por
Enrique Pérez Porter
17 Noviembre 2008
recibido por Email
Parte 1 - el
personaje
Hablar de esta entidad es meterse en aguas profundas, es cierto. Y
peligroso además, por tratarse del genocida más grande registrado,
confeso con pleno cinismo, seguramente debido a la condición de
impunidad que se autoconfieren los dictadores… pero, por otra parte
es un deber del alma, hacerlo, sacar la careta y dejar al desnudo lo
horrible…
De hecho, mucha gente confunde a Jehová con Aquella Inmensa Entidad
Mencionada Como DIOS… Diferentes versiones de la Biblia conducen con
facilidad a ese error, al mencionar su nombre seguido del epíteto
divino… otras en cambio, dejan a Jehová o Jahvé, según lo escrito
original, es decir las letras hebreas que constituyen el núcleo
conceptual de aquel nombre.
Textos más antiguos que la Biblia misma han venido en ayuda para
comprender mejor la mitología encerrada tras las palabras bíblicas.
Y no se piense que con la palabra ‘mito’ se intenta peyorar texto
alguno.
La señora Blavatsky dice en alguna parte:
“La leyenda es una
flor que se abre con la fuerza de la fe…”
Entonces, al confrontar
antiguos registros históricos, dictados por sus protagonistas a los
incipientes cronistas humanos, o atestiguados como parte de los
acontecimientos cotidianos de aquellos tiempos, nos encontramos con
un Jehová—dos en realidad—histórico, que de verdad vino a este
cuerpo planetario como parte de una misión espacial.
La tarea en sí, alejada estaba de ser la ‘creación del hombre’… Se
trataba de algo mucho más técnico, concreto y específico, como es el
trabajo de minería para extraer oro. Y el ‘hombre’—nosotros—fue
producido más tarde como respuesta a una necesidad de mano de obra,
no debido a un mandato explícito de la Deidad, aunque es indudable
que Su Voluntad escondida tras las apariencias era esa.
Jehová formaba parte, como comandante de un grupo de alienos venidos
desde el misterioso
Planeta X que la Astronomía sabe que existe y
necesita encontrar para explicar las anomalías orbitales de Urano y
Neptuno. Con el redescubrimiento de Plutón en 1930, se creyó tener
la respuesta, mas a poco caminar y debido al exiguo tamaño y masa de
Plutón y su acompañante Caronte, los cálculos demostraron el error y
desde entonces a la fecha, la búsqueda ha sido un continuo.
Al
respecto, se sospecha de un cuerpo descubierto en 1983 por el IRAS
(un telescopio satelital infrarrojo) que parece cumplir con las
cualidades físicas para ejercer las desviaciones orbitales señaladas.
Sin embargo la noticia, aparecida como una nota pintoresca en un par
de periódicos del momento, fue acallada con la prontitud del caso
cuando la opinión pública es considerada impropia para conocer la
realidad de los hechos: el cuerpo planetario descubierto es unas 4
veces mayor que la Tierra, y se dirige hacia el núcleo de nuestro
Sistema solar, lo que lo convierte en un peligro potencial y por
ende el conocimiento masivo de su existencia podría derivar en
crisis mundial de histeria.
La insistencia y porfía de muchos observadores mundiales en este
descubrimiento tiene un fundamento serio al comparar el lugar
celeste y las características físicas de la observación, con los
antiquísimos textos sumerios que describen al planeta original de
donde provino la misión espacial a la Tierra. Hay plena coincidencia
entre lo descrito por
las tablillas de Súmer y lo develado por el
IRAS. Esto nos coloca en el sendero de la realidad, sin duda, al
tiempo que explica la aparente digresión al hablar del IRAS y su
silenciado hallazgo.
Según
Andy Lloyd, investigador británico, este cuerpo planetario
forma parte del séquito que acompaña a una estrella enana café,
binaria de nuestro Sol.
Es
una buena teoría que complementa y
explica ciertas ‘anomalías’ en relación a los registros ‘históricos’
del regular acercamiento de este planeta, que los sumerios llamaron
‘Nibiru’
(‘del cruce’) debido a que su presentación en los cielos ocurre
justamente de forma cruzada en vez de la tradicional para el resto
de los cuerpos planetarios observables.
Sin embargo, es Zecharia Sitchin (ver
El 12º Planeta) el
investigador que ha develado estas realidades a la humanidad.
Su
trabajo por más de 60 años ha puesto en evidencia numerosos textos
sumerios y de otra procedencia, además de ordenar lo ya traducido
con anterioridad a su trabajo. Movido por una curiosidad infantil
puso todos sus esfuerzos en traducir de forma correcta la palabra ‘Nefilim’,
que en algún texto de su enseñanza primaria era traducido por
‘Gigantes’ y que él, por su ascendencia hebrea apreció como erróneo.
Esta duda le carcomió energías, gatilló el alma y enfocó su
conciencia… Te agradecemos, Zecharia, desde el infinito y la
eternidad misma.
Y desde allá, fue que vino este Jehová y la hueste de Elohim, Nefilim, o
Anunnakis.
Y aquí llega el momento de complicar algo las cosas. Porque el
primer grupo en llegar venía al mando del hijo mayor del monarca de
Nibiru.
Es conocido en los textos sumerios como ‘Enki’, que significa ‘Señor
de la Tierra’. Fue él quién debió preparar lo necesario para iniciar
los trabajos de extracción, carga y transporte del preciado oro,
vital para sostener la atmósfera de su planeta. Puertos espaciales,
canales en los ríos escogidos para extraer el mineral buscado,
asentamientos de todo tipo.
Unos cuantos ‘años nibiruanos’ después, llega a la Tierra un segundo
grupo de astronautas, al mando de su hermano menor, Enlil (el Señor
de la Misión), y como su nombre lo indica, se hizo cargo de los
trabajos como comandante general…
La Tierra carece de la abundancia de oro en comparación por ejemplo,
con el cobre, y los trabajos, arduos y lentos, resultaban
insatisfactorios para la necesidad de Nibiru… (referencias completas
a esta circunstancia se hallan en ‘El 12º Planeta’ del mencionado
investigador). Entonces, Enki, pone sobre el tapete la generación de
un ‘servidor’ - término que suena bien pero que en realidad se traduce
mejor por esclavo - a partir de un homínido terrestre que pudiera
completar la cantidad de trabajadores necesarios para realizar el
trabajo de extracción. Disponen del conocimiento y la tecnología
adecuada para la transgenización necesaria.
Este par de hermanos, príncipes de Nibiru, al parecer mantenían un
tipo de relación tirante debido a la heredad del reino. Enki era el
primogénito, y sin embargo por ser Enlil hijo del cruce entre Anu el
monarca y una media hermana, tenía una carga de ADN ‘real’ más
poderosa que su hermano mayor y por tanto, según los cálculos es él
quién debe ser a la sazón, el monarca de Nibiru.
Esta realidad al
parecer, despertó una explícita rivalidad entre los hermanos,
tensión que acá en la Tierra se hizo sentir.
Y, ya sea por esa
competencia, o por prudencia, Enlil se mostró contrario a la
generación de este ‘servidor’ tal como proponía Enki. Sin embargo,
la necesidad fue mayor que cualquier referencia, y el propio monarca
Anu fue quién dirimió el asunto a favor de le generación del esclavo,
ralea que finalmente derivó en la actual raza humana terrestre…
Así las cosas y después de muchas circunstancias y años terrestres,
tenemos que la política de estos alienos terminó por conferir a Enki
las tierras del hemisferio sur: África en donde fundó Egipto, Asia
en donde una de sus descendientes, Inanna dio a luz la civilización
del Indo, y después América, donde otro de sus hijos fue conocido
como ‘la Serpiente Emplumada’… Enlil y su parentela derivaron en el
pueblo hebreo, además de otras civilizaciones…
El caso es que, para los registros de los escribas humanos, este par
de hermanos eran los jefes indiscutidos, los reyes que gobernaban
sobre los demás ‘dioses’ extraterrestres, ya que sin importar donde
se presentaran, siempre eran reverenciados por los demás alienos.
Y
la Biblia recoge entonces, algunos de los encuentros y andanzas de
ambos, sin hacer una separación manifiesta… la huella de uno y otro
sin embargo, es factible de reconocer por el talante y las
capacidades de uno y otro. Enki siempre positivo mientras su hermano
es de una seriedad a toda prueba y nunca a gusto con la humanidad,
al paso que su hermano mayor soslaya una conjura conducente a la
destrucción humana y entrega al bíblico Noé las claves necesarias
para salir indemne del diluvio…
Entonces, de retorno al original propósito de este ligero texto,
veamos algunas citas bíblicas respecto a Jehová, entidad que
despliega una indecible facilidad para maldecir a diestra y
siniestra. Tan sólo por esta cualidad, resulta impropio confundirlo
con la Deidad misma, infinitamente misericordiosa, aunque
circunstancialmente incapaz de resolver de manera instantánea los
problemas y dolores planetarios…
Jehová en cambio, se refocila con la expulsión del hombre de un
sitio donde la vida era gratis y del todo benévola, y - según la
Biblia al menos - inventa un diluvio para hacer desaparecer del mapa a
nuestra estirpe.
En Génesis VI, 17, se lee:
"Por mi parte, voy a
traer el diluvio, las aguas sobre la tierra, para exterminar toda
carne que tiene hálito de vida bajo el cielo: todo cuanto existe en
la tierra perecerá"
Esas son palabras de Enlil, y luego Enki es
quién ‘salva’ a un resto de los humanos en la familia de Noé.
La sola manifestación del deseo destructivo es suficiente. Pero hay
más, mucho más…
En Salmos 2, vers. 11 y 12 leemos:
“Servid a Yahveh con temor, con
temblor besad sus pies; no se irrite y perezcáis en el camino, pues
su cólera se inflama de repente. ¡Venturosos los que a él se
acogen!...”
Un jefe, que no deidad en absoluto, que se impone por el
terror. De verdad, la razón se me hace pequeña para comprender por
qué Hitler lo desechó como mentor… después de todo, este Jehová más
de una vez maldijo a su ‘pueblo escogido’ y bien pudo el jerarca
nazi hacer las veces de su verdugo…
El salmo 94 comienza de manera rotunda: ¡Dios de las venganzas,
Yahveh, Dios de las venganzas, aparece! Por esto, redundo lo
expresado en un texto anterior: con esta clase de ‘Dios’, el Diablo
es apenas una figura decorativa…
La suma podría extenderse hasta el fin de la Biblia misma… por
ejemplo, el salmo 147, en sus versículos 10 y 11 señala:
“No le
agrada el brío del caballo, ni se complace en los músculos del
hombre. Se complace Yahveh en los que le temen, en los que esperan en su
amor.”
Es decir, eres un dios del temor, del terror, de la venganza,
de la muerte, y con todo cinismo, haces que tu ‘canalizador’ de
turno declare que el amor y el temor van juntos… qué clase de deidad
eres, Jehová, puerco entre los puercos, con el perdón de los puercos
por rebajarlos con tanta ligereza…
Consciente soy de tu corona, y
jamás negaré que muchas dádivas vinieron a nosotros por tus manos,
pero nada de ello amerita tu iniquidad, tu desamor por quienes
llevamos tu herencia genética…
Muéstrate una vez más. Como el terrible dios de la venganza, que la
humanidad entera conozca de primera mano tu cólera del espanto, que
la tierra entera tiemble bajo tus iras, dios de mierda…
Mis hermanos
terrestres sabrán algún día comprender que eres un castrado del
alma, un inicuo, un sin sentido universal… mis líneas son apenas el
comienzo, y desde ya levanto mi escudo de eternidad contra tus
maldiciones, epítome de lo peor, egregio genocida, sombrío
alienígena… mil veces puedes destruir mi pasar terrenal, que mil y
una veces lo reconstruiré para encararte y dejar al descubierto la
realidad tras tu máscara.
Y te aseguro, no estoy solo en esto: mis
hermanos terrestres han adquirido la conciencia necesaria para
comprender tu bajeza y saber que la eternidad es propiedad de los
Espíritus que nos vivifican, y por tanto, el daño que nos puedes
causar es apenas circunstancial; en cambio tú, en cada maldición te
hundes más en el abismo de tu propia vileza.
Parte 2 - la paranoia
mundial
En lo que se refiere al contacto extraterrestre, la Web está plagada
de avisos paranoicos respecto a extraterrestres lagartos, buitres,
grises perversos; y así la lista de seres malévolos es larga.
Representantes humanos de estas endiabladas entidades, serían los ‘Illuminati’,
una sociedad secreta que controla a la humanidad a través de varias
fuentes, principalmente el poder del dinero y los valores materiales
en general.
La teoría asevera que poseen casi la
totalidad del poder económico mundial, y que por estos tiempos están
dedicados a generar ‘el nuevo orden mundial’, un
gobierno
global dentro de cuyos parámetros quedaría la raza humana del todo
esclavizada, a merced de sus designios.
¿Hasta dónde lo anterior, puede resultar verídico, y, de dónde
provienen estos
hipotéticos ‘Illuminati’?
Antes del principio del humano terrestre, la Tierra estaba habitada
por sólo animales, lo que de ninguna manera alguna excluye a la
inteligencia, como es factible comprobar en delfines y otros; pero
para los efectos reales, una ‘civilización’ planteada como sociedad,
ciudades y organización concreta era algo inexistente.
Luego llegaron
los Anunnaki a explotar minería de
oro. Al comienzo fueron asentamientos productores, en la cercanía de
los cuales obviamente, estaban sus viviendas. Hubo sin embargo, una
poderosa necesidad de mano de obra, merced a la cual y después de
intentos van e intentos vienen, una pequeña partida de homo
servus fue generada.
A poco andar este ‘servus’ demostró ser
hábil y eficiente trabajador, por lo cual la demanda por sus
servicios—gratuitos como cualquier esclavo (servus en
latín)—se hizo numerosa: cada Anunnaki quería disponer de este
homínido de negro pelaje que paseaba su desnudez corporal sin
remilgos, igual que nuestras mascotas, animales de granja y el resto
del reino animal.
Entonces fue necesaria una nueva
intervención en la genética del esclavo, y le fue conferida la
capacidad de procrear… …Y la raza humana terrestre comenzó su
propagación.
Vino después, ya en fecha reciente, hace apenas unos 13 u 11 mil
años, el diluvio. Con esta catástrofe, la cantidad de humanos
terrestres disminuyó casi hasta el cero absoluto. Pero ese ‘casi’
hizo la diferencia y una vez retiradas las aguas el hombre recomenzó
la multiplicación de la especie.
Cachondos somos, de modo que esta tarea se cumplió a cabalidad.
Las guerras intestinas de estos Anunnaki emplearon humanos como
carne de cañón. En algún texto antiguo se puede leer una reflexión
de Zeus en relación al excesivo número de humanos, razón por la cual
decide una guerra que diezme la excesiva cantidad, y junto con
inventar un concurso de belleza induce a Afrodita a que soborne a
uno de los jueces—Paris—para ella resultar elegida.
Resultado: Afrodita ganó el concurso y
el cohecho ofrecido debió ser cancelado mediante el enamoramiento y
posterior rapto voluntario de Helena la esposa de Menelao… la
historia de la Guerra de Troya es conocida de más como para
proseguir esa huella del relato.
Ejemplos como ese hay muchos en la
historia antigua.
Los Anunnaki jugaron desde los inicios
con la vida de los hombres, tal como en la actualidad los becerros
son llevados al matadero para complacer el paladar humano… Lo que
escapó a la conciencia de Zeus fue que, tras el velo de la
mortandad, Eneas y un puñado de troyanos que lograron escapar de la
vulnerada, saqueada y arrasada ciudad, llevaron su destino hacia un
sitio con siete colinas donde se constituyó el centro de la
civilización que venia: Roma.
La historia humana tuvo un recomienzo luego del diluvio, y no sólo
eso, sino que además estos alienos dedicaron esfuerzos para educar a
la incipiente raza humana. Es así como
en Súmer aparecen ciudades
completas, con edificios de varios pisos, escuelas y leyes de
comportamiento social. Pero, siempre en cada asentamiento, hubo un
‘dios’, un ET que presidía por sobre la sociedad humana; y que,
además de regir, era dueño y señor de todo.
Estos Anunnaki, escasos en número y en
especial carentes de hembras, vieron con buenos ojos y gran deseo
que las hembras humanas y sus feromonas les despertaron apetitos
naturales, y el encuentro sexual de humanos y alienígenas fue un
capítulo abierto a la exploración y el placer. Los descendientes de
aquellos cruzamientos terminaron por heredar las tierras, tesoros y
reinos de sus padres venidos del cielo…
Así, el poder económico, social y político fue reservado a unos
pocos.
Huellas de aquellos episodios, promesas de la fortuna por acumular y
finalmente la realización de los acontecimientos las podemos leer en
la Biblia, y aunque puede parecer del todo innecesario citar ya que
la riqueza que poseen unas cuantas familias descendientes de
David y su estirpe Salomón y otros congéneres lo hace
visible, explícito e incontestable, un par de textos pueden
concretar estas líneas.
Son ellos los legítimos herederos de
Jehová mismo, son su pueblo escogido.
En Génesis 17; 1-8:
“Cuando Abram tenía 99 años, se le
apareció Yahveh y le dijo:
«Yo soy El Sadday, anda en mi
presencia y sé perfecto. Yo establezco mi alianza entre
nosotros dos, y te multiplicaré sobremanera.»
Cayó Abram rostro en tierra, y
Dios le habló así:
«Por mi parte he aquí mi alianza
contigo: serás padre de una muchedumbre de pueblos. No te
llamarás más Abram, sino que tu nombre será Abraham, pues
padre de muchedumbre de pueblos te he constituido. Te haré
fecundo sobremanera, te convertiré en pueblos, y reyes
saldrán de ti. Y estableceré mi alianza entre nosotros dos,
y con tu descendencia después de ti, de generación en
generación: una alianza eterna, de ser yo el Dios
tuyo y el de tu posteridad.»”
Nota: el término ‘dios’ en
aquellos tiempos estaba desposeído del concepto ‘Divino’ tal como lo
entendemos hoy día. La palabra viene de un vocablo griego ‘enteoi’,
que significa literalmente: ‘habitante del cielo’, y en efecto,
tanto Jehová como toda la hueste de
Nefilim, vinieron del cielo y por
tanto esa denominación les calza. Por desgracia, la mano negra
adulteró la noción nuclear y engrandeció el vocablo hasta el
Infinito y más allá…
En Isaías 43; 15-21 leemos:
Yo, Yahveh vuestro Santo, el creador
de Israel, vuestro Rey.
Así dice Yahveh, que trazó
camino en el mar, y vereda en aguas impetuosas. El que hizo
salir carros y caballos a una con poderoso ejército; a una se
echaron para no levantarse, se apagaron, como mecha se
extinguieron. ¿No os acordáis de lo pasado, ni caéis en la
cuenta de lo antiguo?
Pues bien, he aquí que yo lo
renuevo: ya está en marcha, ¿no lo reconocéis? Sí, pongo en el
desierto un camino, ríos en el páramo.
Las bestias del campo me darán
gloria, los chacales y las avestruces, pues pondré agua en el
desierto (y ríos en la soledad) para dar de beber a mi pueblo
elegido. El pueblo que yo me he formado contará mis alabanzas.
En fin, es una realidad que Israel es
una nación poderosa, pequeña en tamaño pero grande en su gente,
aguerrida, orgullosa de su ascendencia, y dispuesta a cualquier cosa
en aras de su propia seguridad. ¿Quién podría levantar una crítica
en su contra por esto?
El problema radica, en que aparte Israel, hay muchos más países en
el planeta. Algunos pobres, paupérrimos, donde la gente de forma
literal, se nos muere de hambre. Las naciones vasallas del pasado,
los estados nuevos, los reinos olvidados cuyos nombres ni se
muestran en los colegios…
Del otro lado, las coronas poderosas, los señores presidentes cuyo
séquito de seguridad viste trajes matonescos, los administradores de
empresas multinacionales. Casinos de juego en cuyas salas reservadas
las apuestas tienen un mínimo con el cual familias completas podrían
alimentar no sólo sus cuerpos sino además sus ilusiones de vivir con
dignidad…
En la actualidad, durante las reuniones del
grupo Bilderberg es posible
distinguir la corona británica, la holandesa y otras… ¿debería esto,
extrañarnos?
Para nada… los descendientes de Abraham
heredaron la tierra según la promesa de Jehová, y la
Casa Windsor así como muchas otras
similares, mantienen enjundiosas relaciones comerciales con el
puñado de familias que en la actualidad están siendo desenmascaradas
como quienes intentan convertirse en dueños, amos, y tiranos del
mundo completo.
Y con tal aseveración entramos de lleno, al tema de la ‘conspiración
mundial’… porque en el comienzo de los tiempos terrestres, cuando
aun nuestra vilipendiada y despreciada raza por Jehová estaba
ausente del escenario, fue lógica la acumulación del poder en unos
cuantos sillones ‘regios’; sin embargo el contexto del siglo 21 es
netamente diferente.
Pensadores libertarios surgen aquí y
allá, científicos rebeldes incorruptibles frente a las demandas de
los potenciales patronos, y acaso hasta dirigentes políticos capaces
de desafiar la malignidad global del nuevo orden que desean
implantar, y todo esto sumado a lo más importante: los pueblos, la
masa de almas encarnadas, Espíritus iluminados…
Las estrategias del
reducido grupo que busca ceñirse la corona
mundial necesariamente adolecen de cohesión porque al
pretender esclavizar a miles de millones (o cientos si por acaso de
guerras orquestadas para disminuir el exceso de población según sus
puntos de vista), ellos olvidan y desprecian el valor del espíritu
humano…
¿Qué no disponemos del poder económico,
de las armas o de aparataje tecnológico para siquiera intentar un
ataque frontal? Tampoco la turba premunida apenas con horquetas
parecía poder derrocar la corona francesa en 1789, y…
Es cierto y muy cruel realidad esto de la ‘conspiración mundial’
escondida tras el pomposo y hasta democrático título de ‘Nuevo
Orden Mundial’… pero hermanos míos, amigos de todo el
orbe, almas jerarquizadas, más allá de la pequeñez y atrevimiento de
un puñado de naciones y un grupo de familias ávidas de todo, está la
Voluntad del Universo, en cuyo Seno radica el sentido hacia el bien
común y la dirección y sentido de los acontecimientos mundiales—para
cercarnos a nuestra realidad—se hallan impedidos de rumbear hacia
donde la pretensión egoísta comanda las riendas de sus lujosos
carruajes.
Es posible que la lucha sea cruenta y que incluso semeje que la
corriente de los sucesos sopla a favor del Mal… Quizá muchos serán
los caídos…
Pero al final, el Bien prevalecerá, y
una nueva era iluminará los senderos humanos terrestres.
Parte 3 -
La Conspiración Mundial
La Macroconciencia Universal es una sola. El nombre asignado a
Dios
es secundario, ya que el concepto es común a todos los sistemas que
buscan re-unir a la mortal persona con el eterno Espíritu que la
vivifica.
Entonces, cualquier ausencia de pensamiento ecléctico
ayuda a la Mano Negra.
Amigos, hermanos… es cierto, cruel y terrible que la humanidad como
pueblo, se halla amenazada bajo ‘conspiración mundial’ por un puñado
de familias que detentan un poderío económico inimaginable para el
resto.
Hablar de ello es inútil, odioso y excesivo. Inútil, porque las
palabras de la denuncia son como gotas de miel arrojadas en el
océano: lo salobre permanecerá. Odioso, ya que sólo despierta
resquemor y apunta contra todo aquel humano que ha nacido dentro del
núcleo de estas familias. Y excesivo, debido a que la Web está
plagada con esta información y por tanto, quién desee ilustrarse en
tal sentido tiene tan sólo que arañar un poco la superficie
googliana o de cualquier buscador Web para abrir los ojos al horror.
Dice el poema ‘La Desiderata’ que el Universo marcha como debe…
entonces, de alguna forma podemos considerar ‘voluntad divina’ esta
—hoy día—escandalosa acumulación de la abundancia terráquea en unos
cuantos apellidos.
Sin duda Dios es dueño de la Eternidad, pero su voluntad cambia
según el decurso del tiempo y el grado de conciencia de sus
creaturas.
Tampoco el Espíritu de quién haya sido el Jehová Enlil ha
permanecido inalterado en este corto tiempo desde que
los Anunnaki
abandonaron—dicen—la Tierra.
A la deidad, la inmadurez de las ‘humanidades’ involucradas en
nuestro planeta—para circunscribirnos al ámbito nuestro—le impide
manifestar su misericordia infinita.
Los padres se ven impedidos de aportar lucidez a los hijos
adolescentes. Se hace necesario que estos crezcan y alcancen el
equilibrio por si mismos, ya sea a costa del dolor o de la
iluminación, ambos senderos para alcanzar la comprensión de la
realidad.
Y, sinceramente, nuestra humanidad—dejando aparte a los alienígenas que
nos generaron y otros que nos visitan—alcanzó ya un grado de
discernimiento que nos hace merecedores de algo mejor como método de
pasar terrenal. Esta miserable forma de vida que sufre la gente en
casi cualquier rincón del orbe es una lacra universal, una vergüenza
planetaria, una corona más a botar…
Como fue dicho en otro texto anterior, la solución está lejos del
despojo, eliminación y repartija. En los templos budistas la
existencia se realiza dentro de marcos más comunistas que lo
visionado por Marx, pero esa calidad de almas es difícil de hallar
en las calles del hombre. Y si alguien se halla a disgusto, dispone
de libertad para dejar el lugar.
El marxismo como sistema político ha demostrado ser una lacra peor
que los sistemas a los cuales ha derrocado. Es cierto que ha
devuelto a los pueblos cierta ‘dignidad de vida’, pero todos
queremos más. Más libertad, mejor calidad material, y un completo
acceso a la información, y eso está ausente de las sociedades cuyas
administraciones persisten en conducir a la masa social por el
sendero del colectivismo rojo.
Socialistas seremos cuando comprendamos que todos somos hojas del
mismo árbol y que el soplo universal es para todos igual. Cuando
vivir aquí sea un camino de libertad, desarrollo del alma, y gozo
para el Espíritu.
La fuerza del Espíritu es mucho más fuerte que las armas o el dinero.
Y nada es comparable al ímpetu de una idea cuando ha llegado el
momento de su realización.
Y este amanecer de la Era de Acuario, el Aguador Celeste que trae el
néctar de la inmortalidad, viene envuelto en luces de emancipación,
y de verdad un nuevo Sol deja entrever rayos de camaradería, y atrás
quedará el oscuro cadáver simbolizado en un doliente para entrar de
lleno en la resurrección, a lo infinito de la Vida.
Esta ‘conspiración mundial’ a partir de la corona terrestre en
contra del resto planetario, está lejos de ser una teoría. Los
miembros componentes de los diversos grupos de poder tentaculizan
sus ventosas hasta el fin de cada rincón, y lo realizan con tal
desparpajo que ni siquiera les importan textos como el presente ni
otros que resultan mucho más fuertes, odiosos e iluminadores, en
donde son señalados con nombres, cargos y ubicación.
Hay quienes hablan esperanzados del ‘retorno de Cristo’ como la
solución de todo… ¿A qué volvería?
Hasta quienes se dicen ‘cristianos’ están llenos de desconcierto. Su
cerrazón secular les impide ver más allá de sus dogmas y confunden
todo. Acusan a diversas instituciones de ‘satánicas’ sólo por el
hecho de aceptar al Buda como una emanación divina tan
legítima como la que manifestó Jesús en Palestina…
El fanatismo
musulmán, si bien reconoce a Jesús como un avatar, piensa que los
‘cristianos’ son infieles… Los católicos miran en menos a los
evangélicos… ¿Será la Mano Negra, que revuelve las cosas, confunde
las mentes y divide para reinar?
La deidad es una sola, y nadie necesita ser religioso o adherir a
causa alguna para liberarse de las cadenas opresoras de la
conspiración que pretende esclavizarnos. La verdad trae libertad, y
la conducción del hombre hacia una sociedad justa, acogedora y
luminosa es algo que está ocurriendo, aquí y ahora, por la gracia de
los tiempos, sin que un personaje excelso como es el Cristo llegue a
manifestarse de manera sustancial. Si ello ocurriera, la Mano Negra
buscaría como neutralizar su influencia.
Si abres tu corazón al concepto ‘Cristo’, él llenará tu existencia,
sin necesidad de santificar tus días o que camines por las calles
predicando cualquiera sea su palabra. Sin embargo es tu corazón, tu
voluntad al bien y tu propia luz los términos que salvarán al mundo,
comenzando por el tuyo…
La ‘conspiración mundial’ a la que nos enfrentamos en la actualidad
bien podría ser señalada como la encarnación del Anticristo.
Sólo son palabras, adosadas a conceptos que trascienden los esquemas,
nuevos o antiguos, reales o caducos. Cualquier diseño, por exacta
que sea su representación de la realidad, es tan sólo un bosquejo:
la verdad subyace tras el velo de las apariencias.
La energía esencial de donde desciende este grupo de familias
provino desde los orígenes, estaba aquí antes que nuestra raza.
Anunnakis.
Herederos legítimos. Sin embargo esta situación se ha convertido
ahora, en algo perverso.
Hoy ‘el mal’ es mencionado como la ‘conspiración mundial’; ayer la
masonería luchó y destituyó a la ‘realeza’; y más atrás en el tiempo
los cristianos originales desafiaron el poderío de Roma…
Lo blando y suave es más fuerte que lo duro y rígido, dice el Tao Te
King.
La mujer es blanda y acoge un miembro duro que termina por ceder y
alcanzar la flaccidez.
El pasto que se dobla vuelve a erguirse una vez pasada la tormenta,
mientras techos y árboles rígidos han sido diseminados por la
superficie.
Por algo Jesús dijo: “La tierra la heredarán los mansos (blandos)…”
Los conspiradores actúan de forma inhumana, pragmática y oscurecida
del alma. En esa dureza está su principal debilidad, ya que le será
imposible resistir la tormenta acuariana. Los muros del castillo
negro caerán, y nada o nadie puede impedirlo.
¿Significa esto que podemos esperar sentados, tan sólo contemplando
el cambio sin blandir una espada ni marchar contra los orcos o sus
vasallos para vociferarles en sus caras que somos libres y no sus
esclavos?
Ambas opciones son válidas.
Cada quién debe actuar según
su grado de conciencia; seguir un líder que puede estar errado y
llevarte al abismo: un traficante de almas, es por demás peligroso y
las huellas de tu crecimiento han de ser impresas en diferente
sendero. Sin embargo, si el alma que te anima te empuja a enrolarte
en una cruzada peligrosa, entonces llénate de ánimos y busca tus
instrumentos: la palabra, la música, lo que te sea presentado por
las fuerzas internas que te guían.
“La Verdad os hará libres,”—dijo Jesús—y entonces, que sea tu verdad
la que brille.
El universo marcha como debe. Infórmate y se feliz.
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