficits intelectuales, ya sean como resultado
de la edad, educación o dones naturales y errores morales contribuyen
sustancialmente a la ponerogénesis.
Esto puede incluir ignorancia de diferencias psicológicas, una inhabilidad
de reconocer la manipulación y la tendencia a darse cuenta de los propios
deseos sin consideración al bienestar de otros.
-
Condiciones Socioeconómicas: Sin
importar la calidad de tales condiciones, los psicópatas, como
regla, llegan a la conclusión que la sociedad es opresiva y usa la
fuerza. No obstante, si tales condiciones realmente existen, estas
sensaciones patológicas de injusticia pueden están en resonancia con
aquellos que realmente han sido tratados injustamente.
-
Trauma Psicopático: La subordinación
a un individuo psicopático tiene severos efectos en una persona normal.
Engendra tanto trauma como neurosis, privándolo de autonomía y capacidad
para el sentido común. Las emociones se congelan y el sentido de
realidad psicológica se ahoga. Esto conduce a una sensación de desamparo
y depresión intensa.
PROCESOS INCONSCIENTES
“Procesos Psicológicos inconscientes
dejan atrás el raciocinio consciente, tanto en tiempo como en
alcance, lo cual hace posible muchos fenómenos psicológicos. …
Aquellas personas que usan operaciones conversivas demasiado a
menudo con propósitos de encontrar conclusiones convenientes o
construir algunas astutas afirmaciones para logísticas o
paramoralísticas, eventualmente comienzan a adoptar tal conducta por
razones cada vez más triviales, perdiendo la capacidad del control
consciente sobre su proceso de pensamiento en conjunto. Esto
necesariamente conduce a errores de conducta, los cuales deben ser
pagados por otros, así como por ellos mismos también”.
(Lobaczewski, 152, 3)
-
Conclusiones bloqueadoras:
“Hablamos acerca de que bloquear
conclusiones en el proceso deductivo era apropiado en principio…
pero se vuelve un obstáculo por un directivo precedente del
subconsciente que lo considera [la conclusión] inconveniente o
molesto.”
(Lobaczewski, 152)
Una persona normal tiene todas las
herramientas e información necesarias para resolver un problema, o
llegar lógicamente a una conclusión, pero si la solución contiene ideas
contradictorias para creencias firmemente sostenidas, está ‘bloqueada’
del conocimiento consciente. Esto tipo de negación puede ser
extremadamente dañino, conduciendo a intensas sensaciones de tensión y
amargura.
Por ejemplo, una esposa podría rechazar la
conclusión de que su esposo la está engañando, aun cuando toda la
evidencia lógicamente apunta a que este es el caso (es decir testimonios
de amigos, extrañas llamadas telefónicas de alguna mujer desconocida,
lápiz de labio en el cuello de la camisa). Cuando alguien que apoya la
guerra en curso en Irak es confrontado con el hecho de que se han matado
casi un millón de iraquíes como resultado de su apoyo, este hecho puede
ser subconscientemente bloqueado.
-
Selección de premisas: En lugar de
afectar la aceptación de molestas conclusiones, este proceso bloquea la
pieza de las piezas de información que conduce a la formación de una
conclusión. Al determinar la moralidad de la ocupación de Palestina,
muchos rechazan que los Palestinos fueron étnicamente limpiados en la
Nabka de 1948. Aceptando esta fecha
conduciría a una conclusión correcta, no obstante perturbadora en cuanto
a la moralidad de la ocupación militar israelí.
-
Sustitución de premisas: Este es el
proceso más complejo, y consiste en sustituir otra información por
aquella ya rechazada, haciendo una conclusión más cómoda Este proceso es
a menudo efectuado colectivamente, usualmente en comunicación verbal. En
el caso de Palestina, algunos grupos se han convencido a sí mismos que
no hay tal cosa como un palestino: Palestina estaba vacía cuando la
encontraron los judíos, dicen ellos. Esto podría ser llamado “mentirse a
sí mismo”, o una mentira que conscientemente nos contamos y luego
llegamos a creer que es verdad.
El pensamiento conversivo es altamente contagioso y actúa como
puerta para una peligrosa infección para material verdaderamente
patológico. Las personas que han perdido su capacidad para el
pensamiento lógico (y así la habilidad de distinguir entre la verdad y
la mentira) son así más proclives a aceptar la paralogiza y la par
amoralidad de los psicópatas y caracteópatas. Por ejemplo, observe la
conducta del “Derecho Cristiano” y su aceptación no crítica a la
propaganda de guerra.
EL CICLO HISTERIODAL
En su búsqueda de una buena vida, la humanidad primero usó la fuerza de los
animales, luego se volvió a explotar a sus compañeros humanos. De tal
manera, las semillas del sufrimiento y la desigualdad pueden ser encontradas
en nuestra búsqueda auto-indulgente de la “felicidad”. De esta manera, los
buenos tiempos le dan paso al nacimiento de malos tiempos. El conocimiento
aprendido por el sufrimiento en los malos tiempos conduce a la creación de
los buenos tiempos, y así, el ciclo se repite.
Cuando una sociedad es auto-indulgente (hedonística) y los tiempos son
“buenos”, la percepción de la verdad acerca del ambiente real, y en
particular, la comprensión de lo que una es una saludable personalidad
humana y cómo se consolidan tales personalidades, cesa, primero que nada de
ser la prioridad social más alta, luego cesa de ser generalmente entendida y
finalmente cesa aun de ser recordada como parte del inventario del
conocimiento humano.
La comprensión y la acumulación de conocimiento pareciera ser un “trato
hecho” (es decir, declaraciones como: “No hay nada que pueda ser descubierto
ya en la física” a finales del siglo diecinueve, o “Somos el resultado final
y la meta final de la evolución”).
La búsqueda de la verdad es, entonces, considerada ser una actividad
insustancial por la misma razón de que son buenos tiempos.
Esto, desafortunadamente es una confusión del efecto (los buenos tiempos)
con la causa (el esfuerzo dedicado a entender y las organizaciones sociales
que concuerdan con la realidad creadas por ese entendimiento, el cual trajo
a los buenos tiempos). Un entendimiento profundo puede volverse
“pasado de moda” o aún puede ser despreciado. Por ejemplo, jóvenes
estudiosos de la clase alta victoriana eran etiquetados como “empollones”,
ahora, en los Estados Unidos, tales estudiosos pueden ser aconsejados a que
“consigan una vida.”
Habiendo arribado a la cima de la rueda de la fortuna, mucha gente se olvida
que, sin transformación evolutiva a otro nivel, es una rueda, y no hay más
donde ir sino hacia abajo.
Aquí están la esencia desnuda del ciclo histeroidal con un énfasis
específico en los procesos mentales implicados.
-
La búsqueda de la verdad revela
“inconveniente”, es decir, hechos moralmente embarazosos. Por ejemplo,
los propietarios de esclavos cristianos siendo recordados que tener
esclavos no era una actividad muy cristiana; o de otra manera,
estadounidenses no prejuiciados siendo informados que sus dólares de
impuestos están siendo gastados en metas racistas, es decir, para
limpiar étnicamente a los palestinos de la tierra codiciada por los
Sionistas. Las sociedades hedonistas reprimen el hecho que ellos sacan
provecho del sufrimiento de otros.
-
Al principio, cuando se encuentran hechos
moralmente embarazosos, son conscientemente evitados. Por ejemplo, el
sujeto es cambiado repentinamente; o se entabla una discusión o se
concluye sin avanzar absolutamente en el tema.
-
Cuando se evitan hechos moralmente
embarazosos demasiado con demasiada frecuencia, deja de ser un proceso
consciente y queda relegado al subconsciente; es decir, se vuelve un
hábito.
-
El hábito de evitar hechos moralmente
embarazosos es contagioso. Se vuelve un hábito socialmente aceptado, la
cosa “de moda” a hacer.
Lobaczewski señala que el Emperador
Guillermo I tuvo un trauma cerebral en su nacimiento, y numerosas
limitaciones, tanto físicas como psicológicas, las cuales fueron
completamente encubiertas por las personas alemanas, que, por ejemplo,
es casi imposible encontrar la fotografía de este emperador con su brazo
gravemente marchitado visible.
-
El razonar para sacar conclusiones válidas
se vuelve imposible porque las brechas dejadas por los “inconvenientes”
factores oprimidos. El subconsciente compensa sustituyendo “premisas”
que son menos embarazosas moralmente, como para poder continuar sacando
conclusiones, aunque las conclusiones ahora sacadas son, necesariamente
falsas. Esta es la crónica evitación del punto crucial del asunto.
-
La gente crece perceptiblemente más
egotista, y la sociedad, en su totalidad, más emocional e histérica. Hay
muchísima confusión en cuanto a los valores, y tales sociedades crecen
para ser vistas como arrogantes y hedonísticas.
-
Cuando la desviación de una realidad se
vuelve lo suficientemente grande, la persona o la sociedad se vuelven
patológicas, y hacen juergas de asesinato o guerras mundiales sin
sentido y sangrientas revoluciones son la perspectiva.
En fin, durante las buenas épocas, los valores
morales, intelectuales y de personalidad volvían al punto donde una sociedad
está madura para la manipulación de encantadores de serpientes y compinches
de carisma digno de Rasputín. Los individuos se vuelven emocionalmente
volátiles, egotistas e intolerantes respecto a otras culturas.
El resultante sufrimiento hace necesaria una
gran fuerza mental y física para luchar por la existencia y la razón humana.
Lentamente, lo que se ha perdido es reaprendido.
Los tiempos difíciles dan lugar a que los valores necesarios conquisten
el mal y produzcan mejores tiempos.
THE GENESIS OF EVIL
1. Asociaciones Ponerogénicas
2. Ponerización
3. Patocracia
La causa más importante del mal está en la
interacción de dos factores humanos:
1) Ignorancia humana normal y debilidad.
2) La existencia y la acción de un pequeño, pero extremadamente
activo grupo estadístico (4-8% de la población general) de
individuos psicológicamente desviados.
La ignorancia de la existencia de tales
diferencias psicológicas es el primer criterio de la ponerogénesis. Es
decir, tal ignorancia crea una abertura en donde tales individuos pueden
actuar desapercibidos.
La presencia de tal “enfermedad” a nivel individual es descrita en la
sección Casi Humanos.
No obstante, dependiendo del tipo de actividad de los individuos
psicopáticos y caracteopáticos, el mal puede manifestarse en cualquier nivel
social. Mientras más grande sea el alcance de la influencia del psicópata,
mayor daño es hecho. Así, cualquier grupo de seres humanos puede ser
infectado o “ponerizado” por su influencia. De familias, clubes,
iglesias, negocios y corporaciones hasta naciones enteras.
La forma más extrema de tal mal macrosocial es llamado “patocracia”
ASOCIACIONES PONEROGÉNICAS
“En cualquier sociedad de este mundo, los
individuos psicopáticos y algunos de los otros tipos de desviados crean
una red activa ponerológica de convivencia común, parcialmente extraña
de la comunidad de personas normales. … Su sentido de honor los obliga a
mentir e insultar a ese 'otro’ mundo humano y sus valores a cada
oportunidad.”
(Lobaczewski, 138)
“Podríamos enumerar varios nombres atribuidos a tales organizaciones…
pandillas, turbas criminales, mafias… que astutamente evitan choques con
la ley mientras buscan ganar su propia ventaja. Tales uniones
frecuentemente aspiran al poder político para imponer su legislación
conveniente sobre las sociedades, en nombre de una ideología
convenientemente preparada, sacando ventajas en la forma de una
prosperidad desproporcionada y la satisfacción de su anhelo de poder.”
(Lobaczewski, 158, énfasis agregado)
Las pandillas siempre han proporcionado
grandes oportunidades para jóvenes psicópatas. Sus tendencias
impulsivas, egoístas, insensibles, egocéntricas y agresivas fácilmente
se mezclan fácilmente – e incluso podrían dictar el tono – de muchas de
las actividades de las pandillas. De hecho, no puede haber muchas otras
actividades que produzcan tantas recompensas para los psicópatas
violentos, con tal impunidad.”
(Hare, 176)
Viviendo en un mundo cuya moral y costumbres no
tienen significado para ellos, e incluso las ven como opresivas, los
psicópatas sueñan con un mundo “feliz” y “justo”, en donde su visión
depravada del mundo es aceptada como realidad.
Ellos buscan, por cualquier medio necesario, alcanzar posiciones en el
gobierno en donde sus sueños pueden dar frutos. Si bien la injusticia sí
existe en una sociedad, sus declaraciones respecto a la ‘injusticia’ de su
situación pueden resonar con aquellos que realmente sí experimentan tal
injusticia. Así, las doctrinas revolucionarias pueden ser aceptadas por
ambos grupos por razones totalmente opuestas.
Los grupos Ponerogénicos son aquellos con un número estadísticamente
alto de individuos patológicos, hasta el punto en que el grupo como un todo,
practica una conducta egotista y patológica. Estas personas actúan como
líderes y hechizadores ideológicos, y mientras que la gente normal pudiera
actuar como miembros, ellos han típicamente acumulado varias deficiencias
psicológicas. Aquellos que no son susceptibles a tales influencias son
excluidos del grupo. Estos grupos pueden, ya sea infiltrarse en gobiernos
existentes, o ejercer su influencia desde “detrás del telón”.
Soborno, chantaje, asesinato y actos de terror similares son utilizados para
alcanzar estos fines.
-
Estructura: La estructura del comando
de las asociaciones ponerogénicas es similar a aquel de grupos normales:
los miembros se especializan y complementan las fuerzas de cada uno.
De esta manera, diferentes individuos con diversos defectos psicológicos
llenarán papeles en los cuales su ‘don’ particular es aplicable.
-
La fase temprana de actividad de una
unión Ponerogénicas es usualmente dominada por caracteopatía,
particularmente individuos paranoicos quienes a menudo juegan un rol
inspirador o hechizante en el proceso de Ponerización. Recuerde aquí
que el poder de un caracteópata paranoico estriba en que ellos
fácilmente esclavizan a mentes menos críticas.”
(Lobaczewski, 162).
Víctimas de trauma, individuos con
deficiencias psicológicas y gente joven a menudo caen en la categoría de
‘mentes menos críticas’.
-
Máscara Ideológica: Las metas del
grupo indicadas están a menudo en desacuerdo con su verdadera
naturaleza. Literatura colorida y valores humanitarios a menudo
enmascaran sus verdaderas motivaciones.
Tome, por ejemplo, la disparidad entre las
metas declaradas de la CIA, tales como,
-
“Creando centros especiales
multidisciplinarios para abordar temas de alta prioridad, tales como
la no-proliferación, el contra-terrorismo, la contra-inteligencia,
el tráfico de narcóticos, medio ambiente y la inteligencia del
control de armas”.
También, compare el frente público
humanitario de la Liga Anti-Difamación con su sórdida historia de
sobrevivencia doméstica ilegal, asesinato de carácter y colaboración con
organizaciones extranjeras de espionaje.
-
Primer Criterio de Ponerogénesis:
-
“Un fenómeno que tienen en común todas
las asociaciones y grupos ponerogénicos es el hecho que sus miembros
pierden la capacidad (o ya la perdieron), de percibir a los
individuos patológicos como tales, interpretando su conducta en
modos heroicos, fascinantes o melodramáticos.”
(Lobaczewski, 158).
Cuando un grupo ha sucumbido a la influencia
patológica de sus miembros, pronto pierde la habilidad de distinguir la
conducta normal humana de la patológica. Esta atrofia de facultades
críticas con relación a tales individuos de vuelve una apretura para sus
actividades. También puede ser usado para identificar a grupos
potencialmente peligrosos.
-
La Caracteopatía y la Psicopatía: Los
grupos dominados por caracteópatas reenganchan en actividades bastante
primitivas, y así, son fácilmente quebrantadas por la sociedad normal.
Los líderes psicópata, no obstante, son a menudo más astutos y usan a
individuos caracteopáticos como herramientas subalternas. Al ser
arrestados, tales individuos aceptan los ideales para morales de sus
líderes, actuando como el chivo expiatorio del grupo y aceptando la
mayor parte de la culpa. Los líderes psicopáticos, cuando están en la
corte, subsecuentemente cambiarán la culpa a sus subordinados. Un
ejemplo a gran escala de esta dinámica son los chivos expiatorios de los
oficiales militares de bajo rango, por crímenes de guerra condonados y/u
ordenados por autoridades de más alto rango.
-
Uniones Ponerogénicas Primarias y
Secundarias: Hay dos tipos de asociaciones ponerogénicas.
Las asociaciones ponerogénicas primarias son aquellas que fueron
originalmente formadas y diseñadas para el beneficio de sus miembros
fundadores, usando medios ilícitos (malignos).
Lobaczewski los describe como uniones,
-
"cuyos miembros anormales estuvieron
activos desde el mismo principio, jugando el papel de catalizadores
cristalizantes desde que comienza el proceso de la creación del
grupo.” Es decir, pandillas criminales.
(160).
Tales actividades antisociales de grupos y
una evidente indiferencia para los valores morales obviamente son motivo
de disgusto para la gent normal, y aunque su influencia no se extienda
mucho, ellos pierden su batalla con la sociedad.
Las asociaciones ponerogénicas secundarias son grupos fundados con un
ideal social independiente y atractivo, pero que más tarde sucumbe a una
degeneración moral.
Esta degeneración deja abierta una puerta para,
-
“infección y activación de los factores
patológicos dentro, y más tarde a una ponerización del grupo como un
todo, o a menudo una fracción.”
(Lobaczewski, 160).
Gobiernos, ideologías y religiones son
instituciones fundadas por personas cuya carencia de conciencia sobre
realidades psicológicas específicas y otras fallas morales, los dejan
desprotegidos o abiertos a una infección encubierta y la subsecuente
toma de posición por aquellos sin conciencia. El hecho de que estas
instituciones hayan estado en existencia y tengan una larga tradición
les ha permitido adquirir muchas más membresías y notoriedad.
Cuando tal organización, trabajando hacia una cierta meta social o
política, ya es aceptada por un gran número de gente normal (como por
ejemplo el Republicanismo Americano o Cristiandad Evangélica), la
ponerización del grupo proporciona la extensa influencia de la que
carecen las uniones ponerogénicas primarias.
Después de la toma de posesión por elementos psicopáticos dentro (i.e.
la toma Neoconservativa del Republicanismo Americano), el
grupo ponerogénico es protegido por una “máscara” de valores
tradicionales del grupo. Esto sucederá a pesar del hecho de que estos
valores son obviamente distorsionados y desatendidos. Por ejemplo, tal
grupo aprobará la legislación y se comportará únicamente para beneficiar
a éstos en control, a menudo volviéndose violentos y comenzando guerras
de agresión.
Miembros normales de tal grupo ingenuamente protegen tal conducta
desviada, y no se dan cuenta que es el trabajo de desviados. Su
patología permanece escondida para aquellos que no desean verlo
objetivamente. Se promulgan justificaciones e ideologías preparadas;
toma lugar una selección subconsciente y una sustitución, y la patología
es efectivamente disfrazada detrás de una máscara de sanidad. Aquellos
que pertenecen al ‘partido’ etiquetarán la oposición como pacifistas,
socialistas, liberales o terroristas, o cualquier otra etiqueta que sea
más efectiva para poder invalidar su crítica.
Desafortunadamente, el gobierno solo se
volverá más patológico y egotista en su conducta hacia otras naciones
hasta que sean purgados los aspectos psicológicos desviados o
destruidos.
La misma dinámica está en juego en las relaciones interpersonales.
Tomen, por ejemplo a Ted Bundy, quien tiene una reputación como
hombre amable, inteligente y respetable. Cuando al principio fue acusado
de haber asesinado a varias jóvenes mujeres, sus conocidos lealmente
defendieron su carácter. Esta situación sigue el mismo patrón que la
dinámica macrosocial. Tales individuos a menudo denigrarán a las
víctimas y a los acusadores de tales individuos anteriormente tan
estimados.
Esto no sólo tiene un efecto negativo sobre la víctima, sino que
estimula más allá la conducta irregular por parte del perpetrador.
-
Enfermedad Macrosocial: La enfermedad social
puede ser llamada macrosocial bajo cualquiera de las siguientes
condiciones:
-
procesos ponerogénicos abarcan a toda la
clase predominante de ésta.
-
La oposición por parte de las personas
normales es sofocada a través del uso masivo de carisma, censura y
compulsión física.
Dos etapas generales de enfermedad
macrosocial parecen aplicar a todas sus formas y variaciones:
histeria y patocracia.
PONERIZACIÓN
El primer paso en la ponerización de un grupo a menudo parece como una
distorsión moral de la ideología original del grupo. La existencia de
conceptos simplistas (es decir, si moral o legal) bloquea cualquier
habilidad para pensamiento crítico con relación a la existencia de
psicópatas o su posible influencia en el envoltorio principal de la
ideología del grupo. Tales conceptos doctrinarios son prevalecientes en la
ideología neoconservativa.
Por ejemplo,
“Si no estás con nosotros es que están en
contra de nosotros (en la Guerra contra el Terrorismo -
War on Terror)” y el uso completamente
arbitrario de las etiquetas “terrorista”. “simpatizante de terrorista”,
y “sospeche de ser terrorista.”
Así como es normal en la vida de cualquier
humano experimentar una declinación en la Resistencia psicológica o
fisiológica (llevando así a fallas morales o infecciones bacteriológicas),
los grupos experimentan también tales crisis. La presión que lleva a estas
crisis podría ser causado por influencia de otros grupos, una condición
histérica aumentada o una crisis espiritual general en el ambiente.
La debilidad resultante de las habilidades del razonamiento apropiado y el
pensamiento crítico, deja una abertura para la actividad de los psicópatas y
caracteópatas. Su influencia, entonces, da lugar a más declinación en el
funcionamiento moral e intelectual. Lo absurdo de tal dinámica puede ser
visto en el hecho que a Richard Cheney, un psicópata obvio, le
sea permitido sostener la posición de vice-presidente.
Aun cuando le dispara a su compañero de caza en
la cara, los medios de comunicación y el público estudiosamente
racionalizarán su comportamiento grosero y psicopático. (Ver el Análisis
de McGowan sobre el incidente en cuestión -
Dave McGowan's analysis of the incident in question.)
Cuando tales individuos son tratados como normales, más individuos
perceptivos dejarán el grupo. Cuando el grupo se ha hecho suficientemente
patológico, sus miembros percibirán la nueva dirección en términos morales
(es decir, “Debemos matarlos a todos basados en los principios de justicia y
democracia”), o como una forma de terror psicológico.
Mientras más gente sana deje el grupo, adquiriendo más posiciones
contrarrevolucionarias, se les unen más individuos con anomalías
psicológicas, quitándose las máscaras de cordura aun más a menudo. Sin el
conocimiento adecuado, los individuos normales que han sido expulsados de un
grupo así sufrirán inmensamente, cortados de su razón ideológica original
para unírseles. Infectados con emociones malsanas y material patológico,
ellos pueden asumir posiciones en oposición a aquellas que anteriormente
siguieron.
Nuevos miembros son analizados psicológicamente. Nadie con demasiada
independencia o normalidad psicológica es permitido en el grupo. (Tal
protección debería haber tenido lugar para desarraigar a los
psicológicamente desviados en primer lugar.) Los detractores son tratados
con condenación paramoral.
En pocas palabras, los pacientes se han tomado el asilo.
-
Etapas de Ponerización: Cuando es
primero infectado por los desviados psicológicos, este grupo mantiene la
mayor parte de su carácter original. Pero eventualmente, más miembros
normales son empujados hacia funciones periféricas y son excluidos de
los secretos de la organización; algunos de ellos, por estas
razones, dejan el grupo.
-
“Individuos con desviaciones heredadas,
entonces, progresivamente toman posiciones de dirección. El papel
del psicópata esencial gradualmente crece, aunque les gusta
permanecer ostensiblemente en las sombras… En las uniones
ponerogénicas en la escala social más grande, el papel de liderazgo
es generalmente jugado por un individuo de diferente clase, uno más
fácilmente digerible y representativo. Los ejemplos incluyen
caracteopatía frontal o alguien un poco más discreto de pocos
rasgos.”
(Lobaczewski, 162)
La etapa inicial de ponerización, donde la
membresía es cada vez más patológica, requiere un conocimiento
psicológico y factual para poder reconocer. La segunda etapa, más
estable y abiertamente más patológica es fácilmente evidente a la
mayoría de la gente normal, pero se interpreta en términos morales o
sociológicos (es decir, sin el conocimiento de diferencias
psicológicas.)
Con el tiempo, cuando el grupo se vuelve más ponerizado, los
carismáticos que originalmente lideraban tal grupo son relegados a la
tarea de re-empaquetar la ideología para propósitos de propaganda. Los
papeles de liderazgo se saturan con más individuos psicopáticos, mientas
que el grupo “normal” adquiere más individuos caracteopáticos.
Como en el caso con el aparente “ejecutivo unitario” de la unión
ponerogénica Neoconservativa
George W. Bush, la propaganda del
grupo mantiene la errónea sobreestimación del verdadero poder del
‘líder’.
Este líder,
-
Depende de los intereses de la unión,
especialmente los iniciados de la élite, a un mayor grado de
lo que el mismo está consciente. El emprende una constante batalla
de manejar la posición; el es un actor con un director. En las
uniones macrosociales, esta posición es generalmente ocupada por un
individuo más representativo, no uno privado de ciertas facultades
críticas; el iniciarlo a el a todos esos planes y cálculos
criminales sería contraproducente e ineficaz. Junto con una parte de
la élite, un grupo de individuos psicopáticos, escondiéndose detrás
de las escenas, dirige al líder, de la manera en que Borman y
su pandilla dirigían a Hitler. Si el líder no satisface su
papel asignado, generalmente sabe que la pandilla que representa a
la élite de la unión está en posición de matarlo, o de otra manera,
de quitarlo.”
De tal manera, George W. Bush es
dirigido y controlado por un grupo de consejeros psicopáticos:
Richard Perle, por nombrar a uno.
PATOCRACIA
La primera fase de la enfermedad macrosocial, es decir,
histerización social es la abertura a través de la cuales se manifiesta
la patocracia. Tal período de crisis espiritual social está asociado
con el agotamiento de los valores ideales, morales y religiosos que hasta
ahora han alimentado a la sociedad en cuestión.
Los individuos y grupos crecen para ser cada vez más para el auto-servicio,
y se van aflojando los lazos de deber moral y redes sociales.
Patocracia = ENFERMEDAD
La gente se preocupa por cosas triviales, ignorando asuntos más importantes
tales como compromiso al futuro, o implicación en asuntos públicos.
El rasgo más característico de tal período es una histeria difundida,
como aquella del cuarto de siglo en Europa que precedió la 1ª Guerra
Mundial. Tiempos “Felices” de paz son necesariamente dependientes de
injusticia social, y los hijos de las clases privilegiadas aprenden temprano
en sus vidas a reprimir las ideas de que ellos y sus familias están
beneficiándose de la injusticia de otros. Tales mecanismos inconscientes de
defensa causa que estos individuos desacrediten los valores de aquellos cuyo
trabajo explotan. Estos procesos conducen a un estado histérico de lógica
inhibida y razonamiento.
Esta rigidez de pensamiento, entonces, es pasada a la siguiente generación a
un grado todavía mayor.
Los patrones histéricos finalmente son pasados de la clase gobernante a las
clases menos privilegiadas. Este característico desprecio para cualquier
crítica efectiva, para patrones normales de pensamientos y naciones, hace
obvia la necesidad de censura de los medios de comunicación.
Un censor patológicamente hipersensible vive dentro de cada ciudadano.
Esto ha sido demostrado repetidamente por los medios de comunicación
estadounidenses con relación a las omisiones y distorsiones de:
-
el Reporte de la Comisión Kean-Delikow
911 -
Kean-Zelikow 911 Commission Report
(leído también como El Reporte de la Comisión 9/11: Omisiones y
Distorsiones -
The 9/11 Commission Report: Omissions And
Distortions)
-
la propaganda que conduce a la Guerra de
Irak
-
el numero de muertos de ciudadanos
iraquíes
-
la realidad en Palestina
“Cuando gobiernan tres “egos” – egoísmo,
egotismo, y egocentrismo – la sensación de lazos sociales
y responsabilidad hacia otros desaparece, y la sociedad en cuestión se
divide en grupos cada vez más hostiles unos con otros. Cuando un
ambiente histérico deja de diferenciar las opiniones de personas
limitadas, no del todo normales, de aquellas de personas normales,
razonables, esto abre la puerta para que entre la activación de factores
patológicos de diversas naturalezas.
(Lobaczewski, 177)
Esta fase histeroide es a menudo seguida
por un período de guerra, revolución, genocidio y la caída de imperios:
la patocracia.
|