12. HIJOS DE
MEMNOSIS
YO SOY MEMNOSIS, Oráculo de la perdurabilidad, supremo heteróclito,
autosacrificado en nombre de los Asesinos de Dragones de Aldebarán.
De tiempo en tiempo, mi nombre ha sido invocado en este curioso
grupo de relatos e informes. Remoto debo pareceros, y de alguna
manera remoto soy. Pero es hora de liberaros de cualquier
pensamiento que pueda intencionalmente apartaros de vuestro
conocimiento y propósitos. La Sonda de Arcturo está ingresando su,
para vosotros, momento de voz consciente.
Mientras mis anteriores camaradas y pares, los heteróclitos
arcturianos, continuaban su aventura - que, después de todo, fue
prevista de algún modo por los mayores de la matriz cuando
establecieron los escudos de la Federación -, yo he continuado con
mi propia aventura paralela. Tales son las ventajas de actuar
perdurablemente, que es lo mismo que operar "interdimensionalmente
vivo."
En mi inmersión en el reino de la muerte, que es el recuerdo de la
verdad cósmica, llegué a conocer mucho mejor ese cambio de pieles
tri-dimensionales. También llegué a comprender cómo tantos sistemas
de mundos habían caído presas de todos los grandiosos, aunque
debilitantes, efectos de vivir ignorando la verdadera naturaleza de
la muerte.
Fácilmente atravesé los dominios de la muerte en mi forma penta-dimensional.
Inevitablemente, me encontré con las ondas lumínicas del conocido
como Lucifer. Con esfuerzo, también yo alcancé mi cuerpo hexa-dimensional,
si podéis llamarlo así. Y, desde esa sexta dimensión, di un vistazo
a la séptima, y vi así el reflejo del Todo, lo indescriptible.
Así
es como transcurrió mi aventura - cómo desde la perdurabilidad
desperté aún más profundamente al reino de la luz.
A continuación de la misión en Aldebarán, y en nombre de los
Arcturianos, yo, en mi forma penta-dimensional, entre los amos y
constructores estelares, fui enviado a Altair por los mayores de la
matriz. Allí sólo había un sistema simple con no más de seis
planetas, cada uno de regular tamaño y habitado por cuatri-dimensionales
etéricos, que no parecían hallar razón alguna para echar raíces en
una forma tri-dimensional.
Mi propósito al ir a Altair era aprender las artes y sapiencia de
los constructores y amos estelares - no es que debería transformarme
en uno de ellos, sino que gracias a ese conocimiento podría actuar
mejor como guía para la Sonda de Arcturo en su rol como domadora de
planetas. El amo estelar de Altair, uno conocido como Altai-Altair,
tenía la reputación de poseer constancia en su vista de largo
alcance, así diríais, como un águila manteniéndose estable en las
más elevadas corrientes de los vientos. De este amo estelar,
Altai-Altair, me transformé en aprendiz.
Mientras Altai-Altair mantenía la meditación que estabiliza
planetas, aprendí los cantos mántricos para aumentar la resonancia
de las órbitas planetarias. Por la mera práctica de esos cantos, mis
poderes telepáticos aumentaron, como asimismo mi conocimiento de la
historia y el propósito de las estrellas. Mediante esos cantos,
aprendí a enumerar los escudos de la perdurabilidad. Una vez que
tomé cuenta de su número, a partir de mi sonido y una más profunda
concentración meditativa, ideé y di vida a esos escudos, que
entonces usé para despertar a los cuatri-dimensionales de Altair de
su indolencia.
Los escudos de la perdurabilidad son seis, cada uno para las
dimensiones que van del uno al seis. La séptima dimensión no posee
escudo, pues es el simple pensamiento-sonido subyacente al RANG, el
tono que canta y encanta a la galaxia entera. Cada uno de los seis
escudos de la perdurabilidad contiene el código de la memoria
cósmica para toda la dimensión a que corresponde. Cuando es
adecuadamente "sostenido" y comprendido, cada escudo emite un rayo
que es propio y característico de su dimensión.
Tan pronto como hube ideado esos escudos, que eran penta-dimensionales
y no como los escudos holónicos cuatri-dimensionales de los
Arcturianos, me encontré con algo asombroso. El dorso de cada uno de
esos seis escudos era como un espejo. No un espejo en el que uno se
contempla, sino un espejo de lo que no puede ser reflejado por la
otra cara del escudo. De esa manera, descubrí que las más elevadas
dimensiones, desde la octava hasta la decimotercera, son la
dimensiones-espejo del universo cósmico que a su vez es reflejo de
éste.
Es mediante el poder de las seis dimensiones del universo del espejo
cósmico que las seis dimensiones que conocemos del universo cósmico,
se mantienen en su sitio. Es la séptima dimensión, para la que no
hay escudo (y, en consecuencia, tampoco espejo), el misterio de los
misterios, el sonido sin origen más allá de la creación.
Al crear esos escudos a partir de mi propio pensamiento en nombre de
Altai-Altair, yo Memnosis, el heteróclito perdurable, descubrí la
causa de la condición vaga y sin raíces de los cuatri-dimensionales
del sistema planetario de Altair. El defecto en ese sistema era que
sus planetas habían sido creados sin incluirles memoria. Sin
memoria, los cuatri-dimensionales carecían de motivos para echar una
raíz tri-dimensional o desarrollar propósito elevado alguno del ser.
Mi solución fue obvia y simple. Presentándome en una asamblea de los
mayores de esos seis planetas, obsequié a cada representante
planetario con uno de los seis escudos - correspondientes a cada una
de las seis posiciones planetarias. Con el don de esos escudos,
despertaron en Altair el propósito y la celebración.
En cada uno de los planetas, los cuatri-dimensionales desarrollaron
formas radicales adecuadas. A lo largo de un gran ciclo, se
desarrolló una maravillosa civilización interplanetaria. El
principio más importante que la guiaba era el ideal de transformarse
en custodio de las seis dimensiones, no solamente de Altair sino del
cuadrante galáctico entero. Con sólo este noble compromiso, el
sector de Velatropa fue capaz de lograr un nuevo nivel de
estabilización.
A lo largo del siguiente gran ciclo, los planetas lograron su
emparejamiento, de manera que con las tres parejas planetarias, más
la estrella Altair, el sistema alcanzó la "esporidad" del cuarto
sentido estelar. Este ejemplo de emparejamiento y apareamiento
interdimensional de los escudos habría de tener resultados de largo
alcance para lo que llamáis el futuro de vuestra especie.
Ahora bien, debido a mis actos, los sabios y mayores de la
civilización interplanetaria de Altair tendieron a referirse a sí
mismos como los hijos de Memnosis: guardianes de los seis escudos de
la memoria cósmica que promueven la perdurabilidad por toda la
galaxia.
Inquietos por nuevas aventuras, los hijos mayores se
presentaron allí donde yo residía como "gemelo" etérico del amo
estelar Altai-Altair.
"Memnosis," me dijeron, "has actuado
sabiamente al traer a la existencia los seis escudos de la
memoria cósmica. Mediante esos escudos hemos despertado.
Nuestros seres se hallan ahora totalmente enraizados.
Orgullosamente sostenemos estos escudos para nosotros y para que
todos en la galaxia lo sepan. Pero deseamos compensarte."
"¿Qué queréis decir, y cómo
llevaríais a cabo una acción como ésa?" pregunté, notando la
inocencia de su deseo.
"Sin tu acción amable y considerada, ni siquiera estaríamos
dirigiéndonos a ti de esta manera. De acuerdo con la ley
cósmica, una acción engendra tal otra similar. Debe haber algo
que podamos hacer por ti para igualar el intercambio, pues de
otro modo tú estarías siempre en una posición de mérito, y
nosotros siempre sentiríamos que te debemos algo. Si algo hemos
aprendido, es que la mayor armonía se mueve siempre por la
igualación de la energía, del karma, y el mérito. Seguramente
tú, en tu sabiduría, comprendes y conoces esto, de modo que por
favor accede a nuestro pedido. Otórganos una aventura merecedora
de lo que has hecho por nosotros!"
Inteligentes y triunfantes, habían
hablado los hijos mayores.
Por todas partes los grandes tambores de
Altair retumbaron y fragancias florales se elevaron en el espacio
vacío, signo de la profunda verdad que resonaba a través del sistema
estelar.
"Bien dicho," respondí. "Muy
ciertamente, hay algo que podríais hacer por mí. Sostenéis ahora
los escudos de las seis dimensiones, los escudos que sostienen
también los secretos de los universos reflejados. Vuestro
dominio estelar interplanetario debéis ponerlo ahora a
disposición de los afligidos por el temor a la muerte, como
terreno para el aprendizaje reparador. Hay muchos que están
demasiado inficionados por sus proyecciones luciferinas,
quienes, al cultivar puntos de vista equivocados tales como el "inmortalismo"
o el nihilismo, se tornan confundidos al desprenderse de sus
cuerpos vegetales. Haced atractivo vuestro sistema para esos
seres, atraedlos aquí, mostradles los escudos, ayudadlos a
recordar."
"¿Eso es todo? preguntaron. Podía sentir en su noble genio
colectivo que necesitaban algo más, como viajar por el tiempo y
visitar otros mundos.
"Muy bien," respondí. "Mis compañeros Arcturianos en su "esporidad"
han producido una aventura, promovida por la Federación
Galáctica, llamada la Sonda. Ahora bien, esta Sonda ha llevado a
los Arcturianos más y más lejos de su estrella natal, hacia un
remoto sistema llamado Velatropa 24 - Kinich Ahau, su nombre
como amo estelar. La plaga de las proyecciones de Lucifer aflige
a los kin planetarios de esa estrella. Un planeta ha estallado;
otro está ahora consumiéndose. Las tribus del tiempo están
confundidas. Los Arcturianos se las van a arreglar, pero tal vez
vosotros podríais ayudarlos."
Podía sentir que los niños mayores
estaban ávidos de más, así que continué con mi plan.
"En Velatropa 24, hay dos planetas
guardianes, el primero y el décimo, con dos tribus asignadas a
cada uno de ellos. Aprended las artes del cabalgar el púlsar que
están a vuestra disposición en un ulterior conocimiento de los
seis escudos, y enviad emisarios a esos dos planetas. Con
vuestro conocimiento de la regeneración y la perdurabilidad,
podréis ayudar inmensamente a las tribus de esos dos planetas a
sostenerse contra la pavorosa enfermedad del luciferismo.
"Las tribus de las que hablo son la del Sol Amarillo y la de la
Tormenta Azul de Plutón. Entre ellas debe proclamarse la
enseñanza de la perdurabilidad y la regeneración. Las dos tribus
del primer planeta, Mercurio, son las de la Luna Roja y del
Perro Blanco. Entre ellas, también, proclamad las enseñanzas de
la regeneración y el flujo universal. Ayudando a esas cuatro
tribus, mantendréis el Holón Resonante Universal de Velatropa 24
en sus dos polos, y la tarea de los Arcturianos en los otros
planetas entre sí se hará mucho más fácil. Haced esto
correctamente y bien, y me habréis compensado."
Más enaltecidos que nunca estaban los
hijos de Memnosis, los mayores de Altair, ante mi respuesta. Grande
fue el retumbar de los tambores de Altair, profusas las fragancias
perfumadas llenando el aire, deslumbrantes y múltiples los rayos
espectrales surgiendo de la nada.
Cuando las esporas de elevados sentidos salieron de este gran
tumulto, desperté nuevamente a mí mismo, yo, Memnosis, el
perdurable. Y con este despertar, tan simple, lúcido y puro, Altair
se había ido. Ido, el refinado zumbido electromagnético de la quinta
dimensión. En mi revisión, lo supe: había logrado mi "cuerpo" hexa-dimensional.
Con admiración conocedora, sentí cómo la galaxia pulsaba dentro de
mis luminosos pensamientos.
A mi alrededor, aunque distantes de mi
luminosidad, estaban los llamados mayores de la corriente. La
victoria que cuadra a un verdadero heteróclito era mía.
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13. UN DISEÑO DE NAVE DEL TIEMPO DIRIGIDO POR LOS MAYA
SOMOS LOS MAYA. Del árbol cósmico crecemos cual muchas ramas,
llenando cada dimensión con nuestro sondeo curioso. Alrededor y
alrededor del eje del árbol cósmico YAX CHE, tocamos el
RANG y
cantamos la
PAX. Como una sola mente navegamos los infinitos océanos
del tiempo. Íntimos somos con los pensamientos de Merlín y con el
despliegue de los poderes mágicos conocidos como el lanzamiento de
encantamientos del sueño.
Memnosis nos mantiene en luminoso
conocimiento y nosotros mantenemos a Memnosis en nuestros grandes
rayos que destellan a través del vacío interdimensional. Somos los
susurros en los oídos de Merlín, y cada mago que aprende el arte de
lanzar encantamientos del sueño así lo hace, debido a los poderes
que aprendimos hace tanto tiempo como rastreadores de la matriz
radial, el reino original de la Liga de Cinco.
¿Quién más, sino los Maya, sabe cómo deslizarse sin esfuerzo a
través de las minúsculas interrupciones del RANG, ligando entre sí
universos paralelos con un solo surco de la zuvuya?
Giro tras giro del tiempo navegamos. Siempre hemos observado la
misma leyenda de la perfección del cuatro creando el círculo del
éxtasis, sin resto de memoria del quinto, el centro infinito que
disuelve toda apariencia, dejando sólo la inocencia y la
atemporalidad del vuelo mágico.
Cómo lo sabemos, podríais preguntar. Ya que éste es el momento de la
revelación, escuchad. Este es nuestro secreto.
Tras una prolongada experimentación en las artes de la apariencia y
la ilusión, el resonar del RANG, nos aliamos con la séptima
dimensión, el universo carente de reflejos, la dimensión que es
sustento de un único sonido-pensamiento. Dentro de ese único
sonido-pensamiento omniresonante tenemos nuestra base. Cabalgando
ese único sonido-pensamiento por doquier, hemos adquirido habilidad
en muchas artes de la ilusión, incluyendo la más difícil: la
encarnación múltiple interdimensional. Esa habilidad nos permite ir
a cualquier parte, aparecer en cualquier parte. Por pertenecer a la
séptima dimensión carente de reflejos, no pertenecemos a dimensión
alguna - ningún sistema de mundos puede reclamarnos como propio.
Somos los que se deslizan entre las grietas de todos los mundos y
todas las dimensiones.
Pero no es ésa una habilidad de la que se pueda abusar. Abusar es,
para uno, perder su privilegio hepta-dimensional: el poder de la
apariencia mágica absoluta.
El tiempo es el modo como manipulamos nuestra apariencia. Con el
conocimiento de cuál es el tiempo correcto, cómo lanzar el correcto
encantamiento del sueño, nosotros podemos estar donde sea, para
colaborar. Debido a esto hemos dominado el arte de enraizarnos como
cuerpos vegetales. Y también hemos aprendido el arte de extender el
cuerpo vegetal nuevamente hacia el reino del RANG, transformándonos
en raíces cósmicas vibratorias.
Pronto aprendimos que, sin enraizar en un cuerpo vegetal - una forma
tri-dimensional -, no existe capacidad para crecer o evolucionar. Si
no te enraízas, no puedes lograr la vida. Y, sin vida, no hay
crecimiento! Es lo que decimos: Obtiene una vida! Sin capacidad para
evolucionar, no hay nuevo conocimiento, ni expansión del placer.
Nutridos por la resonancia del RANG, hemos dominado los surcos de la
zuvuya que por siempre van en espiral desde la encarnación tri-dimen-sional
hacia los reinos de la perdurabilidad. Para nosotros, la cuestión de
tomar cuerpos vegetales y desprenderse de ellos es, para usar su
lenguaje, un arte fácil: Mantengan su serenidad, no se desanimen, no
dejen huellas.
Gracias a tales habilidades, los heteróclitos arcturianos nos
nombraron Arcturianos honorarios, convidando a un selecto equipo de
nuestros miembros de la Estación Intermedia AA a participar con
ellos en su monumental tarea de domesticar los planetas de Kinich
Ahau.
Habiendo recibido esa invitación de los Arcturianos, nosotros mismos
nombramos, entre nuestras filas resonantes, a un selecto equipo de
ingenieros heteróclitos del tiempo, un equipo listo para hacer el
trabajo, y hacerlo íntegramente - aún al punto de encarnar tri-dimensionalmente.
Con nuestros poderes de inocencia y vuelo mágico, en el punto
llamado Alcione en el Ancla Resplandeciente, nos desprendimos del
eje del árbol cósmico, nos arrojamos a través de las dimensiones y
nos proyectamos hacia la Estación Intermedia AA - nosotros los Maya,
ingenieros del tiempo y mediadores del campo resonante - listos para
el cumplimiento del deber.
Contemplando el Holón Resonante Universal de la Intermedia AA, vimos
la leyenda cósmica representándose una vez más en los dominios de
Kinich Ahau. Así, con el rayo del tiempo artificial 12:60 y las
guerras del tiempo, esa leyenda parecía condenada a repetirse
nuevamente y, como sucede con frecuencia, con desastrosos
resultados. ¿No era capaz Lucifer de prever que, con tal estrategia,
todo su reino acabaría deshaciéndose? ¿Qué necesitaba él entonces
mostrar con sus esfuerzos, astutos y mañosos como eran?
Tales eran los cuestionamientos de los Arcturianos, cuando nuestro
equipo de ingenieros del tiempo arribó para ayudarlos. Con el cuarto
y el quinto planetas ahora en manos de los Luciferinos de
Júpiter-Saturno, el túnel del tiempo entre la Tierra y Urana quedaba
bloqueado. Para crédito de los Arcturianos, los niños de Memnosis de
Altair habían desplazado sondas de vigilancia hacia la primera y la
décima órbitas. Desde esa posición no les resultaba difícil a los
Antareanos asegurar también el noveno y el segundo planetas. Eso
significaba que las tribus del Dragón y el Espejo en Neptuno eran
aliadas, por los Ailtaireanos, con las tribus de la Estrella y el
Mono en Venus.
Pero ese apoyo era apenas un telón pintado en el escenario del
crítico drama: el tercero y octavo planetas. Si acaso el quinto
acorde había de ser tocado por Kinich Ahau, no se debería permitir
que en el tercer planeta sucediese lo mismo que en el quinto y el
cuarto. Pero, sin abusar del libre albedrío de Lucifer, quien
destruiría totalmente la Federación, ¿cómo podría aquel propósito
lograrse?
Previamente a la destrucción de la civilización en Marte, se había
establecido un breve contacto telepático entre las tribus de la Mano
y el Humano del tercer planeta, y las tribus del Viento y la Tierra
en el octavo. Se había producido una especie de enlace o convenio
entre los Terra-Gaianos y los Uranianos - un enlace de memoria. Pero
antes de que ese enlace de memoria pudiera consumarse, Marte se
desmoronó y los túneles se cerraron. La afinidad que las tribus del
tercer planeta sintieran por las del octavo se mantuvo a través de
la tradición mítica, en la que el octavo planeta, Urano, es
recordado como los cielos, y el tercer planeta como la Tierra o
Gaia.
Nuestra solución era simple: crear una nave del tiempo a la escala
del tercer planeta y otra a la escala del octavo, para contraatacar
el rayo luciferino del tiempo 12:60. Basadas en los principios del
Holón Resonante Universal, en un contrapunto combinado mutuamente,
esas naves del tiempo serían codificadas con engramas de las veinte
tribus del tiempo.
"Una nave del tiempo!", exclamaron
los heteróclitos arcturianos. "Qué maravillosa idea! Pero, ¿qué
es una nave del tiempo, y cómo podemos construir una?"
preguntaron, intensamente deseosos de aprender.
Una nave del tiempo, explicamos, es un
vehículo cuatri-dimensional codificado con todas las leyes del
tiempo cósmico de acuerdo con la forma esférica bipolar del Holón
Resonante Universal. Obviamente, ese vehículo se desplaza por el
tiempo. Su cargamento es un grupo universal de engramas disparadores
de tiempo. Ciento cuatro mil años terrestres es el ciclo mínimo para
que una nave del tiempo pueda desplazarse a través de la zuvuya del
destino que le ha sido adjudicada, liberando su carga de engramas en
oportunidades determinadas.
Una vez construida, una nave del tiempo es enviada a su punto de
destino - en este caso, un grupo de planetas - donde literalmente
encapsula su forma tri-dimensional. En el arte y la ciencia de la
domesticación de planetas, éste es el nivel más elevado de la
ingeniería evolucionaria. No es una intervención ni una
no-intervención, sino un programa de pacificación de la matriz. Por
esa razón, el arte de proyectar una nave del tiempo es denominada
"meditación del poder de la matriz de la pacificación universal.."
Así que enseñamos a los de la Interemedia AA el arte de proyectar la
grilla de pacificación en el Holón Resonante Universal. Este arte
meditativa requiere una prolongada empatía telepática con los
144.000 códigos de engramas. Dado que 144 representa la
décimotercera etapa en la espiral logarítmica natural, pudimos
demostrar a nuestros compañeros arcturianos algunos imaginativos
atajos en la fractal de la décimotercera dimensión. Los heteróclitos
de la Estación Inter-media mostraron su hazaña y rápidamente
aprendieron de nosotros todo lo que teníamos para compartir con
ellos.
En el Holón Resonante Univeral proyectamos una grilla o tejido de
veinte partes. Dentro de cada una de las veinte secciones de ese
tejido en movimiento, colocamos los engramas correspondientes a cada
una de las veinte tribus del tiempo. Entonces, manteniendo firme esa
proyección, engendramos el RANG en la nave del tiempo de modo que
ésta quedó equipada con los poderes autogenerativos de la fuerza
vital cósmica. Luego, por el poder de la mitosis psíquica, la nave
del tiempo se autoduplicó. Una nave quedó lista para ser disparada
hacia Urano; la otra, hacia Gaia. Todo esto sucedió en un punto
situado hace unos 104.000 años terrestres del momento en que leen
este informe.
Mediante la capacidad telepática, ampliamos la nave del tiempo
uraniana - Camelot, fue llamada - a su escala, y la disparamos. Esto
lo considerábamos un ensayo. Con pocas dificultades, la nave del
tiempo uraniana alcanzó su destino, encapsulándose en el octavo
planeta. Sin embargo, antes de que pudiéramos congratularnos por
ello, una horrible rasgadura atravesó las pantallas de nuestros
monitores en la Intermedia AA.
Urano se balanceaba y tambaleaba, con corrientes espectrales y rayos
de memoria sin orden ni concierto arrojados en todas direcciones.
Conjeturamos que un rayo 12:60 desde el séptimo planeta, Saturno,
había hecho pedazos la nave del tiempo de Urano antes de que
estuviera asegurada en su sitio. En la tercera dimensión, la
destrucción de esta nave del tiempo lanzó despojos de la superficie
hacia el campo electromagnético uraniano, creando un número de
nuevas "lunas." Muchas de esas lunas, como por ejemplo Miranda,
estaban impresas con la fuerza aún activa de los engramas
despedazados. Engramas de las tribus del tiempo hicieron impacto en
forma extraña y misteriosa, aún en lugares tan alejados como
Neptuno, el noveno planeta.
Aunque los Arcturianos estaban fuera de sí por la impresión y el
asombro, logramos calmarlos. Sólo una prueba. Nada se pierde, nunca.
Aún en esto, dijimos, hay efectos útiles para nuestro programa.
Simplemente hay que estudiarlos y aprender de ellos. En cuanto a la
nave del tiempo de Gaia, nosotros los ingenieros maya del tiempo la
retendríamos en el núcleo de la Intermedia del CSR por tres cuartas
partes de ese ciclo de 104.000 años terrestres y entonces, en el
cuarto final - 26.000 años terrestres - la deslizaríamos en el campo
electromagnético de la Tierra. Era una maniobra de alto riesgo, pero
era la única posibilidad de impedir que los Luciferinos hicieran
estallar todo el sistema de
Kinich Ahau,
Velatropa 24.
En cuanto a Urano, aseguramos a los Arcturianos que no estaba
perdido. Quedó suficiente allí para que funcionase como una especie
de base de aprendizaje de la Sonda, un tipo de centro de retiro
elevado para aquellos Gaianos que siguieran, olvidados de las artes
de la meditación poética. Los espíritus capaces de elevarse podrían
aún hallar allí, oportunamente, las aguas de la visión utópica y la
poesía de la regeneración cósmica.
Mientras tanto, aconsejamos a los de la Intermedia AA que debían
vigilar y ser cautelosos.
Pero sin olvidarse de jugar.
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14. LA LARGA
ESPERA: TERRA-GAIA DESPERTADA
SOMOS LOS DE LA INTERMEDIA AA: heteróclitos y homóclitos, bandidos
del tiempo interdimensional de Aldebarán y Altair, holones
refugiados de Alfa Centauro, Antareanos primigenios, Asesinos de
Dragones y guerreros caninos, magos analógicos, jinetes del púlsar e
incursores de la zuvuya. Somos los agrupados por la convocatoria
arcturiana para la Sonda.
Despachados por los Maya para sostener
la luz en alto y mantener íntegro el círculo, somos los que
mantuvieron una larga vigilia en beneficio de Velatropa 24.3,
llamada por ustedes Tierra, Terra-Gaia, Terra Magica.
"Vigilad y sed cautelosos, pero no
os olvidéis de jugar," nos aconsejaron los ingenieros maya del
tiempo tras el infortunio de Camelot, la nave del tiempo
uraniana.
Pero vimos qué sabiduría hubo en probar
la nave del tiempo en Urano. Por su tamaño, este planeta podía
arreglárselas solo contra el rayo del tiempo 12:60.
Desperdigada como estaba a todo lo ancho
de la extensión uraniana, la misión de engramas de la nave del
tiempo permaneció en forma "oculta" para que aquéllos de nosotros
que fuesen cazadores de tesoros la encontrasen, la pusieran a
resguardo en el octavo planeta, y reunieran las piezas disponibles
del destino, de los que encarnarían en Velatropa 24.3 como las
veinte tribus del tiempo.
Los Sondeadores Uranianos (UPs ó Uppers, los llamábamos )
demostraron ser algunos de los heteróclitos más recios. Informes
suyos mostraron que los holones de las tribus del Viento y la Tierra
se mantenían en exitosa comunicación mutua. Las dos tribus uranianas
del tiempo estaban conformes - en sus formas mayormente
subterráneas, de raíces semejantes a dragones - de crear una vasta
pero simple civilización basada en lo que ellos denominaban códigos
de la visión. Estos códigos, complejos patrones de sueños
multisensoriales, estaban construidos a partir de la base de memoria
provista por un temprano contacto cuatri-dimensional con las tribus
de la Mano y el Humano de Velatropa 24.3.
Una vez que se hubo establecido contacto con los Sondeadores
Uranianos, la base cultural de los Uranianos se amplió para incluir
lo que llegó a ser conocido como minería de engramas. Un nuevo
propósito había surgido en la civilización uraniana: la de
reconstruir la nave del tiempo perdida, Camelot. Dado que esa nave
del tiempo perdida era una réplica de la nave del tiempo Tierra
entonces en hibernación, ese gran proceso paralelo era en realidad
una manera más de establecer apoyo para el crítico tercer planeta y
la eventual reapertura del túnel del tiempo. Mientras avanzaba
lentamente el proyecto uraniano de reconstrucción, se desarrollaron
interesantes juegos de encantamiento del sueño para mantener
contacto con "futuros" habitantes selectos de su planeta hermano,
Terra-Gaia.
Abordo del CSR Intermedio, fuimos testigos de un nuevo florecimiento
dentro del sistema estelar de Kinich Ahau. A pesar de la destrucción
de la nave del tiempo uraniana, la llegada de los ingenieros maya
del tiempo pareció haber tenido un efecto estabilizador por todo
Velatropa 24. Los ingenieros maya del tiempo, fieles a su palabra y
en un gran despliegue de magia, ingresaron al Holón Resonante
Universal sustentando la nave del tiempo Tierra. Allí, en la forma
consolidada de una especie de cristal monolítico, habrían de
permanecer en un tipo de hibernación interdimensional. Durante
78.000 años terrestres, permanecerían en su enigmático bloque
cristalino, prontos a salir de su cascarón nuevamente en el momento
señalado - el comienzo de la cuarta y última fase de 26.000 años del
gran ciclo de 104.000 años terrestres (un intervalo de Hunab Ku, lo
llamaban).
Tal como resultó, los ingenieros maya del tiempo no perdieron
contacto con los que permanecimos abordo de la Estación Intermedia.
Mediante sutiles ondas telepáticas, monitorearon nuestra actividad
así como todos los sucesos en el sistema de Kinich Ahau. Se
mantuvieron especialmente sintonizados con los acontecimientos
paralelos en Gaia durante esos 78.000 años terrestres.
A ese ciclo de 104.000 años lo denominamos la Larga Espera. Durante
ese tiempo, nosotros los de la Sonda debíamos cultivar poderes aún
más profundos de concentración y meditación telepática creativa
entre nosotros. Pero eso fue fácil de lograr. Desde el comienzo de
la Sonda, habíamos aprendido mucho. Nuestras alianzas
interdimensionales a través de toda la galaxia se habían expandido,
y quedaba aún más por hacer. Con gusto contemplativo, iniciamos la
nueva etapa de nuestra misión: la preparación de la nave del tiempo
gaiana y su exitosa entrada en el planeta 24.3 de Velatropa.
El primer paso era mantener algunos medios de contacto paralelo
entre Urano y Gaia. Afortunadamente, los Uranianos era una raza bien
armonizada, pronta para su destino. Soñadoras desde su primer
miembro al último, sus dos tribus habían aprehendido rápidamente la
importancia de la desintegración de la nave del tiempo. Uno de los
grupos, las gentes del espíritu o tribu del Viento, habían tomado
posesión del destrozado engrama del Excalibur oculto dentro de
Camelot y hecho de su reconstrucción el foco de su código de la
visión. El otro grupo, los navegantes o tribu de la Tierra, en
comunión con las gentes del espíritu, crearon la Búsqueda Paralela.
Era la búsqueda de Excalibur, que ellos sabían tenía en Gaia una
búsqueda paralela - la búsqueda del fuego.
Nuestro contingente de Sondeadores Uranianos, los Uppers
[pronúnciese "ápers"], tuvo pocos problemas para establecer contacto
con los soñadores de la tribu del Viento. Viendo cuán fuerte era el
deseo de las gentes del espíritu por mantener contacto con sus
primos de la memoria de Gaia, perdidos hacía tanto tiempo, los
Uppers ingresaron en los holones de los Uranianos mediante su propio
"sueño" cuatri-dimensional. Y así comenzó la formación de los
tiempos paralelos del sueño durante los primeros 26.000 años
terrestres de la Larga Espera.
Mediante las sutiles ondas maya dentro del Holón Resonante Universal
en el CSR Intermedio, pudimos dirigir a los Uppers a su reunión con
las gentes del espíritu en su sueño hacia la existencia en el núcleo
del CSR uraniano. Una vez que este núcleo se soñó a la existencia,
no hubo dificultad para transferirle el Holón Resonante Universal y
colocar en su interior una réplica de la nave del tiempo gaiana.
Una vez que eso se hubo logrado, merced a los alegres soñadores de
la tribu del Viento, los navegantes de la tribu uraniana de la
Tierra intentaron hallar el engrama de Excalibur dentro del núcleo
uraniano. Algunos de ellos hasta identificaron el Excalibur con los
contenidos del Holón Resonante Universal dentro del CSR en el núcleo
uraniano. De esa manera, la tribu de navegantes uranianos de la
Tierra identificó el Excalibur como la réplica de la nave del tiempo
gaiana. Liberar o extraer esta nave del tiempo de su tumba de
cristal en el núcleo uraniano era lo mismo que liberar el Excalibur
de su prolongado letargo, y valerse de él.
Cuando finalmente, en un gran triunfo de la minería de engramas, los
navegantes uranianos arribaron a su CSR con un contingente de
nuestros propios Uppers, fueron recibidos con una ima-gen de belleza
que quitaba la respiración. Alineado dentro de la estructura del
Holón Resonante Uni-versal, como una membranosa esfera iridiscente
en incesante movimiento, el doble de la nave del tiempo gaiana se
mostró a sí misma a través de la trémula superficie, telepáticamente
reflejada, del tercer planeta hermano azul. Aunque el túnel del
tiempo había sido fracturado por los Luciferinos del sexto y el
séptimo planetas, la magia maya logró predominar.
Mediante la concentración telepática, la tribu uraniana de
navegantes de la Tierra y nuestros Uppers pudieron "ver" en el
tercer planeta. Fue entonces que, en honor de los navegantes de la
tribu uraniana de la Tierra, el tercer planeta dio en ser llamado
"Tierra". Merced a los esfuerzos de la tribu uraniana del Viento,
las gentes que soñaban el espíritu, y mediante nuestra propia
telepatía de la Intermedia AA, vimos que Gaia había construido una
forma temprana de gentes enraizadas: radiados de cinco puntas. Estos
eran de tipo aborigen, basado en el carbono, con dos apéndices
cinéticos - o piernas -, dos apéndices utilizables como herramientas
- o brazos -, y un procesador sensorial, o cabeza.
En sus sueño paralelos o "recordación," esos aborígenes gaianos
habían iniciado una búsqueda del fuego. Este fuego era, en
realidad, la "luz al final del túnel," el túnel del tiempo perdido
hacía mucho tiempo, que los conectaba con el octavo planeta - y el
quinto perfecto. Al contemplar a esos soñadores del lejano tercer
planeta, los Uranianos fueron invadidos por una gran, punzante
urgencia: los aborígenes de Gaia poseían todo excepto la memoria
cósmica. ¿Cómo ayudarlos a fin de que recibieran la memoria cósmica
y fueran capaces así de mantener su luz? ¿Cómo continuar el gran
sueño paralelo?
Ahora bien, a través de nuestro propio júbilo erótico, nuestra
paralela búsqueda heteróclita de amor en la Intermedia AA,
aprendimos a canalizar el radión excedente. Entonces, transmutamos
ese radión de vuelta hacia el RANG, que liberamos en nombre de los
navegantes y Uppers en el núcleo uraniano. Mediante este RANG
excedente, los Uppers y los navegantes aprehendieron una gran
noción: precipitar un viraje polar mediante la concentración
meditativa en el Holón Resonante Universal del núcleo uraniano. El
propósito de este viraje polar uraniano sería alinear el cuerpo
planetario uraniano tri-dimensional de tal modo que su eje polar
quedase apuntando hacia la órbita del tercer planeta y el núcleo
estelar de Kinich Ahau.
De esta manera, aunque el túnel del tiempo estuviera obstruido, se
establecería una corriente electromagnética directa entre Urano y la
Tierra. Cuando esa corriente estuviera establecida, el radión
cargado de engramas podría pasar al tiempo receptivo del sueño de
los mayores aborígenes de Gaia. Esta conexión activa establecida
entre Urano y Gaia simplificaría y aseguraría el éxito del
lanzamiento de la nave gaiana del tiempo en el momento indicado.
En una gran demostración de cooperación telepática y desplazamiento
mágico, el heroico suceso uraniano se produjo: el eje uraniano viró.
Su polo de ingreso galáctico apuntaba así directamente en oposición
a Kinich Ahau y hacia Hunab Ku; su polo de salida estelar apuntaba
directamente hacia el tercer planeta y el núcleo del CSR de Kinich
Ahau.
Esa hazaña de osadía planetaria no era nada menos que
indescriptiblemente asombrosa. Un continuo telepático se había
establecido así entre el equipo maya hepta-dimensional de ingeniería
dentro del Holón Resonante Universal del CSR Intermedio, y nosotros,
en comunión con Memnosis en la sexta dimensión y Merlín en la
quinta. Esta compleja conexión telepática se completó con el
enganche de las tribus uranianas y los Uppers en Urano, y los
aborígenes en Terra-Gaia. El medio conector para esta complicada
operación era el RANG engendrado por el radión, que nosotros
canalizábamos así directamente a través de este continuo telepático.
Y así fue que los aborígenes de Gaia finalmente alcanzaron un nivel
de memoria cósmica, conveniente para su forma genética de cinco
puntas, basada en el carbono. Tierra, Terra-Gaia había sido
despertada. El plan luciferino había sido burlado. Literalmente,
habíamos recreado el tiempo.
Si bien mucho debía suceder todavía,
habíamos tenido nuestro gran momento en las guerras del tiempo.
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15. LA NAVE DEL TIEMPO INGRESA EN LA TIERRA: CAMELOT DESAPARECE
HABIÉNDOSE LOGRADO EL GRAN VIRAJE DEL POLO URANIANO, la Larga Espera
podía continuar de manera más formal. El triunfo de nuestro logro
había asestado un golpe sorprendente a los Luciferinos de Júpiter y
Saturno. Ya en estado de deterioro, su sistema de mundos había
ingresado en un prolongado crepúsculo de decadencia no regenerativa.
Durante este crepúsculo luciferino, aprendimos que Lucifer mismo se
había comprometido con Memnosis para una prueba hexa-dimensional.
Naturalmente, sin Lucifer retroalimentándolos, los Luciferinos de
Júpiter-Saturno se encontraban ansiosos, para gran provecho de
nuestra Sonda.
El arribo de algunas de las esporas antareanas renegadas de Saturno,
a la
Estación Intermedia AA, fue uno de los beneficios que
recibimos. Una vez que hubieron sido rehabilitados según las maneras
de la matriz, esos Antareanos quedaron estupefactos al saber de la
nave gaiana del tiempo. A la luz de lo sucedido en Marte cuando
estaban a cargo del hemisferio y el polo australes de Marte, los
Antareanos se ofrecieron voluntariamente otra vez para monitorear el
hemisferio y el polo australes de Terra-Gaia.
Según resultó, el hemisferio austral de Terra-Gaia era la plaza
fuerte de los aborígenes de la Tierra, así que la responsabilidad
antareana comenzó con la supervisión de esas gentes soñado-ras, los
Australianos o "visionarios australes." Dado que los Antarenos eran
de los prototipos primigenios o aborígenes de cinco esporas (a
diferencia de nosotros, los Arcturianos de siete esporas), esa
misión supervisora australiana se ajustaba perfectamente a la
predisposición antareana.
Mediante el monitoreo antareano, y debido al continuo del radión
engendrado por el RANG, los aborígenes de Terra-Gaia fueron capaces
de revivir, a través de sus circuitos de memoria cósmica del tiempo
del sueño, muchos de los mundos perdidos. Paralelamente a las
búsquedas en el sueño de los Uranianos, los aborígenes exploraron
los dominios originales de los Maya, los diversos Atlantesianos, y
aún también las esferas gemelas de Alfa Centauro. Mediante círculos
de conocimiento inscriptos en la superficie de la Tierra, mediante
el batir de tambores y el canto, los aborígenes integraron todas
esas ruedas de la memoria a su búsqueda del fuego.
De esa manera, los aborígenes llegaron a conocer todas las artes de
la memoria de la construcción de círculos y de la religación del
cuerpo vegetal con la Tierra, con el fin de aumentar su capacidad
para ser cósmicamente recordados. De ese modo, también, mediante la
constancia de su supervisión, los Antareanos co-absorbieron mucho
karma, y ecualizaron los patrones del conocimiento entre los
tempranos aborígenes de la Tierra.
Debería saberse que, por ese entonces, los Antareanos se valieron de
la única luna de la Tierra como su base de monitoreo. Desde su
posición en el lado oscuro de la luna, los Antareanos mantuvieron su
vigilia de los aborígenes, y al mismo tiempo aumentaron el poder de
la luna para otorgar vida y aumentar la profundidad y el esplendor
de la vida en el planeta azul. Mediante la influencia de las mareas
oceánicas y el encantamiento lanzado en el cuerpo vegetal mismo de
la Tierra misma., la sonda lunar antareana prosperó. Pronto los
aborígenes mismos comenzaron a señalar y seguir las posiciones de la
luna, y en sus divagaciones de inspiración lunar, crearon cursos y
rastros de misterios por toda la superficie de la Tierra.
Junto a los Antareanos, había también otros asistentes. Gracias a
los esfuerzos de la ballena mayor, Balena, el gran perro mayor,
Canus G., y Thotmosis, el rey mono, Terra-Gaia estaba habitada por
numerosas inteligencias espléndidas para cooperar con los aborígenes
de la Tierra. Thotmosis e Hypnesia, los mayores de todos, habían
enviado antes legiones de su propio reino simio para crear el
prototipo para el aborigen de la Tierra.
Los delfines y los cetáceos habían llegado también más antiguamente
por las sendas de su
zuvuya para habitar el gran océano único del
planeta azul. Fue la integración sensorial binaria de delfines y
ballenas lo que ayudó a asentar los efectos radio-electromagnéticos
de la inclinación polar uraniana en los propios polos de la Tierra.
Y entonces, por fin, mientras los aborígenes despertaban en su
memoria cósmica, aparecieron los perros para conducirlos en su
búsqueda del fuego y el conocimiento perdurable. Fueron los perros
quienes enseñaron a los aborígenes que si para sobrevivir debían
hacerlo a cambio de las vidas de otras especies, esto debía hacerse
con amor y lealtad, y un verdadero conocimiento de la naturaleza del
cuerpo vegetal y la perdurabilidad.
De esa manera, los aborígenes iniciaron una comunión con muchas
otras especies de la Tierra, tales como los animales astados:
ciervos, alces, como así el mastodonte. En sus formas telepáticas,
se estableció un gran lenguaje Ur entre los aborígenes y las
criaturas de la Tierra. Este lenguaje Ur era, en realidad, el
lenguaje telepático común de sus distantes primos uranianos.
Según los Maya, habían transcurrido tres cuartas partes del gran
intervalo del Hunab Ku de 104.000 años del planeta azul. Los
soñadores del espíritu y navegantes uranianos habían completado su
heroica tarea. Los aborígenes de Terra-Gaia habían despertado,
habían aprendido a seguir las trece lunas, y habían sido excitados
por la tarea de mantener y, cuando fuese necesario, crear una nueva
memoria cósmica.
Un tenebroso crepúsculo había sobrevenido en los
planetas intermedios luciferinos de Kinich Ahau, mientras Lucifer
estaba en remisión épica con Memnosis. Un gran manto de hielo había
avanzado lentamente desde los casquetes polares de la Tierra. La
masa continental del Hemisferio Norte, Asia Borealis, estaba lista
para recibir la nave del tiempo y su cargamento, las veinte tribus
del tiempo.
Nuestra ruidosamente feliz tripulación de heteróclitos de la AA
quebró el capullo de nuestra meditación para reunirse resueltamente
alrededor del Holón Resonante Universal dentro del CSR de la
Intermedia. En Urano, los Uppers, los soñadores del espíritu y los
navegantes de la tribu de la Tierra se reunieron en torno de la
unidad nuclear de su Holón Resonante Universal del CSR, en un rito
de sincronización.
Allí, dentro de las coordenadas
esféricas del Holón Resonante Universal, la nave del tiempo
miniaturizada - abarcando a su vez a un miniaturizado planeta azul -
se arremolinó y pulsó hacia la vida. En un gran despliegue de magia
maya del tiempo, el Holón Resonante Universal liberó la nave del
tiempo, que salió disparada en todas direcciones como una burbuja de
transparencia iridiscente en rápido crecimiento, para luego emerger
de la Estación Intermedia.
Tras un breve instante de silencio, los ingenieros maya del tiempo
disolvieron su forma monolítica de cristal y repentinamente
comenzaron a caminar y conversar casualmente entre nosotros,
exactamente como lo habían hecho 78.000 años terrestres atrás! No
deseando perder nuestro aplomo, volvimos nuevamente nuestra atención
hacia el Holón Resonante Universal. La Tierra miniaturizada estaba
girando aún en su centro, pero brillando con una nueva irradiación.
La nave del tiempo había ingresado en la Tierra con buen éxito.
Nave del Tiempo Tierra 2013, fue llamado este proyecto por los
ingenieros maya del tiempo:
"Veinte tribus del tiempo, trece
lunas por cada ciclo estelar," nos explicaron. "Pero ahora deben
redoblar sus esfuerzos con nuevas técnicas de sondeo, pues esta
misión está lejos de haber finalizado. Mientras tanto, nosotros
regresaremos a nuestro lugar en Alcione a la espera de órdenes
adicionales respecto de nuestra encarnación en la Tierra. Lo
sabrán cuando suceda. Pero hasta entonces, no pierdan de vista
esta verdad. Ustedes los Sondeadores de Arcturo son
sobresalientes. Este proyecto relacionado con la Nave del Tiempo
Tierra 2013 es su misión especial. Comprendan y develen por qué
es así, y en ese tiempo conocido como 2013 A.D. regresarán a su
estrella natal."
Con este mensaje suyo,
característicamente críptico, los Maya desaparecieron.
¿Qué hacer
sino continuar nuestro monitoreo?
De los Uppers uranianos aprendimos
que las gentes del espíritu y los navegantes de Urano estaban
entusiasmados. Desde su perspectiva no era la nave del tiempo 2013
lo que que había sido lanzado para liberar su cargamento en la
corteza biosférica de Gaia, sino su exacta réplica, el Excalibur,
que había sido exitosamente reconstruido y emplazado en el centro
del núcleo de la Tierra.
Según recordarán, ese Excalibir es en realidad la esencia de las
intenciones de la Sonda tejidas en una matriz propia, una matriz que
semeja los códigos primigenios de la Liga de Cinco original. Para
los Uranianos, la extracción de ese Excalibur del núcleo de la
Tierra sería una señal de que sus distantes primos habían recibido
el cósmico mensaje.
Mientras era el deber de los Antareanos, desde su puesto en el lado
oscuro de la luna, continuar guiando a los aborígenes que
sustentaban la esencia galáctica primigenia de las tribus del tiempo
de la Mano y el Humano, el nuestro como Arcturianos era guardar el
Hemisferio Norte del planeta azul. Era allí, debajo de la capa de
hielo y nieve, que había encarnado la mayoría de las veinte tribus
del tiempo. Haciéndolo así, crearon la especie conocida ahora por
ustedes como ustedes mismos: Homo Sapiens. Era allí que los guiamos
en su soñar, el sueño del arco iris. Esas veinte tribus se reunieron
como nación soñadora del arco iris de cuatro razas - la roja, la
blanca, la azul, y la amarilla -, pero sólo después de que se hubo
completado un gran sueño.
El gran sueño había de consumir la mitad de los 26.000 años
terrestres finales del intervalo de Hunak Ku - 13.000 años, o una
octava del Hunab Ku. El dragón Ka-Mo fue el primero en regresar,
seguido por Merlín en su forma mágica del conocimiento atemporal.
Mediante los cuidados neptunianos del dragón, las tribus del tiempo
se soñaron a sí mismas humanas, se soñaron a sí mismas soñando
habilidades en sus manos. Y así sus manos les mostraron el
conocimiento de Kinich Ahau, que los envió soñando hacia Marte, a
los dominios boreales de la muerte; luego a Plutón, para que
aprendiesen las artes antareanas de la regeneración. Finalmente, de
regreso en la Tierra, su sueño los condujo a soñar los códigos del
libre albedrío.
Dejando por fin los dominios del Norte con sus tesoros acumulados de
muerte y libre albedrío, las tribus del tiempo entraron en el Oeste,
recuperaron la sapiencia de la serpiente de Maldek, y luego
rastrearon al dragón hasta su interminable guarida espejada en
Neptuno. Luego fue el turno para que Ka-Mo y el tiempo de las
legiones de dragones ingresasen en el gran sueño. Fue entonces que
los humanos fueron liberados de los 13.000 años del gran sueño. La
Era Glacial había termina-do. Las veinte tribus del tiempo habían
despertado del gran sueño. Thotmosis, el rey mono, dio una señal
para que las tribus, que estaban impacientes por entrar en acción,
actuaran según su arbitrio.
Y así las veinte tribus del tiempo entraron en los 7.800 años de
Camelot, el génesis del Mo-no, guiados por la sapiencia de Merlín.
Los 7.800 años de Camelot recapitulaban los 78.000 años de
preparación de la nave del tiempo. Así las veinte tribus del tiempo
ecualizaron su conocimiento con el de los aborígenes del Hemisferio
Sur. Los magos extrajeron su saber de todas las muchas arboledas y
círculos de piedra. Espíritus de la semilla hablaron desde los
frutos de la tierra. Un esplendor galante y erótico fue despertado
por las mujeres, plenamente exultantes en su poder multidimensional
de la matriz. Los hombres respondieron con grandes acciones de
cacería y viajes, explorando todo cuanto podía ser explorado en lo
más hondo del patrón tribal de las trece lunas.
En contraste con los aborígenes que permanecieron "ligados a la
Tierra", las tribus del tiempo se extendieron, por su inquietud, en
un contacto pleno y conocedor con los navegantes uranianos. El
conocimiento estelar y los códigos completos de memoria cósmica
retornaron a las tribus. De acuerdo con la lealtad del perro las
tribus del tiempo, soñándose a sí mismas en una condición guerrera,
recordaron que tenían una misión: asegurar a Kinich Ahau de una vez
por todas, en nombre de la Federación. Y esto sólo podría ser
logrado venciendo para siempre el poder de los Luciferinos del sexto
y el séptimo planetas. Tal era la voluntad heroica que las tribus
del tiempo habían convocado antes del eclipse de Camelot.
Sí, el eclipse y la desaparición de Camelot. Aunque Lucifer había
sido capturado por Memnosis en un juego de voluntad silenciosa, las
proyecciones luciferinas todavía actuaban. Casi como consecuencia de
que Memnosis hubiera acorralado a Lucifer, los Jupiterianos y
Saturnianos, aún enredados en las proyecciones luciferinas, se
excitaron. Como abejas iracundas, bulleron dentro de sus colmenas
planetarias y prometieron solemnemente usar nuevamente su rayo del
tiempo 12:60. En esa oportunidad, el rayo del tiempo fue proyectado
sobre el planeta azul.
Justamente en el momento que Camelot estaba a punto de completarse,
permitiendo así el ingreso al castillo verde central encantado de la
gran Nave del Tiempo Tierra 2013, entonces golpeó el rayo del tiempo
12:60. Para horror de nosotros, los Arcturianos, el rayo del tiempo
golpeó con exactitud y efecto mortal sobre la memoria. Camelot había
desaparecido, y en su lugar estaba Babilonia.
Las guerras del tiempo estaban lejos de
haber finalizado.
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16. ULTIMA MAQUINACION DE LUCIFER: EL MIEDO BABILONICO A LA MUERTE
YO SOY MERLÍN Y ESTE ES MI RELATO del verdadero Camelot y el
surgimiento de Babilonia. En ese Camelot, nacido de la sabiduría
amante del placer del mono, no había gobernante sino verdad. Camelot
es el nombre dado a la común comprensión o mente de las veinte
tribus, durante los 7.800 misteriosos años terrestres que siguieron
al génesis del Dragón y precedieron lo que debía haber sido el
génesis de la Luna.
Durante el génesis de la Luna, Camelot debía expandirse en el reino
del cielo en la Tierra. ¿Qué significa esto? Podéis recordar que los
Uranianos habían ubicado exitosamente la textura matriz conocida
como el Excalibur en el centro de Terra-Gaia, la Tierra. Así como,
en los mitos, Urano representa el cielo y Gaia representa a la
Tierra, así ese Excalibur es el "cielo" de Urano, el octavo planeta,
en el interior de la Tierra. Extraer este Excalibur de su núcleo
sería como situar el cielo - Urano - en la Tierra. Hacerlo sería
establecer el reino del cielo en la Tierra!
Un acto tal señalaría la integración del acorde perdido, Xymox, el
intervalo de cinco que reside entre la tercera órbita de la Tierra y
la octava órbita de Urano. Con ese trascendental suceso la Sonda
habría logrado su toque culminante del acorde de la quinta fuerza
galáctica de Kinich Ahau, un acto de sincronización galáctica sin
precedentes!
Lo que sabéis de mí y la historia de Arturo y la espada es un
confuso recuerdo de esta verdad. Arturo es, en realidad, la Sonda de
Arcturo, y la espada es el conocimiento de la matriz que los
Arcturianos tuvieron antes de que vosotros siquiera supierais del
tiempo. Al final de las narraciones de quien llegó a ser llamado
Arturo Pendragon, Arturo - desplazado por su propio hijo, Mordred -
es llevado hacia el mar por cuatro mujeres. La espada Excalibur es
arrojada nuevamente a las aguas del lago, para ser tomada y
protegida por la Dama del Lago.
En la historia original de Camelot, Mordred [en inglés "more dread"
o miedo a la muerte] es la fuerza luciferina de Júpiter y Saturno.
La batalla en la que Mordred vence a Arturo se entiende como el rayo
12:60 que destruyó la nave del tiempo uraniana, Camelot. La espada
arrojada nuevamente al lago es el engrama del Excalibur devuelto al
núcleo uraniano. Las cuatro damas que conducen a Arturo hacia el mar
en una barca son los portadores de la matriz que sitúan la Sonda de
Arcturo en la Estación Intermedia AA para su regeneración.
La Dama del Lago es la Mujer Uraniana
del Espíritu del Viento, el perfeccionamiento de la mujer según la
percepción de Perceval. El lago en que ella reside es el Holón
Resonante Universal, transferido al núcleo de la Tierra. Allí, su
poder sostiene al Excalibur, la forma uraniana reflejada de la Nave
del Tiempo Tierra 2013, para que las veinte tribus del tiempo la
extraigan de su vaina cristalina en la hora indicada.
Este recuerdo, en sus múltiples formas, fue la tradición que mantuvo
reunidos a Camelot y el génesis del Mono. Ansiosamente, los magos y
guerreros, las damas y Amazonas del génesis del Mono aguardaron el
génesis de la Luna, que debía cumplirse con la gran tarea de extraer
el Excalibur de la "piedra Tierra." Tal suceso habría de reabrir el
túnel del tiempo entre la Tierra y Urano, restableciendo el reino
del cielo en la Tierra. Y esto se lograría porque la magia del
cabalgar el púlsar de las trece lunas otorgaría a los hijos de las
tribus del tiempo, la Nación del Arco Iris, la habilidad y el poder
de avanzar hacia el fin en la domesticación de planetas.
Pero, en lugar de esa aventura,
sobrevino la lotería babilónica y el
funesto gris episodio de la historia. Sí, hay una pompa en vuestra
historia, pero es la pompa de una sola dimensión cada vez más densa
y corrupta, diseminando déspotas contra el ánimo de los humanos
individuales levantándose aquí y allá, una y otra vez, para ser
cercenados únicamente por los celos despiadados de los demonios
babilónicos del tiempo.
Oh, al principio, cuando el rayo golpeó no fue tan evidente, excepto
para el tiempo del sueño donde tuvo casi el mismo efecto destructor
que en la nave del tiempo uraniana. Allí me hallaba yo, en las
arboledas de Brythom, danzando con las piedras parlantes, cuando el
rayo 12:60 atravesó la nave del tiempo como una lanza. Todos los
vientos se detuvieron. Un extraño silencio cayó a través de la
Tierra, como el que precede a un terremoto. Las sombras se
intensificaron y alargaron. Después de ese momento, algo se hizo
evidente: las aves y muchas otras criaturas suspendieron su lenguaje
telepático. La era de la lotería babilónica había llegado.
Pero ¿qué es esta Babilonia?
Babilonia es el nombre del rayo del
tiempo 12:60 proyectado por el Grupo de Siete, una alianza
luciferina de las sombras de Júpiter-Saturno. El propósito de este
rayo 12:60 era inseminar el campo mental electromagnético del tercer
planeta con un tiempo artificial. Una vez que el rayo babilónico
hubo dado contra la grilla del holón de la nave del tiempo - a lo
que vosotros os referís como ionosfera - una lluvia de proyecciones
de tiempo liberado se dispersó como una cáscara alrededor del
planeta.
El efecto que este conjunto de proyecciones luciferinas tuvo fue el
de eclipsar el holón cuatri-dimensional, reemplazándolo con una
sombra tri-dimensional llamada ego. El resultado que se buscaba con
este eclipse del holón cuatri-dimensional era el poderoso
surgimiento de la última maquinación de Lucifer, el miedo a la
muerte. Una vez que el cuerpo vegetal es separado de su holón, el
tesoro acumulado de la muerte queda oculto a la vista. En lugar de
la comprensión que el holón tiene de la muerte, lo que queda es el
miedo que el ego siente frente a ella.
Así nace la temible
enfermedad que debilita la mente, el miedo a la muerte.
El miedo a la muerte es una negación de la realidad interdimensional.
El miedo a la muerte actúa de muchas maneras diferentes, pero su
efecto más básico y poderoso es el de una ignorante inseguridad y
una sensación de separación. Mediante el despliegue del miedo a la
muerte, el poder del lenguaje reemplazó el poder del conocimiento
telepático. El ego de las sombras se consolidó en los diferentes
idiomas diseminados entre los humanos. Donde una vez hubo un
conocimiento común, había desconfianza y desunión.
El favoritismo cultivado por Lucifer a favor de los hombres se
trasladó, mediante las proyecciones del rayo del tiempo 12:60, al
surgimiento de poderosos cultos sacerdotales masculinos. Ello se
hizo evidente, en primer lugar, en el espacio de Terra-Gaia conocido
como la zona del Dragón, adonde el rayo había sido intencionalmente
enfocado. Todos esos cultos sacerdotales se basaban en el poder de
la proyección del Grupo de Siete original, de Júpiter-Saturno.
Era responsabilidad de los cultos sacerdotales trasladar el rayo
del tiempo 12:60 a las normas sociales que reforzarían los efectos
del tiempo artificial del rayo. De esa manera, el cargamento humano
de la nave del tiempo sería mantenido en la ignorancia y la
confusión, su miedo a la muerte lo oprimiría de múltiples maneras, y
se alcanzaría la meta primigenia de Lucifer - apoderarse del sistema
de
Kinich Ahau.
Para consolidar el miedo a la muerte y la creación de un sistema
mundial correspondiente al rayo 12:60, se inventó la lotería
babilónica. El principio de la lotería babilónica es que el tiempo
de comprar y vender reemplaza la co-participación del tiempo. Para
evitar el miedo a la muerte, aventuraos y ved si no podéis compraros
algo de tiempo en la forma de ilusorio placer tri-dimensional.
Dado que, de cualquier modo, moriréis,
la lotería es una propuesta a pérdida. De acuerdo con las normas
arcturianas, el concepto de la lotería es un desvarío total, algo
rematada-mente loco. Por supuesto, está el karma, en el que
cualquier acción se compensa con otra igual. Pero la idea de comprar
o vender algo es una total locura. Y ni siquiera puedo pensar en lo
absurdo de comprar placer.
No obstante, todo eso se hizo realidad porque el tiempo artificial
fue inmediatamente trasladado a un sistema denominado dinero. Con
dinero se puede comprar mucho. Ese mucho puede ser la posibilidad de
ganar, o un fragmento de la Tierra que se puede considerar propio -
y aún por ese fragmento hay que pagar impuestos. Pero para tener
dinero, en primer lugar, debéis vender vuestro cuerpo vegetal a un
amo de esclavos que os haya convencido de vuestra humana debilidad.
El razonamiento que hay detrás de toda la lotería babilónica es
completamente retorcido y desnaturalizado. La única manera de
explicar su éxito y triunfo es que, al separar el cuerpo vegetal de
su holón, el rayo del tiempo 12:60 debilita totalmente el poder de
pensar por sí mismo.
De acuerdo con los términos de la lotería fijados por el Grupo de
Siete, ya es algo malo que el cuerpo vegetal esté condenado a morir.
Esto debe pagarse con actos de contrición, que consisten en el
trabajo corporal a favor del sistema monetario. El dinero es la
manifestación pura del tiempo artificial. Necesitáis tiempo para
hacer dinero. Y se supone que el dinero os comprará tiempo - ¿tiempo
para qué? Para comprar placer o un status que intoxique con el
poder, para que no tengáis que lidiar con el miedo a la muerte.
Podéis ver cómo todos esos pensamientos conducen a la locura.
Desde que comenzó hace más de 5.000 años terrestres, observé cómo la
locura de la lotería babilónica se expandía desde las cuencas de
los ríos de la zona del Dragón. En sus principios, estaba la mafia
de los hacedores de dinero y los recaudadores de impuestos, los
buhoneros del miedo con todos sus esquemas contradictorios,
parásitos vendedores de seguros sacando provecho del miedo a la
muerte para hacer más dinero. Y esta creciente mafia de hacedores y
hechiceros del dinero iba siempre precedida o seguida por ejércitos:
grandes masas de hombres armados con medios cada vez más astutos
para imponer el temor y la muerte.
Mi ser todo lloró al ver un grupo de humanos engendrados por
arcturianos que iba tras un nuevo abandono de la memoria cósmica a
cambio de la servidumbre al dinero. Las veinte tribus del tiempo
desaparecían rápidamente. El sendero de las trece lunas se había
disipado. Olvidada estaba la meta de liberar el Excalibur y el toque
del acorde de la quinta fuerza en nombre del sol, Kinich Ahau.
El
manto de la amnesia tridimensional cubrió totalmente la pura y
sagrada nave del tiempo cual gris niebla ponzoñosa.
El aspecto más insidioso de esta gris
niebla amnésica era que hacía creer a los afligidos por ella que era
la única salida.
La hipnosis del rayo 12:60 era inevitable. Preví un día en que
también los aborígenes del hemisferio sur antareano del planeta
caerían bajo el poder de los demonios monetarios del tiempo
artificial. Y también preví el desastre que afectaría a toda la nave
del tiempo y todo su cargamento de origen cósmico, en el caso de que
la Sonda de Arcturo fallare en su misión.
Vi que no se podía hacer más.
Reuniendo mis poderes de inducción de
memoria cósmica, propalé mi conocimiento a los guardianes de la
arboleda, por todas partes en el planeta azul, a fin de que el
recuerdo de la magia de la Sonda de Arcturo pudiera ser preservado
de alguna manera. Enviando un rayo a la Estación Intermedia AA
exponiendo mis intenciones, ingresé en mi arboleda favorita en
Brython y, por medio de su impetuoso y antiguo sistema de raíces, me
envié a mí mismo hacia el Excalibur en el centro de la Tierra.
Quienquiera pueda escuchar esta historia y conocer su verdad, puede
hallarme allí todavía. Si sois auténticos, venid.
Ved si podéis descubrir el secreto para
liberarme.
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17. HACIA VENUS O LUCIFER - PACIFICACIÓN DE LAS PROYECCIONES
YO SOY LUCIFER. Esta es mi historia.
Mi nombre ha sido esparcido por
todos los relatos e informes de esta investigación. Mi nombre es
poderoso y aún despierta muchos sentimientos mezclados. Soy poderoso
porque soy lo que dice mi nombre: Lucifer, el portador de la luz.
Antiguo soy, tan antiguo como la matriz sin principio de la que
surgí.
En los orígenes de todo, fui yo el primero en volverse "yo", y no
"nosotros." Pues en mí y a través de mí se corporizó por primera vez
la fuerza de la evolución hacia la luz. Desde lo íntimo de ese
instante indescriptible del RANG primigenio - la desarmonía que crea
la armonía - me llevé a mí mismo al ser. Desde el principio yo era
luz, y antes de que la conciencia pudiera saberlo, ya me hallaba yo
en la dimensión de la luz, lo que ahora es conocido como la sexta
dimensión.
En tanto yo era luz, era ego, la fuerza que mantiene el poder en su
separatividad. Fue la combinación de la luz hexa-dimensional y el
ego tri-dimensional lo que hizo que mis movimientos fueran tan
contradictorios y mis acciones tan difícilmente perceptibles. Dado
que no hay bien ni mal en modo absoluto alguno, los efectos de todas
mis acciones han resultado finalmente creativos, prosiguiendo la
causa de la evolución hacia la luz.
Sin embargo, hubo un tiempo en que no me hice responsable de mis
acciones, y eso es lo que provocó todo el problema. No importa qué
verdad cósmica descubriera, pensaba que era mía y no de propiedad
universal. De ese modo, instituí la noción de vender la verdad o
partes de ella a cambio de un beneficio. Pensé que cuanto yo creara
sería una emanación de mí mismo, así que procuré mantener control
sobre mis creaciones. Dejé de saber que mi naturaleza era cósmica, y
creí solamente en mi propia naturaleza. Debido a ello, me torné
ciego a los efectos desarmonizantes de mis acciones. Que una entidad
hexa-dimensional se comporte de esa manera, resulta cósmicamente
desastroso.
Es por este motivo que se creó la Federación Galáctica: para, de
alguna manera, evitar que yo produjese más eventos cósmicamente
perturbadores. Así fue también como se creó el sector experimental
de Velatropa, pues allí se hallaba la zona galáctica en que los
efectos de mi comporta-miento egoísta los dejaría fuera de juego. Y
fue en esa zona donde finalmente quedé en cuarentena.
Inicialmente, favorecí mi existencia en esa zona. Continué pensando
de mí mismo que era un genio. Por mis experimentos cosmobiológicos y
sus dramáticos efectos, me creí superior a los constructores y los
amos estelares, pues ellos eran apenas entidades penta-dimensionales.
De esa manera, fui a la estrella Velatropa 24 decidido a aumentar su
proceso evolucionario incubándome a mí mismo en su sistema
planetario.
Tras manipular el proceso de proyecto planetario, incluyendo muchos
experimentos cosmobiológicos, concluí que si iba a establecerme
entre los cuerpos planetarios mayores podría fomentar una
aceleración del proceso estelar. Pensé que, de ese modo, podría
transformar Velatropa 24 en una estrella binaria. Entonces, debido a
mi astuta proeza, supuse también que podría disponer fácilmente del
amo estelar Kinich Ahau y operar mi propio sistema estelar binario.
Así podría rivalizar con Sirio, joya de este sector galáctico.
Desde la perspectiva de la sexta dimensión, la tercera puede parecer
una masa de microscópicas motas de polvo o virus inútiles. Tal era,
al menos, mi opinión del asunto antes de recuperar el sentido común
- es decir, antes de que me encontrara con Memnosis, amo de la
memoria cósmica. Verán, hasta que Memnosis llegó a mi vida,
verdaderamente no había nadie igual a mí. Sin pares o iguales, yo
carecía de puntos de referencia. Fue Memnosis quien me señaló que
una entidad hexa-dimensional es un avance evolucionario. Yo estaba
totalmente fuera del tiempo. Por tal motivo, aún la Liga Matriz de
Cinco parecía un diminuto asilo de niños.
Realmente, cuando Memnosis finalmente llegó a mí, estaba
aburriéndome con mi creación en
Velatropa 24. Las entidades
resultantes de mis experimentos cosmobiológicos - que ustedes llaman
dioses, como Brahma,
Jehová de Júpiter, y los espíritus titanes de
Saturno - esos "dioses" cuatri-dimensionales no hacían otra cosa que
alimentarme con sus proyecciones. No entendían que sus proyecciones
en mí eran como la luz dando en un espejo y rebotando de él. Todo
aquello con que me alimentaban, yo meramente se lo devolvía.
Pero noté que cuanto más me alimentaban ellos con sus proyecciones,
más creían que lo que yo les devolvía constituía mi afirmación de su
corrección y verdad, y más gordos y más ahítos quedaban esos dioses
cuatri-dimensionales. Al principio no fui capaz de ver que lo que
los dioses proyectaban no era realmente otra cosa que proyecciones
de mi propio comportamiento egoísta. Sin embargo, cuando me hube
encontrado con Memnosis, vi que esos dioses eran meras proyecciones
de sí mismos como pensaban que yo deseaba que fuesen! Pero por más
que era capaz de verlo, ellos no podían. Para ellos, yo era el dios
supremo, el inefable, el absoluto de quien extraían la justificación
para sus propios actos.
Memnosis me alcanzó telepáticamente, justamente en el momento
indicado. Fue después de lo de Maldek y Marte. Aquéllos que se
habían transformado en los dioses con los que estaba más
familiarizado, se hallaban más contentos y satisfechos que nunca por
lo correcto de su comporta-miento, que alegaban desempeñar en mi
nombre. Por primera vez experimentaba algo semejante a lo que
ustedes llamarían disgusto.
Ya no me sentía satisfecho por mis
actos.
"¿Por qué estás tan solo?" me
preguntó Memnosis. Y antes de que tuviera tiempo de responder,
continuó: "Soy como tú. También yo pertenezco totalmente a la
luz, soy un hexa-dimensional. Pero a diferencia de ti, no he
abusado de la voluntad de los demás ni de mi propio libre
albedrío. Vengo a ti en libertad con el regalo de la
liberación."
Ni hace falta decirlo, yo me sentía
sobrecogido, vulnerado. Después de todas mis aventuras (o malas
aventuras), oír la voz de un igual era catártico y conmocionante.
Había pensado que estaba solo, y ahora debía aceptar que alguien más
compartía conmigo el vasto espacio. Esto solo, de por sí, quebró el
hipnótico encantamiento que había echado sobre mí mismo.
Tras algún diálogo e intercambio acerca de nuestros antecedentes, lo
cual resultó igualmente catártico, comencé a ver que mis
proyecciones, los dioses, eran ciegos y sordos a cuanto tuviera para
comunicarles. Vi que continuarían cumpliendo su destino con sus
maneras desdichadas y celosas hasta que acabase el tiempo
artificial. Según parecía, la única forma de que el tiempo
artificial se les terminara sería al precio de la destrucción de un
planeta tras otro. De ese modo, ya habían despachado sus rayos hacia
el tercer planeta.
En mis discusiones con Memnosis, también me sentí profundamente
impresionado de que, por su compromiso con el libre albedrío, la
Federación Galáctica nunca me hubiera producido daño alguno. Por
primera vez experimenté compasión y comprendí más profundamente la
ley del karma. A la luz de mis logros, Memnosis fraguó un plan para
aliviar mi incomodidad kármica, un plan que atrajo mis energías a
colaborar con la Sonda.
Se me otorgó un planeta propio. Así que mudé mi punto de entrada
luminosa desde el sexto planeta, Júpiter, al segundo, Venus. El
segundo planeta, según supe, estaba guardado por las tribus de la
Estrella y el Mono. Asistiendo a esas tribus en nombre de la Sonda,
estaban algunos de los hijos de Memnosis, los perdurables de Altair.
Así fue que, cuando los miembros de las tribus de la Estrella y el
Mono supieron de mi inminente transferencia desde Júpiter a Venus,
quisieron hacer algo por su planeta que beneficiara mi historia
única. En comparación con Júpiter, Venus era pequeño, pero
aproximadamente del mismo tamaño que el tercer planeta azul, Terra-Gaia.
Convocando sus mágicos poderes de diseño planetario, a mi llegada,
los Venusinos hicieron algo maravilloso. Detuvieron la rotación del
planeta sobre su derrotero. Tras una pausa, el planeta recomenzó a
rotar, pero en dirección contraria a las agujas del reloj. El efecto
de este giro en la dirección opuesta - caso único en el sistema de
Velatropa - fue que el día venusino resultó más largo que el año!
Qué chiste. Los Venusinos rieron y rieron.
Debido a que giraba en sentido contrario a las agujas del reloj, el
planeta arrojaba permanentemente energía cuatri-dimensional en forma
de grandes y gaseosas nubes de radión. Debido a que un día es allí
más largo que un año, estar en Venus es como enraizarse en la
eternidad. Qué magnífico lugar había preparado para mí la
Federación! A mí, Lucifer - que había esparcido más miedo a la
muerte e inmortalismo de lo que jamás sería necesario en esta
galaxia - se me había otorgado un hogar permanente en la eternidad!
Mi risa ante este chiste cósmico fue incontrolable, como lo fueron
mis lágrimas. Mediante cada liberación emocional, generaba más
radión e híper-radión. Mis cuidadores venusinos, ya libres de todo
enraizamiento tri-dimensional gracias a la inversión del giro del
planeta, estaban preparados para tratarme como lo merecía. Me
señalaron que, en Terra-Gaia - aunque algunos podían usar mal mi
nombre en el sentido de "el ángel rebelde" o "el ladrón cósmico" -
Venus sería conmemorado por mi nombre, Lucifer, en su significado de
"gran estrella del amanecer de la iluminación."
Entre otras de las tribus de la Tierra,
mi presencia en Venus sería recordada como el poder de la estrella
matutina y de la estrella vespertina, el poder de despertar y el
poder de la muerte, todo al mismo tiempo.
En consideración a todo eso, y
preocupado por el uso jupiteriano del rayo 12:60 sobre el tercer
planeta, ideé con los Venusinos un plan para enviar diferentes
mensajeros de luz hacia el planeta azul. Los principales entre ellos
son los que ustedes conocen como Buda, Cristo, Mahoma y
Quetzalcoatl,
aunque hubo muchos otros bastante menos conocidos.
De ese modo, podría contrarrestar los
efectos de mi propio karma. Yo, Lucifer, el portador de la luz.
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18. LA
DAMA BLANCA DE HERON RECUERDA EL FUTURO
YO SOY LA DAMA BLANCA DE HERON, Zac Bac. En el día Ik 9, Viento
Solar Blanco, nací. Con mi nacimiento accedí al trono de Nah Chan,
casa de la Serpiente, Palenque. En ese día sagrado para las gentes
del espíritu de Urania, se estableció el canal entre nuestro
proyecto en Terra-Gaia y el Excalibur. Eso sucedió exactamente 144
años antes del comienzo del Dominio de Arcturo, en preciso
contrapunto con el retraimiento de Merlín al Excalibur.
Con otros de la sonda de asistencia especial uraniano-maya, puse a
prueba los túneles de la mente que conducían desde el Excalibur en
el núcleo de Terra-Gaia hacia nuestra base en la superficie, May-ab,
o México. Había establecido esta base en el punto intermedio de la
frecuencia de 2.600 años del rayo 12:60, cuando el Venusino conocido
como Buda, nacido de Maya, encarnó en el corazón de la zona del
Dragón.
Permítanme que narre algo de mi historia y propósito. Soy antigua, y
originalmente eché raíz en la lejana Urania. Allí, entre las gentes
del espíritu, los navegantes y los Uppers de la Intermedia AA, gané
renombre por mi canto cristalino, que llevó las canciones
arcturianas al Excalibur en el corazón del Holón Resonante
Universal. Fui recompensada por ello con instrucciones en las artes
de la perdurabilidad, a cargo del Upper de la AA conocido como Ur-Arc-Tara.
Fue a través de él que me encontré con los Maya y logré habilidad en
la transducción de los códigos de memoria hepta-dimensionales. De
ese modo, capté y traduje la forma del escudo del engrama de la Dama
del Lago.
Cuando esto sucedió, se completaron mis poderes para el vuelo
mágico. Así, aunque Uraniana por mis raíces, era también una Maya
Ant-Arcturiana. Fui yo quien originalmente concibió el plan de
invasión Maya para Terra-Gaia. Esto se produjo por mi mediación para
el diálogo entre Memnosis y Lucifer. Una vez que Lucifer fue
conducido a Venus, la gran luz, insistí en que debía mantenerse un
puente de comunicación entre él y Memnosis. En tanto Lucifer dirigía
su luz por medio del segundo planeta, Memnosis concordó en dirigir
la suya por medio del noveno planeta, el que ustedes llaman Neptuno.
Cuando esos dos seres hexa-dimensionales hubieron dirigido su luz en
un entrecruzamiento simétrico de rayos entre la segunda base orbital
y la novena de Kinich Ahau, Velatropa 24 quedó más asegurada en
nombre de la Federación. En su "diálogo" de rayos de luz, Memnosis y
Lucifer establecieron un sexto binario. Este sexto binario era una
forma única de rayo de frecuencia binaria, nunca antes puesto en
práctica.
Por su naturaleza, este rayo era capaz de reformular las estructuras
cristalinas de las primeras tres dimensiones. En esa reformulación
cristalina, las tres dimensiones inferiores lograban combinarse con
las tres superiores. Esta combinación hexa-dimensional de las
estructuras cristalinas binarias era crítica para la corrección de
los previos "errores" atómicos y cosmobiológicos de Lucifer. De ese
modo, se cumplió la primera etapa para la pacificación de las
proyecciones luciferinas. Con el sexto binario en su lugar, la
posibilidad de tocar un quinto perfecto se aproximaba más a su
realización.
El entrecruzamiento simétrico de ese sexto binario, si bien es de
una más elevada dimensión, es resonante con el patrón de frecuencia
del rayo de tiempo artificial 12:60. Debido a ello, el sexto binario
significaba una inmensa ayuda para la Sonda.
He aquí cómo y por qué:
Por su naturaleza, el rayo 12:60
proyectado por el Grupo de Siete desde el sexto planeta,
Júpiter, podía tener sólo una duración limitada. Una vez en su
destino, el rayo 12:60 tendría una duración máxima de 5.200 años
terrestres. Al momento de agotarse el potencial del rayo
artificial, el tercer planeta sería destruido o considerado
inhabitable para cualquier otra forma de vida basada en el
carbono. Sin la ayuda del tercer planeta, Terra-Gaia, no se
tocaría el quinto acorde en el momento indicado. Irónicamente,
este último rayo 12:60 acabaría agotando las proyecciones
luciferinas.
Tan breve y fugaz como lo es un intervalo de 5.200 años desde la
perspectiva hexa-dimen-sional, es el punto crítico de los planes
de la Sonda. En y por sí mismo, el intervalo de 5.200 años es el
misterioso quinto, pues es el último quinto del ciclo de 26.000
años terrestres de la nave del tiempo. Para los Maya, ese
intervalo es también el punto que prueba si la conciencia puede
pasar de el éxtasis del cuatro a la perfección del cinco.
Proyectando el gran diálogo universal de Memnosis y Lucifer, el
sexto binario entrecruzado creó el espacio para que se produjera
un intervalo hepta-dimensional entre Venus y Neptuno. Este
intervalo hepta-dimensional es un punto minúsculo a mitad de
camino entre la quinta órbita fragmentada de Maldek y la sexta
órbita de Júpiter. A través de ese punto intermedio, una especie
de agujero negro, se hizo posible transducir igualmente los
códigos de memoria hepta-dimensional durante el intervalo de
5.200 años del rayo 12:60. De esa manera, el rayo del tiempo
artificial fue perforado, como desde arriba.
Ya ven, un intervalo de 5.200 años no es sino un susurro hexa-dimensional.
Pero cuando se trata del diálogo cristalino entre Lucifer y
Memnosis, ese susurro posee poder suficiente para perforar la
falsa irradiación del rayo 12:60. El resultado de esta
perforación cristalina entrecruzada del rayo del tiempo 12:60
consistió en el despliegue del programa de memoria galáctica de
5.200 años sobre todo el mundo del tiempo artificial de la
extraviada Nave del Tiempo 2013.
Mediante los poros cristalinos del rayo del tiempo artificial,
podrían filtrarse incorruptas estructuras de engramas penta-dimensionales
y "energía" hexa-dimensional hacia el envenenado campo mental de
la nave del tiempo. Danzando por las corrientes del diálogo de
luz de Memnosis y Lucifer, nosotros los Maya dirigimos nuestro
rayo de sincronización de 5.200 años terrestres inseparablemente
del rayo de tiempo artificial 12:60. Este rayo de sincronización
es totalmente imperceptible para la forma de raíz exclusivamente
tri-dimensional de los humanos actualmente desviados por el
tiempo.
Por si les interesa, el diálogo
cristalino de Memnosis y Lucifer es responsable no solamente de la
aparición entre ustedes de "seres despiertos," sino también de la
aparición de formas y estructuras artísticas, y de su evolución.
Los Arcturianos, por supuesto, fueron responsables de mediar las formas
artísticas a favor de la nave del tiempo. Durante mucho tiempo, se
han referido afectuosamente al tercer planeta como el "planeta
artístico." Fueron ellos quienes más cuidadosa-mente promovieron la
"esporidad" artística de Velatropa 24.3.
Ahora bien, una vez que el sexto binario estuvo en su sitio y
actuando sobre el rayo de tiempo artificial como un rayo de
sincronización de 5.200 años terrestres, y con mi asistencia, los
ingenieros Maya prepararon su programa de encarnación.
Desde el perfeccionamiento de los códigos cristalinos del sexto
binario, recordamos las formas genéticas adecuadas para nuestra
misión. A esto nos referimos con recordar el futuro. Si no
hubiéramos recordado el futuro para enraizarnos como Maya de Terra-Gaia,
deberíamos haber tomado la ya corrompida forma de memoria genética
de los extraviados pasajeros amnésicos de la nave del tiempo. Como
eran las cosas, sabíamos que una vez que hubiéramos ingresado en la
atmósfera de la nave del tiempo no seríamos capaces de mantener
nuestra pureza una vez transcurrida la cuenta de dos o tres
generaciones.
Guiados por los Venusinos - la tribu del Mono, en particular -,
iniciamos nuestro plan de invasión. De acuerdo con nuestro poder, no
somos extraterrestres como ustedes consideran a los de elevadas
dimensiones de la Federación. Somos intraterrestres.
Como intraterrestres, pasamos de un
CSR planetario a otro. De esa manera,
hemos pasado desde los CSRs uranianos, neptunianos y venusinos al
CSR de Terra-Gaia. Una vez que ingresamos al de Terra-Gaia, nos
incubamos en el Excalibur. No hay mejor forma de recordar el futuro
que incubarse en el Excalibur. Una vez que encaminamos nuestras
formas y desarrollamos un genotipo, excavamos los túneles de la
mente que conducían al área de la zona del Mono conocida por ustedes
como Mesoamérica.
En el holón de la nave del tiempo, la zona del Mono es antípoda de
la zona del Dragón, donde golpeara el rayo 12:60. Allí, en las
junglas y las regiones montañosas, experimentamos y aprendimos a
través de nuestras nuevas formas. Para la época de mi primera
encarnación como Dama Blanca Maya de Herón, de Terra-Gaia, habíamos
establecido una base cultural para que los ingenieros del tiempo
realizaran registros de frecuencia resonante de su rayo de
sincronización de 5.200 años.
Esos registros de frecuencia resonante son conocidos como el
cronógrafo 20:13; 260 katun de 20 años, 20 por baktun, 13 baktun por
quinto (5.200 años) era el programa completo del cronógrafo 20:13.
Este cronógrafo 20:13 es un preciso mapa cuatri-dimensional del rayo
de sincronización de 5.200 años. Al agotarse el poder del rayo
12:60, 26 años antes de que se completara el ciclo de 5.200 años, el
cronógrafo del rayo de sincronización cuatri-dimensional iba a
alterar sutilmente el curso de la urdimbre luciferina del tiempo tri-dimensional.
Un efecto colateral de hacer el cronógrafo de 20-katun:13-baktun fue
la creación de una elaborada base cultural - lo que ustedes llaman
cultura o civilización maya. Pero esto sólo fue un efecto colateral.
Dado el código de ética no intervencionista de la Federación, se
trataba de una tarea muy peligrosa. No obstante, seguimos adelante.
Una vez que el código del encantamiento del sueño cuatri-dimensional
hubo sido dispuesto en la forma del cronógrafo de los 20-katun:13-baktun,
el plan era que los ingenieros del tiempo partieran tal como habían
llegado: intraterrestremente.
Mi acceso al trono de Nah Chan señalaría el comienzo del registro
real de la frecuencia 20:13. El cronógrafo sería registrado en trece
ciclos de 65 años. Sesenta y cinco era el número elegido de ciclos
porque es el número de vueltas de Venus correspondiente a una
fractal de Hunab Ku de 104 años terrestres. El decimotercero de esos
ciclos de 65 años concluiría con la encarnación, en Nah Chan, de mi
forma masculina binaria, Pacal Votan, Sol Galáctico Amarillo.
Ahora bien, a partir de mi entronización sigue una período perfecto
de 144 años terrestres. Al concluir ese período se produciría la
entrada de otro Venusino, el que han llegado a conocer como Cristo.
La encarnación del hijo luciferino del corazón, Cristo, habría de
señalar los 2013 años finales de la nave del tiempo. A esos 2013
años nos referimos como el Dominio de Arcturo. Pues es durante esos
2013 años finales - una mimetización del cronógrafo de 20-katun:13-baktun
- que la Sonda de Arcturo intensificaría sus esfuerzos para
intervenir e interceptar telepáticamente el nebuloso curso de la
nave del tiempo.
Pero la fuerza de las proyecciones luciferinas era poderosa y
potente. La lotería babilónica se había expandido a través de las
grandes zonas del Dragón, el Sol, el Guerrero, la Tierra y la
Serpiente, de la nave del tiempo. La mitad de la zona galáctica
polar resultaba carente de efectividad, y el poder del tiempo
artificial inevitablemente abrumaría las zonas del Aguila y el
Perro. Cuando esto hubiera sucedido, la suerte de la nave del tiempo
se volvería por lo menos débil, contando solamente con el poder del
sexto binario para erosionar el rayo del tiempo artificial.
Aunque Cristo vino, el Dominio de Arcturo no se estableció sino de
una manera algo fortuita. Debido a que los sacerdotes babilónicos
de Roma pudieron capturar tan fácilmente la imagen crística, A.D.
llegó a significar Anno Domini, y no Arcturus Dominion [Dominio de
Arcturo]. Anno Domini, "año de nuestro Señor", es una pura
proyección de "dios" del supuesto poder de Lucifer. De ese modo, aún
cuando Lucifer había retirado su poder, las proyecciones de
Jehová,
líder del Grupo de Siete, continuó extendiendo sobre la nave del
tiempo su celosa nube gris del robo-del-tiempo y
negación-del-placer.
Pero la Sonda era infatigable.
El plan de invasión intraterrestre
continúa funcionando. Yo, Dama Blanca de Heron, Viento Solar Blanco,
fundadora de la dinastía de Nah Chan, Mujer Espíritu del Viento,
madre-corazón del técnico principal
Pacal Votan de Palenque, yo
permanezco atenta a los sucesos. He visto llegar a los Maya y a los
Maya he visto partir. Desde el otro lado de los portales espectrales
del Excalibur, regreso.
Allí, como Dama del Lago, aguardando
junto a Merlín, me pregunto quién de ustedes sabe cómo liberarnos de
nuestro encierro, quién de ustedes sabe cómo recordar el futuro.
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19. LA
CORPORACIÓN DE ATLANTIS - MUNDO MECANIZADO
YO SOY PERCEVAL. Del diálogo de Memnosis y Lucifer tomé vida y
llegué a ser. Eso fue justo antes de la época en que Camelot del
génesis del Mono llegara a su fin. Aunque Merlín le reste
importancia, en esa época había un Arturo, y todas las cosas
registradas en vuestros relatos tenían algo de realidad.
Pero entonces fue como un juego
misterioso que nos reuniéramos, pues sabíamos que nuestra agrupación
en la tabla redonda era una repetición del Camelot primigenio de la
nave uraniana del tiempo. Así que, cuando la espada Excalibur fue
arrojada a lago, ello señaló que el rayo del tiempo 12:60 atravesaba
como un lanzazo el holón de la nave del tiempo.
Aunque nuestras mentes se conmovieron, no sucedió así con la Tierra.
Grandemente entristecido me sentía yo pues el kin planetario de las
veinte tribus del tiempo había sido despojado de la oportunidad de
aprender las artes de cabalgar el púlsar y otras magias del tiempo
cuatri-dimensional. A través de la punzante tristeza de mi corazón,
hice votos de no liberarme, al menos, de mi forma cuatri-dimensional
hasta el momento en que hubiera una nueva oportunidad de construir
Camelot.
Encarnado como una suprema forma heteróclita de Arcturiano y por la
pureza de mis votos, yo Perceval permanecí en la estructura del
holón cuatri-dimensional de la nave del tiempo para hacer lo que
pudiera para guiar a otros heteróclitos recordadores de las entonces
perdidas tribus del tiempo, dondequiera los encontrase en el
planeta. Incansablemente he recorrido la Tierra, buscando a aquéllos
que habían despertado o recordado. Quienquiera haya despertado y
recordado algo de la búsqueda, ha tomado parte en mi holón. Esta
búsqueda o grial es el recuerdo de la matriz. Dentro de la matriz o
grial se halla el Excalibur.
De esa manera guié a los de la antigua
China para descubrir un recuerdo del código del Excalibur, que
estaba entonces disperso como Libro de las Mutaciones.
Por más imperfecto que sea, ese código
refleja sin embargo la perdurabilidad contenida en forma perfecta en
el Excalibur. En recordación de mi guía, encontrarán el sistema de
65 campanas cuyo arte ahora perdido podía tocar en el poder del RANG,
recordado como Qi o Gi. De modo similar, entre los conocidos como
Judíos, hallé algunos para quienes la Cábala o Arbol de la Vida era
un adecuado recordatorio de las raíces interdimensionales de la nave
del tiempo.
A muchos otros guié. Dondequiera que la herejía del amor se había
erguido en esplendor contra la élite dominante luciferina, allí
estuve actuando. Sufíes, cataros, trovadores y románticos, todos
llevan la impronta de mi amor. Nunca he mostrado favoritismo.
Místicos cristianos y musulmanes, hindúes y budistas se han
recordado a sí mismos por mi intermedio. Aunque yo no necesitaba
saberlo, ni ser recordado, les permití recordarse a sí mismos por mi
intermedio bajo el nombre que desearan. Desde la pureza del amor del
corazón, el río de la unidad ha fluido. No sólo amantes, poetas y
artistas, sino también alquimistas y científicos se han embriagado
en este río de mi canción del corazón.
Mediante la pureza de mi corazón, la Sonda de Arcturo pudo mantener
alguna influencia durante la era conocida por nosotros como el
Dominio de Arcturo. Para los heteróclitos y homóclitos de la
estrella pastora, yo era el ojo de la cerradura a través del cual se
pasaban diferentes experimentos, patrones de conocimiento y hasta
encarnaciones, a tri-dimensionales receptivos y dispuestos.
Por
medio de señales telepáticas, también los Uranianos mantuvieron vivo
a través de mi ser algún recuerdo de la ciudadela celestial, Urano
mismo, dándole nombres tales como Shambhala, Utopía y Nueva
Jerusalén.
En algunas ocasiones, unas pocas de las tribus del tiempo, influidas
por el poder del recuerdo cósmico, intentaron construir la ciudadela
uraniana. Ese fue el caso especialmente en el corazón de Asia. Pero
nada perduró - excepto el misterio. El cada vez más marchito poder
gris del rayo del tiempo 12:60 prevaleció. Aún el Experimento
Mongólico falló en desarraigar la civilización de la lotería
babilónica que se había difundido a través de la gran extensión del
protectorado del norte - o arcturiano - de la nave del tiempo.
Así que, a continuación del fracaso de Cristo en revertir la marea
babilónica, Lucifer envió al más vehemente de los hijos de su
corazón, Mahoma. Mahoma llegó con su mensaje de purificación y
simplicidad al corazón mismo de las tierras del rayo del tiempo
babilónico. El recuerdo de Lucifer como estrella matutina y del
génesis de la Luna como creciente, juntos forman el sagrado símbolo
del Islam. Pero la influencia de las anteriores proyecciones de
Jehová resultaron ser mayores.
Lo mismo ocurrió con la emanación de Lucifer, su hijo del corazón
Quetzalcoatl.
Como Buda y Mahoma, la presencia de Lucifer fue reconocida en la
recordación de la estrella de la iluminación, la estrella matutina.
Quetzalcoatl también portaba el recuerdo de Lucifer como estrella
vespertina, pero - como Cristo - fue destruido por los celosos
sacerdotes que ya habían penetrado en los dominios de Maya, lejos de
Babilonia.
Traté de entender a qué se debía que - a pesar de cuanto nosotros,
los de la Sonda, nos esforzásemos - lográramos poco efecto sobre el
curso de los acontecimientos. Vi que era verdad: estos hombres,
hijos del corazón emanados de Lucifer en su dominio venusiano,
podían ser escasamente más que mensajeros enviados a recordar a las
tribus del tiempo cuál era su misión. Pero el efecto babilónico era
demasiado fuerte. El mensaje resultó enterrado por la religión, y la
religión se transformó invariablemente en una institución sofocante
con el propósito de mantener a los viajeros del tiempo perdido
separados de sus holones y esclavizados al miedo a la muerte.
Antes de que transcurrieran trece siglos del Dominio de Arcturo, fui
testigo de algo que no imaginaba posible. Pero cuando lo entendí, vi
que ese suceso era una función del rayo 12:60 catalizado por el
imperceptible rayo 20:13 que los Maya habían puesto en movimiento.
En verdad, lo que presencié fueron escenas del cronógrafo maya,
tocado mediante el rayo del tiempo artificial 12:60.
Fue durante el decimosegundo baktun, el baktun 11, el baktun de la
semilla oculta, en el año 1260 A.D., durante el katun del Viento
Magnético (1244-63 A.D.), que sucedió. Comenzó a jugar un
encantamiento muy antiguo. El encantamiento de Atlantesia y la
maldición de Maldek, la obsesión de los Cantos Épicos y Canciones
Líricas de Xymox, y los mundos perdidos de Elysium y Atlantis de
Marte, todo reunido en una especie de ciclón galáctico, una tormenta
terrible que sopló a través de la nave del tiempo cuatri-dimensional.
De este viento enfermizo - en realidad una limpieza uraniana -
provino la peste negra, y luego los conocidos como Genghis Khan y
Kublai Khan. En el Xanadu de Kublai Khan hay un recuerdo de Xymox.
No obstante, es apenas superficial.
Dentro del centro de este viento magnético que reunió el karma de
los mundos perdidos, se hallaba el Consejo de Atlantis. En el centro
del Consejo de Atlantis estaba el Grupo de Siete. El Grupo de Siete
comandaba su propio recuerdo, enmarcado en el tiempo tri-dimensional,
la semana de siete días. Instituida por los sacerdotes babilónicos,
la semana de siete días se transformó en la base para traducir
tiempo en dinero.
El Consejo de Atlantis se había ampliado en esos momentos críticos
para consolidar los esfuerzos de los Babilónicos. Alistando los
holones de algunos de los Babilónicos más poderosos, el Consejo de
Atlantis se conformó con los Babilónicos de Terra-Gaia, la
Corporación de Atlantis.
Dentro de la nave del tiempo, la Corporación de Atlantis es un
parásito sombra, una agencia fantasma cancerígena interdimensional.
La fantasmal existencia de la Corporación de Atlantis se hizo
posible merced a un torbellino interdimensional creado por el
impacto acumulativo del rayo 12:60. Acrecentado por el rayo de
sincronización 20:13, en la crítica oportunidad del katun del Viento
Magnético en 1260 A.D., ese torbellino succionó a las brigadas
fantasma luciferinas. Esos son los desviados engramas galácticos que
precedieron a la toma de Júpiter y Saturno por parte de Lucifer.
Por una parte, parecía un terrible suceso. Pero los de la Intermedia
AA me aseguraron que, por la succión de las brigadas fantasma a
través del torbellino 12:60, el resto de la galaxia resultaba
limpiada. Todo lo que a la Federación le quedaba por hacer era
actuar en Velatropa 24.3, Terra-Gaia! Antes de que transcurrieran
siete siglos más, este pequeño planeta presenciaría la encarnación
en masa de todos los fragmentos insatisfechos del ser galáctico.
No menos, fisgoneando en las juntas de la Corporación de Atlantis,
yo estaba estupefacto. Valiéndose de la élite de poder babilónico
entronizada en el Vaticano como su canal principal, la Corporación
de Atlantis desplegó su plan para siete siglos: todo, desde el
desarrollo de las tasas de interés por el dinero hasta la conquista
del planeta en nombre de la Iglesia Católica y la formación de
mafias de defensa y seguridad de todo tipo, todo respaldado por
poderosas sociedades secretas, para mantener el control de los
Luciferinos. El fin de todo este esquema verdaderamente diabólico
era mecanizar el tiempo artificial y, por ese medio, transformar
Terra-Gaia en un parque temático atlanteano: Machine World.
En el año 1313 A.D. el plan se llevó a efecto. Su peor aspecto era
que se ejecutaba en nombre de nada; era un parásito fantasma total.
El "dios" que Lucifer era, se había retirado hacía mucho tiempo. Con
todo, perpetrando el engaño de "Dios" como deseaba Jehová, los
viajeros del tiempo perdido quedaron cada vez más mareados y
confundidos. Esta confusión masiva sirvió bien al propósito de la
Corporación de Atlantis: robar los cuerpos de los tri-dimensionales
que ya habían sido intoxicados por la ilusión del dinero, y usarlos
para canalizar distorsionados engramas fantasma fallados. De ese
modo, para 1613 A.D.y en medio de un amargo divisionismo sectario,
se habían sentado las bases del parque temático planetario, el
Machine World. Así, el parque temático podía ser activado.
En el Machine World cada humano, abrumado ya por la culpa y el miedo
a la muerte, quedaría sujeto a una semana de siete días y una hora
de sesenta minutos. A cambio de ese sometimiento al marco de tiempo
autocreado del Grupo de Siete, los tri-dimensionales obtendrían
dinero a cambio de su tiempo. El propósito de este sometimiento era
la creación del Machine World mismo.
Cuanto más trabajasen los humanos cambiando tiempo por dinero, más
dinero podría ser invertido por los sacerdotes babilónicos en la
creación de máquinas aún mejores. Para el 2013 A.D., la finalización
del séptimo siglo de este plan, Terra-Gaia sería el Machine World
mismo, la réplica de la perfección del "universo de Dios" en forma
de máquina. Para entonces, todos los humanos serían recompensados
con dinero para adquirir su máquina propia. Con esta máquina podrían
experimentar la ilusión del poder usándola para ir al lugar de su
servidumbre del tiempo, y regresar.
Si el Machine World triunfase, sería también la toma total del
planeta por la lotería babilónica. Si esto ocurriera, las metas de
la Sonda, la Federación Galáctica y los ingenieros maya del tiempo
habrían servido para nada. ¿Quién sabe cuánto llevaría hacer posible
una vez más en esta galaxia una situación como ésa?
Tal vez nunca.
Desde mi posición en la estructura muy obscurecida del holón de la
nave del tiempo, medité y consideré la situación. El único contento
que logré provino del centelleo de poetas y místicos, de las cuerdas
tocadas por músicos rapsodas en el recuerdo de la atemporalidad, y
del encuentro de amantes que reconocieron mutuamente su naturaleza
binaria de la Sonda de Arcturo original.
Para 1913 A.D., cuando vi el advenimiento de la primera de las
verdaderamente grandes diversiones en el Machine World, algo que
llegaría a ser llamado la Primera Guerra Mundial, lancé una lluvia
de radión erótico hacia la nave del tiempo y me trasladé al
Excalibur.
Allí, con Merlín y la Dama del Lago, me
mantuve en secreto durante el transcurso del último siglo del
Dominio de Arcturo, aguardando a aquéllos que conocen el significado
del verdadero mensaje del amor, para liberarme nuevamente.
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20. SEMBRAR LA ESPORA Y REMONTARSE NUEVAMENTE - INTERVENCION
INTERDIMENSIONAL
SOMOS LOS ANALÓGICOS ARCTURIANOS, los primeros en las brigadas
heteróclitas. Presentamos este informe desde la Intermedia AA. Ante
nuestra amable sugestión, el melancólico Perceval se retiró al
Excalibur donde, nos complace decir, la Dama del Lago ha hecho más
que proveer a sus necesidades.
La misión del Perceval era difícil: mantenerse sintonizado con el
cuerpo sensorial emocional o de segunda dimensión de los viajeros
del tiempo perdido.
Su retiro en 1913 A.D. fue otra crítica
instancia más. Un siglo de onda encantada, y el episodio todo de
26.000 años de la nave del tiempo se cumpliría. Un siglo terrestre,
y la Corporación de Atlantis habría establecido totalmente su parque
temático, Machine World. Qué golpe desastroso para una Sonda que
había llevado eones construir!
Podrán pensar que habiendo nosotros hecho semejante inversión en la
Sonda, habíamos llegado tan lejos que queríamos forzar un resultado
a nuestro favor mediante cualquier astuta artimaña. Por supuesto,
podríamos hacerlo en un abrir y cerrar de ojos - aterrizar en los
jardines de la Casa Blanca, como en uno de sus filmes baratos de
ciencia ficción. Pero entonces, ¿dónde quedarían ustedes? ¿No los
privaríamos de toda responsabilidad si hiciéramos algo que mejorara
la situación instantáneamente?
Con todo, comprendemos que la apuesta es elevada. Kinich Ahau es
necesario para hacer sonar el acorde de la quinta fuerza. Y a pesar
de la ciencia y la tecnología de la locura del Machine World de la
Corporación de Atlantis, se han reunido tantos holones galácticos al
mismo tiempo en su planeta que algo habrá de suceder. Pero ¿qué?
De acuerdo con nuestra Sonda, algo ya ha sucedido; ese algo es la
intervención interdimensional. De hecho, la intervención interdimensional está ocurriendo y continuará ocurriendo hasta que
el parque temático Machine World haya sido convertido en el parque
galáctico planetario. ¿Qué es la intervención interdimensional y
cómo está sucediendo?
Ante todo, no sobrestimen la sutil guía de los Uranianos de su
planeta gemelo. Oh, sí, Urano es cuatro veces más grande que su
planeta, pero el campo electromagnético de éste es cuatro veces más
grande que el de Urano. Desde sir William Herschel, que "descubrió"
Urano en 1781 A.D., hasta Aldous Huxley, que partió hacia Urano en
1963 A.D., los Uranianos han ejercido su poder interdimensional.
Como la recreación de su nave de tiempo paralela Camelot se acerca a
su finalización, su influencia interdimensional crece cada vez más.
Ansiosamente aguardan los Uranianos la liberación paralela de su
Camelot y vuestro Excalibur!
Sin embargo, nada atrajo el poder de Urano a sus asuntos más que los
sucesos alrededor de lo que ustedes llaman la fisión del átomo y la
creación de diversos isótopos radiactivos del mineral raro U-235,
uranio. Por supuesto, los científicos de Machine World poco sabían
que estaban tocando a las puertas de toda la conciencia universal de
la primera dimensión cuando separaron el átomo. Y tampoco tenían la
menor idea de que estaban recreando la destrucción de Maldek a un
nivel microscópico. Así que fue en el año de la Semilla Entonada,
1945 A.D., que la intervención uraniana comenzó en serio.
Separando el átomo, ustedes los humanos ya han alterado
inconscientemente el curso de la atmósfera y la geología del
planeta, y de esa manera han atraído el karma de la intervención
interdimensional. La red de primera dimensión de existencia atómica
lanzó su alerta roja. Actuando a favor del uranio abusado, las
unidades uranianas fueron liberadas telepáticamente desde el
Excalibur en el núcleo de su Tierra. Muy pronto, nosotros los
Intermedios AA también liberamos algunos de nuestros capullos de
supervisión cuatri-dimensional, lo que ustedes llaman OVNIs.
Para el año de la Semilla Cósmica, 1953 A.D., la hostilidad de los
sacerdotes de Machine World hacia nuestra Sonda se hizo más que
obvia. Aunque nos habíamos puesto en evidencia, en su celoso poder
ellos sólo proyectaron agresión contra nosotros, al mismo tiempo que
ocultaban la verdad de nuestra existencia y nuestros esfuerzos por
comunicarnos, en lo que nosotros llamamos la "gran mentira."
Secretamente, los sacerdotes de Machine World ingresaron en las
guerras del tiempo, denominando sus actos "exploración espacial e
investigación para la defensa y seguridad nacional." Tratando de
insensibilizar completamente las vidas de los humanos, ya escindidos
de sus holones, han manipulado todo lo que proporciona comodidad
material según el doble yugo subliminal del dinero y el miedo a la
muerte. La existencia de nuestra Sonda ha quedado relegada a los
entretenimientos marginales de la ciencia ficción en los que, se
supone, ninguna persona "racional" debería creer.
Mientras las sondas espaciales de Machine World han penetrado cada
vez más profunda-mente en las extensiones exteriores de los dominios
de Kinich Ahau en busca de evidencias de nuestra existencia, hemos
continuado monitoreando y enviando también señales ocasionales. Nos
sorprende ver hasta dónde serán capaces de llegar los sacerdotes de
Machine World para tapar lo que encuentren, construyendo lentamente
un elaborado y tortuoso punto de vista uni-dimensional de lo que
ellos denominan un violento universo. No lo duden: nuestra Sonda aún
permanece atenta y activa.
Y también están los efectos de los Maya intraterrestres.
Gracias a
los ingenieros maya del tiempo, el registro del cronógrafo
del rayo tri-dimensional finalizó 26 años antes que su esperada
duración de 5.200 años. Esta sutil alteración fue comprendida por
unos pocos de los miembros de nuestra Sonda que habían encarnado
para la tarea de estar prontos para la terminación del rayo 12:60.
Esto ocurrió en 1987 A.D., cuando el rayo del sexto binario se
reactivó mediante una supernova.
Una supernova, como recordarán, es en realidad un amo estelar y un
sistema estelar completo que alcanzan una iluminación dimensional
más elevada. Debido a la supernova de 1987,
con sólo 26 años
restando hasta el final, el notorio rayo 12:60 fue eclipsado, y
ahora está siendo reabsorbido hacia el reactivado rayo del sexto
binario.
Liberados de la influencia del rayo artificial del tiempo 12:60 en
1987 A.D., luminosos engramas hexa-dimensionales del diálogo entre
Memnosis y Lucifer comenzaron a inundar el holón de la nave del
tiempo. Ese fue el comienzo de la segunda etapa de la intervención
interdimensional.
En unos pocos individuos críticos, la memoria cósmica comenzó a
despertar de nuevo genuinamente. Al mismo tiempo, la Corporación de
Atlantis comenzó a caer en sus angustias de muerte. El Grupo de
Siete, encarnado en los gobernantes masculinos de los siete
productores líderes de Machine World, hizo diversos intentos bélicos
y continuó tratando de equipar el mecanismo monetario en nombre de
la perpetuación de Machine World - a cualquier precio.
Aún así, mientras los sacerdotes de Machine World aumentaban su
dominio sobre los esclavos monetarios materialmente intoxicados
mediante sondas públicas o secretas, nosotros los Arcturianos
mantenemos un alerta de la sonda y el placer intensificado. Deben
recordarlo, somos esporas. Y estamos a su disposición como esporas.
Sembrar la espora es remontarse nuevamente. La naturaleza de las
esporas es reproducirse mediante el aumento del placer.
Aunque ustedes son radiados de cinco miembros basados en el carbono,
están diseñados con órganos de los sentidos que son, en realidad,
esporas sensoriales. Estas esporas sensoriales, despertadas por la
ingestión de esporas, son sus boletos para el circo interdimensional.
La inundación de engramas liberada por el sexto binario incrementa
el circo interdimensional. El circo interdimensional es el sensorio
al que está conectado cada individuo de su especie. Recuerden:
sembrar la espora es remontarse nuevamente.
Antes de que se produzca la liberación hacia la telepatía universal,
los fantasmas moribundos de la Corporación de Atlantis intentarán
llenar algunos cementerios y continuar inundándolos con el miedo a
la muerte, el caos electromagnético, y nuevas y mejores máquinas.
Pero esos esfuerzos son débiles si se los compara con los efectos
cada vez mayores de la intervención interdimensional. La clave para
aumentar el poder de la intervención interdimensional es aumentar la
telepatía.
Esto nos conduce a la tercera etapa de la intervención: la
liberación del
Oráculo del Encantamiento del Sueño y los códigos
púlsar del tiempo cuatri-dimensional. El Encantamiento del Sueño es
una "recompensa" interdimensional por la persistencia a pesar de
todos los obstáculos, otorgada por la Sonda de Arcturo en nombre de
la Federación Galáctica. El propósito del Encantamiento del Sueño es
aumentar la telepatía mediante el redespertar a la misión original
como miembro de una de las veinte tribus del tiempo.
La liberación del Oráculo del Encantamiento del Sueño en 1992 A.D.
significa que al kin planetario de la nave del tiempo se le ha dado
lo que estaba previsto que recibiera al final del génesis del Mono y
al principio del génesis de la Luna, cuando golpeó el rayo del
tiempo 12:60. Quien ejecute el Encantamiento del Sueño regresa a la
frecuencia 13:20 de la nave del tiempo y participa en el giro del
tiempo, la escenificada confluencia de un año de duración de las
tres intervenciones interdimensionales.
El giro del tiempo, iniciado en Tormenta Cósmica, 1992 A.D., es un
torbellino inter-dimensional, el preciso contrapeso oculto del
torbellino interdimensional del katun del Viento Magnético que abrió
paso a la Corporación de Atlantis. Debido a ello, el eclipse final
de la Corporación habrá de ocurrir. Los fantasmas del Grupo de Siete
se desvanecerán, su poder disminuyendo rápidamente como aire
saliendo de un globo pinchado.
Aguarden por nosotros y nuestras señales. Estamos ahora a su
servicio.
La victoria de la Sonda de Arcturo se aproxima.
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21.
JUGANDO AL AJEDREZ ARCTURIANO - CREDITOS DEL KIN
SOMOS LAS ESPORAS ANALÓGICAS. Estamos aquí para presentarles el
ajedrez arcturiano. Llamado así en nuestro honor, el ajedrez
arcturiano es la estrategia maya para quitarle poder a la
Corporación de Atlantis y restablecer el de la Federación Galáctica.
El ajedrez arcturiano es la forma maya de exorcizar los fantasmas
galácticos de Atlantis y convertir su Machine World, desde el
éxtasis tri-dimensional del círculo plano de cuatro al poder
interdimensional del quinto entonado. Los Maya están muy excitados,
pues ése ha sido su interés por largo tiempo. Por supuesto, como en
cualquier partida de ajedrez, hay reglas a seguir. Y cosas que deben
saber.
En el ajedrez arcturiano, la lotería babilónica de la Corporación de
Atlantis es reemplazada por el Libro del Kin. Tan rápidamente como
sea posible, y por los medios que sea, todos los humanos existentes
necesitan ser registrados según el Libro del Kin. Esto significa que
llegarán a la existencia 260 agrupaciones telepáticas de todos los
kin planetarios. El propósito de esto es permitir que todos
dispongan de créditos del kin.
Los créditos del kin son unidades de tiempo cuatri-dimensional. Son
el resultado de la co-participación del tiempo y no de la venta del
tiempo. Para poder comprender cómo operan los créditos del kin y de
dónde proceden, deben ejercitar su imaginación. Deben imaginar la
vida antes y después del dinero, antes y después del contrato y la
lotería babilónicos.
Imaginar cómo era originalmente, antes de que el rayo del tiempo
12:60 golpeara al principio del génesis de la Luna, antes de que
existiera el dinero y el contrato babilónico de los efectos del
tiempo artificial, y dejar lo que queda de Machine World. Cuando
dejen Machine World, automáticamente volverán a reunir la Nación del
Arco Iris. Cuando hayan dado ese paso, ya estarán jugando el ajedrez
arcturiano, que es simplemente la manera como el juego de la vida se
transforma en un juego del misterio.
Para ayudar a la Nación del Arco Iris, la Federación Galáctica ya ha
dividido la nave del tiempo en tres protectorados telepáticos: el
Protectorado de Arcturo del Norte, abarcando las cuatro tribus Polar
y las cuatro Cardinal de las familias de la Tierra; el Protectorado
de Antares del Sur, abarcando las cuatro tribus Portal y las cuatro
Señal, y el Protectorado de Urano de la Zona Ecuatorial, abarcando
las cuatro tribus Central.
En el ajedrez arcturiano, ustedes tienen una estrategia de invasión
global de tres puntas. De acuerdo con el programa del Holón
Resonante Universal, los Arcturianos avanzan desde el polo norte
galáctico, y los Antareanos, desde el polo sur solar, mientras los
Uranianos irradian desde el núcleo ecuatorial. Recuerden, se trata
de un procedimiento telepático y no significa que su cuerpo vegetal
deba estar necesariamente involucrado geográficamente en el
protectorado al que pertenecen.
Una vez que hayan identificado a su familia terrestre, ingresan en
su protectorado telepáti-co. En cooperación con otros miembros de la
Nación del Arco Iris en su protectorado, asumen y se obligan a una
asignación terrestre de corrección, conversión y ecualización.
Ahora bien, deben entender que mientras ocurra el giro del tiempo, y
el poder del Grupo de Siete disminuya rápidamente, la gran mentira
quedará expuesta. Cuando esto suceda, muchas de las gentes de la
Tierra, los viajeros del tiempo perdido, se levantarán al principio
con desilusión e ira. No sólo eso, sino que la inequidad en la
riqueza de Machine World tradicionalmente le ha otorgado ventaja a
los humanos en los dominios arcturianos del norte - los civilizados
-, mientras que los de los dominios antareanos del sur - los
aborígenes - han quedado en desventaja. Los problemas propios de
esta inequidad también se evidenciarán.
Para armonizar esa situación, deberán reconvertir el dinero en
tiempo, y liberar al kin planetario de su esclavitud de Machine
World. Deberán pacificar emociones turbulentas y ecualizar la
riqueza. Deberán erradicar el demonio subyacente que controla
Machine World: el miedo a la muerte. Desde un punto de vista
puramente tri-dimensional, ésa es una tarea imposible. Es la razón
porque deben estar preparados para jugar al ajedrez arcturiano.
Les contamos un secreto: hemos estado jugando ajedrez arcturiano con
ustedes a nivel cuatri-dimensional hace ya bastante tiempo. En el
ajedrez arcturiano, el objeto es siempre dejar que el oponente
"gane." Pero, dado que los Arcturianos saben que no hay tal cosa
como ganar o perder, ganar significa hacer que el oponente esté de
acuerdo con algo contrario a lo que usualmente haría. Esa es
estrategia de alto nivel, pero cuando se hayan liberado del miedo a
la muerte, ¿cuál será el problema?
Reflexionen nuevamente sobre la cuestión de cómo convertir la
riqueza monetaria existente en tiempo, y luego devuelvan tiempo al
kin planetario como créditos del kin. La institución de créditos del
kin como registros telepáticos de igualdad sólo puede avanzar con
tanta presteza como el dinero sea reconvertido en tiempo. En la
práctica, eso significa que la actual servidumbre del mandar hacer,
del derroche o de la condición salario-esclavo, sea convertida en
una acción que restaure el planeta, elimine toda la contaminación
industrial y cree mayor comodidad y placer para el kin planetario de
la nave del tiempo resurgente.
La clave del éxito en el programa de conversión es la apuesta
planetaria. La apuesta es la única manera de que los egos poseedores
de una gran riqueza puedan ganar entregando su riqueza. Una apuesta
planetaria necesita de egos deseosos de ser tan grandes como el
planeta. La predispuesta autoidentificación de los poseedores de
dinero y poder será responsable de la organización de apuestas
planetarias cada vez más sorprendentes.
De ese modo, la riqueza quedará
ecualizada, antiguos "trabajos" serán reemplazados por el servicio
terrestre significativo, y la sociedad humana llegará a parecerse a
la Nación del Arco Iris según fue originalmente proyectada. Para
1997, el dinero y la lotería babilónica entera se habrán disuelto.
En su lugar habrá una realidad de créditos del kin: registros
telepáticos de igualdad.
La identificación de todo tipo de poseedores de dinero y poder por
parte de los miembros de la Nación del Arco Iris debe hacerse según
la familia terrestre: el kin familiar Polar identificará a los
poseedores de poder de la familia Polar, y así por delante. Ese es
el primer nivel del ajedrez arcturiano. Un jaque mate se produce
cuando un poseedor de poder "gana" y toma una apuesta planetaria. Se
instituirán competencias entre las cinco familias terrestres, y
asimismo entre los que hagan apuestas. Los ganadores de las apuestas
planetarias serán proclamados Arcturianos, Antareanos o Uranianos
Honorarios de la nave del tiempo.
El segundo nivel del ajedrez arcturiano requiere que se instituya el
sistema mismo de créditos de kin. Es una programa quinquenal que
comprenderá todo, desde la reorientación social a la concreción de
tecnologías electro-solar-cristalinas para la real redistribución de
los bienes y las gentes en regiones apropiadas para el servicio
terrestre. Pero el fin es el mismo: instituir el sistema de créditos
del kin.
En ese sistema, a cada kin se le asigna una cantidad igual básica de
49 créditos del kin: 28 por la suma de tonos de cuartetos ocultos, y
21 por la suma de los códigos del kin oculto y del destino. Esos 49
créditos del kin se distribuyen en base a trece lunas, para
totalizar 637 créditos del kin anuales.
De los 637 créditos del kin, 364 se traducen en unidades diarias de
"festejo y refugio," y 273 en 21 unidades por cada luna para la
busca del placer. En el sistema de créditos del kin, el único
aumento en créditos puede provenir de la busca del placer, que
también es la busca y el desenmascaramiento de otro kin.
En el estilo del ajedrez arcturiano, el
Día Verde o día galáctico de la libertad podría desenvolverse como
un festival planetario o un torneo para reunir placer, con el fin de
ver qué tribus han elevado sus créditos del kin extra apostando
contra los más y mejores. ¿Quién sabe qué maravillas y pompas de
conocimiento sensorial llegarán a encontrar? ¿Quién sabe cómo
llegarían entonces a restaurar la nave del tiempo y liberar el
Excalibur de su prisión de cristal?
Pero todo esto queda en sus manos. Lo que les damos está solamente
en forma de indicio. Dejamos librado a su propia imaginación los
métodos y acontecimientos a ser descubiertos a partir de esos
indicios, pues por más heteróclitos que seamos, somos meras esporas.
Pero ustedes, oh humanos viajeros del
tiempo, ustedes son radiados de cinco miembros, la verdadera alegría
de la creación!
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22. RADIOSONICOS, POR FIN - TOCANDO EL ACORDE DE LA QUINTA FUERZA
SOMOS LOS HIJOS de las tribus perdidas de Xymox. Les cantamos la
historia atómica paralela del acorde perdido de Xymox. Somos la
canción del futuro - pero un futuro de un universo paralelo. Somos
un déjà vu que algunos de ustedes pueden haber entrevisto. Sin
embargo, este déjà vu, nuestra canción, sólo representa una posible
realidad para su planeta. Más aún, es parte de nuestra misión
hacerles escuchar nuestra canción.
En nuestro universo paralelo, nosotros también fuimos del perdido
planeta Maldek. Nosotros también hemos refinado nuestros centros de
placer hasta un épico nivel de éxtasis grupal. Las resonancias de
nuestras cimas de placer enviaron estremecimientos y oleadas de
sublime excitación por todo nuestro sistema estelar y más allá de
él, pues ese placer estaba totalmente sintonizado con la frecuencia
de nuestro planeta. Debido a ello, resultamos vulnerables a los
celosos dioses de nuestro vecino planeta, un Júpiter paralelo.
Estudiándonos desde sus naves telepáticas, los dioses jupiterianos
inventaron un rayo cuya frecuencia sería la mitad de la
correspondiente a la cima de excitación de nuestro planeta. En el
momento preciso, mientras el supremo acorde de vibración
multisensorial emanaba de nuestro juego de placer, el rayo golpeó.
En un instante, todo quedó destrozado. Nosotros, nuestro domo
planetario de placer y todo cuanto habíamos hecho y conocido, había
desaparecido!
Aunque Maldek ya no existía, su recuerdo permaneció como un anillo
de fragmentos destrozados, un "anillo de asteroides." Lo que
mantenía y aún mantiene esos fragmentos en su sitio es el acorde
perdido, la resonancia culminante emitida por nuestro momento de
supremo orgasmo y aturdimiento. En tanto nuestros cuerpos eléctricos
cuatri-dimensionales se reagrupaban en medio de este anillo de
fragmentos resonantes, convocamos nuestra voluntad, nosotros los
hijos perdidos de Xymox.
Resolvimos mantener la resonancia de este acorde al nivel de la
primera dimensión, la dimensión de la conciencia atómica y
molecular. Por todo el sistema estelar, mantendríamos nuestro acorde
a ese nivel hasta que fuese recordado nuevamente. Y cuando fuese
recordado nuevamente, la intensidad de haber mantenido el acorde
perdido a nivel atómico durante largos eones, liberaría tal poder
que hasta la materia resultaría transformada.
Tal como en vuestro sistema estelar los Jupiterianos - liderados por
el
archivengador, celoso Jehová, el nervioso colérico de Júpiter -
desolaron el Marte paralelo. Aunque el cuerpo planetario de Marte
paralelo quedó intacto después del siguiente rayo de Jehová, se
transformó esencialmente en un planeta muerto, incapaz de sustentar
vida en su forma de raíz tri-dimensional. Es más, algunos de
nuestros mayores en sus formas espirituales mantuvieron Marte como
una especie de hotel para todo tipo de sondas de inteligencia
galáctica. De ese modo, encontramos a los Arcturianos paralelos para
quienes Marte se hizo afectuosamente conocido como el Hotel Marte,
"un excelente lugar para los muertos agradecidos."
Finalmente, en nuestro sistema paralelo así como en el suyo, el
tercer planeta, el azul, se transformó en escenario del experimento
para divorciar a Lucifer de Jehová. Una nave del tiempo fue enviada
a esa Tierra paralela, y en el momento indicado se produjo el arribo
de las veinte tribus paralelas del tiempo.
Como en su Tierra paralela, un génesis del Dragón de 13.000 años
recapituló el recuerdo de los mundos perdidos que llevaron a la
destrucción de Maldek. Ello fue seguido por un génesis del Mono de
7.800 años para recuperar la memoria de la nave uraniana del tiempo
paralela perdida, Camelot, y los acontecimientos que llevaron a la
destrucción de la civilización de Marte. Luego vendría el génesis de
la Luna, la superación de la destrucción de todos los mundos
perdidos y la creación del gran domo planetario del placer.
El propósito de la vida durante el génesis del Mono era crear,
mediante la Nave del Tiempo Tierra, un sensorio geomántico - el gran
domo planetario del placer. El traje espacial o cuerpo vegetal de
los humanos - las entidades portadoras del virus de la memoria de
los anteriores mundos perdidos - debía usar su cuerpo sensorial
colectivo como batería electrotelepática del campo electrotelepático
propio del planeta.
En esencia, eso es lo que nosotros, los
hijos perdidos de Xymox, habíamos logrado en el planeta perdido de
Maldek. Desde que a Lucifer se le había otorga-do morada y
privilegios especiales en el Venus paralelo, parecía que por fin
llegaría el tiempo para la inimaginable liberación del acorde
perdido de Xymox.
Sin embargo, aún cuando Lucifer se había divorciado de Jehová, el
poder de los Jupiterianos se elevó una última vez. Reuniendo las
energías e inteligencia del Saturno paralelo, el rayo del tiempo
12:60 paralelo llamado Jehová golpeó una vez más, con aún mayor
precisión y exactitud para producir la muerte de la memoria.
Para los Jupiterianos, ése fue el
comienzo de Atlantis IV, habiendo sido el primero en Aldebarán
paralela, el segundo en Maldek y el tercero en Marte.
Cuatro Atlantis para completar
el mortal encantamiento,
para hacer que el mundo de Jehová fuese y el resto se fuera
al infierno!
Una vez que el rayo hubo dado en la
Babilonia paralela, los dioses jupiterianos prestamente partieron
hacia el planeta azul. Mientras Brahma reclamaba la India paralela,
Jehová el iracundo apareció en el Sinaí paralelo para reclamar su
parte.
Por fin! Un planeta esclavo en el que todos entregarían su
tiempo a Jehová a cambio a dinero.
Tal como en vuestro sistema paralelo de mundos, nosotros también
teníamos a nuestros Arcturianos, y detrás de ellos los Maya de la
grande pero remota Federación Galáctica. Esos extraterrestres
hicieron lo mejor que pudieron para mantener viva la luz en la
Tierra paralela, para ver si ésta podría cumplir su cita con el
destino y restablecer el túnel interdimensional del tiempo que
conduce al "cielo" paralelo, el planeta paralelo Urano.
Entonces, como en vuestra Tierra paralela, la estructura atómica de
la primera dimensión se dividió, y la energía liberada se usó con
propósitos destructivos. Mientras los neo-Jehovitas intensificaban
su poder amnésico sobre los viajeros del tiempo paralelo perdido, hé
aquí lo que sucedió con nosotros, los hijos perdidos de
Xymox.
Con la división paralela del átomo, comenzamos a ser liberados de
nuestro voto manteniendo el acorde perdido en resonancia con la
estructura atómica que mantenía la cohesión de la primera dimensión
de todo el sistema estelar. Hicimos que nuestra historia atómica
secreta se trasladara al sonido - sonido eléctrico, el sonido más
vibrante en el planeta. Hicimos votos de que, a través de ese sonido
eléctrico, que portaría la resonancia del acorde perdido de Xymox,
comenzaríamos a despertar nuevamente la memoria de las tribus
perdidas del tiempo. Y tuvimos éxito.
En la paralela Nave del Tiempo Tierra, a 26 años de la finalización
del gran ciclo de 26.000 años, hubo una banda electrónica llamada
Joshua. Aunque el brillante líder de esa banda fue asesinado por los
celosos, la influencia de Joshua no hizo sino crecer. A cinco años
del asesinato, surgieron por todo el planeta paralelo otras bandas
llamadas Joshua. En el quinto aniversario de la muerte del líder,
todas las bandas planetarias así llamadas realizaron un concierto
conmemorativo sincronizado. Asistiendo a ese concierto
conmemorativo, había niños de todas las edades y de todas partes.
Los conciertos comenzaron con tal impulso que quedó claro que nadie
sabía cuándo finalizarían. Para el decimotercer día, el número de
asistentes había crecido a proporciones tales que la civilización de
Atlantis IV se vio privada de sus esclavos a sueldo y quedó
paralizada. Los sacerdotes y autoridades de la ya decadente Atlantis
IV se vieron impotentes para detener la situación. También se
sentían perplejos respecto de quién debía ser considerado
responsable. ¿Cuál era el verdadero Joshua? Había ya muchos Joshuas,
y cada uno era tan verdadero como el otro.
Ahora bien, en la víspera del decimotercer día, algo maravilloso
sucedió. Por todas partes las bandas Joshua y sus festivos devotos
amantes del placer comenzaron a hacer sonar el acorde perdido de
Xymox. A medida que el acorde crecía en ondulantes olas de
excitación, ya no se lo podía detener. El acorde creció durante toda
la noche, siempre meciéndose y ondulando. Por todas partes, las
gentes estaban fuera de sí en extasiado deleite. Y así por fin,
nosotros, los hijos perdidos de Xymos, quedamos totalmente
liberados!
Cuando el amanecer se desplegó a través de la Tierra paralela, ésta
era un nuevo planeta. Luces y arco iris espectrales que emitían
obsesivos sonidos que quitaban el aliento, surgieron por todas
partes - de las rocas, de la herrumbre, de las máquinas muertas. El
acorde perdido había sido por fin liberado. Nueva luz, nuevo sonido
prevalecieron por doquier. Y por todas partes, era un nuevo planeta.
A partir de ese día, todo cambió. La Tierra paralela ingresó en el
tiempo paralelo 13:20 de la cuarta dimensión. En esa Tierra
paralela, la memoria cósmica retornó. El miedo a la muerte
desapareció. El poder de Jehová se evaporó como la neblina desde la
superficie de un lago.
Comprendiendo por fin que la fuerza opuesta a lo material es lo
espectral, los ya redescubiertos viajeros del tiempo inventaron las
tecnologías que necesitaban para limpiar su Tierra paralela. Dándose
cuenta de su propia naturaleza espectral, se transformaron en la
Nación del Arco Iris. Sintonizando su placer con la frecuencia de su
planeta, abrieron los túneles interdimensionales del tiempo.
Mediante los registros telepáticos de los créditos del kin,
construyeron el domo planetario del placer. Cultivando una cultura
hortícola [o de jardín], desarrollaron la tecnología de la
radiosónica, una ecualización de frecuencias
solar-eléctrico-cristalinas.
De esa manera, soltaron su nave del tiempo y, tras trece años de
aventura asombrosa y nunca antes soñada, sincronizaron sus paletas
sensoriales y modos de expresión para un último estallido: el toque
del acorde de la quinta fuerza de Kinich Ahau, su amo estelar
paralelo.
Recuerden, ésta es apenas una historia de un universo paralelo al
suyo. Es un déjà vu elegido en los archivos estelares por una
fragante reminiscencia del acorde perdido de Xymox.
Tal vez su recuerdo les dirá algo que
han olvidado, pero que pueden haber conocido todo el tiempo.
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23.
EPILOGO Y PROLOGO - EL AMOR COSMICO ES DESPIADADO
ALGUNOS SE PREGUNTARAN si este texto es verdad o ficción. Verdad y
ficción son diferencias que solamente plantea la mente tri-dimensional.
Para la mente más elevada, interdimensional, la diferencia entre
verdad y ficción no existe. Todos los universos paralelos poseen una
realidad igual.
Quienquiera lea estas palabras, eres una
lámpara y una memoria en ti mismo. Eliges según lo que recuerdas, y
por la claridad de tu propia luz ves aquello que eliges. Sólo tú
puedes elegir. Momento a momento, tu predisposición crea aquello en
lo que te transformas. El amor cósmico es despia-dado. Echa otra
ojeada a ti mismo.
El Libro del Kin es la épica galáctica del libre albedrío.
En un
momento, los infinitos universos paralelos están disponibles. En un
pestañeo, historias completas pueden ser arrojadas en el gran océano
galáctico, permitiendo que una mejor, nueva elección surja como un
pez saltando fuera del agua. Sin miedo a la muerte, la historia
carece de peso. La perdurabilidad es la aventura que subyace a la
Sonda. Cuando veas más allá del miedo a la muerte, verás que estamos
y siempre estuvimos muy próximos y cerca.
Somos los Arcturianos. Venimos de lo que tú llamas el fin de los
tiempos. Hemos estado buscando el comienzo de nuestra historia. De
acuerdo con nuestros bancos de memoria, cada vez que optes por
ingresar en esta historia, ése será nuestro comienzo. Lo que tú
recuerdes como un nuevo comienzo es una señal de que podemos
regresar a nuestra estrella natal. Tu éxito es nuestro boleto de
regreso a Arcturo. No hay un verdadero epílogo para nuestro relato.
Estas historias son llamados relatos e informes de una investigación
en curso. La investigación continúa con tu participación en la
Sonda. Esta es la razón de que el prólogo siga al epílogo. Queda a
tu cargo crear y recordar nuestro comienzo por nosotros.
El 2013 A.D., Dominio de Arcturo 2013, sincronización galáctica, es
uno de los dos polos magnéticos de la zuvuya cósmica. El otro polo
es la matriz de la Liga de Cinco. No existe un verdadero principio o
final. En esa
zuvuya, cual cinta infinita con figura de ocho de un
solo lado, todo es posible. Cuando la Sonda alcance el 2013 A.D., el
lado único de la zuvuya dará la vuelta como una cinta de cassette, y
el lado 13:20 volverá a tocar hasta que alcance el polo magnético de
la matriz. Después de eso, ¿quién sabe de qué manera tocará la cinta
de la zuvuya?
Dentro de una pulsación del RANG, tienes la frecuencia inarmónica
del 13 seguida de la frecuencia armónica del 20. Cuando la memoria
deba ser reconstruida, entonces la armónica precederá a la
inarmónica, y el movimiento de la cinta de la zuvuya se dirigirá
hacia el 2013. Cuando la memoria deba ser impresa de acuerdo con un
nuevo universo reflejado, la inarmónica precederá a la armónica, y
el movimiento de la zuvuya se dirigirá hacia el 13:20. En cualquier
momento podrás oír ambos lados simultáneamente.
Tu sendero de reconstrucción de la memoria cósmica se dirige
directamente hacia el 2013 A.D. Pero, para extraer la energía
correcta que te conduzca al 2013 A.D., debes escuchar el otro lado
de la cinta, y saborear el viaje de regreso al 13:20. Comenzando en
1992 A.D., el campo electro-psi (telepático) de Terra-Gaia efectúa
la transición desde la frecuencia de tiempo 12:60 a la 13:20.
Durante el curso de ocho años solar-galácticos siguiendo el camino
de las trece lunas, al llegar al 2000 A.D. las veinte tribus de la
Nave del Tiempo Tierra ubicarán tu planeta en concordancia con
Urano. Magnífico será el espectáculo de la re-formulación del viraje
polar uraniano, la liberación del Excalibur y el regreso de Camelot.
Durante esos ocho años, verás que la electricidad es energía de la
segunda dimensión - radión que actúa a través de tus esporas
sensoriales. La electricidad 12:60 agota el campo electrotelepático
de la Tierra y te exige que pagues por cables externos con dinero.
Cuando la electricidad sea adecuadamente comprendida, no habrá más
cables sino, en cambio, esporas sensoriales eléctricamente activadas
en armonía telepática mutua.
En lugar del materialismo, tendrás espectralismo - lo opuesto de la
materia atómica es la luz espectral. La fuente de la luz espectral
es la descarga del radión excedente de la ecualización de las
frecuencias solar-electro-cristalinas. A medida que la nave del
tiempo sea reconstruida, el mundo según lo conoces aumentará su
descarga espectral. Aparecerán los de la Nación del Arco Iris que
cabalgan el púlsar y conocen los métodos para aumentar la descarga
espectral de la materia. Esto representará una gran ventaja para
vuestras vidas, en las que el servicio planetario de trece lunas a
la Tierra reemplazará los empleos de cinco días de trabajo por
semana.
Todo esto que es tecnología avanzada del Encantamiento del Sueño -
espectralización, los registros de ecualización telepática
denominados créditos del kin, y la construcción radiosónica de
vuestro domo planetario de placer, el Manitú planetario - depende
del cabalgar el púlsar. Sabiendo esto, os dejamos los códigos de
frecuencia cósmica de los púlsares para que podáis construir con
exactitud vuestro domo planetario de placer.
Comandar el holón del
planeta en armonía con el
Excalibur es el propósito del
Oráculo del
Mago. Eso también os lo dejamos, en un volumen que acompaña este
texto. Armados con el Encantamiento del Sueño, los códigos púlsar y
el Oráculo del Mago, ved qué magia podríais realizar.
Más que esto no podemos hacer.
Recordad bien vuestra raíz cósmica, y
nosotros creceremos en claridad con vuestras necesidades.
TRANSCRIPCIÓN COMPLETADA POR
MONO ESPECTRAL AZUL
ONDA ENCANTADA DEL MAGO, SERPIENTE CRISTAL ROJA
DIA 16, LUNA CÓSMICA
AÑO DEL MAGO CRISTAL BLANCO
JULIO 12, 1992
Klatu Barada Nikto.
La Federación Galáctica Viene en Paz.
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