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Noviembre 2021
El primer ministro británico, Boris Johnson, hace un gesto hacia el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, durante un evento sobre acción y solidaridad en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) en Glasgow, Escocia, Gran Bretaña, el 1 de noviembre de 2021.
la COP26 tiene como objetivo poner en funcionamiento las nuevas armas financieras de Occidente, que consisten en imponer a los países del Tercer Mundo
grandes
inversiones para evitar las emisiones de CO².
Para entender su
naturaleza y alcance es necesario partir del conocimiento de las
que se han utilizado hasta ahora, como las sanciones - incluyendo la
más importante de ellas que es el embargo - decretadas sobre todo
por Estados Unidos y la Unión Europea contra países enteros así
como para penalizar empresas y personas.
Estados Unidos y la Unión
Europea sólo decretan, en decisiones inapelables, que un Estado,
empresa o persona ha cometido lo que ellos consideran algún tipo de
violación, imponen lo que ellos llaman "sanciones" o un
embargo
total y a partir de ese momento pretenden que terceros Estados
respeten tales medidas, amenazándolos con aplicarles represalias si
las ignoran.
Hoy en día, 61 años
después, Estados Unidos mantiene su embargo contra Cuba mientras
que las compañías estadounidenses exigen reembolsos ascendentes a
miles de millones de dólares. 1
En ese gran saqueo de los
fondos libios se destacó Goldman Sachs, el más poderoso de los
bancos estadounidenses, que tuvo como vicepresidente a Mario Draghi,
el actual primer ministro de Italia.
Implantando un mecanismo calcado del de las llamadas sanciones, esa operación ya no prevé la imposición de restricciones económicas o "congelación" de fondos sino limitar el financiamiento sólo a los gobiernos y entidades o personas "virtuosas" que acepten someterse al "Índice ESG", siglas que hacen referencia a 3 parámetros:
El objetivo oficial del "Índice ESG" sería establecer normas para evitar la 'inminente' catástrofe climática que nos anuncian en la Conferencia de Glasgow, para defender los derechos humanos pisoteados por los regímenes totalitarios y para garantizar el buen gobierno, claro según el modelo predeterminado por las grandes democracias occidentales:
...son los principales
autores de esas normas, junto con algunas agencias de la ONU
limitadas a un papel subalterno.
La Conferencia de la ONU en Glasgow (COP26) anunció el 3 de noviembre que,
Así nace la Glasgow Financial Alliance for Net Zero.
Desde abril de este año, 450 bancos y transnacionales de 45 países se han sumado a ella y se comprometen a,
Los capitales se recogen mediante la emisión de "bonos verdes" (Green Bond) y de inversiones provenientes de fondos comunes y de fondos de pensiones, en gran parte con dinero de pequeños ahorristas que correrán así el peligro de verse atrapados en una enésima burbuja especulativa.
Ya no será un banco o una transnacional quien se compromete a alcanzar el objetivo de cero emisiones de CO2 de aquí al año 2050 y a ayudar a los "países pobres", donde más de 2 000 millones de personas todavía usan la leña como único o principal combustible. 3
Entre los comprometidos en el asunto de las cero emisiones está incluso la petrolera anglo-holandesa Royal Dutch Shell, que provocó un desastre medioambiental en el delta del Níger y se niega a recuperar las tierras contaminadas.
Así que mientras se trata de eliminar totalmente las emisiones de CO2, los habitantes de esa región de África seguirán muriendo a causa del agua contaminada con los hidrocarburos de Shell.
Referencias
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