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30 Mayo 2020
del Sitio Web
IlMessaggero
traducción de
Biblioteca Pleyades
Versión original en italiano
Información similar en italiano
Información enviada por NM
Chalecos naranja,
protestas en la plaza:
"No a Europa, volvamos a la lira"
Extrema derecha y covid-escepticismo, ira social y aspiraciones
autárquicas, crisis económica y el regreso de
los chalecos naranja.
De Milán a Bolonia,
de Turín a Roma hoy el ala más dura del anti-gubernamentalismo
salió a la calle.
El grito es
"libertad", incluso de la obligación de usar la máscara, porque
"el virus es un truco" utilizado para imponer un nuevo orden
social.
Entonces, inicia la
primera gran protesta en el país, con la cara descubierta, desde el
estallido de la pandemia.
E inmediatamente las
identificaciones y controles empezaron, y llegarán las denuncias por
violar la prohibición de reunión y por manifestaciones no
autorizadas.
Cientos de los "chalecos"
acudieron a la Piazza Duomo dirigidos por el ex-general de los
Carabinieri Antonio Pappalardo, que ya se ha acercado al
movimiento "Forconi".
Las consignas son anti-gubernamentales
y anti-europeas:
no al ejecutivo de
Conte, sí a un "gobierno votado
por el pueblo" e incluso a un "retorno a la lira italiana".
El alcalde de Milán,
Giuseppe Sala, se dirigió al prefecto:
deben ser denunciados
porque una manifestación como esa "es un acto de
irresponsabilidad en una ciudad que lucha por salir de la
situación en la que se encuentra".
También condenado por el
líder del grupo M5 de Lombardía Marco Fumagalli:
"Si mañana las
infecciones aumentaran, ¿quién sería el responsable?".
Le pedí al prefecto
de denunciar a los organizadores del evento llamado "chalecos naranja".
Un acto de irresponsabilidad en una ciudad como Milán que se
esfuerza tanto por salir de la difícil situación en la que se
encuentra.
- Beppe Sala (@BeppeSala) 30 de mayo de 2020
Cuando te digan que vuelvas a la cuarentena en
un mes, no culpes al gobierno y a Europa.
Agarrenselas con estas personas exaltadas que
hoy en la plaza en MILÁN están pidiendo un
regreso a la lira. #GiletArancioni
pic.twitter.com/S0xAjm2YcH
- Gabriel De
Gaetano (@GabrielSorrento) 30 de mayo de 2020
El senador de LeU Francesco Laforgia se dirigirá
directamente al Ministro Lamorgese, porque,
"la plaza no debía
ser otorgada a Pappalardo".
El mismo clima,
En Turín, la
manifestación se desarrolla sin problemas, pero aquí también se
enfrentan al descubierto.
En Bolonia, la
policía tuvo que intervenir para garantizar el distanciamiento.
En Florencia, en
cambio, los "chalecos" en la plaza, pero casi todos con
máscaras.
Sin embargo, en Roma,
donde se organizó la protesta más turbulenta, el número de denuncias
e identificaciones son 70 en numero y también se están examinando
las sanciones relacionadas con el Covid:
además de la falta de
máscaras, en la calle se sentían acentos de todas las regiones,
desafiando la prohibición de la movilidad.
En la capital, el evento
se puso negro:
Unas 200 personas en
la Piazza Venezia, liderando el grupo 'Marcia su Roma', pero
también representantes de
Casapound.
Intentaron llegar a
Montecitorio pero fueron bloqueados por escudos policiales con
equipo antidisturbios, no sin unos momentos de tensión.
Luego, en un intento
de sortear el cordón de escudos, llegaron, en una procesión
improvisada, casi al Vaticano y luego fueron embotellados,
identificados y dispersados.
Un grupo, sin embargo,
decidió permanecer indefinidamente en la Piazza Venezia
("ocupémoslo, instalemos las carpas") donde la protesta comenzó
temprano en la mañana y donde por la tarde alguien también trató de
alejar un carro blindado que bloqueó el camino.
Cabezas rapadas,
tricolores, camisas nostálgicas, algunos 'chalecos':
"Hay personas que no
han recibido su salario durante tres meses, tenemos hambre -
dijeron - somos personas respetables, todos italianos.
Estamos
desesperados".
Sin embargo, para quienes
lideran la protesta, la crisis responde a un plan específico del
gobierno:
"El virus es un
caballo de Troya, no existe", explica uno de ellos, "nos están
haciendo ir en quiebra. No sé cuál es su plan, quieren rehacer
las reglas sociales, vendernos a China.
Quieren confinarnos y
registrarnos a todos ".
E incluso en este caso,
el ala izquierda de la política se ha vuelto en contra.
Dice Laura Boldrini
(Pd),
"no usar máscaras y
no respetar las distancias de seguridad como lo hacen Pappalardo
en Milán y Casapound en Roma es una desfiguración hacia las
víctimas".
"La tolerancia del
Ministerio del Interior para estas cifras - añadió el líder de
Rifondazione Maurizio Acerbo - es muy grave e
inquietante.
Las locas tesis que
afirman son parte del repertorio de Trump, Bannon
y Bolsonaro".
"El virus es un
caballo de Troya, no existe - explica uno de ellos - Nos están
haciendo ir de quiebra. No sé cuál es su plan, quieren rehacer
las reglas sociales, vendernos a China.
Quieren confinarnos y
registrarnos a todos".
Protesta en el Campidoglio por comerciantes
(foto de Paolo Caprioli / Ag.Toiati)
Alemania
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