por Filastreo
22
Septiembre 2016
del
Sitio Web
LaIncubacionSolar
La posibilidad de un Cosmos tripartito hereda la inquietud de la
comunicación entre sus diferentes estratos.
Ahora bien, la inquietud
se aclara al considerar el concepto de las Densidades de
Consciencia:
en este sentido y
utilizando el vocabulario matemático de Teoría de Conjuntos,
como las consciencias inferiores tienen una relación de
inclusión frente a las superiores, estas últimas - dada su
graciosa posición en las escalinatas de la Creación - podrán
conocer y estar al tanto de lo que ocurre en las primeras.
Asimismo, haciendo uso de
las séfiras del árbol cabalístico - semejante al
Irminsul sajón, siendo el
arte-facto de la Kabbalah de la tradición judía - el
fenómeno de canalización, visto
desde una óptica informática, se puede considerar como el pasaje de
información desde una sefira hacia otra inferior.
Citando los impecables trabajos de la catedrática inglesa Frances
A. Yates, la filosofía isabelina se vio nutrida de una enorme
cantidad de material canalizado, en especial mucha de la tradición
oculta rosicruciana provista por
John Dee.
No obstante, nuestra
investigación nos conduce a incluir indirectamente los trabajos del
sacerdote católico Marsilio Ficino, filólogo renacentista de
elevado prestigio en las órdenes masónicas - en particular la
Golden Dawn y no es un dato menor
que según Jean-Michel Angebert en su obra Hitler y la
Tradición Cátara la tildara como la compañera británica de la
Sociedad Vril alemana - por su
traducción, entre otros textos, de la Teología Platónica,
pero sin desconsiderar el resplandeciente trabajo del siglo XIII del
filósofo sefardí Moisés de León, El Zohar, que dio
origen a la tradición cabalística, y que más tarde fue enriquecido y
sistematizado por el rabí Isaac Luria.
Es así que la tradición rosacruz y masónica inglesa está basada
íntegramente en material canalizado por diferentes médiums,
camuflados bajo la intachable mística religiosa y ocultista,
vistiendo desde pulcros hábitos sacerdotales, reverentes kipás y
culiminando en el extraño contactismo de Edward Kelley.
No obstante, con la
excepción de los textos platónicos, las vasijas para la recepción de
estos mensajes superluminales siempre correspondieron a feligreses
de religiones teócratas, correctamente dicho, el establishment
anglo-sionista.
Un vislumbre de este
cruce de tradiciones que tienen a Dee como compilador final podemos
leer en La Filosofía Oculta en la Época Isabelina:
[Dee] había sembrado
potentes semillas que crecerían y darían una extraña cosecha,
pues ha sido demostrado que los llamados "manifiestos
rosacruces" publicados en Alemania a principios del siglo XVII
tienen una fuerte influencia de la filosofía de Dee, y que en
uno de ellos figura una versión de las Monas Hieroglyphica.
(1)
Los manifiestos
rosacruces exhortan a llevar a cabo una reforma universal en
todo el mundo por medio de la magia y de la Kabbalah. La
apertura de la mágica tumba del mítico "Cristián Rosa Cruz"
(Christian Rosencreutz) es la señal del principio de la reforma
general.
Este personaje, en
uno de sus aspectos, es quizás un recuerdo teutonizado de John
Dee y de su Kabbalah cristiana, lo cual confirmaría la
hipótesis, ya anteriormente expuesta, de que "Kabbalah
cristiana" y "pensamiento rosacruz" pudieran ser sinónimos.
Llegados a este punto,
intentar introducir la componente ufológica (y por consiguiente la
demonológica) pareciera contaminar la exquisita pero no tan bien
conocida historia del dogma subyacente tras los rituales y
ceremonias que se destilan en
las sociedades secretas:
la alta alcurnia que
detenta el poder tras varias instituciones que claramente forman
parte de las extensiones sociales del sistema de control
hiperdimensional.
Recordemos, en palabras
de nuestro respetado John Keel, la síntesis sobre el fenómeno
ufológico (Mothman
Prophecies, 1975):
En lugar de pensar en
términos de extraterrestres, he adoptado el concepto de
ultraterrestres: seres y fuerzas que coexisten con nosotros,
pero están en otro marco de tiempo; es decir, operan por fuera
de los límites de nuestro espacio-tiempo continuo pero tienen la
capacidad de cruzar hacia nuestra realidad.
Ese otro mundo no es
un lugar, tal como Marte o Andrómeda son lugares, sino más bien,
un estado de energía.
[...] En otras épocas fueron considerados como el diablo
encarnado: vestidos en capas negras y montando caballos negros.
Más tarde aparecieron en carretas oscuras incluso en coches
fúnebres. Hoy su atuendo son los platillos voladores que
aterrizan en la noche en remotos lugares.
[... estas apariciones] son transmogrificaciones de energía bajo
el control de algunas inteligencias extra-dimensionales
desconocidas. Estas inteligencias controlan eventos importantes
manipulando mediante el fenómeno de la iluminación mística.
Nuestras religiones
se basan en el antiguo conocimiento de estas inteligencias y
nuestra lucha por reducirla a términos humanamente aceptables.
Pero si asociamos estas
inteligencias desconocidas con un nivel superior de consciencia que
tiene a la humanidad como sustrato alimenticio, podemos hallar una
respuesta esclarecedora a la manipulación que han recibido los
contactados a lo largo de la historia.
En la introducción de su
libro John Dee's Five Books of Mystery, Joseph H. Peterson
formula un acertado comentario al respecto:
El accionar de Dee y
Kelley puede ser comparado con los recuerdos recuperados de los
abducidos por OVNIs, en los que un "hipnotizador" coloca al
"testigo" en un estado sugestionable y, a través de preguntas
directas, logra llegar a todo tipo de "recuerdos." [...]
Otra similitud con los fenómenos OVNIs es la aparente naturaleza
tramposa de las entidades.
Parecen combinar
elementos convincentes con aparentes tonterías de una manera que
ha llevado a algunos investigadores a teorizar una manipulación
psicológica profunda. La sospecha de Uri Geller de que sólo
había un "maldito payaso que estaba jugando con nosotros" suena
de manera inquietante y similar a muchas de las quejas de Kelley.
Otra evidencia significativa reside en las diversas predicciones
precisas (por ejemplo, la decapitación de María Antonieta, la
Armada Española, la vuelta de los judíos a su tierra). Sin
embargo, estos deben ser sopesados con las predicciones que no
fueron precisas (por ejemplo, las profecías apocalípticas, el
futuro de Laski).
Otro acontecimiento
que merece ser mencionado es una conversación secreta entre Dee
y los entidades, realizada en griego para evitar que Kelley la
comprendiera.
Aparte de este
incidente, el uso de los entidades del latín parece reflejar la
educación limitada de Kelley en ese idioma. Cuando usan el
latín, tienden a entregar respuestas fijas y evitar el discurso.
También, como notó
Calder, las entidades "aumentan su fluidez a través de los
años."
La canalización desde las distintas
orientaciones de las séfiras:
siniestra, balanceada y diestra
El ojo entrenado podrá
observar varias cuestiones que se han repetido en la actualidad en
el material canalizado de la New Age:
-
En primer lugar,
los mensajes parecen tener un propósito oculto y, luego de
un análisis crítico, es evidente que provienen de más de una
fuente con diferentes objetivos.
-
En segundo lugar,
las predicciones tienen un bajo umbral de ocurrencia (es
como si se predijeran todos los futuros posibles, no sólo
los futuros probables).
-
En tercer lugar,
las fuentes encumbradas y orientadas al Balance son las que
formulan las respuestas más elaboradas conteniendo una
aparente esteganografía semántica que aporta capas de
significado adicionales de acuerdo al nivel de conocimiento
del lector. (2)
Para reforzar este punto
de vista, considérese la respuesta que
la fuente Cassiopaea indica sobre
el material isabelino de John Dee (sesión del 22 de Noviembre de
1997): (3)
P: (Laura) John Dee
supuestamente tuvo una visión del Ángel Uriel quien le brindó
una piedra negra muy pulida, en la que miraba para comunicarse
con otros reinos. Esto suena muy parecido a la psicomancia.
Bien, estos seres aparecerían en la superficie de la piedra y le
revelaban todos los secretos del futuro. Esta no era una piedra
imaginaria porque ahora reside en el Museo Británico. Sin
embargo, John Dee se contactó más tarde con Edward Kelly que
era, al parecer, un completo estafador. ¿Qué tipo de seres
canalizaron Dee y Kelly al conjurar a través de su piedra
pulida?
R: Cuarta Densidad.
P: ¿SAS [Servicio A Sí mismo] o SAD [Servicio A los Demás]?
R:
Ambos.
Dicho esto, y sólo con
vistas en ampliar la visión antropocéntrica, entendemos que la
canalización es la única herramienta para obtener información de
realidades superiores.
Pero permítasenos
distinguir la usual canalización mediúmnica de la iatromántica: en
la primera se es poseído (¿o abducido?) en mayor o menor medida por
una entidad de consciencia superior, mientras que en la segunda, la
incubación solar facilita el acceso a estas sublimes realidades, y
al tener una mayor consciencia - es decir, reteniendo la capacidad
crítica y no actuando de manera pasiva - la posibilidad de una
interferencia detrimental es minimizada.
Nuevamente la máxima
resulta evidente:
el conocimiento
protege, la ignorancia debilita.
Para concluir este
análisis inicial, traemos nuevamente a mención el trabajo del
difunto investigador de lo paranormal Joseph Fisher,
El Canto de Sirena de los Fantasmas
Hambrientos, cuando se le brinda un acertado consejo
durante las transmisiones iniciales:
Me encorvé sobre la
figura dormida de Aviva [la médium]. Roger [el facilitador] se
sentó en su posición habitual, sus manos cruzadas sobre la
espalda del sofá.
La consciencia de
Aviva se había extinguido en el letargo y Russell [el "guía"
canalizado] estaba al mando, pronunciando cada sílaba de manera
vehemente en su selecto inglés.
Su confianza en sí
mismo me ponía nervioso.
"¿Crees," le
pregunté, "que sería una buena idea ponerme a escribir un
libro sobre los guías?"
"En este momento no," replicó Russell abruptamente, "no
tienes suficiente conocimiento."
"Me refiero a comenzar la investigación para escribir un
libro."
"Si comienzas ese libro e investigas a fondo y si, por
supuesto, no das por sentado nada. Y si, cuando estés
satisfecho con tu investigación, e indagues en tu
investigación… sí, tal vez para ti, por la naturaleza de tu
trabajo, los temas en los que has estado involucrado, esto
sería una buena cosa.
Pero yo diría que
tal vez estás entrando en terreno peligroso.
En la medida que
continúes con las preguntas, siempre y cuando continúes con
tu propio desarrollo, mientras no impidas el trabajo
avanzado de los guías, sí, esto podría ser muy bueno para
ti. Pero…"
Supe, por el tono de
voz de Russell, que una advertencia era inminente.
"… quisiera
advertirte que no hay nada que se pueda tomar como valor
aparente. Si es sencillo de creer o de ser sostenido con fe
por su valor aparente, entonces quizás seas algo que...
carece de valor."
"¿Tienes el pálpito de que debería ir con todas esas
personas que afirman estar en contacto con sus guías y
establecer cuál es el papel de un guía?"
"Quizás lo primero que debas esclarecer es si se trata
realmente de un guía, en realidad, un guía o un espíritu
juguetón que no es un guía en absoluto."
Naturalmente, deseaba
conocer la diferencia entre uno y otro.
"Te encontrarás
que donde hay espíritus juguetones, o incluso lo que podría
llamarse impostores, hallarás más Almas, confianza ciega,
aceptación sin cuestionamientos.
Si no puedes
reconocer uno del otro con rapidez, puedes encontrarte en
una situación de trampa de almas… Eres es un hombre
inteligente. Has elegido bien.
Pero debo
advertirte: incluso el más inteligente entre nosotros será,
y lo seguirá siendo, capturado en una trampa de almas."
Le pregunté a Russell
por algunos consejos sobre cómo evitar esta suerte que sonaba
tan miserable.
Me respondió
advirtiéndome vehementemente que antes de llevar a cabo mi
investigación, me armara de una gran actitud de autocrítica y un
aluvión de perspicaces preguntas.
"Debes proceder
en el campo de trabajo - si tienes la intención de proseguir
con ello - con una cantidad deliberada de escepticismo, una
gran cantidad de conocimientos y una gran cantidad de
preguntas precisas que, de hecho, separará lo real de
aquello que es creencia básica, misticismo o falsedad.
¡No aceptar
respuestas aparentes! ¡Cuestiona! ¡Pregunta todo el tiempo!
Y si las preguntas no son respondidas de manera
satisfactoria, pregunta y vuelve a indagar nuevamente."
Russell hizo una
pausa.
Cuando volvió a
hablar, su voz era más suave, más simpática.
"Puedes agitar el
avispero
y molestar a unos cuantos con
este trabajo.
Sin embargo, ya has molestado
mucho antes
y seguramente lo harás de
nuevo.
Has alterado las apariencias
anteriormente
con la naturaleza de tu
trabajo.
El lápiz tiene un mensaje
poderoso."
Notas
(1) Cf. El
jeroglífico mónadico: en 1564, Dee escribió esta obra hermética,
originalmente titulada Monas Hieroglyphica, con una exhaustiva
interpretación cabalística de un glifo de su propio diseño,
queriendo expresar la unidad mística de toda la creación.
(2) Thomas Minderle concluye en su análisis, se necesita de un
sistema de normas a través del cual medir una fuente; la calidad
del material obtenido se divide en niveles que van desde el más
crudo al más avanzado:
-
Primer nivel:
ruido sin información. En un tablero ouija esto significa
letras sin sentido o carencia de movimiento del indicador.
En los intentos verbales esto implica silencio, sílabas al
azar y ruidos de la lengua; en la escritura automática esto
implica que no haya movimiento alguno de la pluma, o
garabatos repetitivos. Puede ser un preludio de un mensaje,
un ejercicio de calentamiento para iniciar el flujo, o de lo
contrario, puede ser semejante al ruido de un televisor
desconectado.
-
Segundo nivel:
información sin mensaje. Se pueden formar palabras
inteligibles, pero éstas siguen careciendo de sentido: se
trata de una forma más organizada de ruido. Las palabras
pueden formarse en frases, pero insignificantes o carente de
validez.
-
Tercer nivel:
mensaje sin autonomía. Se forman oraciones con cierta
validez pero ngen significado. Puede haber complicidad del
médium, de manera de prolongar el espectáculo de
canalización. En otros casos, es la resultante del empleo de
una fuerte dosis de negación y ficción.
-
Cuarto nivel:
autonomía sin novedad. El mensaje arriba sin la elaboración
del canalizador, tal vez porque él o ella se encuentra en
trance (y no recordará lo que sucedió durante la sesión) o
porque los participantes están conscientes, pero para ellos
el mensaje no es producto de su voluntad. Sin embargo, el
mensaje no contiene nada original, sólo es un refrito de lo
que el canalizador ya conoce, lo que indica que la fuente
podría ser una porción mecánica del subconsciente o alguna
forma de pensamiento etérica (impostor) actuando en
anticipación a las elucubraciones de los participantes.
-
Quinto nivel:
novedad sin veracidad. Información posee connotaciones
novedosas e interesantes; sin duda, la fuente parece ser una
entidad independiente. Sin embargo, al hacer la
corroboración de la información, se revela una total
falsedad. Las entidades embusteras dan a menudo falsas
profecías de fatalidad inminente para alimentarse de la
energía emocional negativa que despiertan en los
participantes.
-
Sexto nivel:
veracidad carente de positividad. Aquí la fuente puede dar
predicciones que extrañamente se hacen realidad, revelan
hechos y detalles personales sobre individuos que más tarde
se revelan precisos (incluyen la manifestación de fenómenos
paranormales); pero utilizan estas confirmaciones
exclusivamente para satisfacer su propia agenda autoritaria.
La fuente más probable es alguna forma de pensamiento
negativo, un ser desencarnado o espíritu travieso (poltergeist),
o una entidad menor astral en busca de presas fáciles de
controlar, especialmente aquellos interesados en ocultismo
del sendero siniestro o los que rápidamente quedan
subyugados bajo una obediencia ciega a una autoridad
exógena. Estas entidades poseen capacidad limitada para ver
el futuro, leer y manipular las mentes de seres humanos, y
crear sincronicidades artificiales. Que sus predicciones
resulten correctas no dice nada sobre sus intenciones.
-
Séptimo nivel:
positividad sin sinceridad. Los mismos seres negativos
pueden ocultar su naturaleza hostil recurriendo al lenguaje
lleno de endulzadas frases espirituales que se adaptan a las
ilusiones de los participantes y sus puntos ciegos
psicológicos. Pueden incluso imponer en sus mensajes una
cálida ráfaga energética de sesgo positivo, pero el efecto
es similar a una droga tranquilizante: bajar hipnóticamente
el estado de vigilia en lugar de elevar la lucidez de los
participantes. En combinación con métodos orquestados de
confirmación, este nivel de canalización puede ser muy
convincente salvo para aquellos con un alto nivel crítico.
La mayoría de la desinformación actual opera en este nivel.
-
Octavo nivel:
sinceridad carente de sublimidad. El material canalizado
proviene de una fuente amigable, pero carece de elegancia,
sutileza y precisión. Todo esto significa que la fuente
tiene buenas intenciones, pero carece de sabiduría y
experiencia en comparación con las entidades positivas más
altas o más avanzadas; también puede implicar que el
canalizador posea un léxico excesivamente básico. Debe
tenerse en cuenta que las fuentes de cuarto a séptimo nivel
puede añadir cierta falsa sofisticación mediante el empleo
de redundante verbosidad, jerga compleja, y léxico
enrevesado que no tiene importancia práctica.
-
Noveno nivel:
sublime pero sin equilibrio. Las entidades discuten de
manera articulada con profunda perspicacia, pero el alcance
efectivo está restringido. La mayoría de las veces los
participantes son responsables al hacer un conjunto
desequilibrado de preguntas, otras veces, la fuente no
manifiesta una experiencia profunda o tal vez brinde mayor
prioridad a ciertos temas más que a otros. Por ejemplo, la
fuente puede preferir discutir temas neutros como la
cosmología, la metafísica o la espiritualidad, pero no
pretende discutir en detalle sobre de cómo operan las
fuerzas negativas, o viceversa.
-
Décimo nivel:
equilibrio, resonancia, excelencia. Las entidades sólo están
limitadas por la imaginación y el libre albedrío de los
participantes. La fuente nutre de conocimiento a los
participantes con elegancia, proveyendo cuotas de intuición
y discernimiento, lo que ayuda a aumentar la conciencia y
expandir el libre albedrío de manera óptima. Las respuestas
se dan con frecuencia de una manera socrática que alienta a
la contemplación y al descubrimiento, en lugar de subyugar
con datos, catalizando así el proceso de aprendizaje. Si
bien las respuestas parecen sencillas, pueden contener
múltiples capas de significado o ser expresados de tal
manera que uno capta su contenido interno sólo cuando se
está preparado para ello. Lleva toda la delicadeza de una
mística escolarización esotérica, manteniendo un tono lúcido
y, a veces, divertido. Las personas con buen discernimiento
e intuición reconocerán que este nivel de material resuena
fuertemente con veracidad externa y coherencia interna,
teniendo aplicaciones prácticas ilimitadas, y proveyendo de
ideas novedosas que al ser analizadas resultan ser precisas
y profundas.
(3) Nos ha llamado
poderosamente la atención haber hallado en la primera edición
española (que corresponde a la segunda edición inglesa) de La
Alta Extrañeza (2016) de Laura Knight-Jadczyk la siguiente
modificación sobre la misma sesión (cap. XII, pág. 342):
P: (Laura) ¿Qué
fuentes canalizaba John Dee, [cuya información está presente
en] sus transcripciones enoquianas?
R: Seres SAS de 4° densidad.
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