por John Lash

Noviembre 2004

del Sitio Web MetaHistory 

traducción de Adela Kaufmann
Versión original en ingles

 

 

 

 

El material sobre la teoría gnóstica Arcóntica en Metahistory.org es único a este sitio y esencial para los Mitos de Gaia. Varios artículos y entradas de Léxico describen el origen, la naturaleza y las actividades de los Arcontes, una especie de seres depredadores inorgánicos que pueden equipararse con los Anunnaki del mito sumerio, así como con los extraterrestres ( Grises y Reptilianos ) en el escenario de intervención de OVNI de la tradición moderna.

 

 

 

 

Los seres humanos están en un viaje de conciencia, 
que ha sido momentáneamente interrumpido por fuerzas extrañas. 
Carlos Castaneda

Pases Mágicos

 

 

 

 

 

En toda la "gran extrañeza" de los materiales gnósticos, la cosa más extrañas de todas es sin duda la presencia de los Arcontes. Aquí nos enfrentamos a un verdadero enigma.

  • ¿Dónde situamos a estas extrañas entidades en el relato de los Mitos de Gaia?

  • ¿Deben considerarse como entidades reales, una especie en su propio derecho, aunque uno no terrestre?

  • ¿Cuál es su relación con Gaia, la inteligencia de la biosfera?

  • ¿Y cómo los Arcontes, a su vez, se relacionan con la humanidad?

 

 

 

 

Arconte

 

De la palabra griega  archai, "orígenes, el comienzo de las cosas, antes en el de tiempo." 

 

En el mundo clásico mediterráneo, Arconte era comúnmente usado para el gobernador de una provincia, o, de manera más flexible, cualquier autoridad religiosa o gubernamental. De ahí que el plural, Arcontes, se traduce a menudo en los textos gnósticos como "las autoridades". (No hay palabra copta de Arconte, por lo que los textos gnósticos usan el término griego en la transcripción copta.)

 

Pronunciado Ar-kon. . Adjetivo, arcóntico (Ar-KON-tik)  

 

En mi costumbre habitual de intentar lo imposible, propongo tres definiciones, o tres niveles de definición:

Nivel Uno: Cosmológico 


En la cosmología gnóstica, los Arcontes son una especie de seres inorgánicos que emergieron en el sistema solar antes de la formación de la tierra. 

 

Ellos son ciborgs que habitan en el sistema planetario (exclusivo de la tierra, el sol y la luna), que se describe como un mundo virtual (stereoma), ellos construyen imitando las formas geométricas emanadas del Pleroma, el reino de los generadores, los Dioses Cósmicos.

 

Los Arcontes son una especie genuina con su propio hábitat, e incluso pueden ser considerados ser como-dioses, pero carecen de intencionalidad (ennoia: capacidad auto-directiva), y tienen una desagradable tendencia a alejarse de sus límites y de inmiscuirse en el reino humano. Se dice que los arcontes sienten una intensa envidia hacia la humanidad porque poseemos la intencionalidad que a ellos les falta. 


El Mito de Gaia describe cómo los Arcontes fueron producidos por impacto fractal en los densos conjuntos de campos elementales (dema) de las extremidades galácticas, cuando el Eón Sophia salió unilateralmente desde el núcleo galáctico. Véase especialmente el Episodio 10. Este evento también se describe en detalle en  Sueño Alienígena.

 

Nivel dos: Noética Psicológica

En la psicología gnóstica, la ciencia noética de las Escuelas de Misterios, los Arcontes son una fuerza alienígena que se inmiscuye subliminalmente sobre la mente humana y desvía nuestra inteligencia lejos de sus aplicaciones apropiadas y sanas. 

 

No son lo que nos hacen actuar de manera inhumana, ya que todos tenemos el potencial  de ir en contra de nuestra humanidad innata, violando la verdad en nuestros corazones, pero nos hacen llevar a cabo la conducta inhumana a extraños y violentos extremos. 

 

Dejados abandonados a nuestra suerte, nos gustaría a veces actuar inhumanamente y luego corregirlo, contener la aberración. Obviamente, no siempre lo hacemos. En la exageración de nuestras insanas e inhumanas tendencias, y en extrema la desviación sin corregir de nuestra inteligencia innata, los gnósticos vieron la firma de una especie alienígena que está aprovechándose de los peores defectos humanos.    


Por lo tanto, los arcontes son parásitos psico-espirituales. Sin embargo, como descendencia del Eón Sophia, son también nuestros parientes cósmicos. 

Como entidades inorgánicas de dos tipos, embrionarias y de reptil, los arcontes pueden en momentos penetrar la atmósfera terrestre y aterrorizar a los humanos, aunque no hay ninguna razón o fin para estas incursiones, ya que no pueden permanecer por mucho tiempo en la biosfera y, de todos modos, no tienen un plan maestro que lograr aquí. 

 

El estatus ontológico de los Arcontes es dual: existen tanto como una especie alienígena independiente de la humanidad y como una presencia en nuestras mentes, algo así como un conjunto de programas que operan en nuestro ambiente mental. El riesgo que suponen invadiendo nuestro software mental es mucho mayor que cualquier riesgo físico que pudieran plantear por violar erráticamente la biosfera. 

Trabajando a través de la telepatía y la sugestión, los Arcontes intentan desviarnos de nuestro curso apropiado de la evolución. Su técnica más exitosa es usar la ideología religiosa para insinuar su manera de pensar y, en efecto, sustituir su mentalidad por la nuestra.

 

Según los gnósticos, el salvacionismo judeo-cristiano es la táctica principal de los Arcontes, un implante alienígena. 

Nuestra capacidad de discernir fuerzas alienígenas trabajando en nuestras mentes es crucial para la supervivencia y la co-evolución con Gaia que, como Sophia, produjeron accidentalmente a los arcontes, en primer lugar. 

 

(Este comentario pertenece al Nivel Uno, la definición cosmológica, pero como sucede a menudo con las enseñanzas gnósticas, los elementos noéticos y cósmicos tienden a fusionarse.)

Al reconocer y rechazar a los arcontes, reclamamos nuestro poder, definimos nuestras fronteras en el marco cósmico, y establecemos nuestro propósito relativo a Gaia, la inteligencia que mora en el planeta.



Nivel tres: Sociológico  

En la visión gnóstica de la sociedad humana, los arcontes son fuerzas alienígenas que actúan a través de sistemas autoritarios, incluyendo sistemas de creencias, en maneras que causan que los seres humanos, a su vez, se vuelvan en contra de su potencial innato y violen la simbiosis de la naturaleza. 

 

VIVO – LIVE en inglés, deletreado al revés es malo (EVIL), pero los Arcontes no son malos en el sentido de que poseen poderes autónomos de destrucción, capaces de ser aplicados directamente sobre la humanidad.

 

Son agentes de error en lugar de malos - pero el error humano, cuando se va sin corregir y corre más allá de la escala de corrección, se convierte en el mal y va en contra del plan universal de la vida. 

 

Los gnósticos enseñaban que los Arcontes explotan nuestra tendencia a dejar que nuestros errores no sean corregidos. 

Debido a que los arcontes necesitan la complicidad humana para ganar poder sobre la humanidad, cualquiera que los asista puede considerarse un tipo de Arconte, un accesorio. 

 

¿Cómo ayudan los humanos a los arcontes? 

 

Una forma (sugerida en la definición de dos niveles) es aceptando los programas mentales de los arcontes - es decir, adoptando la inteligencia alienígena como si fuese en base humana - y la aplicación de esos programas realmente haciéndolos cumplir en la sociedad. Otra forma es activa o pasivamente conformándose a las agendas así propuestas e impuestas. 

Jacques Lacarriere sugiere que los gnósticos detectan la cara humanizada de los arcontes en todas las estructuras y los sistemas autoritarios que niegan la autenticidad y la autodeterminación del individuo. 

 

Él argumenta que los gnósticos, reconocieron que,

"el carácter fundamentalmente corrupto de todas las empresas e instituciones humanas: el tiempo, la historia, poderes, estados, religiones, razas, naciones..."

(Los gnósticos, p 24.)

La corrupción se produce, no porque nosotros cometemos errores, sino debido a los errores que cometemos se van sin corregir y extrapolan más allá de la escala de corrección. 

 

Lacarriere dice que los gnósticos llegaron a esta conclusión final,

‘de la observación racional del mundo natural y el comportamiento humano’.

Finalmente, ellos aseveraron que la,

“contención de todo poder - sea del tipo que sea - es una fuente de enajenación... Todas las instituciones, leyes, religiones, iglesias y poderes no son nada más que una farsa y una trampa, la perpetuación de un engaño muy viejo ".

(p. 28-29) 

Esto puede parecer una visión oscura de los asuntos humanos, pero dada la evidencia de la historia (por no hablar de los acontecimientos actuales), no se puede decir que es injusto o exagerado. 

 

 

 

 

 

Una Razón no-Ordinaria

Los gnósticos exploraron estas preguntas de una manera sobria y coherente, pero para seguir sus huellas, primero debemos observar una advertencia: No espere que la investigación de los arcontes sea racional. Al menos no en el sentido ordinario de racionalidad.

 

Aristóteles observó que la marca de una mente madura es entretener una idea sin aceptarla - sin "creerla", como se dice hoy. No estoy insistiendo en que cualquier persona crea la teoría arcóntica del gnosticismo. Propongo que la examinemos y tomemos muestras, eso es todo. La ecuanimidad es esencial cuando se trata del enigma de los arcontes. 


Esta investigación exige la aplicación de una facultad especial que podría llamarse razón no ordinaria. Lo que esto es, se puede ilustrar por una broma de Woody Allen (de la película de Manhattan ):

 

Un hombre llega a un psiquiatra en nombre de su hermano, que sufre la aflicción de la creencia de que él es un pollo, y se comporta en consecuencia.

"Es terrible de ver, doctor. La forma en que va alrededor cacareando y rascando. La familia está pasando por un infierno con esto. ¿Qué puede hacer usted? Puede la psiquiatría ayudar a mi hermano?"

El médico responde que sin duda sí puede.

"Incluso en delirios avanzadas como este, la terapia a menudo puede llevar al paciente a la realidad," el médico le asegura. "Estoy dispuesto a trabajar con su hermano, a lo que sea necesario. Será un largo camino, sin embargo."

Suponiendo que el hombre se anima, el psiquiatra consulta su agenda. 

"¿Cuándo puede usted traer a su hermano en la primera sesión?" pregunta.

De repente, el hombre frunce el ceño.

"Lo siento, doctor. Me gustaría, pero no puedo hacer eso. Yo realmente no puedo. Necesitamos los huevos."

La respuesta del hombre es completamente racional en el contexto de su imaginación. 

 

Cuando los Trekkies (devotos de la serie-culto de televisión, Star Trek) discuten ávidamente personajes y eventos de la serie, están usando un razonamiento no-ordinario. Los  fenómenos de intercambio de tarjetas Pokeman desencadenaron una explosión de razonamiento no ordinario en el que los niños tenían que recitar en riguroso detalle las conductas y rasgos específicos de más de un centenar de entidades diferentes.

 

En Internet los MMORPG (Juegos Masivos de Multi-jugadores Jugando un Papel en Línea), los jugadores asumen identidades ficticias que deben comportarse de manera consistente, exhibiendo un tipo de racionalidad virtual. 

 

El razonamiento implicado en tal rol es riguroso, ya que los jugadores no pueden hacer que sus "avatares" hagan lo que quieran. Los avatares deben tener códigos específicos de conducta. El desarrollo y mantenimiento de este tipo de códigos implica un razonamiento no ordinario.  

En efecto, la razón no ordinaria es igual que la razón ordinaria, excepto que su objeto es imaginado antes de ser percibido.  


Videntes gnósticos tenían que ser expertos en el razonamiento no-ordinario para interpretar las experiencias que sufrieron en los estados de mayor percepción. No todo en el cosmos o en la psique humana se puede reducir a términos racionales, por supuesto, y que en todo caso no es el punto de razonamiento no ordinario. 

 

El punto es  traer entendimiento sano y sobrio a los aspectos de la experiencia humana que están más allá de los límites de la percepción sensorial ordinaria 

Este ensayo trata a los Arcontes en el contexto de  ejercicio imaginal propuesto en Coco De Mer - Nuestra participación en la Ensoñación de Gaia. Lo que aprendemos acerca de estas entidades, y de nosotros mismos en relación con los mismos, implicará razonamiento no ordinario, pero no va a ser una tontería irracional. Contemplando a los Arcontes no es un ejercicio de fantasía o un juego de fantasía.

Lejos de ello. 

 

Si los gnósticos tenían razón, es sobre todo detectando cómo trabajan los Arcontes  que podemos conocer cómo trabajan nuestras propias mentes, y reclamar el poder soberano de la inteligencia dotada en nosotros por Sophia.
 



 

Visiones Fractales

Los Arcontes pueden ser considerados como progenie de Sophia, pero no en el mismo sentido en que las especies nacen y se mantienen en el útero de Gaia, la biosfera terrestre. 

 

De hecho, ellos son llamados Arcontes (del griego archai, "primordial, primero, antecedente en el tiempo"), ya que surgen en el sistema planetario antes que en la Tierra se formase un hábitat para la vida.  

 

El Sueño Unilateral de Sophia produce una subida de tensión desde el centro cósmico, y la Diosa, disparando hacia atrás como una corriente torrencial, impactó los campos inertes de la materia primordial de una manera inusual.

 

Los textos gnósticos usan el término "feto abortado" para describir los resultados de este impacto ..

Existe un velo entre el mundo de arriba, y los reinos que están por debajo, y la sombra llegó a la existencia bajo el velo. Algo de la sombra se convirtió en materia, y fue proyectada en pedazo apartes. Y lo que Sophia creó se convirtió en un producto en la materia, como un feto abortado. 
(La Hipóstasis de los Arcontes , 94: 5-15)

Para el icono de Coco de Mer, ahora podemos añadir una variación gráfica para sugerir cómo los Arcontes emergen del Sueño de Sofía, como la fuga de una placenta. 

 

Como se explica en el ensayo precedente de esta trilogía, el Coco de Mer con  detallado cósmico representa el "Protennoia trimórfico", el mundo de los tres cuerpos originales del Sueño de Sophia.

 

Nuestro mundo, la biosfera terrestre, junto con el sol y la luna, son manifestaciones de este Sueño.

 

Con el surgimiento de los Arcontes, otro Sueño entra en juego fuera de nuestro triple orden mundial. Propongo llamar a esto el Sueño Alienigena. (Esta elección de la lengua se volverá evidente a medida que avancemos.)

 

Este otro Soñar es un giro de la energía de la emanación de Sofía, un derrame exótico, el cual, sin embargo, no le impide o arrestar su Sueño Original. 

 

 

 

 

El Mito de Gaia describe cómo el impacto del Eón Sophia sobre la densidad de la materia atómica produce una fractura masiva, al igual que el patrón de dispersión de fracturas en un estanque de hielo.

 

El patrón tiene un centro en el que se encuentra Sofía (identificada por el sistema de Mandelbrot ), y una extensión de la tela de araña de las líneas de fractura que corren en todas las direcciones (el mar congelado de las ondas fractales).

 

El Episodio 9 describe cómo Sophia, situada en el centro de la zona de impacto, ve a Su alrededor como un mar de olas de tracción, y montando las olas, o en realidad componiendo las ondas que parecieran a montar, son formas de auto-repetición que parecen caballitos de mar. Estos caballitos de mar son similares a las formas que aparecen a alta reiteración de la ecuación en el sistema de Mandelbrot.

 

Estas formas se corresponden con el tipo anatómico espontáneamente generado a partir de la materia atómica sin forma por el impacto de Sophia, un tipo llamado el "cuerpo de sombra," haibes en copto. 

Unas palabras sobre fractales:

aunque los patrones como-fractales aparecen en la naturaleza (en helechos, por ejemplo: la disposición de las hojas en un tallo se repite en la forma de las ramas del tallo), las formas auto-similares producidas por alta iteración no son naturales, hablando en sentido estricto. 

 

Los fractales, tales como los que se muestran aquí son el resultado de la alimentación de una fórmula matemática en una computadora y teniendo la fórmula para reprocesarse a sí misma, una y otra vez. 

Sin embargo, las formas así producidas se parecen al famoso "caleidoscopio multicolor" visto por muchas personas que tomaron LSD en la década de 1960. 

 

Yo diría, en primer lugar, que los fractales son vistos constantemente en los estados alterados, y segundo, que por lo tanto, los patrones que se ven pueden representar procesos reales, aunque sobrenaturales en el cosmos en general. 

 

Las formaciones fractales descritas en el Mito de Gaia (Episodios 9-10 )son fenómenos físicos reales que se producen de manera espontánea cuando un Aeon (a, corriente de alta porosidad de plasma estelar de masa libre) se vierte en los densos campos de la materia elemental. 

 

Al principio estos "caballitos de mar fractales" parecen ser estructuras inanimadas, rígidas y casi cristalinas en la naturaleza, pero por el hecho mismo de que Sophia los contempla, se vuelven animados.

 

En la segunda fase del despliegue descrita en el pensamiento trimorfo, el Eón Sophia,

"Desciende para empoderar a sus miembros caídos dándoles espíritu o aliento." (NHLE 1996. P 511) 

Así, las formas de tracción se transforman, de semi-rígidos caballitos de mar en formas fetales redondeadas, con colas, pero las colas, al parecer, siguen cayendo y convirtiéndose en otros embriones.

 

Por este extraño proceso de generación por auto-repetición, emerge la horda neonata de los Arcontes  

 



 

El Señor Arconte

La Hipóstasis de los Arcontes describe una evolución que sigue la aparición inicial de las entidades arcónticas fetales. 

 

En el pasaje citado aquí, aplico algunos conceptos extraídos de la astronomía moderna para desarrollar una imagen más viva de acontecimientos supuestamente observados por  videntes gnósticos en el cosmos, en su conjunto: 

Existe un velo entre el mundo de arriba [en el núcleo galáctico], y los reinos que están por debajo [exteriores, en las extremidades galácticas], y la sombra llegó a existir bajo el velo. Algo de la sombra [masa oscura] se convirtió en materia [atómica], y fue proyectada aparte [parcialmente formada en matrices elementales, la dema].

 

Y lo que creó Sophia [por su impacto] se convirtió en un producto en la materia [la dema], [una forma neonata] como un feto abortado. Y [una vez formado] asumió una forma plástica moldeada de la sombra, y se convirtió en una bestia arrogante parecida a un león. Era andrógino, porque salió de la materia [neutral, inorgánica] que iba a la deriva. 
(La Hipóstasis de los Arcontes, II, 4, 93:30 ff)

Una lectura atenta revela un detalle crucial: después de la formación inicial de los tipos embrionarios de arcontes, una segunda variante del "cuerpo de sombra" surge, con características propias distintivas.

 

La Hipóstasis de los Arcontes lo describe como "una bestia arrogante parecida a un león", pero esta criatura también es descrita (en otro texto cosmológico, el Apócrifo de Juan 10: 5) como "un cuerpo serpentino (dragón) con una cara como de león".

 

Así, hay dos tipos distintos de Arcontes:

  1. un feto tipo o embrionaria

  2. un tipo dracónico tipo o reptil

En La Hipóstasis de los Arcontes (93: 30 - 94:5), un suplicante le pide al gran ángel Eleleth,

"Enséñame sobre la facultad de los Arcontes, ¿cómo llegaron a ser, y por qué tipo de génesis, de qué material y quie los creó y produjo su fuerza.

 

Las enseñanzas dadas en respuesta a esta pregunta fueron precisas y detalladas. Dos variantes distintas del tipo Arconte son indicadas, y también se especifican sus comportamientos.

 

Otro tratado cosmológico, el Tripartito Tractate , afirma que "las dos órdenes [de arcontes] se asaltaron unos a s otros, luchando por el mandato debido a su manera de ser."

(84: 5-15)

Debido a las dos etapas distintas de su generación, los Arcontes están investidos de una naturaleza agresiva y conflictiva, luchando entre sus propias filas.

 

El problema es provisionalmente resuelto, sin embargo, cuando el tipo de reptil asume el dominio sobre la horda masiva de los neonatos, y, de hecho, en todo el ámbito de la dema afectado por el desplome de Sophia:

Abriendo sus ojos, él [el arcontes dracónico] vio una gran cantidad de materia sin límite [extendida a través de las extremidades galácticas], y él se volvió arrogante, diciendo: "Soy yo, el que soy Dios [la única deidad de estas regiones], y no hay otro aparte de mí. "

(Hyp Arch, 94:20)

Mientras que los Arcontes neonatos son inertes, sus formas atrapadas en una etapa prematura de desarrollo, el líder reptiliano es agresivo, territorial, y acusado de poderes demoníacos.

 

Por un lado, él es un formidable cambia-formas:

Ialdabaoth tenía una multitud de rostros más que todos ellos, por lo que podía poner una cara delante de todos ellos, de acuerdo a su deseo... Él compartió su fuego con ellos, por lo tanto, se convirtió en señor de ellos. 

 

Debido al poder de la gloria que poseía de la luz de su madre, él se llamó a sí mismo Dios. Y él no obedeció al lugar de donde vino.

(El Apócrifo de Juan, 11:35-12:10)

La declaración del jefe de arcontes que él es el único dios en el cosmos es, huelga decirlo, un momento decisivo en la cosmología gnóstica - si no en la evolución humana también.

 

Todos los textos cosmológicos describen este evento, con ligeras variaciones. Los Gnósticos eran insistentes en la identificación de Yaldabaoth con Yahvé o Jehová, el dios tribal de los hebreos. 

 

Esta deidad no sólo es ciega, sino tonta y loca (Hipóstasis de los Arcontes 89: 24-25).

 

Para los gnósticos, la locura no es tanto falta de solidez de la mente como la consecuencia de la falta de corrección de errores mentales. La mentalidad de los arcontes "no puede ser rectificada", y, lo que es peor,

"la naturaleza arcóntica no es capaz de desarrollarse." 

(Gilhus, La Naturaleza de los Arcontes, P. 40)

Debido a la forma de su generación, los arcontes no tienen ennoia, ninguna intencionalidad innata.

 

El suyo es un Sueño Alienígena, apartado de la biosfera, el inteligente campo de vida de Gaia. 


El concepto de un Dios que es a la vez loco y vacío de poder de voluntad es aparentemente único al gnosticismo. Huelga decir que, cuando los gnósticos expresaron sus puntos de vista sobre la identidad de Jehová  a los devotos judíos y cristianos que también veneraban al Padre Dios judío, no fueron bien recibidos. 


El Apócrifo de Juan añade detalles cruciales al escenario arcóntico. Por un lado, se presenta un caso raro en que Sophia es, en realidad llamada la madre de los Arcontes. 

 

También dice del jefe de los arcontes que,

"no obedeció al lugar de donde vino." 

Este es un detalle revelador.

 

El hecho de que el jefe de los Arcontes se aleje de los lugares de donde surge indica una preocupación clave de los gnósticos: las tendencias de violación de los límites de los Arcontes. Desde su inicio son una especie invasora.


El Arconte dracónico se dice que es ciego (bille copto), por lo que no ve bien el Pleroma o Sophia.

"La ceguera del mundo espiritual que caracteriza a los Arcontes." 

(Gilhus, p. 17). 

Él es llamado Samael y Saklas. Samael es hebreo y arameo es Saklas para "un ciego."

La comprensión de la ceguera de los Arcontes es de vital importancia para nuestra detección de cómo pueden afectar a la humanidad. 


 

 

 

Alias ​​Jehová

El jefe de los Arcontes es también llamado el Señor Arconte. También se le da el extraño nombre, Yaldabaoth (pronunciado Yall-DAH-bay-OT).

 

Los estudiosos no están de acuerdo sobre lo que podría significar este nombre, y cómo se derivó. Según una traducción significa "el niño que cruza el espacio." Por otro, significa "jefe de la horda." (Jarl Egil Fossum, el nombre de Dios y el ángel del Señor, pág. 332-6).

 

Por lo tanto, parece juntar alusiones a ambos tipos de Arcontes. En el Antiguo Testamento el título seba'ot YHWH, Yahweh Sebaoth, se produce 276 veces como el título del dios padre. (Diccionario de  Deidades y Demonios en la Biblia, p. 155)

 

Gershom Scholem, erudito preeminente de la Cábala y del misticismo judío, explicó Ialdabaoth como,

"un compuesto del participio activo arameo yaled (es decir," engendrado") y el nombre Abaoth, que representa una forma abreviada del nombre Sabaoth (ejércitos). Así, Ialdabaoth significa  'el engendrador de los ejércitos". 

(Nathaniel Deutsch, La imaginación Gnóstica, p. 55)

Y hay más de media docena de otras interpretaciones. 


Es probable que el nombre Ialdabaoth es simplemente una variante de Jehová, el dios paternal padre de los hebreos. Los Gnósticos identificaron a Jehová con el Señor Arconte y rechazaron el Antiguo Testamento y todo el plan judaico para la salvación como un subterfugio de los Arcontes. 

 

Tiene sentido que habrían utilizado el mismo término usado por los judíos para dejar al descubierto la verdadera naturaleza de la deidad judía. 


En cuanto al conocimiento que ellos consideraron crucial para la supervivencia humana, y para la co-evolución de la humanidad con Sophia, los gnósticos podrían ser confrontativos y totalmente despreocupados sobre a quién pudieran ofender.

 

Su actitud intransigente y a veces despreciativa, combinada con su incapacidad para anticipar el alto grado de violencia física que se desencadenaría por su desafío a las creencias judeo-cristianas, sin duda, alimentó el fanatismo vicioso que destruye los Misterios.

 

 

 

 

La magnificación de la generación Arcóntica fractal presenta una imagen gráfica que parece ajustarse a la situación descrita por los videntes gnósticos.

 

El tipo embrionario, o el Arconte neonato, está claramente definido, pero también lo está la otra entidad:

el Arconte reptil con su avariciosa mandíbula  y su larga cola espermática. Esta "bestia arrogante" parece abalanzarse sobre las entrañas del tipo embrionario. Justo en el punto donde el Arconte embrionario tendría un ombligo de crianza, los reptiles se mueven en invasiva. El Arconte neonato permanece pasivo, al parecer, chupándose el dedo o el pulgar!

Algo extraño está sucediendo en la parte inferior del cuerpo del neonato, ya que su cola de caballito de mar está precariamente unida al torso. 

 

El tipo embrionario permanece absorto en sí mismo, pero reacciona a la agresión de otro tipo dejando caer su cola, como lo hacen los reptiles asustados. Nos preguntamos si la cola desarticulada formará otro neonato, u otro reptil.

 

La forma reptil parece ser repetida fractalmente en la estructura de la cola del tipo embrionario, como si la cola se desprendiese y se convirtiese en una entidad propia, en lugar de otro embrión. 

El elemento de miedo figura en gran medida en el comportamiento de los Arcontes y su efecto en la humanidad. En el Antiguo Testamento, el temor de Dios es considerado como una de las principales marcas de la experiencia religiosa.

 

La posibilidad de que el miedo humano es una especie de alimento para ciertos extraterrestres invasores ha sido ampliamente discutido en el debate ET/OVNI. El Segundo Tratado del Gran Seth dice que la agenda de los Arcontes es "el miedo y la esclavitud." 

 

Los Arcontes desean mantener a la humanidad,

"cohibida de miedo y preocupación." 

(NHLE 1990, p. 367)

Otros pasajes también advierten contra el uso de los Arcontes 'del miedo como arma psicológica. 

 

En otro detalle llamativo, el tipo de reptil parece estar sosteniendo una esfera en sus mandíbulas, recordando la mítica imagen de una serpiente ofreciendo fruta prohibida: por ejemplo, la Serpiente en el Jardín de Hiperbórea con la manzana de oro en su boca. ¿Está el recién nacido comiendo de esta fruta redondeada?

 

Los gnósticos tenían su propia versión de lo que ocurrió en el Jardín del Edén, eventos en los que los arcontes estuvieron profundamente involucrados, por lo que tal vez no sea sorprendente ver indicios del escenario Paraíso en esta etapa primitiva de la actividad cósmica. 

 

Toda esta actividad en la generación fractal de los Arcontes es imaginal, pero no es imaginaria, es decir, no está compuesta meramente en nuestras mentes. Recreando lo que los videntes gnósticos observaron es un uso sobrio de la imaginación, no un vuelo para hacer-creer.

 

Toma una razón no ordinaria describir lo que está pasando aquí, pero el escenario tan desarrollado es completamente razonable y coherente en sus propios términos. 
 

 


 

Conflicto Fetal

Sin embargo, los videntes gnósticos de los Misterios llegaron a imaginar a la generación de los Arcontes, los fractales de alta iteración alrededor de todo el conjunto de Mandelbrot encajando su escenario de una manera extraña.

 

Y hacen más también, ya que los embriones y reptiles fractales también cuentan con mímicas de gestación humana (o viceversa). En la concepción humana, el saco embrionario se compone de dos partes: el saco vitelino (4 en la ilustración de abajo), y la masa fetal unida a ella (1), suspendido en el líquido amniótico (2).

 

En el momento, el embrión en desarrollo adquiere una inicial definición anatómica, semejante a un pez (un hecho que a la ciencia médica le gusta usar para recordarnos nuestros orígenes pre-humanos). Tiene una cabeza distinta, y una cola, y una tercera característica, el ombligo que lo conecta con el saco vitelino a través del cual es alimentado.

 

La generación fractal de los Arcontes presenta todas estas características de una manera clara y precisa.

 

 

 

 

A medida que el embrión crece, el saco vitelino (4 en la imagen) se contrae, y hay al mismo tiempo un desarrollo secundario.

 

También conectado al ombligo está la allontois (5), una vesícula que llena el espacio intermedio entre el amnios (3) y el corion (7), el límite exterior de toda la salida de la placenta. Un tipo de tensión morfológica juega entre estas estructuras en evolución: para que crezca la allontois, debe contraer o comprimir (reprimir) el saco vitelino que alimenta el feto en crecimiento. 

 

A menos que el allontois crezca de esta manera, la placenta protectora no puede ser madurada completamente. 

 

Una tensión similar hay entre los Arcontes embrionarios y los reptiles. Así como el desarrollo embrionario en los seres humanos se divide entre el crecimiento del feto alimentado desde el saco vitelino, y la represión del saco vitelino para producir la placenta completamente crecida desde la  membrana allontois, el poder de los Arcontes es dividido por la naturaleza de su generación ("debido a su forma de ser", antes citada)

 

Este conflicto se resuelve parcialmente cuando el tipo de reptil asume el dominio sobre la horda masiva de los neonatos.  

Los gnósticos ciertamente sabían cómo se veía un feto abortado. Moralmente opuesto a la procreación biológica por los seres humanos, eran conocidos de practicar el control de natalidad, y haber ayudado a otros a hacerlo.

 

Habrían conocido de la observación directa, que el feto abortado en una etapa avanzada de la gestación no se parece a un omelet medio-cocido, sino que tiene los vestigios de forma anatómica.

 

Su elección de esta bizarra metáfora debe haber sido intencional, reflejando la percepción oculta que el Arconte imita la anatomía de un neonato humano. 

 

Esta metáfora es muy valiosa, no sólo porque nos permite visualizar lo que los videntes gnósticos detectaron por percepción extrasensorial, sino también porque establece una estrecha relación entre la especie humana en la tierra y los Arcontes pre-terrestres. 

 

Para más acerca de esta vinculación, ver el pasaje de cierre, "Primos cósmicos." 

 


 

El poder de la serpiente

La descripción de una "serpiente con cabeza de león" para el Ialdabaoth es fascinante.

 

Para los Gnósticos el león representa la fuerza ciega de la procreación (una asociación que probablemente se deriva de las escuelas de misterios egipcias, por no hablar de la observación de la fuerza y ​​el ruido de los leones en apareamiento en el desierto), por lo que el  cuerpo similar a un espermatozoide de los reptiles con cabezas de león es aún más apropiado.

 

Este tipo dracónico de Arconte aparece en gérmenes gnósticos, no porque los gnósticos adoraban a los reptiles - ni mucho menos - sino debido a que vieron la imagen como un antídoto mágico a la influencia arcóntica. 

 

Más bien, así como la forma de un cráneo en una etiqueta indica un líquido venenoso, impidiéndonos confundirlo con un líquido que es seguro para beber, la imagen del león-serpiente era representada en los amuletos gnósticos para protegerse de la intrusión arcóntica. 

 

 

 

 

La serpiente con cabeza de león de los gnósticos es llamada por nombres mágicos como Ophis, Knuphis y Abrasax.

 

En la anatomía oculta del misticismo asiático y el Yoga, este reptil es conocido como Kundalini, el poder de la serpiente. Los gnósticos que practican el yoga Kundalini fueron llamados ofitas, del griego ophis , "serpiente." Este culto fue condenado por los primeros cristianos como paganos "adoradores de la serpiente."

 

Para la mentalidad mundana y no iniciada, la serpiente Kundalini sólo puede concebirse por cruda literalización. Para los gnósticos, la serpiente con cabeza de león coronada de rayos solares no sólo era la imagen del Señor Arconte, sino también de la fuente de poder espiritual que permite a los seres humanos resistir esa entidad. 


Los expertos que no ven fuera del gnosticismo para entender que éste nunca menciona el Kundalini, pero los estudiosos no ortodoxos y esotéricos como G.R.S. Mead, Helena Blavatsky, y C.W King ( Los Gnósticos y sus remanentes) hacen la conexión de forma rutinaria, al igual que los mitólogos comparativos tales como Joseph Campbell y Alain Danielou.

 

En El Interior Alcanza el Espacio Exterior (The Inner Reaches of Outer Space), Campbell muestra cómo  la imagen del Kundalini, “el poder de la serpiente", aparece en el mundo del Valle del Indo 2300 A.C. y continúa en todo el espectro de las culturas antiguas, bien abajo hasta la era común. 

 

Todavía en el siglo 16, los táleros de oro en Alemania (Campbell, fig. 8) mostraron la Crucifixión en una cara y una serpiente cubierta sobre la cruz en la otra.

 

En esa fecha tardía, Cristo habría sido identificado con el Kundalini - y sin una idea de por qué, sin embargo -, pero para los gnósticos, la serpiente en la cruz era una cancelación del poder salvador atribuido a la crucifixión (es decir, la exaltación del sufrimiento como una fuerza redentora). 

 

La excitación del Kundalini produce éxtasis, desencadena la superconciencia, abre las facultades ocultas, y libera las ondas de energía sanadora que lavan las secreciones fisiológicas y hormonales a través del cuerpo. 

 

Como la serpiente mítica que guarda el árbol de la ciencia en el Génesis, el Kundalini era "el mensajero de la salvación" para los Gnósticos.

 

En una inversión completa de la lectura habitual de la Caída, los Gnósticos consideraban a la serpiente como un aliado espiritual para la humanidad primitiva,

"El primero en tratar de liberar a la humanidad de la esclavitud de un dios ignorante que se había identificado con el Absoluto y por lo tanto bloqueó el camino hacia el árbol de la vida eterna."

(Campbell , p. 78)

El "dios ignorante" que falsamente se identificó con el Absoluto es, por supuesto Yaldabaoth, alias Jehová . 


Los
gnósticos enseñaban que nous, la inteligencia espiritual dotada en la humanidad, podría ser bloqueada por los Arcontes. Esto ocurre a través de la intrusión arcóntica (tema del próximo ensayo compañero, De Cómo somos Desviados), que implica una especie de invasión subliminal a nivel del pensamiento y del lenguaje (es decir, la sintaxis mental). Pero nous podría reforzarse a través de acceso al poder del Kundalini, una corriente de éxtasis que normalmente descansa latente en el cuerpo humano. 

 

En su monografía sobre los Arcontes, S.E. Gilhus observa que,

"La estrategia erótica es el medio más importante utilizado por los neumáticos para salvar la luz perdida." 

(P. 51)

Neumático es es el término gnóstico para los seres humanos que persiguen el camino de la iluminación psicosomática, el método fundamental de la religión gnóstica. 

 

Pneuma, "fuerza espiritual", es desarrollado por cultivación del nous, "inteligencia superior".

 

Pero los Arcontes presentan un campo ciego de resistencia a este proceso: en definitiva, dependen de que los humanos permanezcan ignorantes de su inherente potencial espiritual. 

 

Cuando el Kundalini es levantado de su estado latente, la inteligencia más alta florece, y hay otros efectos también. Sectas gnósticas, como los ofitas practicaban la elevación comunal de Kundalini para producir una envoltura protectora contra la intrusión arcóntica. 

 

En efecto, ellos sostenían que el Kundalini, la energía sexual-espiritual encerrada en la estructura del cuerpo, es el principal instrumento de defensa contra los Arcontes. 

 

El Diálogo del Salvador, NHC III, 5 (85), contiene este intercambio:

Judas dijo: "He aquí que las autoridades (arcontes) habitan por encima de nosotros, por lo que son ellos los que nos gobiernan."

 

El Salvador dijo: "Son ustedes los que reinarán sobre ellos. Pero sólo cuando os deshagáis de vuestros celos, y asumáis la protección de la Luz, y entréis en el nymphion (cámara nupcial) ".

El salvador-maestro es enfático en que tenemos el poder sobre los Arcontes, pero también deja claro que algunas fallas humanas impiden el uso de nuestro poder.

 

La palabra griega phthonos puede ser traducidas como "celos" o "envidia". Los Gnósticos consideraban  la envidia como la firma de los Arcontes, así como la principal  debilidad humana que nos hace vulnerables a su intrusión.

 

"La protección de la Luz" llega a través cuando el Kundalini se activa, a menudo descrito como una marea como un rayo de luz electrificado que se vierte a través del cuerpo. "Nymphion" es una palabra en clave para la célula ambiente de protección psicofísica generada por los altos niveles de Kundalini.


Sir John Woodruffe, el gran transmisor de sabiduría tántrica hindú para el Occidente, identifica directamente la práctica de Kundalini Yoga (elevar el poder de la serpiente a través de los canales de la columna vertebral) con ritos gnósticos de "adoración a la serpiente." (Shakti y Shakta, p. 191 y ss.)

 

Eruditos budistas como E.A. Evans-Wentz , J.M. Reynolds , y H.V. Guenther han hecho observaciones similares, pero los eruditos gnósticos no han correspondido, ya que no  ven fuera de su género para comprender la teoría y la práctica de la Gnosis. 

 

la imagen del león-serpiente aparece una y otra vez en forma de jeroglíficos en las paredes del templo de Horus en Edfu, a cuarenta millas al sur de Nag Hammadi. En el culto de Hathor celebrado allí, el león-serpiente representaba la "simiente real" del faraón. El niño real Horus es a menudo representado en un gesto de chuparse el dedo, que recuerda vívidamente la postura de los Arcontes embrionarios. 

 

¿Tenían los sacerdotes egipcios que dirigieron el engendro de las familias dinásticas, conocimiento íntimo del Kundalini así como de los Arcontes?

 

La serpiente Kundalini está representada en el arte sagrado egipcio por una cobra de pie, o un par de cobras, a veces enrolladas en un palo, y por el uraeus, la toca de la cobra de empoderamiento divino. 

 

La trenza ceremonial en el lado de la cabeza de Horus era un indicio más del poder de la serpiente. La trenza faraónica, que tradicionalmente se usa en el lado derecho de la cabeza, repite visualmente la forma de las cobras espermáticas de Edfu. 

 

La iconografía sagrada lleva un explícito, pero altamente ocultista conocimiento: Horus es el niño cuyas funciones cerebrales del hemisferio derecho están acentuadas por el poder de la serpiente. 

Las imaginería "esotérica" ​​del poder de la serpiente opera en varios niveles a la vez. 

 

Veremos que el complejo simbolismo biológico del mito gnóstico tiene mucho que enseñarnos acerca de la naturaleza de los Arcontes, así como la forma en que podemos resistirlos.
 



 

La Violación de Eva 

Ialdabaoth es también llamado el Archigenerador, "el maestro criador" (Apócrifo Juan II, 12, 25)

 

Los gnósticos, para quienes la ética debe ser coherente con la cosmología, consideraban la procreación biológica, en la medida en que es un acto involuntario, como un mecanismo sin sentido que hace de los seres humanos accesorios para el jefe de los Arcontes.

 

De cómo Ialdabaoth engendra su propio tipo, y controla la reproducción de los tipo-embriones, e incluso puede estar involucrado en el entrecruzamiento con los humanos - son algunos de los elementos más desconcertantes en los mitos Sophia.

 

Varios textos en el NHC describen el intento de los arcontes “de violar a Eva”: es decir, inseminar la especie humana. Los textos dejan claro, sin embargo, que no tienen éxito en sus objetivos.

 

La Hipóstasis de los Arcontes describe este episodio:

Entonces, los Arcontes se acercaron Adán. y cuando vieron a su contraparte femenina hablar con él, se mostraron agitados en gran medida y excitados por ella. Se dijeron unos a otros: «Vamos, sembremos nuestra semilla en ella", y la persiguieron.

 

Y ella, la madre de los vivientes, se rió de ellos por su ingenuidad y ceguera, y en sus garras ella se convirtió en un árbol, y dejó ante ellos su sombrío reflejo parecido a ela misma.

(89: 15-25)

Este pasaje demuestra la sofisticación imaginal de la visión gnóstica. 

 

Los videntes gnósticos disciernen el intento Arcóntico de inseminar a Eva - de interferir en la genética de la especie humana, si se quiere - pero también observan que el intento fue un fracaso. La metamorfosis de Eva en un árbol recuerda el mito griego de Daphne, que se convirtió en un laurel.

 

(Este paralelo muestra que la cosmo-mitología gnóstica no fue una casualidad, sino un sistema de conocimiento visionario profundamente arraigado en la mente indígena de la Europa precristiana.) 

 

Para los gnósticos, las visiones que contemplaban en estados alterados eran empíricamente verdaderas y podrían ser probadas. Al hacer esto, ellos fueron capaces de desarrollar una visión extraordinaria en los mundos sobrehumanos, las actividades de los dioses, la relación de la humanidad con las especies alienígenas, y la experiencia a largo plazo de la especie humana.


El escenario anterior describe cómo los Arcontes no logran capturar a Eva, pero que de alguna manera se involucran con su sombra, un mero reflejo.

 

Esto implica que, si bien los Arcontes no pueden acceder a nuestra estructura genética, pueden afectar o distorsionar nuestra imagen de la mujer, de lo femenino, y en ese sentido ellos realmente pueden tener éxito en profanar a Eva. Ellos pueden distorsionar nuestro sentido de nuestra propia composición genética. 


Como tan a menudo lo hace, la idea gnóstica del orden cósmico nos desafía a entender lo que está sucediendo en nuestras propias mentes. ¿Hay alguna manera en la que nosotros, los humanos hayamos contaminado la imagen de la mujer?

 

Por ejemplo, imponiendo a las mujeres una noción artificial de la identidad, una falsificación de su verdadera naturaleza. De ser así, sería considerado por los gnósticos como accesorio a la violación de Eva por los Arcontes.

 

¿Hay evidencia en el mundo de hoy que tenemos una visión distorsionada de la genética?

 

Si es así, esta distorsión, y las acciones que proceden de ella, serían totalmente merecedoras de ser consideradas como consecuencias del ‘efecto del desvío del comportamiento humano por los Arcontes.

 

 

 

Entran Los Anunnaki 

El pasaje anterior de La Hipóstasis de los Arcontes hace memoria de los escenarios actuales de intervención alienígena en la genética humana.

 

La mayoría de las teorías sobre el programa de cría ET asumen que todo lo que los alienígenas (por lo general, de la cual los tipos grises embrionarios son sospechosos) podrían optar por hacer, pueden hacerlo. 

 

Pero los videntes gnósticos que solicitaron el razonamiento no ordinario a sus observaciones de los Arcontes llegaron a una conclusión diferente. En la visión gnóstica, sería un gran error asumir que los Arcontes están haciendo cosas que no pueden hacer, porque eso les daría poder sobre nosotros. 

 

Los gnósticos enseñaban que el principal peligro al que nos enfrentamos con los Arcontes no reside tanto en lo que en realidad pueden hacer, sino que en lo que falsamente creemos que pueden hacer.

 

Su carta de triunfo es el engaño (apaton y plane en griego), sobre todo el engaño sobre la naturaleza y el alcance de sus poderes. 

"Porque su deleite es amargo, y su belleza es depravada. Su placer está en el engaño."

(El Apócrifo de Juan BG 56, 3-7) 

Extraño como son, ciertos elementos en el mito gnóstico de nuestra especie pueden ahora comienzan a parecernos familiar.  

 

El tema de la inseminación alienígena de la raza humana también se produce en las narrativas arcaicas de la antigua Sumeria, que data del tercer milenio antes de Cristo, y es endémica en la tradición contemporánea ET/OVNI. 

 

Cuentos sumerias describen una especie alienígena llamada los Anunnaki, que se acreditan con la producción de la especie humana mediante ingeniería genética, y también con la inauguración de la civilización.

 

Estas narrativas se encuentran en las tabletas cuneiformes que datan de aprox. 1800 A.C., pero conservan redacciones tardías de versiones mucho más antiguas. Al parecer, la historia de la intervención alienígena es uno de los guiones más antiguos de nuestra especie. 

 

Muchas personas que siguen el debate ET/OVNI son conscientes de los relatos sumerios de los Anunnaki, que son fácilmente asimilables a los extraterrestres de hoy en día, pero hay una total ausencia de referencia al escenario gnóstico de los Arcontes en la controversia hasta el momento. 

La cuenta gnóstica de actividades Arconte/Anunnaki difiere en muchos puntos importantes de aquello que se encuentra en las cuentas sumerias. 

 

Por un lado, los gnósticos no consideraban a los Arcontes como seres superiores que pusieron en marcha de un salto al comienzo de la civilización. Tampoco consideraron a los Arcontes capaces de acceder al genoma humano (llamado por ellos el Anthropos), aunque se les concedió algún papel para la actividad arcóntica en nuestra evolución física.

 

Este punto es muy difícil de aclarar, sin embargo... Con mucho, la diferencia más notable entre las cuentas sumerias y las cuentas gnósticas es que las primeras no contienen la menor idea de los mitos de Sofía y ninguna explicación de cómo los Arcontes , alias Anunnaki, se originaron. Se trata de una laguna considerable, por decir lo menos. 

 

En su elaborada reelaboración de los materiales sumerios, Zecharia Sitchin describe a los Anunnaki como una especie no-humana, altamente avanzada, que habitan el planeta Nibiru, un escolta del sistema solar, con un período de 3,600 años.

 

En la versión de Sitchin de la prehistoria, los Anunnaki vinieron a la tierra en busca de oro para la fabricación de una suspensión coloidal necesaria para estabilizar su atmósfera. (Para una descripción completa, consulte el último libro de Sitchin, El Libro Perdido de Enki.)

 

Aunque Sitchin parece ser un legitimo Sumerólogo con un profundo conocimiento de las lenguas antiguas, ningún erudito ortodoxo avala su escenario para los Anunnaki. 

 

En el peor, lo rechaza como una fantasía de "antiguos astronautas" vestidos con túnicas académicas. Soy incapaz de decir si la cuenta de los Anunnaki en Nibiru de Sitchin  es una interpretación precisa de los textos cuneiformes o una fantasía extrapolada en su mente.

Significativamente, Sitchin nunca describe la apariencia física de los Anunnaki de ningún tipo . 

 

Una de las grandes ventajas del escenario gnóstico Arconte es que en sí proporciona descripciones vívidas de estas entidades. 

  • ¿Será una coincidencia que los Arcontes embrionarios y serpentinos descritos en los textos gnósticos presenten una correspondencia idéntica a las dos clases de extraterrestres reportados con mayor frecuencia en los tiempos modernos, los Grises y los Reptilianos?

  • Y si los gnósticos tienen esta parte del escenario de intervención correcto, ¿qué otra cosa está correcta?

 

 

 

 

Primos Cósmicos

 

 

Las mismas manifestaciones que crean nuestras creencias religiosas, 
crearon nuestras creencias OVNI. 

Una mirada seria al Fenómeno

causaría una revisión de nuestra forma

 de ver la religión. 
John Keel

OVNI: Operación Caballo de Troya

 

 

Es sorprendente encontrar descripciones vívidas y detalladas de los alienígenas depredadores en textos oscuros que datan del siglo cuarto DC., pero las revelaciones de la Gnosis no son nada si no sorprendentes.

 

Existen algunos reportes antiguos de "avistamientos de ovnis", pero el material gnóstico de los Arcontes no presenta meramente “reportes”.

 

Explica sus orígenes en el orden cósmico, su naturaleza (inorgánica, imitativa, sin intencionalidad), su apariencia y táctica, su actitud hacia la humanidad, y más. Una solución más clara y coherente del "Fenómeno" (el enigma ET / OVNI) difícilmente podría haberse imaginado. 


La "alta extrañeza" del material de gnóstico Arconte plantea un problema de credibilidad, por supuesto. 

 

Nos enfrentamos a la elección de creer que estos textos representan una cuenta exacta de lo que los videntes gnósticos observaron en  estados de realidad no-ordinaria - es decir, un reporte fiable de auténtica investigación parapsicológica alcanzado por visión remota, sueño lúcido,  observación clarividente, y entonces son evaluados cuidadosamente por razón no- ordinaria - o creer que los gnósticos eran simples fantasiosos, místicos engañados por sus visiones, bichos raros de culto wacko, o peor. 

 

¿Cómo, entonces, podemos determinar si la cuenta gnóstica de los Arcontes era delirante o si presenta conocimiento fidedigno de intervención extraterrestre 


En Fuentes del Mito de Gaia, discutí el concepto indígena del Tiempo de Sueño , la obra eterna de la conciencia creativa en el Ahora Eterno, y su variante, Ensoñación:

Cuando la ensoñación llega a la expresión, en particular, el conocimiento y el comportamiento, los aborígenes se refieren al Sueño de la criatura que encarna ese conocimiento y exhibe ese comportamiento.

 

Por ejemplo, el Sueño del Canguro es la suma del conocimiento innato y el comportamiento instintivo de todos los canguros, remontándose a los antepasados del Tiempo de sueño. Se puede decir, en términos biológicos, que es la promulgación del genoma de la especie del canguro. 

 

Todas las criaturas, orgánicas e inorgánicas, humanas y no humanas, viven y mueren por las ensoñaciones que se juegan a través de ellos.

 

En la cosmovisión indígena, el regalo único de los seres humanos para crear la cultura se deriva de nuestra capacidad para recordar y volver a contar el Sueño, no sólo de nuestra propia especie, sino de otras también.

 

La creencia indígena de que el papel de la humanidad es recordar los acontecimientos del sueño por todas las criaturas concuerda con la sugerencia presentada en compartir las Mitos de Gaia: la especie humana permite uncircuito-de-memoria para Gaia.

Para aplicar estas ideas al problema de los Arcontes, recordemos que nosotros, la especie humana, estamos involucrados de una manera especial en El Sueño de Gaia, que se origina en el Protennoia trimórfico, la intención primigenia triple del Eón Sophia .

 

Nuestros límites apropiados son definidos por la trinidad Tierra-Luna-Sol, y nuestra dotación de sabiduría se desarrolla, a cargo de Sofía, dentro de las condiciones particulares de la biosfera, el útero de Gaia. Sin embargo, hay otro Sueño que se filtra en el Ensueño Tierra, algo así como un mensaje inalámbrico que sangra a través de una conversación en curso en otra frecuencia. 

Algo muy raro está sucediendo en la Tierra debido a una fisura en la mente humana, y de esta fisura, a su vez, surge de una anomalía en el orden cósmico.

"El sistema del mundo en que vivimos se produjo por un error."

(El Evangelio de Felipe , NHC II, 3, 75.1)

El viaje mágico de la conciencia en la cual co-evolucionamos con el sueño de Gaia es desviada o distorsionada por una influencia alienígena, así como lo enseñaron los gnósticos. 

 

Sobre este punto recóndito parece que han acordado con el viejo brujo yaqui Don Juan, quien le dijo a Carlos Castañeda,

"Los seres humanos están en un viaje de conciencia, que ha sido momentáneamente interrumpido por fuerzas extrañas."

En el ensayo compañero, De Cómo estamos desviados, vamos a ver más de cerca cómo los gnósticos describen la intrusión de estas fuerzas extrañas, las entidades alienígenas que también son nuestros primos cósmicos. 

Todo lo que aprendemos acerca de los Arcontes nos enseña algo fundamental acerca de nosotros mismos.