21
Agosto 2023
del
Sitio Web
SputnikNews
Versión en italiano
Bandera de Uruguay,
imagen referencial.
Uruguay, una de las economías
más pequeñas de Sudamérica, logró convertirse en el primer miembro
del Banco de
los BRICS, después de Brasil.
En diálogo con Sputnik,
el analista uruguayo Nicolás Pose aseguró que el,
"Banco de los BRICS
podría venir a llenar el vacío que ha dejado en parte el Banco
Mundial".
En septiembre se cumplen
dos años desde que Uruguay comenzó a formar parte del Nuevo Banco
de Desarrollo fundado en 2015 por el bloque BRICS, integrado por
Brasil, Rusia, la India, China y Sudáfrica.
La Junta de Gobernadores del Nuevo Banco de Desarrollo (NDB
por sus siglas en inglés) admitió a Uruguay como miembro, junto a,
Bangladesh, Emiratos
Árabes Unidos y Egipto en 2021,
...marcando el comienzo
de la fase de expansión de la entidad financiera como institución
multilateral global.
Así, una de las economías
más pequeñas de Sudamérica fue la primera de la región en conseguir
una posición que hoy es ansiada por países vecinos.
"La búsqueda de
Uruguay de ingresar al NDB de los BRICS debe entenderse como
parte de una estrategia más amplia del país de diversificar las
fuentes de financiamiento con las que cuenta para emprender sus
distintos esfuerzos de desarrollo", dijo a Sputnik el doctor en
ciencia política Nicolás Pose.
En efecto, antes de la
incorporación al Banco de los BRICS, Montevideo había sido aceptado
como miembro del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura
(AIIB) en mayo de 2020.
Para el experto, el país sudamericano busca sumar nuevos lazos más
allá de los que mantiene con los mecanismos de financiamiento
tradicionales, como con el Banco Interamericano de Desarrollo
y el Banco de Desarrollo de América Latina.
"La aparición de un
nuevo jugador en el escenario de los prestamistas multilaterales
que supone el NDB de los BRICS implica para el país una
diversificación de las oportunidades de acceso al crédito",
apuntó Pose.
En esto coincidió la
también experta en relaciones internacionales Nastasia Barceló.
Para la analista
uruguaya, hay cierta conciencia en los países latinoamericanos que
han atravesado procesos de integración - sobre todo en Brasil
y Argentina - de tener otras fuentes de financiamiento
para generar desarrollo sostenible, principalmente para proyectos de
infraestructura.
"Uruguay
históricamente ha tenido una vocación de buscar alternativas de
financiamiento", afirmó y calificó de positivo que el país
busque opciones más allá de las tradicionales.
La admisión de
Montevideo,
"se transforma en una
posibilidad o en una oportunidad para las inversiones en el
país, pero también para inversiones que impliquen una
interconexión internacional, transnacional" sostuvo,
...algo que tiene cada
vez mayor importancia en un mundo globalizado.
Al respecto, Pose destacó que, en su intento de
diversificación, Uruguay no solo emprende una búsqueda de vínculos
económicos y financieros, sino también políticos.
Una
alternativa "sin entrometerse en asuntos internos"
Ambos analistas consideran que el objetivo de la membresía del NDB
es ampliar las opciones a la hora de buscar financiamiento, aunque
la postura política de la entidad supone una vinculación distinta
que con el resto de los organismos.
"Uno de los objetivos
que están planteados como tal es ser una alternativa a las
instituciones que colocan condiciones bastante complejas para
los países, sobre todo en desarrollo, y que ya no solo tienen
que ver con aspectos financieros o económicos, sino también con
el régimen político", sostuvo Nastasia Barceló.
La experta agregó que el
NDB rechaza la idea de,
"entrometerse en los
asuntos internos de los estados", una práctica usada por el
Banco Mundial o el
Fondo Monetario Internacional,
que le "dictan a los países lo que deben hacer".
Sin embargo, el contexto
político también impacta en que el NDB se sitúe como una alternativa
real, dado que su impulso,
"ha dependido de los
vaivenes políticos que se han sucedido en la región".
Para Nicolás Pose, la
posición que adquiera el NDB va a estar condicionada o asociada,
"al volumen de
financiamiento que pueda movilizar la institución en la medida
que este banco se constituya como una plataforma que movilice
montos importantes".
"Desde la perspectiva de Uruguay, el nuevo banco de desarrollo
de los BRICS podría venir a llenar el vacío que ha dejado en
parte el Banco Mundial, en la medida que en los últimos años ha
tendido a enfocarse en aquellos países de menor desarrollo
relativo, dejando a los países de media renta alta y los países
de renta alta, como Uruguay, con menos alternativas de acceso al
crédito", apuntó el experto.
Hasta el momento, el NDB
ha aprobado un total de 96 proyectos de infraestructura, que superan
los 32.800 millones de dólares.
Una nueva
etapa de expansión
La admisión de Uruguay es signo de que la cartera del NDB
está comenzando a desplegarse, luego de un proceso que demoró seis
años.
"En este momento el
NDB está en un momento de expansión que tal vez era una fase que
se esperaba que estuviera culminada tiempo antes", sostuvo
Barceló.
La analista remarcó que
el Banco superó un periodo en el que se mantuvo bastante paralizado
y ahora se encuentra en plena fase de ampliación, por lo que se
analiza la admisión de nuevos miembros.
En ese contexto,
Argentina espera la confirmación de la entidad financiera para
ser incluida como miembro.
"Se hablaba de la
expansión de los BRICS ya por el año 2015 o 2016 y llegamos a
2023 con un banco que, si bien está aumentando en este momento,
no lo hizo antes.
Esta fase está un
poco desfasada a lo que se buscaba al inicio", apuntó la
experta.
Para la analista el
desarrollo de la entidad financiera se relaciona con "los valores
políticos de los países de la región" y, en ese sentido, se ha
puesto al NBD como prioridad en algunos gobiernos más que en otros.
Durante la Administración en Brasil de Jair Bolsonaro
(2018-2022), por ejemplo,
"los BRICS no
estuvieron en agenda, no tuvo el énfasis que hubo en los
gobiernos de Dilma Rousseff (2011-2016) y Luiz Inacio Lula da
Silva (2003-2010)", explicó.
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