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			por Thierry Meyssan 
			del Sitio Web
			
			RedVoltaire 
			
			 
 
			
			 
 
			La ministro qatarí también estuvo en Gaza. 
 Es evidente que si Qatar puede dar órdenes al Hamas, ya no puede seguir ocultando su propia responsabilidad en el ataque del 7 de octubre. 
 En otras palabras, 
 Pasemos en revista rápidamente el curriculum vitae de Qatar. 
 
 
 
			 
 Al separarse del Imperio británico, el primer emir de Qatar, Khalifa ben Hamad Al-Thani, se vuelve hacia Francia y comienza a desarrollar su país con un marcado sentimiento de desconfianza hacia los ingresos fáciles provenientes de los hidrocarburos. 
 Pero, en 1995, el primer emir es derrocado por su hijo, Hamad ben Khalifa Al-Thani. 
 El nuevo emir concluye una serie de acuerdos para la explotación y la comercialización del gas, y también del petróleo, principalmente con, 
 
			El 
			dinero fluye entonces en grandes cantidades hacia las arcas del 
			emirato. 
 
			Ese canal de televisión vía 
			satélite, Al-Jazeera, logra un éxito inmediato, participa 
			intelectualmente en el movimiento pro-paz israelí pero, durante las 
			guerras de Estados Unidos contra Afganistán e Irak, sus reportes se 
			convierten en la pesadilla cotidiana de Washington. 
 Después de ese despliegue, el Pentágono no tarda en hacerle entender al emir Hamad ben Khalifa Al-Thani que tiene que abstenerse de desafiar a Estados Unidos. 
 El emir se despierta una mañana con hombres de las fuerzas especiales estadounidenses en sus aposentos. 
 
			Un oficial estadounidense le asegura que los soldados de Estados 
			Unidos están allí para protegerlo de un hipotético golpe de Estado. 
			El emir capta el mensaje y, en adelante, se somete a las 
			exigencias de sus "protectores". 
 Los hermanos Frydman se retiran del canal y este será entonces completamente reformateado por la firma de consejería JTrack (el director de JTrack fue el 'Hermano' Mahmoud Jibril), que pone a la cabeza de Al-Jazeera a Wadah Khanfar, miembro de la Hermandad Musulmana. [1] 
 Poco a poco, este personaje censura toda crítica contra el "imperialismo americano", llegando incluso a retirar de las transmisiones ciertas imágenes de los crímenes perpetrados por las tropas estadounidenses en Irak. 
 Después de haber perdido varios de sus periodistas bajo las balas y las bombas de las fuerzas de Estados Unidos, Al-Jazeera se convierte en vocero de las potencias anglosajonas y da la palabra al islamismo sunnita. 
 
			En 
			2009, Wadah Khanfar viaja a Estados Unidos, donde lo reciben los 
			personajes más destacados de la élite dirigente estadounidense. 
 El palestino Wadah Khanfar, miembro de la Hermandad Musulmana, deja Al-Jazeera para pasar a presidir un think tank turc denominado Al-Sharq Forum. 
 El primer ministro de Qatar, Hamad ben Jassem ben Jaber Al-Thani, asume el mando en Al-Jazeera, que se pone inmediatamente al servicio de la OTAN, convirtiéndose en la principal herramienta de su propaganda en el mundo árabe. 
 Al-Jazeera ofrece entonces una visión parcializada de las agresiones contra Libia y contra Siria, transformándose en portavoz de la Hermandad Musulmana. 
 
			El imam 
			Yussef al-Qaradawi se convierte en el predicador oficial de Al-Jazeera 
			y explica a su público que hoy Mahoma estaría indudablemente del 
			lado de la OTAN. 
 Pero también utiliza su poder financiero para reactivar guerras. 
 Por ejemplo, aporta 2 000 millones de dólares a Sudán, gobernado por el miembro de la Hermandad Musulmana Omar al-Bashir, para que este último retire de Siria a su enviado especial, el general Mohamed Ahmed Mustafá al-Dabi, [2] quien, después de haber desempeñado un digno papel como pacificador en la región de Darfur, había sido nombrado presidente de la Misión Internacional de la Liga Árabe en Siria. 
 
			El general Al-Dabi 
			y sus colaboradores habían tenido acceso a todo lo que habían 
			solicitado ver en Siria y habían llegado a la conclusión, en un 
			informe preliminar, de que los medios occidentales mentían y que no 
			había ninguna "revolución" en Siria. 
 
 
 
			 
 Esa "guerra fría" entre monarquías del Golfo ha sido objeto de interpretaciones incorrectas. 
 
			El Financial Times afirma que estuvo vinculada a una oscura historia 
			de pagos de rescate, otras fuentes la atribuyen a una declaración 
			del emir Tamim ben Hamad al-Thani, favorable al uso del islam con 
			fines políticos, práctica que comparten la Hermandad Musulmana e 
			Irán. 
 Al-Sissi, quien fue director de la inteligencia militar egipcia, había estudiado esos documentos y comprendió cómo podía utilizarlos después de oír el discurso pronunciado en Riad, el 21 de mayo de 2017, por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, contra el terrorismo de la cofradía. 
 Al-Sissi transmitió entonces al rey de Arabia Saudita los documentos de la Hermandad Musulmana que tenía en su poder. 
 Aquellos documentos demostraban que la Hermandad Musulmana y Qatar se habían concertado para derrocar al soberano de Arabia Saudita, Salman ben Abdelaziz Al-Saud. 
 La revelación tuvo el efecto de una bomba para el rey y para su hijo: 
 El 5 de junio de 2017, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Egipto y Bahréin, seguidos por el gobierno yemenita de Abdrabbo Mansur Hadi, por el gobierno libio de Tobruk, por el gobierno de la República de Maldivas y el de la Unión de las Comoras, rompen sus relaciones diplomáticas con Qatar y cierran sus fronteras terrestres, aéreas y marítimas con ese emirato. 
 El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, acusa a Qatar de financiar "el extremismo religioso". 
 Qatar cuenta entonces con el apoyo de Turquía y Marruecos, del Hamas, de Irán y de Alemania, donde el Guía Nacional de la Hermandad Musulmana goza de importantes contactos en el ministerio de Exteriores. 
 
			En África, Níger y Chad apoyan a Arabia 
			Saudita. 
 Trump organiza el acercamiento entre Marruecos e Israel y el fin de la "crisis del Golfo"... y se entierra la polémica sobre el islam político. 
 
 
 
			 
 En una carta dirigida al primer ministro egipcio de aquella época, Hassan El-Banna describe sus 3 objetivos: 
 La Hermandad Musulmana (llamada en árabe Ikwan, o sea la "cofradía") es una sociedad secreta organizada según el modelo de la Gran Logia Unida de Inglaterra. 
 
			Lo poco que se sabe de su acción proviene de 
			testimonios de ex miembros o de documentos ocupados después de sus 
			derrotas. 
 El Reino Unido y Estados Unidos no tardaron en recurrir a los políticos de la Hermandad Musulmana, 
 ...y a sus milicias, como, 
 
			Al llegar a la 
			Casa Blanca, 
			
			Barack Obama designó un miembro de la Hermandad 
			Musulmana, Mehdi K. Alhassani, como miembro del Consejo de Seguridad 
			Nacional para garantizar un vínculo permanente con la cofradía. 
			[5] 
 Cuando Arabia Saudita rompe definitivamente con la Hermandad Musulmana, en 2014, Qatar reemplaza espontáneamente al reino como proveedor de fondos. 
 Sin disponer de los mismos medios que el poderoso reino saudita, el emirato qatarí se convirtió entonces en el gran suministrador de fondos, con la aprobación de Estados Unidos. 
 En 2018, Qatar garantizó los salarios de los funcionarios del Hamas en la franja de Gaza. 
 
			En 2022, el actual presidente estadounidense, 
			
			Joe Biden, confiere a 
			Qatar el rango de "aliado mayor fuera de la OTAN", honor reservado a 
			una decena de países en todo el mundo. 
 Referencias 
 
 
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